Actions

Work Header

Alphas

Summary:

Rich está acostumbrado a pasar su celo solo… No es lo que habría querido, pero era totalmente necesario para él. O lo que había sido una normalidad hasta la llegada de un caballero, que había puesto su existencia de cabeza.

Chapter 1: Prólogo

Notes:

Resumen: Rich está acostumbrado a pasar su celo solo… No es lo que habría querido, pero era totalmente necesario para él. O lo que había sido una normalidad hasta la llegada de un caballero, que había puesto su existencia de cabeza.
Serie: EliteCraft 2
Personajes: Farfadox, ElRichMC.
Pareja: Farfa-Rich.
Género: Drama, Amistad, BL (Boys Love), Omegaverso.
Rating: M.
Advertencia: AlphaxAlpha, Escena de sexo.
Capítulos: Prólogo.
Palabras: 1113.
Notas: Segundo fic de esta pareja… ¡¡Al parecer ellos eran lo que yo necesitaba para salir del hiatus!! Estoy muy contenta… Y aprovechando lo máximo posible. Espero que esta historia les guste.
Fecha: 01/06/2025
Beta Reader: ---
Disclaimer: Todo lo referente a MineCraft, pertenece a Mojang-Microsoft.

(See the end of the chapter for more notes.)

Chapter Text

Había sido una terrible noche… De una terrible semana para Rich.

La molesta fiebre superficial de su cuerpo, la picazón de su piel… Todo le indicaba que estaba cerca de su celo, y eso lo ponía de mal humor, a niveles que no podría expresar de manera bocal.

Como uno de los pocos Alphas de esa región, se podía decir que él tenía cierto status, y no era extraño que muchas personas quisieran conocerlo… Incluso hasta viajar largas distancias para saber si había alguna posibilidad de que pudiera encontrar en ellos una posible pareja.

Desde su primer celo, esa parecía una idea genial… aunque pronto se dio cuenta de que no era como él se lo había imaginado.

“¡Joder, hueles terrible!” Había dicho esa primera vez, sin poder evitarlo. Y haciendo que la cara de un joven Omega se desfigurara en vergüenza, hasta casi llegar a las lágrimas.

No había sido su intención ser así de grosero, pero el olor lo había sorprendido de tal manera, que no había podido evitar decirle al dueño de ese olor que le parecía repugnante.

Tampoco había sido la única vez que se pasara… Otras personas se acercaron a él cuando su celo estaba cerca o ya en auge, y sus aromas le resultaron totalmente asquerosos; aunque esas veces había tenido la deferencia de guardarse la información solo para sí mismo, y simplemente alejó a los candidatos de ‘pareja’ con mucha cortesía y amabilidad.

No importaba que fueran hermosos Omegas los que intentaran atraerlo, así como algunos audaces Betas… Todos ellos resultaban ser portadores de aromas que lo repelían de tal manera, que había comenzado a encerrarse en su base cuando su celo comenzaba a hacerse evidente.

Afortunadamente, nadie había intentado ir hasta su casa por lo que sus últimos celos habían sido tranquilos… Solitarios sí, pero tranquilos al fin.

En esa temporada su celo llegó junto con el invierno, por lo que podría ir al pueblo más cercano por última vez antes de que su olor atrajera a más de un curioso. La nieve haría más difícil que muchas personas estuvieran en las calles, además de que las capas extras de ropa ayudarían a que su propio aroma no llamase tanto la atención.

Rara vez necesitaba ir al pueblo, y preferiría evitarlo de ser posible… Atraer la atención de aventureros y caballeros no era su ideal de tranquilidad, principalmente porque a ellos jamás podría alejarlos con alguna que otra palabra cortes… Y sus cortejos acababan en una batalla asegurada, en la que Rich terminaba lastimando el orgullo, y algo más, de su cortejante momentáneo.

—¿Huelen eso?

Oyó fuerte mientras estaba pasando por los puestos callejeros, que como había previsto, estaban casi vacíos.

Instintivamente, apretó el cuello entre sus hombros, como si eso pudiera hacer que su aroma natural no se filtrara de su ropa.

—¡Cris se tiró un pedo! ¡Cabrón!

Las risas que siguieron a ese comentario, hicieron que Rich se desinflara de un aire que no sabía que había contenido en sus pulmones.

—¡Salir con ustedes es cada vez más denigrante!... —Otra voz se alzó, al mismo tiempo que intentaba de alejarse del grupo, como tratando de desvincularse de ellos.

Rich lo reconoció como Silithur, el dueño del bar del pueblo, el mismo bar que él evitaba pisar con toda la razón del mundo. Observó un poco más, porque al resto de las personas, Rich no las reconocía del pueblo… Así que seguramente eran aventureros, pasando por el pueblo. Esperaba que… fugazmente.

—¡No, boludos! Lamentablemente conozco bien los pedos de este tarado… No es eso, huele a…

Rich se tensó en medio de la calle, Silithur pasando a su lado sin darle una segunda mirada, y luego pudo ver a dos jóvenes altos, ataviados en armaduras dañadas y rostros cansados que tampoco dieron señales de estar interesados en el idiota parado inerte en medio de la calle. Detrás, dos más que venían golpeándose como si fuesen críos, peleándose por algo que a Rich no podía importarle menos, y por último…

—¡Che! No puede ser que nadie más lo huela… Lo tengo metido en la nariz.

El caballero que cerraba la marcha del grupo se quejó… Alzando su nariz al aire, como si tratase de seguir el rastro de donde venia aquel olor que no reconocía. Encontrándolo eventualmente.

Y como no… Si había estado caminando derecho hacia él.

Rich lo vio acercarse sin poder mover un musculo, sus manos apretando la capa alrededor de su cuerpo, como si esta le sirviera de escudo al posible problema que podría desatarse delante de sí.

—¡SOS VOS! —La voz gritó y el gruñido comenzó a vibrar automáticamente después.

Rich abrió los ojos en ese instante, no sabía cuándo los había cerrado, pero era obvio que estaba siendo amenazado por algo… ¿No?

Podía sentirlo, el aroma claro y vibrante del otro Alpha, así como las vibraciones de un gruñido bajo y gutural, que comenzó a resonar con la voz del caballero.

—Alpha… —Murmuró el caballero frente a él, con algo de asco y disgusto, como escupiendo su status y a él al mismo tiempo.

Rich no movió un solo musculo, solo esperó… Algo que jamás paso.

El otro Alpha solo olio por última vez cerca de su capa, antes de expulsar el aire de su nariz bruscamente, como si el aroma que recibió lo hubiese insultado personalmente; y salió de allí, detrás de sus compañeros sin darle una segunda mirada a Rich.

—¡Joder!

Fue lo único que Rich pudo murmurar… Sintiéndose temblar desde la cabeza hasta los pies.

Se quedo en la calle, en medio de la nieve y oyendo –sin oir– a los comerciantes a su alrededor. No podía ni siquiera desmenuzar lo acontecido a manera consiente. Aún estaba prendado de la imagen del caballero ‘oliendo’ cerca suyo… Como solo los Alpha más ‘rústicos’ suelen hacer.

—¿Qué paso Farfa? —La voz se coló en el viento, llamando su atención, cuando intentaba hacer que sus pies volvieran a obedecer.

Se giró para buscar la interacción de uno de los jóvenes que venían peleando, y el caballero que solo negó antes de entrar al bar de Silithur.

—Nada boludo, entremos. —La voz sonó más clara… Mas tranquila, nada como lo que Rich había escuchado hasta hacia segundo.

“Farfa… ¿Se llama Farfa?”

Su mente claramente estaba embotada, pero necesitaba pensar con claridad y rápido… Porque jamás le había pensado que alguien que lo hubiese olido no intentase cortejarlo. No era egocentrismo, era prácticamente una regla no escrita…

Así como tampoco podía creer que…

—Olía delicioso… —Murmuró entre dientes, intentando no elevar su voz.

Esta era la primera vez que alguien no olía a algo que le desagradara... Y necesitaba averiguar por qué.

 

Fin del Prólogo.

Notes:

Aquí estamos otra vez, más pronto de lo que yo mismo creí… Pero bueno, si hay ideas hay que plasmarlas, ¿verdad?
La idea es simple, y la verdad que la tengo un poco repetida en mis historias, pero el Omega verso, y el Alpha por Alpha me encanta… (Ahí tienen, un spoiler)
Pocos capítulos, tal vez sean solo cuatro… Pero intentare hacer que sean contundentes. Aquí solo estamos abriendo la historia con un prólogo para presentarles la trama.
Ustedes me dicen que les parece.

Nos leemos pronto.

Chapter 2: Capítulo 01: Y tú…

Notes:

Resumen: está acostumbrado a pasar su celo solo… No es lo que habría querido, pero era totalmente necesario para él. O lo que había sido una normalidad hasta la llegada de un caballero, que había puesto su existencia de cabeza.
Serie: ElitaCraft ∞
Personajes: Farfadox, ElRichMC.
Pareja: Farfa-Rich.
Género: Drama, Amistad, BL (Boys Love), Omega Verso, AU (Universo Alternativo)
Rating: M.
Advertencia: AlphaxAlpha, Escena de sexo.
Capítulos: 01/04
Palabras: 2606.
Notas: Generalmente, en mi ideal de Omegaverso, son los Alphas los más raros de encontrar, por ello son tan requeridos.
Fecha: 03/06/2025
Beta Reader: ---
Disclaimer: Todo lo referente a MineCraft pertenece a Mojang-Microsoft.

(See the end of the chapter for more notes.)

Chapter Text

Apretó los puños y mordió el borde de su labio inferior, lo suficientemente fuerte como para hacerse sangrar. Pero el pinchazo de dolor despejo la nube de humo en la que parecía estar parado.

El aire frio volvió a significar algo para él, pues golpeó su rostro, cuando nuevamente estuvo verdaderamente consciente de sus alrededores.

El viento rugió entre los edificios y Rich se detuvo en el acto.

—¡PARA BOLUDO!

No se había dado cuenta en qué momento caminó hacia el bar, arrastrando la nieve a cada paso, hasta que la voz poderosa lo sacó su de transe. Como si el grito hubiese sido una directiva que él debía acatar a raja tabla.

Se quedó en la puerta del bar, lo suficientemente cerca para oír el bullicio del interior, pero no tanto como para que lo notasen desde dentro.

Allí pudo notar que el bar esta casi vacío, a excepción de los aventureros y Silithur; y que el aire estaba lleno de ese aroma embriagador…

¡Ahí está, eso había sido lo que lo había paralizado y embotado sus sentidos!

Rich olfateó el aire superficialmente sintiendo que su piel se erizaba por completo.

¡Inaudito!

Jamás le había pasado algo como eso. Mucho menos con un Alpha…

—Qué raro verte por aquí, Rich… —La voz de Sili lo sorprendió, pero él sabía ser diplomático.

—Ya vez… Resguardándome del viento. —Señaló el exterior, como una respuesta completamente lógica.

—Oh sí, ya veo… —La cabeza de Silithur apenas salió un poco hacia el exterior, viendo que muy probablemente una nevada estaba a punto de caer. —Voy a cerrar la puerta, si me permites.

Rich asintió, sin pensarlo mucho, pero para que Sili pudiera cerrar la puerta del bar él tenía que moverse… Hacia dentro del mismo.

—Listo… ¿Algo caliente, Rich?

Silithur preguntó, con una sonrisa amistosa, ya dirigiéndose hacia el otro lado de la barra. Rich apretó la parte superior de su capa alrededor de su cuello, en toda su interacción con el dueño del bar, intentó no desviar sus ojos hacia donde el resto de personas seguían su interacción naturalmente. Asintió al ofrecimiento, modulando un corto ‘Gracias’.

Guio su cuerpo de manera automática, sentándose en la barra con su espalda erguida, pero sus hombros escondiendo un poco su cabeza, haría esto rápido y saldría de allí luego de conseguir alguna información. La taza estuvo frente a él en muy poco tiempo, y Sili añadió un trazo de torta con una sonrisa amistosa que claramente no aceptaría un no a su oferta.

Rich asintió con agradecimiento, al menos eso le daría algún tiempo más para escuchar las conversaciones, y así averiguar quién era aquel caballero, y lo más importante… ¿Qué estaba haciendo en su territorio?

Agudizó su oído mientras sostenía su taza cerca de sus labios, pero nada llegó a ellos. No hubo sonido alguno, ni risa, ni broma… O siquiera una palabra.

Rich no pudo evitar parpadear confundido.

—Tené cuidado, te vas a quemar…

La advertencia fue dicha muy cerca de él, demasiado cerca como para sentirse cómodo. Sus manos no dudaron en dejar la taza y girar lo suficiente como para notar al caballero a su lado, y cuatro miradas con distintos grados de curiosidad detrás de su hombro.

No había yelmo… Por lo que Rich pudo ver bien al hombre detrás de la armadura, y detallar con precisión como era que se veía la persona que había conseguido hacerlo sentir tan extraño con menos de una interacción.

—Hola, soy…

—Sé quién sos… —El caballero a su lado bufó, una sola mirada a Sili bastó para que un vaso pequeño de líquido cristalino fuese dejado frente a él. —ElRich… Todo el pueblo te conoce, sos el único Alpha de esta zona. —Acabó, bebiendo de un solo trago lo que seguramente era alcohol fuerte, por el olor.

Bien, el extraño lo conocía, o al menos había escuchado de la gente del pueblo quien era él. Y eso no era nada bueno pues, al contrario, él no sabía nada de este Alpha.

—Farfadox, supongo… ¿Verdad? —Era solamente un farol, el nombre lo había oído recién, y por lo demás no sabía nada, pero no jugaría esta mano en desventaja.

El caballero no pareció notar el recurso rebuscado y solo asintió, tomando asiento a su lado y de paso, su trozo de torta para él.

Con ese simple movimiento, el bar pareció volver a una instancia normal, con murmullos y sonidos que antes habían estado apagados por completo.

—La gente que me conoce me dice Farfa…

Rich asintió viéndolo llevarse el primer bocado de torta a la boca.

—Y nadie además de Sili me conoce en este pueblo. —La sonrisa bailó burlona en las comisuras de sus labios.

—Farfa… —El mencionado le llamó lo atención, no lo suficientemente fuerte, solo una advertencia baja.

Farfa bufó, girando sus ojos con cansancio teatral.

—Creen que porque los dos somos Alphas vamos a pelear, o algo así… —Dijo, señalando con su pulgar por sobre su hombro.

—¿Algo así? —Repitió Rich sin poder evitarlo, cruzando fugazmente sus ojos con algunos de los ‘compañeros’ del caballero.

—Mira… Yo no tengo intención de estar en tu territorio más de un par de días. —Explicó, restándole importancia. —Generalmente estamos por acá menos de una semana. Así que ninguno de nosotros se va a cruzar en tu camino… ¿Capisce?

Rich parpadeó confundido, pero asintió de todas formas.

—Ninguno de acá quiere tener problemas con nadie, trabajamos como aventureros, no como mercenarios.

—Eso es bueno saberlo… —Rich murmuró, dándole por fin un trago a su café. —¿Y ellos son?

La pregunta tomó por sorpresa al caballero que había intentado acabar con esa incomoda conversación lo más rápido posible.

—¿Los wachos? —Farfadox preguntó confundido, pero rápidamente se encogió de hombros dispuesto a presentarlos con el Alpha. —El de orejas largas es Conter… —Señaló a una cabeza sobre la mesa que claramente estaba dormida. —Siempre se duerme primero, después son CrisGreen, Shadoune y Rubik.

Rich los vio levantar sus manos en un saludo pequeño, mientras iban siendo nombrados. Aunque el muchacho llamado Shadoune sí lo saludó más enérgicamente, hasta incluso con una sonrisa.

Farfa también lo notó, por lo que no tardó en aclarar su garganta, y destacar el pequeño detalle en cuestión.

—Este… Shadoune es el único Omega del grupo, los demás son todos Betas.

Rich se encontró a si mismo escondiéndose una vez más entre los pliegues de su capa, mientras asentía a la información que estaba recibiendo.

—Y tú…

—Ah sí, Alpha… Pero ya lo sabias. —Farfa suspiró con cansancio, buscando con una mirada al resto de sus amigos.

Un gesto y todos se levantaron de la mesa, Cris cargando a Conter a pesar de su queja y su ‘Eh, bájame puto’ dicho entre sueños. Shadoune volvió a saludar cortamente a Rich seguido de cerca por Rubik, que no le impidió tal acción, pero tampoco lo dejó explayarse mucho.

¿Qué clase de idea sobre él tenían estos aventureros?

Incluso Silithur había desaparecido, y por los sonidos, estaba en su trastienda, totalmente ajeno a lo que sucedía en su bar.

—Oye… —Juntó el valor suficiente para comenzar, pero la cercanía del caballero volvió a dejarlo sin tierra firme bajos sus pies.

Farfadox estaba muy cerca suyo, nuevamente olfateando su capa. Sus ojos apenas abiertos y sus manos alejadas de él, como para evitar que sea mal interpretado.

—Mañana nos vamos. —Dijo cuando se alejó, como una sentencia que sería acatada apenas los primeros rayos del sol aparecieron en el horizonte.

Rich solo movió su cabeza con afirmación, y era un movimiento que el caballero parecía estar esperando, pues apenas la vio inclinó su cabeza cortamente, un saludo de respeto, antes de ir detrás de sus compañeros.

La taza en sus manos estaba fría ya, pero Rich no podía soltarla, esa pequeña pieza de cerámica se había convertido en su ancla en esos momentos, y no podía pensar en que pasaría si la devolvía a la barra…

—No son una amenaza, Rich.

Silithur lo sobresaltó, su entrada venia cargada de botellas para reponer en el largo mostrador detrás de él.

—No creí que lo fueran. —Anunció rápidamente, intentando parecer creíble.

—Son buenos chicos, ruidosos… Y medio tontos, pero son valientes y leales. No serán un problema en el pueblo… Mucho menos para ti.

En la última parte de sus ‘elogios’, Sili imprimió algo más de énfasis.

—Los conoces bien… —No fue una pregunta en sí, solo un comentario amistoso.

—Se puede decir que si… Aunque es una larga historia. —Silithur consiguió la taza de las manos inmóviles de Rich y repuso el café por una caliente. —Otro día te lo contare. Ahora… —La cabeza del barman se acercó bastante por sobre la barra.

Rich lo imitó, teniendo cuidado con su nueva taza, ahora caliente.

—Farfa es un chico especial… Tampoco es malo, pero hay que tenerle paciencia de vez en cuando. Son jóvenes, todos ellos… Solo para que lo tengas en cuenta.

Ok… Entonces, había un Alpha joven en ‘su’ territorio, un Alpha del que no sabía más que lo que veía. Un Alpha que había podido embotar sus sentidos solo con su aroma…

Esto no tenía buena pinta, la verdad.

—Está bien Silithur… Confió en tu palabra. —Apuró su taza de café y agradeció la torta que a fin de cuentas no comió, pero por la esmeralda que había dejado en el mostrador, estaba pagando.

Salió de allí con más preguntas de las que había entrado, pero también estaba sin tiempo para hacerlas. Ya comenzaba a sentir el calor de su cuerpo, anunciando que su celo estaba ya sobre él.

Vio por última vez el bar de Sili, reconociendo que había habitaciones en algún lugar de este; buscó con su mirada un segundo piso, como si fuera la primera vez que reparaba en él. Allí, contra de la ventana de cristal, un yelmo descansaba solitario.

No era el caballero, pero seguramente allí dormiría junto a sus compañeros.

Rich le dedicó una última mirada, no solo al yelmo, sino a todo el cuadro… Aun parecía surreal, y no llegaba a entender nada de lo que había ocurrido. Y seguramente tardaría en hacerlo.

—¡Maldito celo! —Maldijo entre dientes, poniéndose en marcha a su base.

Luego se daría cuenta que no había conseguido las cosas por las que había salido.

 

*****

 

—¿Se fue?

La voz de Farfa se coló en el silencio del bar.

—Si, recién… ¿Todo bien? —Silithur parecía preocupado.

Farfadox asintió dejándose caer en el asiento de antes, mientras su cabeza golpeaba el mostrador.

—Eh, cuidado…

—Me dolió más a mí que a la mesa… ¡NO JODAS!

Sili solo sonrió de lado, antes de bufar con cansancio.

—¿Seguro que estas bien, Farfa?

El caballero apenas se movió, uno de sus ojos viéndolo de lado.

—¡Es una reverenda mierda!

—Lo sé… Pero ya conoces la historia, no sé si Rich será como Shadoune o no, pero ha rechazado a todo el mundo.

—¡Ja!

Farfadox suspiró contra la madera de la barra, el aroma residual del otro Alpha aun colgando por allí, para total deleite –o también tortura–, puramente suyo.

—Además, sé que eres bueno peleando, pero Rich…

—Claro, porque como me atrae su aroma lo que voy a hacer automáticamente es a retarlo a duelo… ¿Quién mierda piensa así?

Silithur asintió a la atronadora lógica de Farfadox, pero él sabía mejor que nadie que la lógica no estaba del lado de aquellos que habían intentado acercarse a Rich y solo habían encontrado un elegante, pero frio rechazo.

—Evidentemente, tu no… ¿De verdad se irán mañana?

—Si, ya se lo dije a Rubik y a Cris… Conter está roncando y Shadoune se está bañando, después se los diré a ellos.

—Entiendo, pero… ¿Por qué? Ya han estado ustedes aquí por varios días, antes… Y no ha habido jamás problemas. No contigo al menos.

Farfa respiró fuerte, no sabiendo reconocer si eso ultimo era una acusación velada o no.

—¡Está en celo! —Fue su única respuesta, ambas manos cubriendo su rostro con fuerza.

—¿Rich?

Asintió sin ganas de ver la cara que Sili estaba poniendo en esos momentos.

—Eso es bueno… ¿No?

El caballero lo miró como si de repente le hubiese salido una segunda cabeza, y ambas lo estuvieran maldiciendo al mismo tiempo.

—¿Qué tiene de bueno que este en celo? ¡Todo lo que me contaste pasó cuando él estaba en celo! ¿Te olvidaste?

—Bueno, bueno… Sí, pero tu estas acá, y él está rumbo a su base, seguramente… ¡Y ninguno se vio en la necesidad de agarrar una espada!

—Ja… Que gran consuelo. —Farfadox se burló con un rictus de tortura en sus labios. —¿Habría sido igual si me acercaba y le decía que encontraba su olor una delicia?

La mueca de su boca saboreó la palabra, no del todo seguro si era así como quería describirlo.

Silithur lo meditó por unos instantes… Acabando por ver a Farfa con un dejo de disculpas.

—No lo sabrías… Lo que sí sabemos es que, si te dice que no, tu no actuaras como el resto, ¿verdad?

Farfa esquivo su mirada, le encantaría decir que sí, que él no perdería la cabeza por ser rechazado por alguien, pero…

Buscó inconscientemente el aroma casi desaparecido del Alpha… “¿Quizás?” se dijo a sí mismo, intentando ser lo más realista posible.

—Seguro, primero porque no hay chance de que le diga nada… —Se encogió de hombros con desgano. —Y, además, esta fue la única vez que coincidimos… No hay chance de que pase otra vez.

—Lo siento Farfa, es algo complicado y lo he visto muchas veces antes…

—Sí lo sé, igual no es como si tuviera el mínimo problema, jamás me llamo la atención nadie… —Se irguió cuan larga su espalda era. —Además, no veo que sea de esos que le gustan los de su mismo género… O genero secundario, en todo caso.

Silithur asintió en silencio, limpiando un vaso más por costumbre que por necesidad.

—Me alegra ser un simple Beta, macho.

El resoplido semi divertido del caballero, valió otro vaso frente a él…

—Vamos, que no puedo darte fuerzas con nada de lo que te diga, pero al menos puedo darte esto.

—¿Alcohol? —Farfa elevó una de sus cejas, divertido por la manera exagerada que Sili había llenado sus vasos.

—¡Brindis!

—¿Por qué brindamos?

—Por lo que quieras… Amistad, amor, dinero… Todo lo que aun te está a punto de llegar.

Los labios oscuros se estiraron, pero no consiguieron formar una sonrisa completa. Era un guerrero, el no creía que pudiera tener amor… No de manera normal, al menos. Amistad ya la tenía, y le cuidaría con su vida. El dinero siempre le sirvió como un medio y jamás como un fin, él no perdería la cabeza por las riquezas que las que lo hicieran vivir bien.

“Amor…” Murmuró saboreando el alcohol en su lengua. Quizás algún día, incluso él acabaría casado, con hijos a los que criar y cuidar… Pero dudaba que fuese su amor, lo que lo llevaría a ese final. Entregaría sus hijos al gremio, y los entrenaría como caballeros… Pero no habría amor para él…

Agradeció el trago con una sonrisa torcida, no tenía ganas de que el alcohol lo terminase arrastrando a la parte oscura de su mente.

—Me voy a dormir, así al menos salimos de acá descansados…

—Está bien. Descansa… —Sili saludó, sabiendo que mientras Farfa se quedaría en su habitación por el resto del día, los demás chicos aun saldrían para distenderse un poco, luego de su última aventura.

Claramente, las cosas no iban a ser sencillo, y en verdad deseaba que Farfa pudiera mantenerse firme ante lo que parecía ser un problema sin solución.

 

 

Continuará.

Notes:

Esto no va a ser corto… Ya me veo venir el fic largo, y eso era algo que no quería… Pero bueno, vamos a ver para donde me lleva la trama, porque de lo que tenía medianamente delineado, ya se está difuminando.
Quizás, así sale mejor… No sé.
Me puse a terminar el capítulo después del fiasco de la votación por el torneo de Shipps… No hablemos de eso.
Lo cierto es que acabo de terminarlo, y no lo edité lo suficiente… Si encuentran un error o una incongruencia me lo dicen porfa.
Ya saben… Me dejan saber lo que les parece hasta ahora la historia.
Soporto críticas constructivas y destructivas también.
Nos leemos pronto.

Chapter 3: Capítulo 02: Esperando.

Notes:

Resumen: Rich está acostumbrado a pasar su celo solo… No es lo que habría querido, pero era totalmente necesario para él. O lo que había sido una normalidad hasta la llegada de un caballero, que había puesto su existencia de cabeza.
Serie: EliteCraft 2
Personajes: Farfadox, ElRichMC.
Pareja: Farfa-Rich.
Género: Drama, Amistad, BL (Boys Love), Omegaverso.
Rating: M.
Advertencia: AlphaxAlpha, Escena de sexo.
Capítulos: 02/04.
Palabras: 2098.
Notas:
Fecha: 08/06/2025
Beta Reader: ---
Disclaimer: Todo lo referente a MineCraft, pertenece a Mojang-Microsoft.

(See the end of the chapter for more notes.)

Chapter Text

Las paredes de su base eran más sofocantes que en otras ocasiones, se sentía encerrado en su propia casa, y lo que antes había sido una confortable sensación de seguridad, ahora estaba sofocándolo.

Rich se despojó de su abrigo apenas volvió de su corto ‘paseo’ por el pueblo. Las pocas compras que había conseguido hacer, completamente olvidadas a un lado de la puerta.

El calor subía desde sus pies, quemándole las piernas; el cosquilleo –normalmente manejable– hoy estaba siendo un millar de veces peor, algo que difícilmente podía controlar.

Cerró sus ojos y respiró profundamente, no estaba intentando calmarse… Su intención primordial era ‘perseguir’ ese aroma… Llegar a recordar cada nota de un perfume que no había olido jamás hasta ese día.

El hierro de la armadura era la base, pero debajo de eso había tanto color, la transpiración del hombre, de ese caballero… De Farfadox. La piel mesclada con lo que parecía ser días de aventura donde de seguro los baños habían sido escasos –o ningunos–, no debían de sonarle tan absolutamente sexy como lo hace imaginarlo.

—¡Joder!

Rich claramente no quiere hacerlo… Pero el calor está escalando rápidamente por su cuerpo. Algo que no le pasaba desde la primera vez que su estatus de Alpha se asentó en toda regla en su adolescencia.

Sabía que acabaría por sentirse sucio, pero lo necesitaba…

No buscó más que hacer el suficiente lugar entre su ropa, no necesitaba más. Cerró sus ojos y buscó la oscuridad total de su mente.

No necesitaba un rostro, o una voz… Y para eso debía de cerrarse a cualquier otro sentido que no fuese el olfato.

Inspiró suavemente, intentando recordar…

Su mano se sintió fría ante el calor de su abdomen, las llamas abrasando sus dedos cuando llegó por fin a su miembro.

—Maldición… —Mordió su labio inferior con fuerza. —No pienses… —Se instruyó a sí mismo una y otra vez, como si un mantra comenzara a formarse en sus labios.

La pared más cercana sirvió de apoyo para su espalda, para que no se sintiera tan mareado de golpe. Sirvió también para sostenerlo –algo– más erguido, cuando sus piernas flaquearon por un momento.

El aroma llenando la parte cociente de su mente, diseccionando cada nota y cada color que podría creer encontrar.

Su boca se llenó de saliva, mientras sus dedos seguían acariciando su miembro más lentamente de lo que en realidad quería hacerlo.

Pero no hubo caso… “La gente que me conoce me dice Farfa…”

La voz llenó sus pabellones auditivos y la sonrisa cínica que bailo en las comisuras del caballero, apareció demasiado nítida en el vacío de su mente.

Apretó sus ojos más fuertes, girándose contra la pared, la frente acalorada sobre la fría piedra, y su aliento cálido también chocando contra esta.

—No lo hagas más difícil, Rich… —Se amonestó sin real enfado, solo una marcada frustración audible.

En realidad, no quería pensar en el Alpha… De verdad que no quería hacerlo.

¡Por Dios!

Recién lo había conocido… Y en verdad no lo ‘conocía’ si se ponía especifico en el pensamiento.

Era un Alpha joven, que ahora sabia, había estado rondando su ‘territorio’ hacía tiempo. Un Alpha que parecía conocerlo, más de lo que él podía imaginar… Un Alpha Guerrero, con demasiada seguridad en sí mismo.

—Far…

No se atrevió a acabar el nombre, y tampoco le fue totalmente necesario, había estado construyendo su clímax, aun y negándose a pensar, oír, e imaginarse nada del caballero… Su mano se llenó del semen cálido que se había negado a querer liberar.

—¡Ostia!

Bufó a pesar de sus dientes apretados, sus ojos aun cerrados, evitando a toda costa ver aquello que sabía le daría vergüenza reconocer.

Respiró con dificultad, intentando volver a normalizar su respiración, pero su celo ya estaba en su cenit… Ahora solo le quedaban días de esto mismo, aunque esto en realidad no había sido su normalidad nunca antes.

Intentó serenarse, pensar con claridad antes de que la nube de feromonas nublara su razón. Él había pasado sus celos, hasta ahora, con total ‘normalidad’… O al menos sin tener que recurrir a necesidades tan mundanas.

Esto era irreal, no podía ser que él…

Miró su mano, húmeda, como si fuera su principal traidora; y no pudo negar la realidad… Este no sería un celo más, por el cual atravesaría tan solo evitándolo mientras se enterraba de lleno en sus experimentos, este sería completamente distinto, y por lo que podía esperar muy intenso.

No había ni comenzado a pensar en los porqués… Y era evidente que no tendría tampoco mucho tiempo para hacer eso.

Intentó ponerse pie, acomodándose la ropa lo mejor que podía, mientras agolpaba en su mente las palabras que creía necesarias. Las escribió rápidamente, lo mejor que pudo, en su libro de anotaciones importantes.

No sabía que tan duro lo golpearía este celo en comparación con los anteriores, pero no quería correr el riesgo de buscar algún patrón.

Se desnudo por completo luego, sus piernas temblando luego de recibir el aire frio del ambiente, pero sus muslos aún estaban acalorados… Y el resto de su cuerpo aun picaba, la única sensación que él reconocía como ‘normal’ de sus celos.

Se dejo caer así en su cama, viendo el techo por demasiado tiempo, hasta que sus ojos solo veían manchas y una sonrisa que le gustaría mejor evitar, al menos por los próximos días.

Pero claramente esa sería una batalla perdida.

 

******

 

La habitación generalmente era un torbellino… Con ellos cuatro allí metidos, raramente había un solo minuto de silencio. Ni siquiera las noches eran tranquilas, y siempre había uno que se las arreglaba para arruinar el sueño de los otros.

Pero ahora no volaba una mosca… Farfa seguía semi sentado en su cama, mirando a la nada, y el resto tenía cuidado de no respirar más fuerte de lo debido siquiera. Todo en un intento vano de no molestar la frágil sensación de tranquilidad en la que el caballero parecía haberse asentado.

Aunque todos sabían que era una puesta en escena muy burda.

—¿Deberíamos sacarlo a que toque el pasto, aunque sea? —Preguntó Conter, muy muy bajito… Casi pegado a la cien de Shadoune.

—No quiere salir… Y tampoco creo que sea bueno sacarlo. —Rubik suspiró con preocupación, pero entendía muy bien las razones de su compañero. —Solo dejémoslo tranquilo…

—¿Nos vamos mañana, al final? —Shadoune preguntó, ya dejando la habitación atrás y pensando con tristeza que él había pensado en descansar al menos unos días más antes de salir a los caminos una vez más.

—Sí, en la mañana… Cris ya está comprando lo necesario para que partamos. —Rubik cerró la puerta detrás de ellos, no sin antes echarle una última mirada a Farfa. —Traten de descansar lo más que puedan hoy, y acuéstense temprano en lo posible… —Advirtió con seriedad.

Bien sabía que ninguno de ellos quería salir de allí antes de lo que habían planeado, pero tampoco iban a arriesgarse a que algo, luego de lo mucho que Sili les había contado que podía pasar.

Rubik suspiro intentando relajarse. La tranquilidad de Farfa era lo que peor lo tenía… Desde que habían entrado en los territorios de Rich, el olfato de Farfa lo había tenido intranquilo, conocer a Sili les había hecho conocer más del Alpha que aún no habían visto. Y el caballero solo había ganado más nervios.

—Vayan a disfrutar del día… Y no gasten mucho dinero, aun tenemos que llegar al oeste. —Rubik los despidió de forma que pudiera volver a la habitación.

Los vio salir del pasillo, aun cuando ninguno de los dos tenía ganas de salir de allí, antes de volverse de cara a la puerta, golpeando la madera dura solo para avisarle que estaba de vuelta. Farfa aun estaba en la misma posición, sus ojos perdidos en algún punto de la pared del frente.

—Entiendo que no entiendo todo lo que significa esto… —Comenzó, sus pulmones exhalando el aire, como si con eso pudiera también quitarse de encima los problemas que todos tenían sobre sus espaldas. —Pero siempre hay una solución para todo Farfa… Y si hay alguien capaz de encontrarla, ese eres tú.

Los ojos parpadearon un instante antes de fijar la figura de Rubik frente a si… Antes de que un pesado suspiro se oyera.

—No podemos simplemente obviar este pueblo, es estratégico… Y nos dejaría al limite de alimentos, hasta el siguiente pueblo…

La voz salió desafectada, automática y vehemente, como si no fuera la primera vez que esas mismas palabras salieran de su boca… O al menos, la haya formulado una y otra vez dentro de su cabeza.

—¿Entonces?

—Nada… Seguimos como hasta ahora. —Farfa intentó despedir a Rubik con un movimiento de su mano. —Es la primera vez que lo vemos, en meses estando por acá…

—Y lo vas a dejar a la suerte el próximo encuentro.

—No va a haber un próximo encuentro, Rubik…

—¿Y cómo sabes eso?

Farfa se irguió en la cama, el cansancio evidente de quien no tiene ganas de hacerse cargo del elefante en la habitación.

—Mira, es obvio que a Rich no le cabe ninguna, Sili lo dejó bien claro… Mas que seguro que él no será quien se acerque a nosotros, a mi… Por propia voluntad.

—Eso no nos resuelve el problema…

—No, pero tampoco nos problematiza más… Ya te dije, no podemos simplemente saltarnos este pueblo, pero podemos hacer nuestra estadía lo mas corta posible. —Farfa cerro sus ojos, acomodando su espalda sobre la almohada y la pared una vez más. —Solo un descanso corto, la obtención de alimentos y seguir nuestra ruta…

Rubik asintió, no era la solución que quería oír, pero confiaba en Farfa, después de todo era casi su jefe, y los había sacado a todos de situaciones peores, esta era casi anecdótica… Y estaba dispuesto a confiar en la forma de ver las cosas del caballero.

—¿Qué pasa si todo sale al revés? Solo por saber si lo has pensado…

Farfa abrió un ojo, antes de volver a cerrarlo. Sí, lo había pensado… Y aun estaba recopilando escenas posibles en su mente.

Confiaba en su destreza con una espada en la mano, pero la verdad es que no le gustaría tener que empuñarla contra ‘ese’ Alpha, seria un pésimo segundo encuentro… Y aunque no tenia esperanzas de ‘llevarse’ bien, tampoco quería tener que lastimarlo, o salir lastimado.

Obvio que lo haría si se veía amenazado, o a cualquiera de sus compañeros, pero si podía simplemente detenerse en un asentimiento de cabeza cuando se cruzaran… ¡Deseaba que fuese así de fácil!

—Si peleo con él de alguna forma, también nos despedimos de este pueblo Rubik… Lo lógico es no tener problemas con Rich. Ser lo más civilizados posibles. —Farfa sabía muy bien que el único que podría tener problemas con Rich era él.

—¿Y mientras estemos aquí tu estarás encerrado? Para no suscitar un posible encuentro…

Los hombros se elevaron, y una sonrisa se dibujo en sus labios.

—Me vendrá bien para descansar…

—Ok… —Rubik aceptó. —Visto que tienes todo pensado… Confió en vos Farfa.

—Uh loco… Que presión, yo ni siquiera se que estoy haciendo la mitad del día. —La risa no tuvo ni por asomo la misma fuerza que otras, pero al menos dejo a Rubik un poco más tranquilo, su compañero aun podía encontrar razones para reír.

—Ya lo sé… Ahora descansa, te traeré comida más tarde.

—Uh, tengo mi propio mozo… Sili nos va a cobrar más, que no te vea traerme de comer.

Rubik sonrió, pero negó sin problema.

—Mandare a Shadoune… A él no le dirá nada.

—Siempre terminamos explotando a Shadoune, que hijosdeputa que somos…

La sonrisa murió un poco en sus labios, su cabeza echada hacia atrás en la pared, y sus ojos aun cerrados… Su mente aun siendo bombardeada con preguntas y escenas que no podía desenredar del todo.

—A Shadoune no le molesta. —Acabó Rubik, sabiendo muy bien a que se refería Farfa, pero al mismo tiempo, entendiendo porque lo repudiaba.

La puerta se cerró detrás de Rubik, y lo primero que vio fue a Cris sentado en el pasillo.

—¿Aun ve a la nada? —Preguntó con cuidado.

—No, pero tampoco creo que lo ayude mantener sus ojos cerrados…

Cris se encogió de hombros, las bolsas de alimentos y cosas necesarias aun dispuestas en el suelo.

—Al menos así lubrica sus globos oculares…

—Para mañana espero que este mejor.

—Yo también, tenemos una misión, y no entraremos a un Dungeon con él así…

Rubik suspiró, tenían dos semanas antes de la Dungeon, y necesitaban a Farfa en su mejor forma.

 

Continuará.

Notes:

Complicado segundo capítulo… Lo tendría que haber terminado hace tiempo, pero ya ven… hasta hoy me tuvo pariendo, y eso que no es ni muy largo ni muy difícil. Pero… Ya estamos donde quería, en la nada misma…
Creo que me mande una cagada, aunque no estoy arrepentida, porque me gusta como quedo, me deja todo más complicado para el reencuentro.
Espero que el resto de capítulos no se me vayan tanto al pingo… Quiero llegar ya a lo bueno (Sexo).
Nos estamos leyendo pronto.