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Pack Wars (Traducción)

Summary:

Scott le gusta llamarle la Gran División de la Manada del 2012.

A Derek le gusta llamar a Scott un idiota.

(O la vez en la que Derek secuestra a Stiles para enseñarle una lección a Scott, y termina por aprender unas cuantas cosas el mismo.)

Notes:

Gracias a miss_aphelion por darme el permiso de traducir su fic. Espero que lo disfruten tanto como yo lo hice ;)
Si quieren leerlo en ingles y no esperarse a las actualizaciones les dejo el link:
http://archiveofourown.org/works/641269 ----Si lo hacen diganle hola de mi parte y gracias :)

(See the end of the work for more notes.)

Chapter 1: Capítulo 1

Chapter Text

 

La manada de separó después de Jackson volvió a la vida. Stiles le echa la culpa más a Jackson, porque era el deseo de detenerlo que llevo a todos a unirse, pero enserio ¿Quién quería estar realmente en una manada con Jackson?

Entonces Scott termino con la tregua temporal y se dijeron adiós. De alguna manera ellos terminaron con Isaac en el divorcio, Stiles intenta traer también a Lydia, pero ella sigue siendo tercamente neutral, ni si quiera se une a Jackson incluso cuando han vuelto a ser novios.

Terminan siendo tres (dos y medio si cuentas que Stiles no es un hombre lobo, pero a Stiles se rehúsa a esa clase de conteo) contra cuatro una vez que Érica y Boyd regresan de rodillas (cuatro y medio si cuentas al tío zombie de Derek, ¿Pero quién lo hace?). No las mejores circunstancias, realmente, pero Stiles piensa que hace la victoria aún más dulces, y ellos siempre ganan.

¿La manada de alfas? Sí, eso fue gracias a ellos, con un poco de ayuda de Allison. Aunque Stiles piensa que la ayuda de Allison está bien, porque eso les da solo más puntos a su favor, incluso si a Érica le gusta llamarlo trampa. Stiles estaba orgulloso de su plan, que era hermoso en su simpleza. Scott e Isaac acorralaron a la manada del alfas donde los querían, y Stiles los atrapo con un circulo de cenizas de serbal* entonces Allison cargo su arco y les dijo que podría cargarse uno a uno o podrían irse y nunca volver.

Allison es de alguna forma aterradora, así que comprensiblemente tomaron la puerta número dos.

Derek y compañía llegaron cinco minutos tarde, enojados por haberse perdido la diversión.

Entonces la verdadera guerra comenzó.


 

En retrospectiva, ir detrás de un Bunyip era probablemente no la mejor idea de Stiles.

Había oído de las muertes por ahogamiento de la radio policial de su padre, y las circunstancias le parecieron extrañas. Sacó Google y el bestiario y se puso a  trabajar.

Cuando se topó con referencias del maligno espíritu de agua de mitología aborigen pareció encajar. No sabe cómo es que siempre estos salvajes suposiciones terminan por ser ciertas 99% del tiempo.

Había llamado a Scott, por supuesto. Scott le había dado el discurso de estar en medio de algo junto con Isaac y después le colgó. Nada nuevo ahí.

Pero el Bunyip no espera a nadie. Había habido tres muertes hasta ahora, todas separados por cuatro días. Esta noche era la cuarta desde el último ahogamiento, así que Stiles se montó en su Jepp con una linterna y los goggles para el agua que su padre le había comprado para mejor-no-recordar intento de unirse al equipo de natación.

Ahora, mientas sale a la superficie del rio de la Preserva, luchando por respirar, piensa que debía haber tratado contactar a Isaac. Isaac no le habría colgado. Probablemente.

No es que Stiles no sea capaz, porque el totalmente encontró al Bunyip. En el primer intento incluso.

El problema con eso es que, él encontró al Bunyip.

Stiles trata de liberarse a patadas, pero el agarre del Bunyip es resbaladizo, manos como aletas alrededor de su tobillo que lo jalan de vuelta al agua. Con la luz de la luna dándole un extraño brillo al agua, los goggles le dan una vista perfecta. Es extraño, la cara como un perro parece triste, y Stiles tiene un momento de pena por el Bunyip antes de que el agua se vuelva roja.

El agarre del Bunyip se afloja y de repente hay brazos alrededor de su cintura, arrastrándolo hacia la superficie. Stiles boquea por aire, removiéndose en el agarre de su captor mientas se quita los goggles en pánico. Entonces escucha un comando brusco, solo un corto, “quédate quieto”, y se relaja incluso aunque probablemente no debería encontrar la voz de Derek tranquilizadora.

—Lo mataste—dice Stiles, después de que Derek lo pone en tierra firme. Se mueve en el momento que Derek lo suelta, inclinándose sobre el agua para mirar hacia abajo. Derek lo agarra y lo arrastra de vuelta.

—Es un Bunyip, Stiles. Iba a matarte— gruñe.

—Sí, lo sé. Es solo que era en cierto modo lindo. Me recordaba a mi perro de la infancia, Boba Fett — dice Stiles, suspirando pesadamente —. Pero gracias, supongo. Por salvarme la vida.

— ¡Esto no es…esto no es un juego! — Derek estrecha los ojos, y se cruza de brazos — ¿Dónde está el resto de tu pequeña manada?

— ¿Huh?— Stiles pregunta, levantando la vista— Oh, vine solo.

—Viniste solo— repite lentamente Derek, sonando furioso. Stiles no le presta mucha atención al tono, porque Derek usualmente suena furioso — ¿Scott te deja venir aquí tu solo?

—Scott no me deja hacer nada — Stiles dice, Tiembla un poco por el viento que rosa su ropa pasando sobre su piel — ¿Quién crees que es el que hace todos los planes? Hago lo que yo quiera.

—No— Derek dice tercamente, sacando su mandíbula.

Stiles se le queda mirando con la boca abierta por un momento. — ¿Qué quieres decir con “no”? — pregunta.

—Nunca vas solo — Derek gruñe — Ese es el punto de tener un manada.

— ¿En serio? Bueno, ¿Dónde están los tres mosqueteros entonces?—Stiles pregunta.

—Lo suficiente cerca para venir si los llamara. ¿Puedes decir lo mismo?

Stiles lo mira con furia, pero no puede pensar en una buena respuesta para eso. Scott es muchas cosas, pero un buen conversador por teléfono, no es una de ellas. A Stiles le ha colgado más de una vez. Sabe que la respuesta a esa pregunta es probablemente no.

—Mira, gracias por tu ayuda — Stiles dice — Este ronda va para ti. Pero tengo que ir a casa, mi papá debe estar esperándome.

—Tu papá está fuera de la ciudad por una conferencia en Napa.

— ¡Eres un acosador!— lloriqueo Stiles — ¿Cómo es que sabes eso?

—Me canse de esperar mientras Scott jode por ahí — Derek empezó a acercarse a Stiles, tomándolo por el brazo — Tú vas a venir conmigo.

— ¿A qué te refieres con que voy contigo? — demanda Stiles.

—Scott necesita aprender cómo cuidar de su manada. Le voy a enseñar una lección.

—¿Cómo, exactamente?— pregunto Stiles — Porque estoy sintiéndome miserable y mojado, y Scott no es exactamente lo que yo llamaría un estudiante modelo.

—Te voy a secuestrar — le informa Derek — por el bien mayor.

—Estoy un poco preocupado porque pareces creer lo que estás diciendo. Casi fue ahogado hace un momento ¿No ha sido mi noche lo suficientemente traumatica?

— ¿Prometes que no vas a involucrarte en estas cosas de nuevo? — demanda seriamente Derek.

—Me gustaría. Pero probablemente sería inútil, ya que sabes cuándo miento.

—Entonces lo siento, pero te estoy secuestrando — Derek dice, para después tomar a Stiles y arrojarlo sobre su hombro.

Stiles lanzó un grito de protesta escéptico, y golpeando la espalda de Derek — ¡Bájame!  —demando.

—No. Considera esto custodia bajo protección.

—Eventualmente Scott va a notar que no aparezco — lo que quizás no es tan buen argumento a como sonaba en su cabeza. Para de removerse con un suspiro cuando Derek endurece su agarre — Esto es romper nuestro pacto no-hablado de no interferir.

— ¿No interferir? — Derek pregunta incrédulo —Ustedes idiotas se meten en nuestros asuntos todo el tiempo.

— ¡Pero no directamente! Vamos a sus espaldas, eso es totalmente diferente. Esto es una declaración de guerra. Scott puede ser distraído, ¡pero es el leal hasta el final! El vendrá por mí.

—Estoy contando con eso — Derek dice, entonces lanza a Stiles dentro de la cajuela del Camaro y lo cierra con llave sin ninguna ceremonia.

— ¡Hubiera preferido pasar mi noche con el Bunyip! — Stiles grita enojado desde la cajuela.

Chapter 2: Capítulo 2

Notes:

(See the end of the chapter for notes.)

Chapter Text

La primera vez que el auto para Stiles patea la cajuela y grita por ayuda. Su única respuesta son risas.

Sonaban sospechosamente como Érica.

La segunda vez que pararon, Stiles no desperdició el aliento. Toca el suelo de la cajuela hasta que alcanza el borde la alfombra y tira de ella, rasgándola. Pasa la mano por la parte expuesta hasta que toca el cable liberador de la cajuela. Entonces se coloca al lado contrario y tira hasta que escucha un click.

—Sí— Stiles grita, sonriendo mientras se arrastra fuera de la cajuela. Aun esta oscuro, piensa que probablemente es media noche. Está en algún estacionamiento que no reconoce, y con su suerte (aún no sabe si es bueno o malo), no hay nadie alrededor. Mira hacia las luces y ve una tienda de conveniencia, ¿En serio? Derek paro para picotear mientras él está encerrado en la cajuela.

Stiles considera correr por un momento antes de trepar al asiento del pasajero con un suspiro. Baja la visera y abre la guantera buscando por el teléfono de Derek, pero debe habérselo llevado consigo. El teléfono de Stiles había sufrido el mismo destino que el anterior, realmente necesita dejar de sumergir su celular en agua.

Y probablemente también debería dejar de terminar en el agua con Derek por casualidad. ¿Cómo es que eso pasa más de una sola vez?

Escucha a Derek aproximarse, y sus murmullos de frustración cuando nota el estado de su cajuela. Entonces se está dejando caer en el asiento del conductor mirándolo con ira.

— ¿En serio?— demanda.

—Mi papá es policía — Stiles dice — La mayoría de los niños tienen una charla de quince minutos sobre “no hables con extraños”, yo tuve un seminario de una semana sobre “qué hacer si eres secuestrado por una persona loca”. En ese tiempo pensaba que era una exageración, pero en serio, la mejor clase del mundo. ¿Quién sabría que puede haber tantas formas de utilizarlas?

Derek entorno los ojos hacia él, y Stiles tomo ventaja de su distracción para agarrar uno de los Gatorades de sus manos — ¿Para mí? No te hubieras molestado.

—Vas a pagar por eso, y por el daño a mi auto.

—Por supuesto — Stiles dice animado — ¿Debería checar el cuidado de la cárcel de Beacon Hills County?

—No involucraras a la policía —Derek dice petulante — Porque no quieres involucrar a tu padre.

—Mi papá está en Napa, ¿recuerdas? Y conozco a muchos policías. Soy como su mascota. Me aman, ¿A ti? No mucho, todavía tienen el cartel de se busca y todo. Aunque, admitiéndolo, es más porque María piensa que eres de ensueño.

Derek solo rodo los ojos y echa a andar el coche, llevándolo sueavemente hacia atrás directo a la carretera.

— ¿Por qué no corriste? — demanda.

—Eres un hombre lobo —Stiles se encoge de hombros.

Los labios de Derek se curvan un poco, y no lo niega.

—De todas formas, no habría llegado muy lejos a pie. E imagino que me matarías si le hiciera un puente* a tu coche.

— ¿Sabes cómo hacer un puente?

—Lydia me lo enseño — Stiles dice, de forma engreída.

— ¿Lydia sabe...? No, espera, olvida eso. No es realmente una sorpresa — Derek lo mira de reojo con una expresión extraña — Te iba a dejar salir, ¿sabes? Solo quería esperar hasta que estuviéramos afuera de Beacon Hills.

— ¿Qué? ¿Dónde mierda estamos? Sabes que secuestro es un delito mayor y que cruzar líneas de estado traerá a los Federales detrás de ti como la guadaña de la muerte ¿Cierto?

—Estamos a veinte millas de la ciudad —Derek dice secamente — No creo que los Federales sean un problema.

—Aun no puedo creer que estés llevando esto tan lejos — Stiles admite, frotando sobre la ropa mojada

Derek le da un vistazo rápido, y arruga el entrecejo. — Traje ropa seca para ti. Están atrás. Cámbiate antes de que te de neumonía.

—Solo estas preocupado de tus preciosos asientos, ¿No es así? — Stiles demanda.

—Sí — Derek dice, lanzándole una sonrisa cortante — así que cámbiate.

Stiles le da un suspiro de sufrimiento antes de desatar el cinturón de seguridad e ir a los asientos de atrás. Se sienta detrás de Derek, pateando con la rodilla el asiento del conductor a propósito más de una vez. Derek deja salir un gruñido bajo, pero no dice nada, y Stiles sonríe de forma socarrona.

Encuentra la bolsa de ropa, y la saca antes de fruncirles el ceño. Es una Hanley gris oscuro, un par de jeans negros, bóxer-briefs y calcetines negros. Básicamente es mucho negro. —Esta es tu ropa.

— ¿Qué, querías que irrumpiera en tu casa para agarrar algunas cosas?

—No tienes razón — dice Stiles — porque eso sería cruzar la línea.

Stiles decide no pensar mucho en esto, porque está congelándose, así que se retuerce para salir de sus jeans mojados y boxers, y rápidamente se pone los de Derek. Se ven un poco grandes en él, pero no tanto para que sea notable. No piensa que Derek pueda verlo donde está: seguramente situado detrás de él, pero se cree ver un poco de rojo en el espejo retrovisor.

Stiles se deshace de su arruinada chaqueta y camiseta para vestirse con la Hanley. — Siento como si estuviera vestido para un robo.

Derek solo suelta un bufido para después lanzarle su chaqueta de cuero golpeándole el pecho a Stiles.

Stiles abre la boca con incredulidad. —Pero esta es tu chaqueta. Tu siempre estas usando está chaqueta.

—Solo póntela —Derek le alza la voz —Aun estas temblando.

—Sé que no tienes experiencia en esto — Stiles dice mientas se pone la chaqueta —pero solo para que quede claro, eres un pésimo secuestrador. No se supone que me tengas cómodo, la clave es hacer a tu rehén lo más incómodo posible. Tuviste un buen comienzo echándome a la cajuela, muy intimidante. Estaba casi asustado, tal vez como, 98% irritado y 2% asustado. Pero ahora estar perdiendo terreno, trayéndome Gatorade…

—Era mi Gatorade — Derek interrumpe, pero Stiles lo ignora.

—Y ahora me traes ropa, aunque sean depresivas. Es patético de hecho; ¿No sabes cómo hacer esto para nada? Se supone que los secuestradores mantengan a sus víctimas aisladas, y en desventaja. Es común tomar prendas de vestir, especialmente los zapatos, para hacer más difícil el que huyan…

—Buena idea. Dame tus zapatos.

— ¿Qué? — pregunta Stiles, mirando hacia arriba mientras sus cerebro finalmente se sincroniza con su boca y se da cuenta del curso en “cuidado del secuestrado” que ha estado diciendo en automático —Oh, tienes que estar bromeado

—Ahora, Stiles — Derek dice impaciente, tendiéndole una mano.

—Aw, hombre — Stiles se queja mientras toma sus tenis y se los da a Derek irritadamente.

—Gracias — Derek dice, antes bajar de repente la ventanilla y arrojarlos por ella.  

— ¡Hey!— Stiles suelta un quejido, dándose la vuelta para ver a sus pobres tenis rebotan saliendo del camino hasta la alcantarilla — ¡Amaba esos zapatos!

—Deberías estar agradecido, estoy dejando migajas de pan. Es tiempo de ver realmente que tan bueno es tu “alfa”.

—Te odio —Stiles le dice, reptando hacia el asiento delantero golpeado a Derek en el costado con la rodilla con más fuerza de la que puede ser considerada accidental.

 —Cinturón — Derek le dice de mala manera — Solo estoy tratando de sacerte de la jugada.

— ¿Sacarme de la jugada? — repite Stiles.

—Piensa en esto como un partido de ajedrez. No vas detrás del Rey, él es inútil. Vas detrás de la Reina, y la defensa de tu enemigo se cae a pedazos.

— ¿Realmente estas llamándome Reina? —pregunta Stiles.

—La Reina es la más peligrosa pieza de tu enemigo — Derek dice, su voz templada como si estuviera tratando de no gritar — Estaba dirigido como un cumplido. Uno del que estoy empezando a arrepentirme.

— ¿Por qué sigues llamándonos “el enemigo”? —Stiles pregunta, haciendo comillas en el aire para darle más énfasis — ¿Crees que Scott es tu archienemigo o algo? ¿Has estado planeando su caída? ¡Oh por Dios! —Rompe en carcajadas — Oh, Dios. Esto es hilarante. Mientras nosotros hemos estado desperdiciando las noches teniendo maratones de Call of Duty tú has estado ocupado planeando la dominación del mundo.

—Cállate — dice firmemente, y eso solo hace reír más a Stiles, porque Derek está prácticamente sonrojado.

— ¿Te das cuenta que suenas como un demente, cierto? ¿Sabes que esto es una locura?

—Érica pensó que era una gran idea — dice Derek.

—Eso no dice nada a tu favor. ¿Entonces qué? ¿Toda tu manada está en esto ahora?

—Sí. Van a vernos ahí.

— ¿Vernos en dónde? —demanda Stiles.

—Eso no es importante—Derek dice, dándole una mirada rápida —Es agradable, no te preocupes.

—No te preocupes, dice —Stiles le contesta mal — ¿Y cuánto tiempo voy a ser tu prisionero?

—Solo hasta que Scott te encuentre. O hasta que tu padre regrese a casa de su conferencia. Cualquiera que pase primero.

—Mi papá no regresa hasta dentro de tres días — protesta Stiles.

Derek retine una sonrisa. — No tiene mucha fe en Scott, ¿No es así?

—Por supuesto que la tengo. Nadie cree en Scott tanto como yo. Lo conozco mejor que nadie. Lo que significa que conozco sus fortalezas, y sus limitaciones.

—Una de ellas siendo no pensar en alguien más que en sí mismo — dice Derek.

—No, eso no — Stiles empieza — No es así. Scott es buena persona, tiene un buen corazón. Él solo… no puede ver el bosque por los árboles. A menos que uno de los árboles se llame Allison.

— ¿No piensas que te mereces más que eso? — Derek pregunta quedamente —Si fueras…— se calla, cerrando la mandíbula y apretando sus manos en el volante.

— ¿Si yo fuera qué?

Derek mantiene los ojos en el camino — Si estuvieras en mi manada, nadie sería capaz de secuestrarte en medio de la noche. Siempre sabría donde estas.

—Bueno, no estoy en tu manda — Stiles dice de forma cansada, y apoya la cabeza contra la ventana — Y Scott vendrá al final. Siempre lo hace.

—Ya veremos— dice Derek, y por alguna razón, suena casi triste.

Notes:

*Hacer un puente a un coche, que es quitar los cables del contacto del coche y empalmarlos para que arranque.

No roben coches niños, esta mal...XD

Chapter 3: Capítulo 3

Notes:

(See the end of the chapter for notes.)

Chapter Text

Derek se estaciona en lo que parece ser el medio de la nada. Stiles realmente había estado bromeado con el cuento de conducir a un remoto lugar en donde nunca encontrarían su cuerpo, pero él en serio no podía ver nada que no fueran árboles. Y no árboles cualesquiera. Este lugar tenía árboles gruesos y altos que no había ni si quiera en la Reserva, y se parecían sospechosamente a los de Redwoods*.

— ¿Estamos en Arnold?*— demanda, girándose para mirar mal a Derek.

Derek frunce los labios, lo que significa que Stiles tiene razón y él no quiere reconocerlo.

Stiles gruñe y se inclina hasta que su frente toca el tablero. —Oh por Dios. Dijiste veinte millas.

—Estábamos a veinte millas en ese momento —Derek dice, sacando la llave del coche —Arnold no esta tan lejos. Scott debería seguir siendo capaz de encontrarte. Eventualmente.

— ¿Por qué estamos aquí? — Stiles demanda — ¿No estamos en el Parque Estatal, o si? ¿No estas llevándome a una cueva, cierto? Esto no es justo. No estoy hecho para esto. Tengo un selecto tipo de Agorafobia. Se activa en cualquier momento que estoy muy lejos de una conexión de Wi-Fi.

—No es una cueva — Derek dice, rodando los ojos mientras abre la puerta —Sal.

Stiles suspira dramáticamente al mismo tiempo que sale del coche. Mira hacia arriba en donde los árboles parecen tocar el cielo. Lo hace sentir mareado.

—Tenía planes para esta noche ¿sabes? Iba a acurrucarme en mi cama y ver la nueva temporada de Fringe.

—Si no hubiera aparecido, estarías muertos —Derek dice fácilmente — Estoy seguro de que esto es mejor que estar muerto.

—Buen punto — admite Stiles.

—Vamos — Derek sujeta la mano de Stiles arrastrándolo detrás de él.

— ¡Hey, ve más despacio! ¿Recuerdas que tiraste mis zapatos? Ow.Ow.Ow.

— ¿Quieres que te cargue de nuevo?

— ¿Qué? ¡No! — Stiles contesta rápidamente — Amo caminar sobre rocas y ramas y… lo que sea que fuera eso, en nada más que tus asquerosas calcetas. Estoy bien. Super.

Derek resopla y entonces asiente con la cabeza delante de ellos. —Ya casi llegamos. Creo que puedes hacerlo.

Stiles se detiene de repente cuando la nada oscura delante de ellos finalmente por fin toma forma en su mente. Había sido difícil verlo en la oscuridad, pero ahora es obvio que es una choza. No como una cabaña, tampoco, pero una de esas mansiones modernas hechas para parecer fuera de moda, construida enteramente de madera real.

—Dime que no estamos irrumpiendo en este lugar. No quiero agregar allanamiento de morada a tu creciente lista de crímenes.

—No lo estamos — Derek dice hoscamente, sacando sus llaves y abriendo la puerta, como si esta fuera una situación normal — era la cabaña de verano de mis padres.

—¿Cabaña de verano? —Stiles repite — este lugar es más grande que la casa de Jackson.

Stiles tiene que morderse la lengua para callarse de demandar saber cuánto dinero tiene Derek realmente, porque aunque este irritado no es lo bastante cruel para recordarle al hombre lobo como lo obtuvo.

Pero no es como que piense que puede detener el comentario del todo.

—En serio, has estado invadiendo propiedad ilegal en almacenes y vagones de tren, ¿Y este lugar solo está sentado aquí? ¿Qué está mal contigo?

Derek no contesta, solo vuelve a tomar a Stiles por la muñeca y arrastrarlo hasta las escaleras del porche antes de escoltarlo dentro. Derek prende las luces, y Stiles abre la boca mientras mira alrededor. El techo es demasiado alto hechos de madera no barnizada de color claro. Todos los muebles están cubiertos por sábanas blancas, partículas de polvo flotando en el aire como diamantina, pero con un poco de limpieza este lugar podría hacer obviamente una aparición en Better Homes and Gardens.

— ¿Entonces…tienes una PlayStation?— Stiles pregunta, para romper el extraño silencio que ha caído sobre ellos. Derek se ve tenso, enrollado como un resorte, y Stiles odia que se esté sintiendo mal por el hombre. Él es la victima de secuestro aquí, después de todo. No es como si él hubiera preguntado para que lo trajeran a esta casa, con todos sus fantasmas.

—No— Derek dice, pateando la puerta para cerrarla antes de darle a Stiles un empujón al final del pasillo —Solíamos venir aquí para distraernos del resto del mundo. Ni si quiera hay una televisión.

—Uh, sí, eso no va a funcionar para mí. Literalmente me volveré loco sin algo de entretenimiento. No que no tengas tus momentos. Quiero decir, esa vez que estabas vomitando esa porquería espesa de color negro y casi te corto el brazo, buena diversión, honestamente, pero enfrentémoslo, la mayoría del tiempo eres igual de expresivo que un cartón recortado. 

—Te quedaras aquí —Derek dice, empujándolo dentro de una larga habitación, aparentemente contento de ignorar todo lo que Stiles dice.

Stiles tiene que admitir, es bastante agradable. Es casi tan grande como su sala de estar, con una cama queen-size en el centro y un enorme baúl de madera a los pies de esta. Hay un tocador en un lado y un escritorio en el otro, y largas ventanas con cortinas en cada pared. Incluso hay cuarto de baño completo, puede ver la bañera desde la entrada.

Cuando Derek había dicho “Te voy a secuestrar” esto no es donde se imaginaba que terminaría. Pensaba que solo descansarían en un motel por un tiempo hasta que Derek que aburriera o Stiles se saliera por la ventana del baño y se fuera hacia las colinas.

En lo que a las cárceles concierne, esta era a la vez bonita y altamente efectiva. Incluso si aún tuviera sus zapatos, estaría perdido entre los árboles alrededor de este lugar en cinco minutos máximo.

—Mierda — suspira.

Derek se cruza de brazos y se apoya en la puerta de entrada, no está sonriendo, pero lo presuntuoso está prácticamente saliendo de él. Piensa que es inteligente.

Stiles le da una de sus apretadas sonrisas, y se prepara para darle un golpe de la realidad. Él le mostrara inteligencia.

—Entonces, vamos a escucharlo. ¿Cómo va a ir esto?

La presunción de Derek disminuye un poco, y se endereza. —Ya te lo dije. Te vas a quedar aquí hasta que tu padre regrese o Scott te encuentre.

— ¿En serio? — Stiles dice, riéndose al mismo tiempo que niega con la cabeza — ¿Eso es todo lo que tienes? ¿Ese es tu plan completo?

—No veo ningún problema en el — Derek dice de forma defensiva — ¿Por qué?

—Bueno, uh, veamos. Solo por empezar, ¿Qué pasa con mi papá? Porque me ha estado llamando cada noche al toque de queda solo para estar seguro de que estoy ahí. Es como si no confiara en mí o algo. Y mi celular murió, así que no va a ser capaz de contactarme de esa manera. Sé que piensas que Scott está en las nubes y ni si quiera notara no que estoy, pero mi papá es seguro que lo ara.

>>Sin mencionar que no pareces haber pensado en la posibilidad de que Scott no solo note que no estoy, pero que puede decirle a su ahora sí ahora no novia del oscuro cabello y arco y flechas que he sido secuestrado por tu manada. Nos como si Scott nunca hubiera echo acuerdos con los Argent antes, solo estoy diciendo.

>>No que no apruebe tu curso de acción elegido. O como ser echado a una cajuela, era espacioso, y seguía oliendo a la sangre y sudor del ultimo tipo que tiraste ahí. Pero si vas a hacer esto deberías hacer bien, ¿Correcto? De otra manera mi papá va a venir a cazarme. Los SWAT van a caer de las vigas, y eso no va a ser bueno para nadie.

Derek lo mira fijamente con una extraña combinación de molestia e incredulidad.

—Eso es todo — pregunta.

— ¿Qué, ese pequeño soliloquio? Eso solo es el principio, amigo. Solo se va a poner peor. ¿Sabes que tengo TDAH, no? ¿Y que se supone que tengo que tomar Adderall para que no me salga de los rieles? Aquí hay una alerta de spoiler: No he tomado nada desde ayer y no tengo ninguna pastilla conmigo. ¿No planeaste nada de esto, cierto?

Derek lo mira fijamente durante un momento, viéndose más o menos aterrorizado por la posibilidad de Stiles convirtiéndose en más molesto de lo que ya era.

—Enviare a alguien a que las traiga — dice finalmente— Solo dime dónde están.

—Claro, porque en realidad quiero que tú y tus pequeños acosadores en entrenamiento busquen entre mis cosas — Stiles se mofo, volteándose para tirar de la cubierta blanca de la cama. La cama está hecha por debajo de la sabana, con una colcha de color oscuro de marrones, morados y azules, y las sabanas debajo de ella se ven nuevas.

—Stiles —dice exasperadamente —si las necesitas, las conseguiré para ti.

—Está bien. Estoy bien, eso es como, la menor de tus preocupaciones, en serio. Eso solo es el menor fallo en este lio de plan. Son los enormes abismos los que deberían de estar preocupándote.

—Bueno, ese no es tu problema — Derek le dice de forma cansada — ¿De acuerdo? Las consecuencias serán mías.

—Eso es muy nombre y todo, pero no, lo siento, así no es como funciona. Esto no solo te afecta a ti — Stiles dice, y luego se pasa la mano por la cara — ¿Qué hora es?

—Once y media, ¿Por qué?

—Eso es bueno, es más temprano de lo qué pensé —Stiles le tiende una mano — dame tu teléfono.

Derek solo alza una ceja, y Stiles hace un gesto de tomarlo con su mano.

— ¡Vamos! No voy a llamar a Scott. Pero a menos que la última vez te gustara tanto ser fugitivo que pensaste que lo harías de nuevo, no llamare a mi padre.

Derek le pasa el teléfono. —Sabré si llamas a Scott —Le advierte.

—Sí, supero oído, bla, bla, bla. Amó a Scott como un hermano, pero él no sería mi llamada en situaciones peligrosas. Eh hecho ese error demasiadas veces.

Stiles marca en número de su padre, y se deja caer para sentarse en el borde de la cama.

— ¿Quién es? — su padre contesta bruscamente.

—Hey, papá, hola, soy yo. Quiero decir, Stiles. Tu hijo.

—Siles, ¿Dónde diablos has estado? — El Sheriff grita — estaba a cinco minutos de llamar a la estación y mandarlos a buscarte.

—Lo sé, siento que me perdiera la llamada. Yo solo…No quería quedarme solo, así que Scott dijo que podía quedarme con él. Estábamos jugando videojuegos y perdimos de vista la hora, supongo.

— ¿Por qué no estas llamándome de tu teléfono?

—Uh, si, sobre eso…—Stiles empezó con voz avergonzada.

—No otro — el Sheriff suspira — ¿Qué demonios, chico?

—Lenguaje. Mira, este es el teléfono de Scott, así que puedes hablarme por aquí en cualquier momento ¿okay? Melissa dijo que me podía quedar hasta que regresaras.

—Quiero hablar con ella.

—No está aquí — Stiles dice — Trabaja el turno nocturno, papá, tu sabes eso. Puedes hablas con ella cuando regreses si no me crees.

Su padre suspira. —No me refería a…solo quiero estar seguro de que estas bien.

— ¿Qué, crees que yo no estoy preocupado por ti también? Más te vale estar alejado de las papas rizadas.

El Sheriff ríe. — Sí, sí. Te amo, chico. Se bueno.

—Siempre. También te amo, bye.

Stiles cuelga el teléfono y mira a Derek. El hombre se ve incomodo, y está mirando a sus pies, como si se sintiera mal por haber presenciado la llamada. Stiles suspira. —Ahí tienes. ¿Me he vuelto bueno, huh? ¿Mintiéndole?

Derek frunce los labios, y al final se encuentra con su mirada. — Gracias. Por hacer eso.

—Sí, bueno, no lo hice por ti — Stiles dice — Estabas en lo cierto, no quiero a mi papá involucrado en esto. Aunque espero que te des cuenta que voy a estar castigado si no puedo convencer a Melissa de mentir por mí una vez que todo esto termine. Y no hay garantía de que lo logre. Melissa ha estado sintiéndose más y más culpable por mentirle a mi papá.

—Estás haciendo lo correcto. Esta más seguro no sabiendo.

—Tienes que decir eso. Él te llevaría a prisión si le dijera la verdad.

Derek inclina la cabeza hacia arriba, sus ojos cambian de color brevemente al mismo tiempo que se voltea hacia la puerta. Sus manos se doblan una vez y le lanza un vistazo de vuelta a Stiles — Los otros acaban de llegar. Deberías dormir un poco.

Stiles solo asiente con la cabeza y un medio encogimiento de hombros, y espera a que Derek se vaya.

—Stiles — Derek dice explícitamente, extendiendo una mano.

—¿Qué? — pregunta.

Derek rueda los ojos y da un paso de vuelta hacia él — El teléfono, Stiles.

Stiles masculla para sí mismo y saca el celular del bolsillo de la chaqueta de cuero, de forma irritado dejándolo caer en la mano de Derek. 

— Bien. ¿A quién llamaría de todas maneras, no?

—Solo duerme un poco — Derek gruñe, y sale de la habitación.

Stiles se levanta y trata de abrir la puerta, pero es inútil. Asique se quita la estúpida chaqueta de Derek y la lanza de forma enojada al suelo.

—Sera mejor que vengas, Scott— murmulla, dejándose caer de espaldas a la cama.

Notes:

*Redwoods es un parque. Como una reserva (Para mi es un bosque, pero bueno, así se llama)
*Arnold El estado en que esta la reseva.

Mis explicaciones son las mejores :)

Chapter 4: Capítulo 4

Notes:

HOLA! se que la mayoría de las veces se las sudan las notas sobre los capítulos, pero si en algún punto no entienden algo de la traducción, las notas del final siempre tienen una explicación que puede servirles. Y si ese no es el caso siéntanse libres de preguntar en los comentarios :)

(See the end of the chapter for more notes.)

Chapter Text

Stiles no duerme mucho solo está ahí recostado un par de horas, evaluando sus decisiones de vida .Empieza la noche tratando de convencerse que no es gran cosa, ¿Y qué estaría haciendo en su hogar, de todas maneras?  Su plan había sido ver Fringe, o probablemente un poco de Tenant era Doctor Who, y eso hubiera resultado inevitablemente en él dejando extraños, incomprensibles mensajes en el buzón de voz de Scott demandando saber por qué tenía que morir.

Que, ya sabes, había estado bien cuando lo más emocionante que les había pasado que la Comic-Con de ese año estaba a dos horas de camino, pero como eran sus vidas ahora la última vez que lo había hecho Scott pensó que era en serio e irrumpió en su habitación demandando saber quién había muerto. 

Realmente Derek le había hecho un favor, decidió Stiles.

Y entonces una pequeña parte de su cerebro se horrorizo de darse cuenta que esta desensibilizado con esta clase de vida que su secuestro es más como unas vacaciones que lo realmente es, y casi tuvo un ataque de pánico.

Apenas se había movido para sentarse en el suelo, apoyando la espalda en la cama tomando aire profundamente cuando escucha a alguien entrar. Mira hacia arriba y se sorprende al ver a Boyd en vez de a Derek.

—Aquí — Boyd dice, pasándole una botella de agua — Toma algo conmigo.

Stiles coge la botella de agua y Boyd se sienta aun lado.

— ¿Dónde está tu mascara de esquí? — Le pregunta— No soy idiota. Sé que significa que me vas a matar cuando me dejan ver sus caras.

Boyd rueda los ojos, mirándolo por el rabillo del ojo.

—Stiles, — dice — necesitas calmarte. Tu corazón esta como loco.

—Sí, bueno, eh sido secuestrado. Raptado, soy un rehén. Es traumatizante.

—Derek nunca dejaría que algo te pasara — Boyd lo mira de reojo, atrayendo una pierna hacia su pecho mientras la otra la deja extendida — Es un buen hombre.

—Eres uno de sus minion, tienes que decir eso — protesta Stiles — Vamos, Boyd. Eres el cuerdo. Pensé que tú eras la voz de la razón.

—Pienso que esto es algo que iba a pasar eventualmente, de una forma u otra. Nuestra pequeña guerra estaba obligada a llegar a un punto crítico. De esta forma, podríamos hacerlo sin una matanza. Sabías que esto iba a pasar.

—No, no realmente. Puedo decir con honestidad que nunca me imaginaba a Derek lanzándome a la cajuela y después dejarme en el bosque en la aislada cabina de su familia.

—Sabes de lo que estoy hablando — Boyd dice.

—Claro, el momento decisivo — Stiles deja caer su cabeza contra la cama — la épica batalla Derek Vs. Scott. Como sea, ellos pueden hacer lo que quieran. Yo no creía que iba a terminar siendo el trofeo.

Boyd se ríe ligeramente. — Trofeo — dice — Es una buena forma de ponerlo. Me pregunto si realmente sabes lo cierto que es.

Stiles juega con la tapa de la botella, y se encoje de hombros. — ¿Por qué importa? Tal vez es mejor si solo me siento aquí mientras ellos pelean. Desde hace tiempo que Scott ha estado queriendo enfrentarse con Derek, y como el idiota que soy le he estado convenciendo de lo contrario como si esto pudiera terminar de otra manera.

—Solía querer ser como Scott, ¿sabes? — Boyd dice. Stiles reprime una pequeña risa y se gira para mirarlo — No, lo hacía. Él era como una gran sombra sobre nosotros. Un gran ejemplo de control, de cómo deberíamos de ser. Derek hablaba de la manada de Scott todo el tiempo, usaba ejemplos para enseñarnos que hacer. Explicando las estrategias. Y pensé, eso es lo que quiero hacer.

— ¿Por qué me estás diciendo esto? — Pregunta Stiles — ¿Estas tratando de entrar en la manada de Scott o algo?  Porque si me das un aventón fuera de aquí, amigo, estas dentro.

—No — Boyd dijo irónicamente — te estoy diciendo esto, porque el hombre que pensé que era Scott no existe. Un día le mencione a Érica que quería ser como él y se rio de mí. Me dijo que él no estaba detrás de ninguna de las cosas que Derek siempre nos estaba diciendo, dijo que siempre eras tú el que estaba detrás de todo. Scott solo guía.

—Entonces en realidad — Stiles dice con aire de suficiencia — Quieres ser como yo.

Boyd se ríe — No. Quiero ser el hombre que haces parecer a Scott.

—Bueno, tal vez estés de suerte — dice de forma seca, y le da un gran trago a la botella de agua — Puede que esté buscando hacer una entrevista para un nuevo mejor amigo.

Boyd suspira y niega con la cabeza — Pienso que ambos sabemos que eso nunca va a pasar. Siempre va a ser tú y Scott. Derek aun no lo entiende, pero los he visto por años. Si Scott a veces te toma por sentado, sabes que es por porque no puede imaginar un mundo sin ti.

—Nos haces parecer como personajes en una novela de Harlequin* — dice Stiles haciendo una mueca de repugnancia. —Y no, no.

—Sabes que no me refiero a eso. Ustedes son como almas gemelas platónicas.

—Trate de explicarle eso a Scott una vez. Él quería saber si era Pluto o Mickey en esa analogía, y estuve a punto de abandonarlo en ese instante.

—Pero no lo hiciste — Boyd dice, dándole una pequeña sonrisa.

—No — concuerda Stiles — Le dije que él era Pluto.

Boyd se ríe de nuevo, y Stiles lo mira detenidamente. No conoce mucho de Boyd, no realmente. Había tenido algunos tratos con él en la escuela antes de que se convirtiera, pero Boyd nunca dejo que Stiles lo llevara a una conversación. Siempre mantuvo las cosas estrictamente a los negocios.

Lo que sí sabe es que durante las crecientes riñas de su pequeña guerra de manadas, de alguna manera Boyd se las ha ingeniado para mantenerse encima de todos y un poco hacia un lado.

— ¿Por qué estás haciendo esto? — Stiles pregunta quedamente.

—Es mi Alfa —Boyd dice de manera suave.

—Lo dejaste antes — le recuerda.

Boyd se pone rígido, pero su expresión no cambia — Y aprendo de mis errores.

—Sabes que no está bien mantenerme aquí. Jackson y Erica probablemente encuentren todo esto hilarante, pero tú quieres ser un buen hombre. Lo dijiste.

—Sí. Pienso que es estúpido. Se lo dije a Derek.

— ¿Y qué dijo? — pregunta Stiles.

—Me dijo que lo iba a hacer de todas maneras, y tenía razón. Sabes que no te vamos a hacer daño, Stiles. Si Derek hubiera estado aquí cuando estabas teniendo tu pequeño ataque de pánico probablemente se apresuraría para sacarte de aquí y llevarte a tu casa.

—Tengo que tener otro cuando regrese entonces — Stiles dice, aunque no cree que realmente funcione — ¿Por cierto, dónde está?

—Patrullando afuera.

— ¿Jackson y Érica? — pregunta casualmente. 

—Derek los envió a algún lado — Boyd dice, y mira a Stiles lo que significa que sabe lo que está haciendo.

—Así que, estamos solos — Stiles dice, riendo.

—Si no te conociera mejor, pensaría que te me estas proponiendo — el moreno dice con sequedad — De hecho, es probablemente porque te conozco que pensé eso.

Stiles rueda los ojos — Sabes lo que quiero — dice — Vamos. Ayúdame a escapar de aquí. Solo dame las llaves. Nadie tiene que saberlo.

—No— Boyd dice, su voz controlada, pero hay una rotundidad en ella que hace que la sonrisa de Stiles se vaya. No hay negociaciones con Boyd, ya lo había intentado antes.

—Sí, claro — Stiles dice — Pensé…

 —Si pensara que resolvería algo, te dejaría ir, sin importar lo que Derek diga — Boyd interrumpe — Pero si corres, él solo te perseguirá. Va a tener que darse cuenta que te tiene que dejar ir. Solo… dile que no gentilmente* ¿okay?

—Decirle que no gentilmente — repite Stiles — ¡He sido secuestrado! Soy la victima aquí. ¿Qué tiene que ver eso en este contexto?

Boyd solo sacude la cabeza mientras se para — Si aún no lo has entendido no puedo ayudarte. Dime si necesitas algo más.

Boyd ya ha salido de la habitación y Stiles lo escucha poner el seguro.

— Todos ustedes están locos — Stiles susurra, antes de tomar un sorbo de la botella de agua, y sabe que Boyd puede oírlo.

Estúpidos hombres lobo. Le arrebatan la satisfacción de gritar, oirían susurros igual de bien.

 


 

Stiles está dormido en el suelo cuando escucha un portazo. Se sacude para despertarse, maldiciéndose a sí mismo por haber bajado la guardia. Sabe por experiencias anteriores que esto es el comienzo de la abstinencia de Adderall. Técnicamente si solo estuviera tomando las pastillas como se las prescribieron no debería haber ningún síntomas aparte del regreso de su TDAH, pero Stiles es conocido por tomar dos, o tres, veces la dosis recomendada cuando necesita un poco más de concentración.

Y había tomado tal vez más de lo que debería los últimos días mientras estaba investigando al Bunyip. Y ahora esta

— ¿Qué mierda les paso?

Stiles abre la boca para responder antes de darse cuenta de que la puerta de su habitación está cerrada. La voz está viajando, muy claramente, a través de la ventilación aun lado de la puerta.

Stiles cierra la boca y recarga su cabeza contra las rejillas.

—McCall es estúpidamente fuerte —Érica dice, sonando ofendida.

—Les dije que debían ser vistos — Derek gruñe, y wow, suena enfadado. Stiles sonríe, porque Derek enfadado siempre lo hace feliz. — ¿Qué es lo que sabe McCall? ¿Sabe que tenemos a Stiles?

—Bueno, si no lo sabía, ahora lo hace — Jackson dice secamente — No estaba muy feliz de encontrarnos a Érica y a mí en la habitación de Stiles.

Stiles entorna los ojos, mordiéndose el labio para evitar murmurar sobre lobos amargados estúpidos y entrometidos.

— ¿Los siguieron? — demanda Derek.

—McCall y Lahey comparten dos velocidades entre ellos, yo tengo un Porsche — Jackson dice —No pensé que eso estuviera en dudad.

—Debieron de haber encontrado el Jeep de Stiles donde lo dejo en la preserva — Derek dice de modo tirante. — McCall puede ser ingenioso cuando se concentra en ello. No lo subestimes.

—Oh, vamos — Érica dice — Todos sabemos que es un inútil sin Stiles. Puede que Isaac pueda descubrir todo esto, pero probablemente está feliz de tener a Scott solo para él.

—No es inútil sin Stiles — Derek dice, y Stiles frunce el ceño hacia la ventilación, porque de hecho Scott lo es, muchas gracias. Ellos siempre han trabajado mejor juntos. — Es peligroso sin Stiles. Hace cosas como tratos con los Argent cuando Stiles no está ahí de decirle lo contrario y esa es la última cosa que necesitamos.

— ¿Entonces por qué estamos haciendo esto? — pregunta Jackson.

—Bueno, no se suponía que se enterara hasta que terminara — Derek grita — No se supone que les vieran. Podría haber pasado días sin que supiera donde esta Stiles.

—Aw — Érica habla lentamente, siguiendo con una risita — Y no querías que lo hiciera. Stiles no es un cachorro, lo sabes. No puedes quedártelo.

Stiles escucha a Derek darles un aterrador gruñido, y después pasos, así que rápidamente se levanta y se tira de nuevo a la cama. No se molesta en mirar cuando Derek entra.

— ¿Qué estás haciendo? —Derek pregunta tranquilamente.

—Contando las baldosas del techo — Stiles dice— Hay ciento ochenta y tres, si tenías curiosidad.

—El techo es de madera — Derek le dice, su voz con un poco de preocupación.

—No me quites esto — Stiles dobla los brazos apoyándose en sus codos — Necesito algo para ocupar mi mente.

—Esto puede ayudar — Derek dice, y después le lanza algo.

Aterriza en su pecho con un sonido sordo, y Stiles mira para abajo. Estalla en una amplia sonrisa cuando reconoce su Nintendo DS — Oh, gracias a Dios — dice, besando el objeto dramáticamente antes de aplastarlo contra su pecho.

Derek da una sonrisa leve. — Pensé que querías eso — dice, antes de lanzarle algo más — Y tu medicina.

—Okay, esto casi compensa el hecho de que hurgaste en mis cosas cuando te dije que no lo hicieras — Stiles dice.

—Solo pensé que los necesitarías — Derek dijo, titubeando — Tienes razón. No pensé todo esto, y lo siento. No estoy haciendo esto para castigarte.

—Cierto — dice Stiles, poniendo las píldoras a un lado — estás haciendo esto para castigar a Scott. Lo entiendo.

—No, no lo entiendes — Derek dice en frustración.

—Okay, tienes razón, no lo entiendo — Stiles dice, sentándose y mirando a Derek — ¿Entonces porque no me lo explicas?

Derek desvía la mirada — ¿Necesitas algo? — pregunta quedamente.

— ¿En serio? — Reclama Stiles —Solo vas a…

—No hay nada de qué hablar — Derek dice bruscamente — Solo serán un par de días.

—Dices “solo” como si no fuera nada de tiempo — dice Stiles — Pero podría estar atrapado aquí tres días. Eso es setenta y dos horas de mi vida que nunca voy a recuperar. Eso es cuatro mil, trecientos veinte minutos, y es… bueno, no sé exactamente cuantos segundos sería, porque probablemente necesitaría una calculadora para eso. ¡Pero es mucho!

—Doscientos cincuenta y nueve mil doscientos — Derek dice, y después da la vuelta sobre sus talones y camina hacia la puerta. — Estaré aquí si me necesitas.  

Stiles abre la boca en incredulidad por un momento en incredulidad antes de encontrar su voz de nuevo — Preferiría volver a contar baldosas imaginarias del techo.  

Stiles fulmina con la mirada a la puerta por un momento antes de agarrar la botella de medicina, porque si va a salir de aquí, será mejor si se puede enfocar en una sola cosa por más de tres minutos.

 Vacía unas cuantas píldoras en la palma de su mano y se queda quieto. Se ríe con incredulidad y muerde su labio antes de que lo escuchen, o descubran lo que han hecho.

 Porque Stiles a repuestos algunos de sus viejos botes de medicina, y estas capsulas no son las que están llenas con Adderall.

 Son las que están llenas con ceniza de serbal.

Notes:

Harlequin: es en realidad una editorial conocida por sus novelas románticas, he leído algunas y sí, todo es dulce y tierno, con finales felices y parejas predestinadas.

En una parte Boyd le dice a Stiles "dile que no gentilmente" en ingles es "turning him down" y se puede leer de dos maneras: rechazar a alguien o decepcionar a alguien. Boyd obviamente lo ve de la primera manera, pero Stiles es un obtuso de primera (nadie puede culparlo) y piensa que se refiere a lo segundo. En español esas cosas no se confunden fácilmente, así que lo hice ver de la siguiente forma, cuando Boyd le dice que le diga que no (a salir con él, obvio) Stiles lo malentiende y piensa que le estaba hablando de convencer a Scott de ser parte de la manada, o el ser parte de la manada para que Scott lo siga.

Ahora, creo que otra parte en donde se puede confundir es en donde Jackson habla de Scott e Isaac compartiendo dos velocidades, no se mucho del tema porque habla de carros, pero me estoy refiriendo a que Scott e Isaac tienen la velocidad de un carro de dos velocidades, una mucho menor a la de un Porsche.

Chapter 5: Capítulo 5

Summary:

*Scrimmege: Es la línea de ataque en el fútbol americano, pero los británicos (raros como son) también utilizan la palabras para decir "juegos de practrica"
bounders: sin verguenzas.

Notes:

(See the end of the chapter for notes.)

Chapter Text

Stiles no confía en sí mismo para hacer un movimiento aun. Su mente es hiperactiva y lenta a ratos, y sabe que solo va a tener una oportunidad para irse. Barreras de ceniza de serval son construidas por confianza, traídas a la vida por un torrente de pensamiento coherente, y no está completamente seguro de que pueda lograrlo en este momento.

Aún no sabe exactamente cómo funciona. A Deaton le gusta hablar bonito, con términos floridos que no significan absolutamente nada, como chispa, fe, milagros. Básicamente, no es de mucha ayuda, y Stiles aún no ha podido encontrar ningún libro sobre ello. Las únicas referencias que ha sido capaz de encontrar en Internet se refieren a Rowan como un elemento protector contra seres malignos, y Stiles ha escrito todo eso bajo el título inútil porque también puede detener a Scott, y él está muy lejos de ser malévolo.

Así que no está muy seguro de cuan fácil se pueden derribar, una vez hechos, o si la distancia puede ser un factor. Si se aleja unas cuantas millas de distancia tal vez se derrumben, y estarán pisándole los talones en seguida.

Sabe que necesita ser inteligente si quiere que funcione. Ha acusado a Derek de no planear con antelación unas miles de veces desde que llego, y él no planea cometer los mismos errores. Va a esperar a que la oportunidad se presente por sí sola, y va a estar listo cuando ocurra.

Lo primero que hace es encerrarse en el pequeño baño de la habitación, y vaciar las píldoras en la alfombra de baño. Las abre una a una para vaciar la ceniza de serbal en la botella. Sus manos tiemblan un poco y tiene que parar por un minuto para no esparcir todo en el piso, toma unas cuantas respiraciones para calmarse y volver a empezar.

No es mucho, porque Scott solo le dio lo que quedo después de su movimiento en contra de Gerard Argent. Pero si Stiles hace esto bien, debería ser capaz de extender el círculo tanto como lo necesite.

Acaba de abrir la última capsula y está literalmente barriendo la evidencia bajo la alfombra cuando oye la puerta empezar a sacudirse.

— ¿Qué estás haciendo ahí adentro? — la voz de Érica demanda, y la escucha golpear su mano contra la puerta.

Vuelve a ponerle la tapa al frasco y lo mira cuidadosamente. Ya no puede ver el contorno de las capsulas a través de él, pero tampoco puede distinguir la ceniza de serval. Aun así no será capaz de dejarlo a plena vista.

—Stiles — Érica ronronea a través de la puerta, y sabe que ella puede entrar fácilmente. Podría probablemente romper la manija de la puerta sin ningún problema, así que no tiene mucho tiempo.

—Solo un segundo —grita, y guarda la botella en el bolsillo de sus pantalones. Se inclina hacia delante y abre la puerta — ¿Qué?

Érica se escabulle hacia dentro, una mano en el marco de la puerta mientras lo mira con una sonrisa de satisfacción — ¿Qué estás haciendo, Bambi? — pregunta.

Stiles cruza los brazos sobre su pecho — ¿Cómo es que baje de Batman a Bambi?

Érica se ríe alegremente, y un poco intensamente — Eres demasiado adorable, enserio — dice, antes de envolver una mano en su Hanley y arrástralo a fuera del baño —Derek me puso de niñera.

— ¿Qué? — Stiles reclama. Se suelta del agarre para caminar de vuelta a la cama — ¿Dónde está Derek, o Boyd, o incluso Jackson?

—Stiles, me hieres — Érica hace pucheros de forma dramática y coloca una mano en su pecho — pensé que éramos amigos.

La peor parte es, casi lo fueron. En algún momento entre Érica golpeándole la capaza con su propio radiador y él sosteniéndola cuando Derek le rompió un brazo, habían alcanzado una especie de tregua. Entonces pasó lo del sótano, y los Alfas, y de repente volvían a estar en lados opuestos.

—Los amigos no dejan que los amigos sean secuestrados — Stiles le dice, y la sonrisa de Érica se endurece pero no se va.

— ¿Por qué estabas ahí adentro de todos modos? — Érica pregunta con perspicacia, su voz se apaga un poco cuando ve el contorno del frasco de pastillas a través del bolsillo de sus pantalones. Stiles piensa por un minuto que ella sabe de alguna manera, pero su expresión de suaviza — Oh, cierto…bueno, mira, como sea.  Al menos tienes tu medicina ahora.

— ¿Qué? — pregunta Stiles, haciendo una mueca cuando su voz chirrea.

—La medicina — repite Érica con sequedad — Son las correctas ¿no? Derek debería de haber pensado en conseguirlas en seguida. Pero él no sabe cómo es, ser humano. He sido una mujer loba menos de un año y a veces lo olvido.

—Sí — Stiles dice rápidamente. — Era exactamente lo que necesitaba.

No es exactamente una mentira, así que su corazón no lo delata.

—Genial — dice Érica, y después envía su cabello hacia atrás como si se estuviera arrepintiendo de mostrar preocupación. — Odiaría tener lidiar contigo cuando no estas medicado.

A veces Érica le recuerda a Lydia, la manera en la que trata de usar máscaras, pero Lydia tiene una vida de practica y un control perfecto. Érica está tratando de dominar el arte de ser Lydia pero no tiene nada que la sostenga, y es muy fácil ver a través de las grietas.

Y Stiles sabe dónde poner presión para romper la máscara. Ni si quera le importa que su mano está temblando.

— ¿Qué hay de ti? — Se aleja de ella, empujando la botella lo más que puede al fondo del bolsillo — ¿Te estas sintiendo bien?

—Estoy bien — dice con cautela.

— ¿En serio? — pregunta Stiles, mirándola a la cara — Porque sé que Scott puede golpear bastante fuerte. Es decir, lo he visto derrotarlos muchas veces. Ambos sabemos que no son rivales para él, incluso si tienes a Jackson como apoyo.

—No te preocupes, nos cuidamos solos — Érica se ríe, pero puede ver que es forzado. — Te trajimos tus cosas ¿no? Y no es como que Scott nos estaba preparado para nosotros. Estoy segura de que estaba revisando tu colección de video juegos cuando lo encontramos.

—Scott y yo tenemos los mismos juegos — Stiles dice con soltura — Exactamente los mismos juegos para poder jugar contra nosotros en línea. Así que estaba probablemente buscando pistas.

—Tanta fe — Érica dice — ¿Qué te hace pensar que puedes contar con él?

—Porque, a diferencia de otras personas, él no es del tipo que corre el momento en que las cosas se ponen feas

Sabe que ha ideo demasiado lejos el segundo en que la sonrisa de Érica se vuelve cruel. Se ve como los primeros días después de que fue convertida, todo su enojo y poder embotellados casi explotando, como un barril de pólvora.

Nunca han hablado de lo que les había pasado. Nunca hablaron de la electricidad que había fluido de manera constante a través de ella y Boyd o la forma en la que había sido golpeado. La forma en que lo habían subido a un coche y arrojado a la calle en frente de la casa de Scott, o que ella y Boyd habían sido liberados solo para correr de nuevo.

Ignorar las cosas siempre parece una gran idea en teoría, pero en realidad nunca mejora nada. Solo hace que la memoria permanezca en tu mente el tiempo que tú la dejes.

—Érica — Stiles empieza a decir, no sabe si quiere disculparse, o solo tratar de que se vaya. Érica no le da tiempo para decidir. Se acerca y lo empuja a la cama, una mano apretujada en su camisa, las afiladas uñas casi rompiendo a través de su piel.

— ¿No piensas que Scott se preocupa por ti, o si? — pregunta, con esa sonrisita maniaca que es tan suya.  Le recuerda a un personaje de caricatura, Betty Boop, con garras — Claro, estabas bien cuando eras el único amigo que podía tener, pero él es uno de los nuestros ahora. Es popular, tú sigues siendo aquel triste, desesperado friki que siempre has sido.

—Pensé que ya habías pasado de la fase de perra psicópata — Stiles dice, y odia cuando su voz tiembla, porque sabe que Érica no lo dejara pasar. Puede sentir su corazón latiendo fuertemente, y se empuja más arriba de la cama. Érica gatea detrás de él hasta que prácticamente está sentada en su regazo.

— ¿Derek está haciendo esto para enseñarle una lección, cierto? — Pregunta — Pero ¿Y si no es la que tú piensas? ¿Qué pasa si lo que en realidad le quiere mostrar es lo fácil es todo sin ti?

Su respiración se corta otra vez y de repente Érica está tirando de él, curvando la cabeza hasta que está lo suficientemente cerca para susurrar en su oído — ¿Qué es lo que vas a hacer, cuando él no venga por ti?

Stiles pone una mano entre ellos, sus dedos curvándose alrededor del bote de medicina — Aléjate de mí — advierte, y su voz es tranquila pero esta vez se mantiene constante.

— ¿Es eso lo que quieres? — Érica dice de forma seductiva — Porque apuesto si preguntaras dulcemente, te dejaríamos entrar.

Está a un momento de abrir la botella cuando Érica es arrastrada lejos de él. Pasa demasiado rápido que de primero le cuesta entenderlo, un segundo Érica esta tan cerca que puede sentir su aliento, y al siguiente está chocando contra la pared opuesta.

Y luego está Derek, salido de la nada, de pie delante de ellos.

—Fuera— Derek ruge, con su voz alfa, la que envió a Isaac recién convertido de lobo a adolecente aterrorizado en diez segundos. No es menos afectivo en Érica, quien se encoge y deja salir un sonido sospechosamente parecido a un sollozo antes de levantarse y salir huyendo de la habitación.

Stiles no tiene ni un segundo para estar aliviado cuando de repente Derek está enfrente de él, poniéndolo sobre sus pies, mirándolo como si fuera su culpa.

—Estabas asustado de ella — dice Derek.

—No, no lo estaba — Stiles protesta de forma inmediata — Ni de cerca. Y wow, ¿en serio? Vaya manera de culpar a la víctima. Prácticamente soy mutilado por tu loba y no obtengo ni siquiera un “Hey, ¿estás bien? Ni si quiera un…

—No me mientas. Estabas asustado de ella.

—Ya, tú dices eso, pero polígrafos tienen 4% de margen de error — Stiles dice, tratando de alejarse de Derek — Y estoy seguro de que eso también ocurre con los hombres lobo.

— ¿Por qué estarías asustado de ella? — pregunta Derek, empujando a Stiles contra la paren antes de que pudiera alejarse —Ni siquiera estas asustado de mí.

—Sí, bueno, normalmente tu solo amenazas con hacerme daño, no eres muy bueno cumpliéndolo — dice Stiles — Excepto la vez del volante, pero prácticamente te estaba prostituyendo, así que me lo merecía y…

— ¿Qué hizo? — demanda Derek. Con una mano toma la mandíbula de Stiles, sorprendentemente gentil, y lo fuerza a mirarlo a los ojos. Lo suelta en el momento en que le devuelve la mirada — ¿Por qué no me dijiste?

—Pensé que solo estaba haciendo lo que le habías dicho — Stiles se encoje de hombros — Siempre pensé de ti en la suave reencarnación de Eric Voz Zipper de Beach Blanket Bingo, dando órdenes imperiosamente a tu manada de ratas. Creo que Scott es Frankie Avalon y yo soy Annette Funicello, y eso en realidad no merece la pena pensarlo.

Derek se le queda mirando fijamente — ¿Qué?

—Es una película de los 60 — Stiles dice, agitando una mano despectivamente — Es antes de tu tiempo.

—Stiles — dice Derek, con ese tono de frustración que parece guardar solo para él — Se suponía que solo te distraería.

—Bueno, lo hizo espectacularmente — Stiles le dice — Estuve distraído por media hora, inconsciente en un contenedor de basura.  Así que felicitaciones en tu liderazgo. Es una gran pandilla la que tienes. Eres un espectacular ejemplo para el joven Scott.

Los ojos de Derek se tornan rojos por un momento, antes de que parpadee y vuelva su color normal — No pasara de nuevo — dice firmemente.

—No vas a, matarla ¿cierto? — pregunta Stiles vacilante.

Derek rueda los ojos —No, Stiles, no voy a matarla. ¿Qué está mal contigo?

— ¡No lo sé! — Dice Stiles defensivamente — Es solo que ese parece ser tu plan por defecto. ¿Es un problema? ¡Vamos a matarlo! No es que este diciendo que no sea efectivo. Estaba totalmente a bordo de matar a Jackson. Mejor plan del mundo. Pero todavía me agrada Érica, a pesar de que me odia ahora.

—Ella no te odia — Derek dice lentamente — Solo te quiere en nuestra manada.

—Claro — responde de forma incrédula — Tiene una divertida forma de mostrarlo.

—Hablare con ella — Derek dice, dando unos pasos atrás, viéndose extrañamente incómodo. Mira hacia sus pies. — ¿Tienes hambre? Hare que Érica traiga lo que tú quieras.

—Porque eso mejorara todo

Derek solo lo mira, poco impresionada — ¿Hay algo que lo haga? — pregunta, aunque es obvio que es retorico, y no es como si este abriéndose a sugerencias.

Pero Stiles nunca ha conocido una pregunta retórica a la cual no tiene respuesta.

— ¡Sí! Hay algo que puedes hacer. Puedes dejarme ir. Porque esto es suficiente, okay, esto ha ido lo suficientemente lejos.

—Hay un buen lugar de hamburguesas a una milla por la carretera—Derek dice. Porque, contrariamente, Derek nunca a tenido problemas pretendiendo que todo lo que Stiles dice es retorico. — Creo que tienen papas rizadas.

—No tengo hambre— Stiles dice, en su mayoría es cierto. Porque en realidad se está muriendo de hambre, es solo que la idea de comida en este momento es horripilante.

— ¿Estas enfermo? — pregunta, frunciendo ligeramente el ceño mientras se acerca de nuevo.

— ¡Hey, hey! ¡Espacio personal! — Stiles se queja, esquivando al entrometido lobo — no estoy enfermo. Es solo que no quiero nada de ti ¿okay? Así que, por que porque no vas a tener unos, totalmente sin sentido, sricammages con tus bounders como siempre lo haces — Stiles frunce el ceño cuando revisa su extraña elección de palabras — Y no, no sé porque sueno como un profesor británico de repente. Solo vete ya.

—Necesitas comer algo — Derek dice, incluso podría haber parecido preocupado, excepto que el hombre lobo lo mira todo el tiempo como si de alguna manera lo hubiera insultado personalmente. Lo cual está bien, Stiles lo ha hecho.

—Oh mi Dios — Stiles grita — No quiero tus estúpidas papas rizadas ¿okay? Y para mi decir eso es como sacrilegio, pero es la verdad. ¡Así que déjame en paz!

—Bien— Derek gruñe, mientras camina hacia la puerta — Puedes morir de hambre, entonces. Como si me importara — Derek cierra con un portazo detrás de él, sin mirar para atrás ni una vez. Stiles deja escapar un sonido de frustración cuando escucha la cerradura hacer click.

— ¡Espero que sepas que te escuchas como se estuvieras recitando las linead de la Bella y la Bestia! — Stiles le grita. Cierra los ojos por un momento y después golpea la puerta cerrada con el puño. Se da la vuelta y recarga la espalda en ella, deslizándose hacia abajo hasta quedar sentado en el suelo.

Está cansado y tan harto de todo esto. Puede sentir su corazón latir rápidamente y trabaja para calmar su respiración, no queriendo alertar a Derek y arriesgas a enfrentarse a él de nuevo.

No puede lidiar con el estúpido Derek Hale ahora mismo. Ni si quera está seguro si tiene importancia si Scott aun lo está buscando. Tal vez está acosando a Allison por Internet, dejando pequeños mensajes patéticos en su teléfono. Y está bien. A Stiles no le importa.

Quiere que lo dejen solo, y en un momento de locura considera desperdiciar su oportunidad. Frota su pulgar contra la botella de medicina y se imagina así mismo en una barricada ahí mismo donde ninguno de ellos lo puedan alcanzar. Podría quedarse aquí hasta todo terminara, y no tendría que lidiar con nada de esto otra vez.

Podría hacer eso también. Podría olvidarse de todo. Serio fácil de hacer, pero su padre lo crio mejor que eso, Y los Stilinski no renuncian. Así que saca la botella de medicina de su bolsillo. No se rendirá, porque no importa cuánto lo quiera, está cansado de estar en la banca.

Va a salir de aquí.  

Notes:

*Scrimmege: Es la línea de ataque en el fútbol americano, pero los británicos (raros como son) también utilizan la palabras para decir "juegos de practrica"
bounders: sin verguenzas.

Chapter 6: Capiítulo 6

Notes:

(See the end of the chapter for notes.)

Chapter Text

El plan de Stiles comienza el minuto en el que escucha a Derek y Érica gritarse el uno al otro a través de la ventilación. Divide al enemigo, es totalmente un movimiento clásico, y Stiles lo ha logrado sin si quiera pensarlo.

—Apenas y lo toque — insiste Érica — No pensé que causaría tanto daño.

—Es humano — grita Derek — Si lo golpeas y lo dejas, no se mejora. Lo podrías haber matado.

—No lo hice…no lo haría, lo juro, yo solo — Érica lloriquea.

—Boyd, solo sácala de aquí — gruñe Derek — Ahora.

Stiles no tiene super oído, pero incluso él es capaz de seguir las pistas auditivas para entender lo que pasa después. Escucha los pasos frenéticos de Boyd acompañando a Érica hacia la puerta y el rugido del motor llevándolos hacia la carretera.

—Vigílalo — Derek dice, su voz cargada con furia, posiblemente a Jackson. Y después de un momento, oye la puerta cerrándose con fuerza de nuevo.

Stiles sonríe y se pone de pie, porque ahí estaba la oportunidad.

Se siente energizado ahora que tiene un plan en la mente, y sin ningún cuidado vacía la mitad de la ceniza de serbal en la palma de su mano, antes de poner el resto en la botella y devolverla a su bolsillo.

Sin embargo sabe que no debe ser demasiado confiado. Puede que Jackson sea el más fácil de manipular, pero Jackson también es el que menos se preocuparía por él como para abrir la puerta y comprobar que este bien. Stiles duda que Jackson fuera a verlo incluso si empezaba a gritar y golpear la puerta.

Jackson solo hace las cosas por Jackson, así que la clave es tomar ventaja de sus poderes de hombre lobo para volverlo completamente loco.

Empieza cantando 100 Bottles of Beer on the Wall, pero cambia sin problemas a The Song that Never Ends cuando alcanzo ochenta botellas de cerveza. La cuarta vez que está cantando el coro comienza a gritar lo suficientemente fuerte que está un poco sorprendido cuando el espejo no se rompe.

 

Solo pasan siete minutos para que Jackson abra la puerta de manera brusca y lo fulmine con la mirada.

 

—Te matare, Stilinski — gruñe.

 

—Oh, hey, Jackson — Stiles dice de forma amigable —No sabía que estabas aquí. ¿Quieres unirte? ¡Podríamos tener un sing-a-long!

 

—No — dice Jackson firmemente — Y si no te callas voy a cerrarte la boca con cinta adhesiva*

 

—Wow, lindo uso de verbos.

 

— ¿Qué?

 

—Ya sabes, usando cinta adhesiva como verbo…como sea, eso no importa —dice Stiles — Probablemente ni si quiera lo hiciste a propósito.

 

— ¿Piensas que soy un idiota, no es así? — Jackson pregunta, entrando a la habitación.

 

Stiles de hecho, no lo hace, pero eso quería implicar. Había una razón por la cual Lydia se había hecho pasar por estúpida durante años, Jackson tenía un inexplicable complejo de inferioridad.

 

Stiles da un paso hacia atrás, permitiendo que su pulso se eleve para que Jackson piense que está asustado de él. La ansiedad no es fingida, porque todo depende de que acorrale a Jackson en el lugar preciso. Tiene que asegurarse de que él y la puerta estén a un lado de la barrera que va a crear, y Jackson bien contenido en el otro.

 

—No dije eso — Stiles dice.

 

—Puede que no saque un 110% como tú o Lydia, pero consigo 100 también —Jackson habla con enojo — No soy estúpido.

 

— ¿Se supone que eso me impresione? —Pegunta Stiles —Que seas lo suficientemente inteligente no te da tantos puntos como pareces pensar — retrocede hasta que choca contra la pared, y observa a Jackson acercarse — Eso solo significa que eres un estúpido por elección y no solo una víctima de nuestro siempre en declive, sistema educacional, lo que te hace más que un estúpido.

 

—Ni si quiera puedes insultarme como una persona normal ¿o sí? Dios, eres tan raro — Jackson dice, pero ahora parece casi entretenido, y eso no es lo que quiere Stiles. Él se cruza de brazos, y no se acerca más de la forma en la que Stiles lo necesita — ¿Por qué no te callas, antes de que en realidad vaya por la cinta adhesiva?

 

—Siempre recurres a la violencia. Quiero decir, está bien ser un bravucón ahora, eres el rey de la colina, pero esta clase de cosas nunca pasan de la secundaría* — Stiles le dice, su voz tomando una falsa dulzura que aprendió de Lydia, así que era seguro de que molestaría más a Jackson — ¿Qué hay de la universidad? ¿De verdad vas a seguir con esto? Siempre podrías unirte a una fraternidad supongo. Entonces vas a estar bien por otros cuatro años.

 

—Ves, justo ahí, Stilinski —Jackson gruñe — Aun estas tratando de ponerme en un estándar normal. Soy un hombre lobo, nunca voy a ser el chulo del pasado sobre el que puedes reinar en nuestra décima reunión de exalumnos. Siempre voy a ser así. Siempre.

 

—No estoy discutiéndolo — dice Stiles — Solo pienso que es triste como probablemente es cierto.

 

Jackson estrecho los ojos — No sabes nada de mí.

 

— ¿Es en serio? — Stiles se ríe — ¿Vas a actuar como si no te conociera? Jackson, hemos estado en las mismas escuelas desde el jardín de infancia. Me has estado molestando siempre. Así que si, a lo mejor tienes secretos ocultos, tal vez solo eres un pobre niño rico y debería tenerte lastima. Pero nunca dije que era una buena persona, y no quiero perder mi tiempo en alguien como tú.

 

— ¿Entonces porque ayudaste a que me salvaran? — pregunta Jackson.

 

La pregunta detiene por un segundo a Stiles, porque por un momento parece sincera.

 

—Por Scott, y por Lydia — dice Stiles.

 

—No te creo. Me hubieras salvado de todos modos. Te habrías quejado todo el tiempo, pero igual lo harías.

 

—Tú no lo hubieras hecho por mí. — Stiles le dice, porque al menos eso lo sabe con certeza.

 

—Probablemente no lo habría hecho — concuerda Jackson — Pero tal vez he cambiado. Y tal vez no eres tan inútil como siempre pensé, pero aun estarías mejor con nosotros. Serías más fuerte como parte de nuestra manada.

 

Stiles lo mira por un momento, tratando de ponerse en el lugar de Jackson. Lo que odia más a cerca de Jackson es que no son tan diferentes como a él le gustaría pensar, ambos aman a las personas que aman, y a joder con todo el mundo.

 

Trata de pensar que beneficio puede sacar Jackson de él uniéndose a la manada, no le cuesta mucho llegar a la única cosa que tienen en común, su amor por Lydia. El amor que Stiles le tiene a Lydia ha cambiado, transformado en algo casi mutuo, una especie de amistad que está seguro no arriesgaría por esperanza de algo más.

 

—Piensas que si me uno, Lydia me seguirá — Stiles concluye. Ella ha estado tratando duro de no involucrarse, pero se ha estado inclinando hacia la manada de Stiles, debido a él y a Allison. Stiles sabe que a menos que Jackson este en grave peligro, era más probable que ella lo ayudara a él que ha Jackson. Porque Jackson esta con Peter, aunque sea solo de forma tangente, y Lydia no ayudara a Peter si lo puede evitar.

 

Si Stiles y Jackson estuvieran del mismo lado, ella probablemente los seguiría. No era un mal plan.

 

—Por alguna razón ella se ha encariñado contigo — Jackson dice mordazmente.

 

—Lo está — concuerda Stiles — Nos juntamos todos los viernes para ver capítulos repetidos de Gossip Girl y hablar de chicos.

 

—Honestamente no puedo decir si eso es sarcasmo o no

 

—Es mitad y mitad — dice Stiles — Apuesto a que no estaría tan feliz si supiera que ayudaste a que me secuestraran.

 

—Ella no lo sabrá — Jackson gruñe, acercándose.

 

—Claro — Stiles dice, arrastrando la palabra. Solo necesita que Jackson se acerque unos cuantos metros — ¿Por qué nunca van a encontrar mi cuerpo? Porque esa es la única que cosa que me detendrá de decirle. Le prometí que sería honesto con ella, y me gusta cumplir mis promesas.

 

—Si piensas que obtendrás a Lydia delatándome…

 

—Si piensas que simplemente con decirle la verdad tendría una oportunidad de conseguir eso — Stiles dice — entonces eres tú el que tiene problemas.

 

—Lydia y yo estamos bien — Jackson dice con rabia.

 

— ¡Oh, vamos! Ambos sabemos que eso no es cierto. A ella no le agrada que estés en esta manada. No le agrada que estés cerca de Peter. Ella no quiere tener nada que ver en todo esto, y tú estás atascado porque no es un club del cual puedes salir, y estarías aún más jodido de lo que ya estas si te convirtieras en omega.

 

—Ella entiende porque elegí estar en esta manada.

 

— ¿Lo hace? — pregunta Stiles — ¿Y ella entiende porque pediste por esto en primer lugar? ¿Y la abandonaste el momento en que lo obtuviste? Tuviste el momento hermoso del amor lo vence todo, y recibí el mensaje, sé que nunca tuve una oportunidad. Así que no tienes que preocuparte por mí, pero si piensas después de que te curaste todo se arregló, entonces en serio eres estúpido.

 

Jackson no ha notado que lo está guiando, pero ya se ha movido hasta la mitad de la habitación. Stiles está contra la pared al lado del baño, y Jackson está parado enfrente de él, junto enfrente de la puerta. Stiles tiene corazón, después de todo, y no está seguro cuanto tiempo estará atrapado Jackson. Lo último que puede hacer es estar seguro de que tiene todas las comodidades.

 

El temperamento de Jackson por fin gana y camina hacia Stiles. No llega tan lejos, porque Stiles deja que la ceniza de serbal se deslice por sus dedos hasta el piso. Cierra los ojos fuertemente y desea que la barrera forme una línea curvada, un semi arco alrededor de Jackson.

 

Stiles abre los ojos justo en el momento para ver como Jackson es lanzado hacia atrás contra la puerta por la fuerza de la barrera que se estaba formando.

 

—Qué mierda — Jackson lo mira con incredulidad por un momento antes de que note la ceniza de serbal encerrándolo.

 

Jackson se pone de pie e instantáneamente golpea la barrera, pero se mantiene sólida. Stiles ríe mientras Jackson se recarga contra la pared invisible.

 

—Sabes que, Jackson, si eso de la fraternidad no funciona, podrías tener un futuro de mimo.

 

Jackson gruñe — Déjame salir, en este momento, Stilinski. 

 

—No — dice Stiles de manera simple — Así no es como va a ser esto.

 

Stiles empuja la pared, dando vueltas alrededor de la barrera, siendo cuidadoso de quedarse afuera de ella. —Ya no estas a cargo — dice — Es hora de mi lista de demandas.

 

—Has perdido la cabeza — Jackson dice — Derek te asesinara.

 

Stiles es lo suficientemente listo como para preocuparse por lo que Derek le puede hacer, pero aún tiene la mitad de se ceniza de serbal y no está preocupado de algún daño físico. Las amenazas de Derek ya no significan mucho. De hecho, encuentra el “Te arrancare la garganta, con mis dientes” adorable estos días.

 

Sin embargo no fue tan divertido el acto arrogante de hombre de las cavernas que resulto con él arrojado en la cajuela. Va a atrapar a Derek en un círculo de ceniza de serbal si es necesario.

 

— ¿Vamos a ser rápidos entonces, huh? — Stiles dice — Primero, voy a necesitar las llaves de tu Porsche.

 

Jackson lo mira detenidamente por un momento, antes de romper a reír. — Sí, seguro — dice — ¿Por qué no vienes para acá y las agarras?

 

—Porque prefiero que me las lances

 

— ¿Y por qué haría eso? — Jackson pregunta.

 

—Bueno, si no lo haces — Stiles dice, sonriendo abiertamente — Voy a poner en práctica el curso de diez minutos que me dio Lyda de cómo hacer puentes en tu coche de cincuenta mil dólares.

 

Jackson se puso un poco pálido. — No estás hablando en serio.

 

—Estoy hablando absolutamente en serio. Pienso que podría hacerlo. Es decir, sería divertido internarlo. Lo más probable es que cause mucho daño, por supuesto, aun si lo consiga o no, y ¿no habías dicho que tu padre te iba a hacer pagar por cualquiera futura reparación después del “incidente del Troll”? Tuviste que decirle que habías golpeado un poste de teléfono si mi memoria no me falla, y tu padre no estaba muy feliz.

 

Jackson lo fulmina con la mirada, viéndose como si quisiera ponerle las manos en cima. Stiles no esta tan delirante como para creer que podría ser así de valiente si la barrera de ceniza de serbal no estuviera entre ellos, pero lo está, y va a tomar toda la ventaja que pueda.

 

—Estas bien en una cosa, puede que Derek vuelva pronto, así que preferiría tener las llaves — dice casualmente — Oh, y tus zapatos.

 

—Tienes que estar bromeando — Jackson dice con incredulidad.

 

—Si estuviera bromeado, los sabrías, porque sería gracioso como el infierno — Stiles dice — Sé que esto es una ocasión extraña, pero este soy yo siendo mortalmente serio. Así que si quieres ver a tu precioso carro de nuevo vas a hacer lo que yo diga.

 

Jackson solo le mira furioso, así que Stiles le da un incentivo más — De otra manera — dice, arrastrando las palabras de forma dramática ؙ— va a encontrar un inoportuno final al borde de un barranco, a lo Un Experto en Diversiones.

 

—No lo harías — dice Jackson.

 

—He tenido unos días muy malos, y has hecho mi vida un infierno durante años. No creo que quieras probarme en esto. 

 

Jackson le arroja la billetera y celular, con más fuerza de la necesaria, así que Stiles se apresura en coger el teléfono y se asegura de que no se haya roto. Después Jackson procede a quitarse los zapados de forma enojada y se los lanza. Stiles tiene un recuerdo breve pero horrible a los años en los que jugaban al dodgball*, pero se las arregla para que los zapatos no golpeen ningún órgano vital.

 

—Vas a pagar por esto, Stiles, espero que lo sepas — Jackson dice.

 

—En caso de que lo hayas olvidado, me secuestraste — dice Stiles — Cuando yo lo hice, pusiste una orden de restricción en mi contra. Y ambos sabemos que mis intenciones eran mucho más honorables que las tuyas, así que deberías estar agradecido que esto es lo único que te voy a hacer. Te estas liberando con facilidad.

 

Stiles trata con fuerza de ponerse los zapatos de Jackson, pero se siente como una de las hermanastras malvadas de la Cenicienta tratando de forzar a la zapatilla de cristal. Simplemente no entra. — Oh por Dios — se queja — ¿Por qué tienes que tener unos pies diminutos de bailarina?

 

— ¡Hey! — Jackson protesta.

 

Stiles se rinde y se pone de pie guardándose la billetera de Jackson en el bolsillo trasero. — Bueno, diría que ha sido divertido, excepto que eres tu — Stiles dice — Tu manada debería de ser capaz de pasarte comida a través de la barrera, así que no morirás de hambre, aparte, ¡tienes el baño justo ahí! Todo lo que puedes necesitar. Disfruta el resto de tu vida aquí.

 

—Stiles, espera, en serio, piensa bien esto — Jackson dice, y se escucha como si realmente estuviera asustado — ¿Vas a tratar de manejar mi Porsche sin zapatos? La última vez muy a penas y pudiste manejarlo, realmente vas a lanzarlo por un barranco…y vas a estar en él cuando caiga.

 

—Si no te conociera mejor, diría que estas preocupado.

 

—Lo estoy —Jackson gruñe — Porque Derek y Lydia me matarían si dejo que algo te pase. Mira, solo déjame salir. Y te llevare yo mismo a casa.

 

—Sí, seguro. ¿Qué tan crédulo crees que soy? —Stiles bufa —La única ventaja que tengo sobre ti es la ceniza de serbal. Estás loco si crees que te dejare salir. Toma su Nintendo DS de la cama, porque no va a dejar a ningún hombre atrás. — Y no voy a dejarte distraerme hasta que Derek llegue, tampoco, pero buen intento.

 

— ¡Stiles! — Jackson le llama, pero Stiles no mira vuelve a mirar hacia atrás. Camina directo a la puerta principal y empuja hacia afuera sorprendido de que este tan claro. Mira el teléfono de Jackson, y dice que son solo las cuatro de la tarde. Obviamente perdió todo el sentido del tiempo, porque pensó que al menos serían las ocho o las nueve.

El Sol lo toma desprevenido y tiene que recargarse contra la puerta por u momento, cerrando sus ojos fuertemente aunque no ayuda mucho. La luz quema de forma directa sus parpados. Todo lo está haciendo sentir mareado después de estar encerrado en la casa por tanto tiempo, pero no tiene el tiempo para ajustarse. Sale del porche y camina hacia el carro.

 

Escucha el aullido de Jackson en el momento en que se sienta en el lugar del piloto. — Mierda, mierda — Stiles murmulla, sus manos tiemblan mientras pone la llave en el switch de encendido.

 

No importa cuán lejos Derek se ha ido, no hay manera de que no haya escuchado eso, y Stiles sabe lo rápido que es. Enciende el coche y piza el acelerador, casi deteniéndolo mientras cambia direccionales y se dirige a la carretera.  

Escucha el aullido de respuesta de Derek detrás de él, lo suficientemente fuerte como para resonar en sus huesos, pero sigue avanzando.

 

Stiles alcanza en GPS y lo activa en el momento en que está a salvo en la carretera, y una alegre voz lo saluda. —Por favor, introduzca su destino.

 

—Beacon Hills — Stiles dice.

 

—Beacon Hills, Californa. Setenta y cinco punto ocho millas de la ubicación actual —Reporta la computadora — Esta hiendo en la dirección equivocada. De vuelta en el semáforo próximo.

 

Stiles ve el pequeño y abandonado camino a su derecha y sigue avanzando. De ninguna manera se va a detener ahí, parece el camino que tomarían en Rest Stop. Sus manos están temblando levemente en el volante y toma una respiración profunda, tratando de controlarse. Este carro gira con el más ligero toque. Es muy lejado a su Jeep, que normalmente requiere que gire el volante casi por completo solo para dar una vuelta de cuarenta y cinco grados.

 

—Recalculando. Esta hiendo en la dirección equivocada. — anuncia la computadora. — gire a la derecha.

 

—Sí, sí, no ahora — Stiles se enoja, viendo en el espejo retrovisor, esperando ver a Derek corriendo detrás de él.

 

—Recalcu…

 

Stiles golpea la consola, apagando el GPS. Porque de ninguna manera se va a devolver. Estos caminos secundarios son estrechos, y no piensa que tenga suficiente espacio entre él y Derek como para regresarse sin ser atrapado. Tiene que haber una plaza comercial en algún lado, con una entrada a la autopista. Solo tiene que seguir adelante.

 

Stiles deja que el reconfortante zumbido del motor lo calme, y empieza a ver el atractivo de este tipo de carros. Nunca elegiría algo tan llamativo por encima de su Jeep, porque su lealtad no se puede comprar, pero no significa que no puede disfrutar mientras dura.

 

Desafortunadamente, no dura mucho. A penas había recuperado la calma cuando un rebaño de ciervos sale corriendo fura de la línea de los arboles directo a él. Stiles sacude el volante, y es como si fuera una ficha en el hockey aéreo, deslizándose sin ningún problema por el asfalto y directo al borde del camino, levantando suciedad y barro durante unos metros antes de que el coche se detenga de forma brusca.

 

Stiles golpea el volante a pesar del cinturón de seguridad, que trata valientemente de detenerlo. Agarra el cinturón mientras se sienta de nuevo, jadeando porque el golpe le saco el aire. Sabe que va a tener un moretón cruzándole el pecho causado por el cinturón, y cuando se mira en el espejo puede ver que el lado derecho de su frente ya está cambiando de color, esparciéndose casi hasta su ojo.

 

—Peor huida del mundo— Murmulla. Mira hacia atrás ansiosamente antes de intentar encender el coche pero solo ronronea durante un segundo y después vuelve a morir. No piensa que está demasiado dañado, pero probablemente va a necesitar que lo remolquen. O, ya sabes, un hombre lobo para arrastrarlo de vuelta a la carretera.

 

Ninguna de las dos opciones le funciona en este momento, así que desabrocha el cinturón de seguridad y se tambalea fuera del carro. Echa un vistazo al camino y observa un pequeño restaurante no muy lejos, con gran letrero de neón apagado a elevándose veinte pies en el aire proclamándolo como Mike´s Place.

 

Stiles gira hacia atrás mientras otro aullido se hace eco entre los árboles, y se da cuenta de que es lo que envió a los ciervos corriendo hacia la carretera. Sintieron un nuevo predador en los bosques, y tuvieron el sentido común de correr. Stiles decide seguir su ejemplo. Traga con fuerza y mira hacia el restaurante. No esta tan lejos como para no llegar a pie incluso cuando no tiene zapatos, es solo cuestión de si puede o no llegar ahí antes de que Derek lo encuentre.

 

Decide caminar en el asfalto en vez de la tierra, que podría estar escondiendo un número de cosas horriblemente antihigiénicas, como vidrio roto o jeringas usadas, pero incluso andando por la carretera casi lisa llega cojeando al restaurante. Es seguro que tiene llagas en los pies, lo que lo lleva a tararear Another Day In Paradise.

 

Entonces tiene que hacer una nota mental para parar de compararse a sí mismo con mujeres ficticias, especialmente personajes transitorios de poca suerte delas canciones de Phil Collins y princesas de Disney.

 

Se para delante del restaurante y mira el cartel de “No Camiseta, No Zapatos, No Servicio”, el anuncio hace que se detenga tres minutos enteros pensando antes de tirar los pantalones demasiado largos de Derek hacia abajo sobre sus calcetines negros, decidiendo que no se notan mucho. Entra y se desliza en el primer reservado que ve, dobla sus brazos y los pone sobre la mesa dejando caer la cabeza sobre ellos con un gemido.

 

 Quiere dormir durante cinco años, pero solamente obtiene sesenta segundos antes de que un toque vacilante en el hombro lo haga que se sacuda y se siente. Parpadea por un momento hasta que la mujer a su lado se deja de ver borrosa, y ahora puede leer el alegre gafete “¡Hola, mi nombre es Marge!” Sujetado en su delantal

 

— ¿Estas en algún problema, cariño? — Marge pregunta suavemente, lo que le recuerda a Stiles que está en un lugar público, y que debería estar haciendo un esfuerzo de parecer una persona normal.

 

—No — Stiles dice, y se ríe torpemente. Pone sus manos debajo del mesón para que ella no note que están temblando. — Estoy bien. En serio. Totalmente bien.

 

— ¿Vienes solo? — pregunta, mirando a las ventanas, obviamente haciendo una rápida evaluación de los coches estacionados. Stiles sabe cómo funcionan las pequeñas ciudades habiendo crecido en una, pero esto es un lugar turístico. Duda que vaya a reconocer cada uno de los carros. — ¿Sin padres?

 

—Nop, solo yo — Stiles dice, aclarándose la garganta porque wow, sonaba como si tuviera trece — Estoy en viaje, viendo universidades. Acabo de graduarme, ya sabes.

 

—Ok — dice, mirándolo de forma escéptica, así que Stiles está bastante seguro de que aún no puede mentir de forma convincente a la gente ordinaria — ¿Qué vas a ordenar, entonces?

 

—Solo una coca-cola — Le dice.

 

—En camino, cariño — Dice, aun mirándolo sospechosamente.

 

Stiles la sigue con la mirada mientras camina hacia la cocina, porque ella está activando todos sus sentidos de buen samaritano. Normalmente no sería un problema, porque generalmente le agradan los buenos samaritanos, pero tiene dieciséis años, no tiene zapatos y con moretones, y ella tiene ese aire maternal, como si quisiera arroparlo y mejorar todo.

 

Tiene que irse de aquí antes de que atraiga más atención, y preferiblemente antes de que Derek lo encuentre. Sospecha que el restaurante es uno de esos famosos por sus “muy buenas” papas rizadas, así que no iba a ser imposible de encontrar.

 

Saca el celular de Jackson, dudando por un momento antes de marcar un número que se sabe de corazón y que casi nunca se atreve a llamar. Siente la intensa mirada de la camarera mientras espera que conteste, y deja escapar un suspiro de alivio cuando por fin contesta.

 

—Hey, soy Stiles. Estoy atascado en Arnold, en un restaurante llamado Mike´s Place — dice, tragando saliva a duras penas — ¿Puedes venir a recogerme?

Notes:

Oh por Dios, que este capitulo me costo!!! demasiados términos técnicos acerca de automoviles que no sabia como traducir, sobre todo porque en diferentes partes del mundo se dice de otro modo, así que...ah, como sea, si tienen dudas solo dejen un comentario y yo con gusto les explicare. Por supuesto eso también incluye algún error que se me haya pasado al editar el cap.

*En la parte de la cinta adhesiva en ingles dice: "I´m going to duct tape your mouth shut" y no hay una forma de traducir eso en español.
*El dodgeball, es un juego en el que un equipo lanza pelotas al equipo contrario buscando golpear con ella a los otros alumnos.

Chapter 7: Capítulo 7

Notes:

Hola chicos!!! Estoy muy avergonzada por este hiatus, y les seré sincera todo era por procrastinar. Así que necesito que alguien sea mi beta, no solo por cualquier error de ortografía o cosas relacionadas con la literatura, es más por la necesidad que alguien me presione al punto de que me acose cada minuto con mensajes jajajaja. Si alguien esta interesad@ podría dejarme un mensaje en este capitulo con su correo electrónico, twitter o cualquier otra aplicación con la que nos podamos comunicar. Su recompensa será saber sobre cualquier actualización mucho antes de que se publique (obvio), además de futuros fic que ya tengo avanzados lol (no se preocupen la todo son Sterek)

(See the end of the chapter for more notes.)

Chapter Text

Scott aquí, puedes uh, dejar un…oh hey, Allison, ¡espera!

 

Stiles gira los ojos al mientras el melodramático correo de voz de Scott sigue sonando, terminando con el crujido de ropas moviéndose porque Scott persigue a Allison y se olvida de que está grabando. Scott no ha sido capaz de encontrar una forma de arreglar el mensaje, Stiles ha estado evitando arreglarlo por él solamente porque lo encuentra divertido.

 

Por supuesto, es menos divertido en este momento de lo que lo fue hace tres semanas.

 

Stiles deja caer el celular de Jackson en la mesa sin molestarse en dejar un mensaje, y se dice a si mismo de que está bien. Ya se las ingenió para conseguir un aventón a casa, así que no necesita a Scott. Sin mencionar que se las arregló para escapar por su cuenta de la sombría cabina de Derek, y eso es aún mejor. Tal vez la manada Derek aprenda a no meterse con él debido a Stiles, en vez de preocuparse de lo que Scott pueda o no hacer.

 

Va a tener que comenzar a cargar ceniza de serbal con él. Los hombres lobo no parecen darse cuenta de que esta ahí hasta que es demasiado tarde, y mientras que Stiles ha querido creer que no es necesario pelear contra ellos, obviamente ese ya no es el caso. Sabe que está en desventaja, así que necesita toda la ayuda que pueda.

 

Escucha el sonido de la campana cuando la puerta se abre, y todos los cabellos en la parte de atrás de su cuello se le erizan. Gira lentamente para mirar detrás de él y Derek viene caminando como si acabara de salir de un comercial de Calvin Klein, con lentes de sol tipo aviador de color marrón oscuro que no esconden muy bien la chispa roja cuando sus ojos se encuentran.

 

Stiles suspira y se encoge de hombros, devolviendo su atención a la envoltura de su popote. Derek se desliza en la cabina frente a él, y cruza las manos encima de la mesa. Stiles puede decir por la falsa y amplia sonrisa, que en realidad es más como si le enseñara los colmillos, que no está contento.

 

—Jaque mate — Stiles dice en saludo, levantando la coca-cola hacia él.

 

Derek levanta una ceja. — ¿Cómo lo sabes? — pregunta, apoyándose en la mesa. — ¿Crees que alguien podría detenerme si te sacara de aquí?

 

—Creo que podría detenerte — Stiles dice, y le da un gran sorbo al refresco — Si haces tan solo un movimiento para tocarme, te atrapare en esta cabina indefinidamente con lo que me queda de ceniza de serbal.

Derek lo fulmina con la mirada, pero se relaja en el asiento. — ¿Dónde demonios has conseguido la ceniza de serbal?

 

—Me lo trajiste — Stiles dice — Estaba en el frasco de medicina.

 

—Estaba…— la expresión de Derek se vuelve rígida — Si eso estaba en el frasco, ¿Entonces, cuándo fue la última vez que tomaste Adderall?

 

Stiles se encoge de hombros, —No importa — dice — Es un poco tarde para que te estés preocupando ¿no crees?

 

—He estado preocupado desde que lo mencionaste — Derek sisea, apoyándose más en la mesa, solo un poco más cerca de lo que Stiles está cómodo. Si Derek lo agarra no está seguro de que pueda usar la ceniza de serbal para separarlos. — Es por eso que mande a Érica y Jackson a tu casa para conseguirlo. No sabía que tenías señuelos escondidos, pero supongo que debí sospecharlo.

 

—Sí, de hecho, debiste hacerlo — concuerda Stiles — Te dije que no era buena idea meterse con mis cosas. Nunca sabes lo que puedes encontrar.

 

—Hablando de cosas que encontré — Derek dice secamente — Encontré el Porsche de Jackson parado a un lado del camino. No sabes nada de eso, ¿cierto?

 

—Tiene suerte de no lo lanzara por un acantilado — Stiles le dice.

 

—Tienes suerte de que no te fueras por un acantilado. No deberías de haber estado conduciendo. — Derek dice, y aunque su voz se mantiene estable Stiles alcanza a ver el destello rojo en ellos.

 

—Sí, bueno, no debiste de meterme en tu maletero — Stiles dice.

 

La mandíbula de Derek se aprieta, Stiles lo mira con aprensión, pensando que es extraño que Derek nunca se mueva. Siempre se queda tan quieto, hasta que el momento en el que tiene algo que hacer, y entonces se mueve más rápido de lo que él puede seguir.

 

—Vas a dejar salir a Jackson — Derek dice, después de un momento. No se disculpa por lo de la cajuela, Stiles sabe que no debería haber esperado una.

 

— ¿Oh, estas pidiendo favores ahora?— pregunta.

 

— ¿Parecía que estaba preguntando? — Derek gruñe, pero retrocede cuando la camarera se acerca, dándole a Stiles otra Coca-Cola, aunque la suya aún está más que medio llena.

 

Ella mira a Derek con recelo y luego se acerca a Stiles — Cariño, ¿este hombre te está molestando? — pregunta, con voz baja como para que Derek no escuche. A juzgar por la sonrisita arrogante, Derek esa escuchando. Por supuesto.

 

—Sí — Stiles dice, solo para ver lo ojos de Derek ensancharse — Pero es familia, así que supongo que tengo que soportarlo.

 

La camarera todavía parece cautelosa, pero se ríe — Muy bien entonces — dice — Hazme saber si necesitas otra cosa.

 

— ¿Familia?  — Derek dice secamente.

 

—Eres mi primo, ¿recuerdas, Miguel? — Stiles pregunta — ¿O prefieres que le pase una nota en mi servilleta que diga “He sido secuestrado, por favor envía ayuda”? Porque podría hacerlo. Me han dicho que tengo don para el dramatismo.

 

—No te preocupes Puede que la ayuda ya esté en camino. — Derek dice, y deja su teléfono en la mesa antes de deslizarlo hacia Stiles — tu padre ha llamado como diez veces en la última hora. Los mensajes varían entre “Hey, chico, solo para comprobar que estas bien” a “Si descubro si no te has quedado con Scott estas castigado de por vida”

 

—Genial. Gracias por esto — Stiles dice, agarrando el teléfono de Derek con frustración para llamar al número de su padre. El teléfono suena pero nadie contesta, y Stiles se traga el pánico de una forma tan dramática que Derek se tensa. Puede que Scott no conteste su teléfono un ochenta y nueve por ciento de las veces, pero su padre siempre lo hace.

 

Le devuelve el celular a Derek después de darse ánimos mentalmente para convencerse a sí mismo de que su padre no está en algún tipo de problema. No tiene nada de qué preocuparse, porque su padre está bien. La razón más probable por la cual él no contestaría es si había dejado la conferencia temprano para volver a casa.

 

—Bueno, para que “castigado de por vida” es la ganadora. — Stiles dice — Lo que es bastante irónico, porque nunca me ha castigado por ninguna de las otras cosas locas que he hecho que han sido realmente mi culpa.

 

—Entonces tal vez esto es exactamente lo que necesitas — Derek dice — Vámonos.

 

—No va a ningún lugar contigo — dice Stiles — Pensé que estaba claro con la amenaza de “te encerrare aquí indefinidamente”. Pensé que era bastante badass de mi parte, pero puedo intentarlo de nuevo, por si no lo entendiste.

 

—Jackson aún está atrapado — Derek dice, y Stiles puede notar que está luchando por mantener su voz calmada — Y necesito llevarte a casa antes de que tu padre de la alerta ámbar.

 

—De hecho estaba deseando usar esta oportunidad para probar un experimento. — Stiles dice — Tengo curiosidad si seguirá atrapado aunque regrese a Beacon Hills. Quiero decir, ¿es algo de proximidad? ¿O, es como un interruptor? ¿Una vez que esta encendido, se queda así hasta que alguien lo apague? Quisiera saberlo.

 

—Sus padres van a notar que no está — Derek dice de forma apresurada — y si tu estas desaparecido también, probablemente van a llegar a la conclusión equivocada, considerando lo que paso la última vez.

 

—Sí, pero la última vez Jackson era un lagarto controlado mentalmente por la noche, y un estúpido co-capitán de Lacrosse por el día — Stiles dice — Esta vez es tu pequeño soldado, y no lo vas a dejar decir nada en contra de mí, porque yo podría decir cosas peores de ti.

 

—Bien— Derek dice firmemente — déjalo ahí. Derribare la pared para sacar a Jackson, lo que sea. Pero voy a llevarte a casa. Vámonos.

 

—Creo que ser un Alfa se te ha subido a la cabeza — Stiles dice — es como si pensaras que solo por decir las cosas como si fueran ordenes todo el mundo va a hacer lo que tú quieras. Pero no soy tu beta, Derek. Puedes decirme que hacer tan a menudo como quieras, no va a cambar nada.

 

—No te voy a dejar manejar así — Derek gruñe, alargando la mano y atrapando la muñeca de Stiles. Lo hace tan rápido que Stiles no tiene tiempo de montar la barrera.

 

—Suéltame — dice, y su voz es extrañamente calmada.

 

—Te dejare ir cuando empieces a ser razonable — Derek dice.

 

— ¿Yo? ¿Ser razonable? — Stiles pregunta, soltando una carcajada. La cabeza de la camarera se giró hacia ellos, viéndose preocupada otra vez, así que Stiles se muerde el labio para calmarse. — Claro. ¿Así que ahora debo de confiar en ti?

 

—Lo que sea que pienses de mi — Derek dice — Sabes que no te haría daño.

 

— ¿Realmente piensas que nunca me has hecho daño? — pregunta Stiles, y ahora él se inclina sobre la mesa, forzando a Derek a encontrarse con sus ojos. Derek suelta su muñeca como si lo hubiera quemado — Entiendo que sientas una responsabilidad, o algo así, pero no necesito que me lleves a casa. El plan B ya está en camino. Puedes inter con la conciencia limpia, porque no necesito tu ayuda.

 

Stiles saca las llaves de Jackson de su bolsillo trasero y se las lanza a Derek, quien las coge fácilmente en el aire — Listo — dice — No más paseos en el Porsche de Jackson, ¿Eso te hace feliz? ¿Te puedes irte ya?

 

— ¿Estás seguro de que eso es lo que quieres que haga? Porque la camarera está llamando a la policía — Derek dice, viéndose más tranquilo, como si pensara que ha ganado — Ella piensa que eres más joven de lo que en realidad eres y que soy una especie de depredador.

 

— ¿En serio? — Stiles pregunta sarcásticamente — ¿Y a que otras horrendas conclusiones ha llegado? ¿Piensa que me han secuestrado, tal vez?

 

—Stiles, realmente no... — Derek comienza.

 

— ¿No qué? — Stiles lo interrumpe con frialdad.

 

—Sabes que te iba a dejar ir — Derek dice — Esto solo era un ejercicio, una pequeña misión de entrenamiento.

 

—Eso habría requerido mi consentimiento — Stiles dice, dejando unos cuantos billetes en la mesa antes de levantarse casualmente y salir de la cabina. Le dejo a la mesera una propina de cuarenta dólares, porque es el dinero de Jackson y ella se lo merece más.   Ella se voltea a mirarlo, parece que quiere detenerlo así que se apresura a salir.

 

Derek lo sigue.

 

— ¿Hasta dónde crees que vas a llegar? — Derek demanda — La policía va a llegar pronto, ¿Qué les vas a decir cuando lleguen? No tienes ninguna identificación, ni si quiera tienes zapatos, ¿Cómo vas a explicar…

 

—Tal vez diga que fui secuestrado por Derek Hale — Stiles dice, mientras se abre camino por la calle hacia donde está el Porsche de Jackson. Se detiene una vez que están fuera del estacionamiento y se da la vuelta — Sabes que estoy jodido si no lo hago, si sigo mintiendo por ti. ¿Lo entiendes, cierto? Mi papá ya sospecha que algo pasa; ya debe estar de camino a casa. Si tengo suerte, le ganare en llegar, pero sé que no debo contar en mi suerte. Así que muchas gracias, Derek. Soy el daño colateral de sus pequeñas guerras una vez más.

 

Derek se detiene a unos pocos metros de él, viéndose incomodo, y enojado por estar incomodo — Nunca te dije que mintieras por mí.

 

—Por supuesto que lo hiciste — Stiles se ríe — ¡Me has estado pidiendo que mienta por ti desde que nos conocimos! Y lo entiendo, lo hago, sé que no tenemos otra opción. Pero no debería de ser así de difícil, y no estoy seguro de que pueda seguir haciéndolo.

 

—Entonces para — Derek dice — Podemos decirle a tu padre si eso es lo que quieres. Puedes decirle que te secuestre, decirle lo que soy. Siempre ha sido tu elección.

 

—Te encantaría eso, ¿verdad? — dice Stiles, dando un paso firme hacia el hombre lobo — Porque no sabes qué hacer si no tienes algo con lo cual pelear. Pero no voy a meter a mi padre en todo esto, solo para que te puedas entretener.

 

—Stiles — Derek gruñe — No me refería a eso. ¿Qué quieres de mí? Primero este molesto porque piensas que quiero que mientas, después te enojas porque te digo que digas la verdad.

 

Derek da un paso hacia él y Stiles tuerce la tapa de la botella abriéndola y derramando su contenido en el suelo, la ceniza se reacomodo alrededor de él, justo en el momento en el que la mano de Derek pudo haberlo sujetado. Derek se hace para atrás sorprendido, y el corazón de Stiles se acelera mientras lucha para mantener la barrera.

 

—Detente — Stiles dice.

 

—Como si tuviera otra opción — murmura Derek.

 

—No es muy divertido, ¿cierto? — pregunta Stiles, tropezando hacia atrás. Llevándose la ceniza con él. Es como si fuera su propio escudo de fuerza. Como salido de Star Trek. Pero no es la misma sensación que con Jackson, no siente confianza, ni más seguro.

 

Se da la vuelta y comienza a caminar, manteniéndose al borde de los árboles y vigilando la carretera por si viene un auto. Deben de estar en el borde exterior de Arnold porque está casi desierto, ni si quiera pude ver turistas que hayan venido a visitar el parque o la ciudad. Pero esta justo al aire libre, si Derek no estaba mintiendo y la mesera realmente llamo a la policía, van a tener muchos problemas que no necesitan.

 

Escucha a Derek caminando detrás de él, haciendo sonidos extraños y bajos que casi se convierten en gruñidos cada vez que topa con la barrera.

 

—Va a ser suficientemente malo si la policía me atrapa, deberías irte de aquí — die Stiles, cuando el atrofiado sentido común de Derek no aparece para hacerlo correr.

 

—Debemos salir de aquí — Derek concuerda — Creo que puedo hacer que el Porsche funcione, solo deja que…

 

—No — Stiles dice.

 

—Tus pies están sangrando, Stiles — Derek gruñe, como si la debilidad de Stiles le ofende directamente — Detén esto. Esto no es lo que quería.

 

— ¿Entonces qué era? — Stiles grita, dándose la vuelta en frustración. — ¿Cuál es el punto de todo esto? Porque tenías razón, ¿okay? Scott no va a venir por mí, al igual que no vino cuando estaba recibiendo una paliza por el abuelo de Allison, al igual que no vino cuando le llame desde la piscina…

 

—Yo no… — Derek empieza, y es extraño, verlo sin palabras. Casi nunca habla, pero cuando lo hace es conciso y deliberado.

 

—Tu… realmente no tienes ni idea de lo que estás haciendo, ¿verdad? — Stiles pregunta, y no sabe por qué, pero eso lo enoja más. Tal vez es porque, lo que sea que Derek está haciendo, lo está intentando, y Stiles no quiere sentir simpatía por él ahora mismo. — ¿Y tú le quieres enseñar a Scott como ser un buen líder? Le da un nuevo significado a aquellos que no pueden hacer, enseñan.

 

—Stiles…

 

— ¿Saber por qué Gerard me secuestro? Era un mensaje, eso es todo. No se preocupaba por mí. Solo le importaba lo que le haría a Scott. — Stiles dice. — Así que, todo fue más agradable y al menos nadie me golpeo, pero el concepto es el mismo.

 

—No te atrevas a comprarme con él— le gruñe Derek.

 

— ¡Entonces madura! — Stiles grita — Si tienes un problema con Scott, ¡ve con Scott! Porque estoy empezando a lamentar conocerlos a ustedes dos.

 

—Esto nunca ha sido sobre Scott — Derek grita de vuelta — ¡Esto es sobre ti!

 

Stiles se congela como si lo hubieran golpeado. — ¿Qué? — susurra.

 

—Casi haces que te maten — Derek gruñe — y no es la primera vez.

 

—Entonces, ¿esto era para darme a una lección? — Stiles pregunta de forma incrédula — ¿Qué? ¿Qué si hago algo estúpido me vas a encerrar como Rapunzel en una mansión aislada de la sociedad?

 

—Sí…no…eso no es…— Derek tartamudea de la frustración — Elegiste a Scott. Lo entiendo, y está bien. Pero si vas a estar en su manada, entonces Scott necesita asegurarse de que tiene tu espada. Y no lo está haciendo, Stiles. Sabes que no.

 

—No es…no es como que escogí a Scott — Stiles dice — Nunca hubo una elección. Es solo, solo termine con él por default. Así ha sido siempre.

 

—No tiene que ser siempre así, — Derek dice, acercándose. Stiles casi puede sentir como la barrera de cenizas de cerval haciendo ondas cada vez que Derek

Presiona contra ella, pero lo empuja hacia atrás como paso con Jackson.

 

Stiles traga con fuerza y retrocede, preguntándose si él está haciendo esto, si esta dejando que Derek le haga esto, dejándolo entrar en su mente. Intenta que la línea se mantenga firme pero Derek lo está mirando de una manera como nunca nadie lo ha hecho, como si importara, como si fuera Allison para alguien.

 

Stiles puede sentir el momento en el que su mente cede ante la resistencia de Derek, la barrera que construyo es empujada hacia él como ondas para que Derek pueda entrar. Los labios de Derek capturas los suyos, con una amabilidad que el hombre lobo nunca había tenido con él, yo todo se siente como si estuviera pasando en cámara lenta—si se hubiera imaginado como sería besar a Derek, no habría sido algo como esto. Las manos de Derek se cierran sobre su cintura para acercarlo más a él, desestabilizándolo hasta que tiene que poner sus manos en la camisa de Derek para poderse mantener de pie.

 

Gime cuando Derek se aleja, halando ligeramente su labio inferior con los dientes, y Stiles no sabe lo que debería de hacer. No sabe si debería besarlo de vuelta, o empujándolo, o correr lo más rápido que pueda.

 

Bueno, eso no es cierto. Sabe que debería correr, pero, él nunca corre cuando debería.

 

— ¿Qué demonios fue eso? — jadea, la mayoría de su peso aun apoyado en Derek. La manera en la que lo está sosteniendo, no le deja otra manera más que aferrarse a él.

 

No obtiene una respuesta, pero de repente hay una masa peluda y borrosa en una chaqueta azul chocando contra el costado de Derek. Stiles tabalea hacia el árbol mientras Derek y Scott dan volteretas uno sobre el otro hacía los árboles, Derek transformándose a medio camino para que cuando termine sometiendo a Scott este completamente transformado.

 

— ¡Paren! — Stiles grita, impulsándose contra el árbol para tratar y meterse entre ellos.

 

Scott no escucha. Gruñe y de alguna manera quita a Derek de encima. En otro momento, Stiles estaría impresionado. Ahora solo está entrando en pánico, busca por los restos de la ceniza de serbal para poder separarlos, pero los dejo desvanecerse con el viento con el beso de Derek. No puede encontrar ningún rastro ahora.

 

Se resbala y cae sobre una mano caminando por el irregular terreno, antes de levantarse y arrojarse delante de Derek justo antes de que Scott pueda golpearlo de nuevo. — ¡Scott, para! — grita.

Scott se detiene, pero no se transforma de vuelta. Sus ojos ámbar lo miran como lo hacían las primeras veces que Scott se trasformaba, furiosos y salvajes, de un abrasador oro brillante. — ¿Por qué lo defiendes? — Scott reclama enojado — Encontré a Jackson donde lo dejaste. Me lo dijo lo que te hicieron.  

 

—Solo estaban jugando con nosotros, estoy bien — Stiles dice, no quitándose de en medio de ellos —déjalo ir, ok?

 

— ¿Dejarlo ir? — Pregunta Scott de forma incrédula — No, Stiles. Esto ha durado bastante, y Derek ha ido demasiado lejos esta vez. No puede tomarte como si nada. 

 

—No puede — concuerda Stiles — y no lo volverá a hacer. ¿Lo harás, Derek? — Derek gruñe detrás de él, obviamente no habiéndose molestado en cambiar el tampoco. Stiles lo voltea a verlo. — Así que, ahí lo tienes. Todo solucionado.

 

— ¿Por qué estas…? — Scott empieza, frunciendo el ceño con una concentración que lo hace cambiar a humano otra vez sin quererlo — He estado enfermo de preocupación, Stiles, y tu estas... ¿Ahora estas saliendo con Derek? ¿Planeaste esto, Stiles?

 

Scott se ve como si eso realmente es una posibilidad, Stiles trata de no tomárselo de forma personal, porque Scott ha visto el beso—y si Stiles no sabe lo que el beso significa entonces mucho menos Scott lo sabe. Trata de entender como esa clase de escena pueda ser malinterpretada.

 

Pero esta hasta el límite del estrés y su mente esta en veinte al mismo tiempo, un momento en un una y al siguiente ya no está ahí, le arden los pies, los huesos le duelen y está demasiado despierto pero más cansado que esa semana en donde trato de averiguar cuanto podría estar sin dormir.

 

Así que Scott acusándolo de conspirar con Derek a sus espaldas es la gota que derrabo el vaso.

 

— ¿Cómo puedes preguntarme eso? — Pregunta — Porque entre los dos, no soy el que es conocido por hacer planes solo. Mientras respondas tu maldito teléfono, yo siempre, siempre te digo todo, y te arrastro conmigo.

 

— ¿Cómo olvidarlo? — Scott pregunta, sus ojos brillando ámbar de nuevo. — si no hubiera sido por ti entonces…

 

Scott deja de hablar antes de que termine la acusación, palideciendo cuando se da cuenta de lo que dijo. Stiles se pregunta su el sonido de su corazón rompiéndose es lo que hace a Scott detenerse, pero ambos saben que no se detuvo a tiempo.

 

—Entonces nada de esto hubiera pasado — Stiles termina quedamente, y las palabras le roban el aliento. Trastabilla al dar un paso hacia atrás mientras trata de respirar, pero el aire sigue saliendo, porque no tiene defensa contra la verdad. De repente se siente enfermo, y tan exhausto que muy puede seguir de pie. Empieza a perder el equilibrio y Derek se estira para alcanzarlo, pero Scott lo detiene, poniéndose entre ellos con un gruñido.

 

Todo este tiempo, Stiles estaba convencido de que conocía su postura. Podía escuchar a Érica decir que Scott estaba mejor sin él y ni si quiera le importó, porque le creía a Boyd. Se supone que tenían que ser inseparables, incluso cuando estaban separados. No existía Scott sin Stiles. No Stiles sin Scott.

 

Salvo que ahora se pregunta si talvez a estado equivocado todo este tiempo. Tal vez la verdadera razón de todo esto es lo poco que encajaba, si eso es lo que Derek se había propuesto a enseñarles, no lo sabía.

 

Escucha el rugido de un carro en la carretera detrás de ellos, y se voltea, preocupado de que pueda ser la policía. En su lugar es un midnight blue BMW Z4, dejando un rastro de caucho quemado cuando se detiene repentinamente justo a lo largo del borde de la carretera.

 

La puerta del copiloto se abre, y ahí esta Lydia Martin, viéndose resplandeciente mientras se inclina a través del interior con una mano en la manija de la puerta y otra en el volante. — Mete tu culo en el coche, Stilinski.

 

—Stiles — Scott dice en confusión, viéndose perplejo y herido, y Stiles tiene que luchar contra su instinto de no responder, no explicar, no ayudar, para no mejorar las cosas. Es lo que siempre ha hecho.

 

Derek no dice nada, solamente se da la vuelta y desaparece en las sombras entre los árboles. Pero de alguna forma eso es peor.

 

—Stiles, — apresura Lydia, su voz cortando sus pensamientos. Se gira para mirarla, y ella arquea una ceja en duda. Stiles camina hacia ella, colapsando en el asiento y cerrando la puerta. No gira para ver a Scott, o tratar de observar el retroceso de Derek. Solo le pone el seguro a la puerta y se inclina hacia atrás.

 

Lydia bufa y encendiendo el coche, sacándolos a la carretera —¿Quieres decirme que demonios está pasando? —pregunta, toda falsa dulzura — Porque vi el Porsche de Jackson abandonado al lado de la carretera. ¿Debería de preocuparme por eso?

 

—Jackson está bien — Stiles dice — Solo que robe su auto y lo deje atrapado en un círculo de cenizas de serbal.

 

—Voy a necesitar más que eso — dice Lydia, su voz tan fría que Stiles lucha por no tener un escalofrió.

—Derek y su manada me secuestraron

 

—¿Te secuestro? — pregunta, y su voz sigue igual de fría, pero esta vez Stiles no piensa que está dirigida a él. — De todo lo estúpido… ¿Cuándo paso esto?

 

—Está bien, estoy bien. Mira, te mostrare como llegar a la cabaña. Dejare salir a Jackson.

 

—Hmm, no — Lydia dice con delicadeza, y sus ojos no se desvían del camino —Déjalo que se ponga nervioso. Eso es lo que se merece por no decirme que iba a secuestrarte. Siempre puedo regresar y dejarlo salir después, si me apetece.

 

—Bueno, ¿Entonces puedes darle esto, si lo haces? — pregunta Stiles, y deja la cartera en la guantera.

 

Lydia le da un vistazo antes de que sus labios curven en una sonrisa. — ¿Cómo lograste para quitársela a Jackson?

 

—Amenace al amor de su vida

 

—¿Me amenazaste?

 

—Su Porsche — Stiles dice, y trata de imprimir el aire chulesco de siempre, pero no cree lograrlo porque Lydia no muerde el anzuelo.

 

—Eso funcionaría — dice, sacudiéndolos cuando toma una curva cerrada yendo alrededor de 50 millas por hora.

 

—Probablemente debí preguntar esto cuando te llamé — Stiles dice, agarrándose fuertemente a la puerta del carro. — Pero, ¿tan siquiera tienes licencia de manejo?

 

—Nope — le responde, sin embargo, va caminado velocidades como una profesional cuando toman otra vuelta cerrada — Pero papi me dio esto por mi cumpleaños numero dieciséis de todos modos, así que pensé que le debería sacar provecho.

 

Stiles ríe, sintiendo todo el estrés dejarlo, sabe que no está libre de peligro aun, pero por primera vez desde que lo metieron en la cajuela siente que puede respirar.

 

—Gracias por venir. No estaba seguro que lo harías. 

 

—Dije “cuando quieras” — Lydia dice secamente — aunque con los problemas que te metes, no estoy segura si quiero hacer esa clase de compromiso.

 

—Lo siento — él dice, y da una risa ahogada. Recarga su cabeza en la ventana y cierra los ojos por un momento, porque además de Derek, Lydia es la última persona que quiere que lo vea llorar. — Es solo que no había nadie más.

 

Lydia le echa un vistazo, antes de regresar la mirada al camino. Presiona con más fuerza en acelerador, y los árboles pasan tan rápido que parecen pintados con acuarelas.

 

—Cuando quieras — ella dice, y suena como una declaración.

Notes:

Espero que les haya gustado y alguien pueda ser mi beta.
OJO: sería de gran ayuda si tienes almenos una noción de Ingles porque suelo quedarme estancada en algunos Slangs propios de estados unidos que no cuentan con una propia interpretación en español.

Chapter 8: Capítulo 8

Notes:

Pero miren quien hizo aparición otra vez!!!! Sho!!! asdasdasdas
Disfrútenlo, pero antes:
Unconditional_S te respondí en los comentarios, pero no se si lo has visto...así que, me encantaría que fueras mi Beta!!! Así que por favor deja tu facebook, o twitter, o...instragram??? donde sea que pueda contactarte para ponernos de acuerdo :)

(See the end of the chapter for more notes.)

Chapter Text

—¿En serio? ¿Eso es todo lo que me vas a decir? — reclama Lydia. — Tenía planes hoy, ¿Sabes? Involucraban nuevos zapatos.

Stiles hace una mueca de dolor por el tono de voz, pero sabía que esto se avecinaba. Lydia le había permitido casi diez minutos de silencio antes de que prácticamente se retorciera con preocupación. La preocupación después se convirtió en molestia, porque no le gustaba estar preocupada. A Stiles no le molesta el enojo, le gusta la forma única que tiene Lydia de hablar corazón-a-corazón, porque no cree ser capaz de soportar amabilidad en este momento.

—¿Imagino que no lo dejaras estar si te digo que lo dejes estar? — pregunta Stiles.

—No, pero tendía que llamar a los Guinness — Lydia dice — porque tu no queriendo hablar tiene que ser algún tipo de record.

—Es solo que no entiendo qué demonios paso — Stiles dice con vehemencia, apartando su ojos del camino para mirar a Lydia. — Cuando Scott y yo lo hicimos había una razón verdadera detrás de ello. Las razones de Derek por otro lado…no tienen sentido.

—¿Y cuáles son esas razones?

Stiles se desploma en el asiento, cerrando los ojos momentáneamente dándole sentido a sus pensamientos. —Dijo que lo estaba haciendo para darle una lección a Scott, después me dijo que era para protegerme, entonces actuó como si esas dos cosas fueran la misma, y después me beso. 

Lydia pisa el freno abruptamente. La fuerza lanza a Stiles hacia delante, pero es detenido por el cinturón, mira por el espejo retrovisor agradecido porque no haya nadie detrás de ellos.

—¡Lydia! — se queja.

—¿Y él qué? — Lydia demanda, y está usando su tono peligroso, el que uso cuando uno de los maestros cuestiona sus ensayos, o Jackson trata de cancelar una cita.

—¿Dijo que trataba de protegerme? — Stiles trata de que Lydia deje el tema.

No lo hace.

—Ese bastardo en serio tuvo el valor…Oh, lo voy a matar — sisea —Todo este tiempo para finalmente actuar como hombre y admitirlo, ¿lo hace después de esto?

—¿Qué? —Stiles pregunta, frunciendo el ceño mientras Lydia vuelve a conducir. Toma la manija de la puerta porque Lydia está dejando su enojo en la carretera — ¿Finalmente admitir qué?

—Admitir que tiene un crush contigo como una niña de catorce años. O, ya sabes, como tú lo hacía conmigo. — Lydia dice, como si esto no fuera una revelación, como si esto fueran viejas noticias.

—¿Qué? — Stiles demanda de nuevo.

—¿Nunca has notado que él te busca? — pregunta Lydia — ¿Más que a Scott? ¿Quién es supuestamente su “hermano” ahora y todo eso? 

—Sí, pero solo porque Scott no le daría ni la hora. Y también porque probablemente le gusta empotrarme contra las cosas, y regañarme, y tratarme como un niño estúpido — dice Stiles — Lo que sea que piensas que sabes, Lydia, estas totalmente equivocada.

—Oh, cariño, no lo estoy. Sus técnicas serían más adecuadas para un hombre de las cavernas, pero él obviamente ha estado colado por ti hace meses. Y no es que no lo apruebe, siempre y cuando olvidemos la situación del secuestro, porque él es hermoso. Pero también se comporta como un acosador y su único familiar vivo es un asesino en serie.

—No creo que sea así, quiero decir, ¿Lo has visto, cierto? Y me conoces. Así que, creo que solo quiere que me huna a su manada.

Lydia frunce los labios. —Tu autoestima necesita trabajo. Esto es parcialmente mi culpa, desde que he pasado los últimos seis años pensando que era un perdedor. 

—Gran charla

—¿Estaba equivocada, okay? — dice Lydia —Y no admito eso muy seguido. O nunca.

Stiles la miro boquiabierto. —¿Qué estás diciendo?

—Cualquiera sería afortunado de tenerte — explica — Excepto yo. Aun no te quiero. Solo para que quede claro.

—Sí, lo sé — Stiles rueda los ojos — No te preocupes, ya te superé.

—Como sea, el punto es, los sentimientos de Derek no están en duda. Los tuyos lo están. ¿Qué es lo que quieres?

Stiles sabe que le debe una verdadera respuesta, que se la debe así mismo—pero no tiene una. Cierra los ojos. —Solo quiero dormir — termina diciendo.

Lydia asiente con la cabeza, dejándolos regresar al no tan incómodo silencio hasta que se detienen en frente de su casa. El corazón de Stiles de detiene cuando ve la patrulla de su padre en la entrada para coches, pero Lydia solo mueve su cabello hacia un lado de forma impaciente, ignorante de su muerte inminente.

Suspira y se fuerza a salir del coche. Camina alrededor del coche y en ese momento Lydia baja la ventana del conductor y lo detiene por la muñeca, acercándolo gentilmente.

—Quiero que me prometas algo — dice, girando sus ojos hacia él como hermosos, mortíferos rayos laser — Solo…aléjate de ellos, de todos ellos, hasta que averigües que es lo que quieres.

—No creo que eso vaya a ser un problema — Stiles dice — Estoy seguro que mi papá me va a poner en arresto domiciliario.

Lydia sonríe — Genial — dice, y acelera en su BMW como si fuera una especie de James Bond.

Stiles suspira y camina hacia la puerta, cojeando ligeramente por las ampollas en sus pies. No llega muy lejos cuando la puerta se abre de golpe y su padre baja corriendo las escaleras de entrada, viéndose más enojado de lo que Stiles lo ha visto en toda su vida.

—Maldita sea, Stiles — dice con la voz ronca, antes de tomar a Stiles en sus brazos. Stiles se deja caer contra él, tomando consuelo en uno de los increíbles abrazos de su padre, anqué el tono de su padre promete que no va ser tan sencillo —Gracias a Dios que estas bien. ¿Tienes alguna idea de lo que preocupado que estaba?

John se separa lo suficiente para ver bien a Stiles, y en vez de tranquilizarse, solo logra preocuparse más. —¿Quién te hizo esto?

—Nadie— Stiles dice rápidamente — Solo tuve un rato de mala suerte. Estoy bien, papá, en serio. ¿Cómo es que llegaste tan rápido?

John medio escucha mientras agarra gentilmente la barbilla de Stiles para mirarle los ojos. Su expresión endureciéndose cada segundo que pasa. — Es solo una hora de vuelo desde Napa — dice entre dientes — Logre abordar un avión después de la segunda llamada que no contestaste.

—Sí, lo siento por eso — Stiles dice — Veras estaba…

—Entremos a la casa — su padre le interrumpe, viéndose a un molesto, Stiles sospecha que es porque su padre sabe que estaba a punto de mentir.

Su padre no espera una respuesta porque lo arrastra hasta la casa y lo sienta en el sofá, antes de sentarse en la orilla de la mesa de café justo delante de él. La expresión de su padre es fija y dura, la clase de expresión que solamente se molesta en usar cuando se trata de sospechosos.

Stiles traga saliva e intenta mantenerle la mirada — Así que… ¿Cómo estuvo el viaje? —pregunta.

—No — su padre dice, y su voz calmada es la que preocupa más a Stiles. — Antes de que te pregunte de nuevo que paso, quiero decirte lo que sé hasta ahorita para evitar confusiones. Empezaremos con la llamada que recibí de uno de mis oficiales. Encontraron tu Jeep abandonado en la Reserva, y lucía como si hubiera estado ahí por un tiempo. Así que intente llamarte al número que me diste para el celular de Scott, pero por alguna razón seguía sonando el buzón de voz de Derek Hale. Después trate con Melissa, e imagina mi sorpresa cuando me dijo que no te ha visto en días.

Stiles extiende las manos sobre sus rodillas y respira entrecortadamente, tratando de temblar lo menos posible mientras su mente piensa una excusa. El Jeep es su orgullo y su padre lo sabe, él nunca lo dejaría ahí para servir de mini-hostal para cualquier criatura salvaje que se lo topara.

No a menos que no tuviera opción.

Las mejores mentiras, Stiles sabe, vienen de la verdad, pero no puede decir que fue secuestrado sin hacer que su padre se convierta en un hombre consumido por la venganza que caza personas imaginándose a sus secuestradores inexistentes. No dejara que su padre sea el que sufra por esto, y no desperdiciara el tiempo del departamento del Sheriff. Pero no puede traicionar los secretos de Derek, incluso ahora.     

—Y ni siquiera pienses en mentirme — John dice, su tono de voz afilado le provoca un gesto de dolor —Porque esta vez te atrape, chico. Estas cubierto de moretones, estas temblando, no traes zapatos, y esa no es tu ropa. Quiero saber qué es lo que está pasando contigo, en este instante. No más mentiras.

No más mentiras, piensa Stiles, y es un pensamiento tan horroroso que repentinamente no puede respirar. La verdad no debería de ser así de aterradora, tiene dieciséis, no debería de cargar con esto solo. No debería de mentir tanto que se ha convertido en su base. Sus mentiras solían ser una broma entre su padre y él, solían reírse de ellas porque Stiles siempre se delataba. Su padre siempre sabía la verdad, sin importar si mentía o no, así que nunca importo realmente.

—No puedo — susurra, porque no le puede decir la verdad, pero sabe que tampoco puede mentir. No hay historias que pueda crear que tenga sentido — No puedo decirte, ¿de acuerdo? Es mejor así, tienes que confiar en mí, porque no sabes…y no me creerías, de todos modos.

Stiles se fuerza a levantarse, agarrando el respaldo del sofá cuando pierde el equilibrio, y empieza a caminar para no mirar a su padre. —Ni si quiera yo me creería. Bueno, ok, probablemente lo haría. Peor no soy un buen ejemplo para este tipo de cosas. Scott ni si quiera me creyó y es él el que…

—¿El que, Stiles? — manos agarrándole los hombros para girarlo, y Stiles tropieza. Ni si quiera escucho a su padre levantarse. La inexpresiva cara de Sheriff se ha ido del rostro de su padre, sus ojos ahora mirándose grandes y preocupados, y de alguna manera esa cara es peor de ver.

Es como si todas sus cuidadosas y planeadas mentiras, y medias verdades e incluso sus ilusiones se están deshaciendo al mismo tiempo. Ha estado tratando tan duro de mantener todo separado, cuidadosamente etiquetado y lidiado con ello según su importancia, pero su padre lo ha averiguado. Es solo cuestión de tiempo, siempre ha sabido eso. Una vez que su padre tiene una pista, no lo deja estar.

—¿Quieres tomar la píldora roja o la azul? —Stiles le pregunta quedamente, y entonces sus piernas le fallas y su padre está gritando su nombre mientras lo sostiene y lo empuja hacia el sofá.

—Stiles, mírame — John dice firmemente. Sostiene el rostro de Stiles y le examina los ojos — ¿Cuándo fue la última vez que tomaste el Adderall?

—No lo sé — Stiles dice, dejando caer la cabeza entre sus piernas al mismo tiempo que respira profundo. —¿Qué día es hoy?

Su padre desparece por un momento y vuelvo como por magia, sosteniendo un vaso de agua y su medicina — Tómalas — dice gentilmente. 

Stiles obedientemente toma las pastillas, tomándolas con casi todo el vaso de agua antes de que sea valiente para mirar a su padre a los ojos — Papá —empieza a decir.

—Esta bien —John dice —Bueno, no está bien, pero te voy a dar tiempo, al menos por ahora. Tu salud es más importante. Vamos, levántate. Te voy a llevar al hospital.

—Pero estoy bien — Stiles protesta.

—Apenas y te puedes mantener de pie. El daño que puedo ver es malo, pero no estoy seguro de que pueda confiar en ti para decirme si algo está peor.

—Es solo el Adderall, ya sabes, he olvidado tomarla antes —Stiles dice — Solo quiero dormir, no me hagas ir por favor.

John lo observa durante un momento, y entonces sacude la cabeza. —Voy a llamar a Melissa entonces —dice —te revisara, y si ella dice que necesitas ir al hospital, iras, sin peros. ¿Entiendes?

Stiles no quiere ver a Melissa por diversas razones, pero asiente con la cabeza, porque sabe que su padre llego a su límite. Su papá siempre ha sido un hombre de acción, cuando algo va mal quiere arreglarlo. No entiende el sutil arte de dejar que los problemas se resuelvan por si solos, o ignorarlos hasta que ya no estén.

Su padre llama a Melissa y entonces se sienta en su silla mirándolo fijamente. Stiles se remueve en el asiento incomodo por la mirada, porque lo está mirando como si no lo conociera. Stiles se pregunta si en realidad no lo hace. No puede recordar la última vez que hablaron. Si su padre no está en camino de parar un problema, entonces Stiles está en camino de resolver uno de los suyos.

Stiles está casi aliviado cuando Melissa entra corriendo por la puerta, incluso aunque trae consigo problemas. Está usando su uniforme, se mira exhausta y ansiosa mientras se deja caer en frente de él, y Stiles trata de no pensar en Scott, trata de no preguntarse si ella también lo culpa.

—Stiles —dice, tocándole el brazo —¿cariño, estas bien?

Él se sacude sin quererlo, y Melissa suspira. Su relación nunca se recuperó de la muerte de su madre, había estado tan perdido, y tan triste, que cada acto de bondad de su parte le dolía. Ella cambio las reglas de sus interacciones para reconfortarlo, empujándolo de forma juguetona en vez de abrazarlo, rodando los ojos a sus payasadas en vez de preguntarle que estaba mal.

Su relación se desarrolló en la exasperación de Melissa y su actuación de Eddie Haskell, pero debajo de ese cariño bromista, había una base sólida. Podían pretender todo lo que quisieran, pero no había forma de cambiar el hecho de que pasaban juntos el mismo periodo de tiempo que ella pasaba con Scott, o que no puede recordar un momento en que no la conociese.

—Estoy bien — insiste Stiles — es solo resaca por el Adderall.

—uh huh — ella dice secamente — Ya hemos pasado por esto, nunca ha sido tan malo. ¿Cuándo fue la última vez que comiste y dormiste? — Melissa probablemente sabe más de asma y ADHD que cualquiera en el hospital, teniendo que lidiar con él y Scott. Incluso con todo lo demás en su cabeza, Stiles se deja atraer por ella, con su tono profesional, porque al menos esto es familiar.

—Dormí anoche — Stiles dice — tomé un refresco.

—Jesús — su padre murmulla, caminando de un lado a otro detrás de él. Stiles se contrae de dolor, pero no responde.

Melissa le da una barra de proteína. —Come esto, —dice — ¿Qué le paso a tus pies?

—Perdí mis zapatos —le contesta Stiles, mordiendo con recelo la barra.

—Perdiste tus zapatos — Melissa repite secamente, y esa es la Melissa que conoce — sabes, Stiles, casi puedo creer eso viniendo de ti.

John bufa —Yo no lo haría, si fuera tú — dice amargamente.

Melissa mira a John, su mirada cambiando de él a Stiles. —John — dice casualmente — olvide la venda. ¿Podrías buscar en el baño de arriba? Deje una aquí la última vez.

John suspira y asiente con la cabeza, antes de subir por las escaleras.

—Ok, desembucha — dice Melissa en el momento en que su padre está fuera de vista — ¿Realmente estas bien, y necesito preocuparme por Scott?

—No, estoy seguro de que está bien — Stiles le asegura — probablemente ya está en casa.

Melissa asiente con la cabeza, frunciendo un poco el ceño —¿Y por qué no está aquí contigo?

Stiles sabe que no quiere decir nada por eso; hace un año, demonios, hace un par de meses, hubiera sido una pegunta perfectamente válida que requeriría una respuesta extravagante, como un monstruoso accidente en bicicleta o una intervención divina. Porque nada más habría mantenido lejos a Scott.

—No creo que seamos amigo ya — le dice después de un momento —pero hey, al menos ya no te tienes que preocupar de que entre por la ventana, o que robe la comida, o…

—No seas ridículo, Stiles. Tu siempre serás amigo de Scott —Melissa lo interrumpe, tocando sus pies con menos gentileza de la que Stiles se siente merecedor y aplicando el desinfectante sin siquiera avisarle.

—Ow, ¡oye!

—¿No te gusta? Lleva zapatos la próxima vez —Melissa le dice —  Y mientras estas en ello, ¿Por qué no me dices que paso?

Lo dice casualmente, pero Stiles sabe que es todo menos eso. La experiencia que tiene con los padres consiste en los recuerdos confusos pero perfectos de su madre, quien, en retrospectiva, nunca había hecho algo mal, y su padre, quien siempre lo dejo hacer lo que quisiera, quien nunca puso restricciones a menos que fueran realmente necesarias, y que rara vez hacía que Stiles las cumpliera.

Stiles encuentra el enfoque estricto y directo de Melissa a la crianza absolutamente aterrador, y él sabe que Melissa no está preguntando. Estaba diciendo lo que espera que Stiles haga.

—Derek decidió practicar su habilidad de secuestro conmigo — Stiles dice de mala gana — Le doy un 69 (D+), y solo por el esfuerzo, porque no me costó nada escapar, pero luego conduje el Porsche de Jackson.

Melissa levanta la mirada bruscamente, y de forma suave extender una mano sobre el moretón en su frente. Le agarra la barbilla y gira su cabeza hacia la luz, observando atentamente sus ojos antes de asentir y dejarlo ir.

—Una semana— dice suavemente.

—¿Qué? —pregunta Stiles.

—Cuando tiempo tienes

Los ojos de Stiles se agrandan —¿Qué? ¿De vida?

Melissa rueda los ojos. —Es cuanto tiempo tienes para decirle a tu padre la verdad, o lo voy a hacer yo por ti —explica — Esto no va a suceder otra vez bajo mi supervisión.

Stiles siente a su corazón detenerse por un momento, y sacude la cabeza —No, no puedes hacer eso.

—Querría que él me lo dijera, si los papeles estuvieran invertidos —dice Melissa—Necesitaba saber sobre Scott. Tu padre necesita saber sobre ti.

—Tu no entiendes, no ves el peligro en el que lo pondría. Es diferente a ti — Stiles dice— Intentaría luchar contra ellos, y no puede. No pude saber, por favor, tienes que entender…

—Él es el Sheriff, y más importante, es tu padre — dice en ese tono amable que Stiles odia, porque no sabe cómo luchar contra el —No es tu trabajo protegerlo. Tienes que decirle, o yo lo hare.

—Ok — Stiles murmulla — Lo hare. Le diré. Pero no ahora. No hoy.

 —Tienes una semana —le recuerda Melissa —Sé que esto no es fácil para ti. Pero es lo mejor.

—No puedo encontrar la venda —dice John, bajando las escaleras para volverse unir a ellos —¿Quieres que vaya por una? ¿Qué necesitas?

—Oh, ¿puedes creer esto? —Melissa dice, hurgando en su bolsa — Esta justo aquí.

Melissa envuelve la suela de los pies de Stiles cuidadosamente con la venda, mientras su padre mira a unos pasos de distancia. Stiles la mira trabajar en vez de encararlo, admirando la forma eficiente en que ata las vendas.

—Va a arder un poco, pero todo es superficial —Melissa les dice, para después mirar seriamente a Stiles —necesitaras los vendajes por unos días, solo cámbialos. Regresare para revisarte en, ¿Que dices si, una semana?

Melissa le levanta una ceja y Stiles la fulmina con la mirada —Bien —le contesta de mala manera.

—Stiles —John le dice de forma reprobatoria.

—Está bien, cúlpalo a la resaca — Melissa dice, pasando una mano por el cabello afeitado de Stiles —Lo mejor es que duerna, pero échale un ojo de vez en cuando.

Se detiene a un lado de John cuando va de salida. —No seas muy duro con él — susurra —su corazón está en el lugar correcto. 

John se ríe casadamente —Esto sería sencillo, si no supiera eso ya

Melissa asiente con un suspiro y coge su bolsa para colgársela en el hombro.

—Llámame si necesitas algo —dice—estaré aquí.

—Gracias—John le dice, acompañándola a la puerta.

Stiles descansa la cabeza en sus manos mientras espera que su padre vuelva. Observa las botas de su padre aparecer en su capo de visión y se prepara. A enfrentado locos hombres lobo alfas, puede enfrentar a su padre. Probablemente.

Entiende que se lo debe a su padre. Su padre que lo deja salirse con la suya, pero todo tienen un punto de quiebre. Es la mala suerte de Stiles que esta vez no sea su culpa.

—Okay —dice— te escucho.

Su padre suspira y estira un mano para ayudarlo a pararse —Oh, planeo hacer que me escuches. Solo que no ahora. Escuchaste a Melissa, necesitas dormir. Vamos.

John sostiene un fuerte agarre en su brazo durante en camino por las escaleras, y lo abraza de nueve cuando están en la puerta de su cuarto. Stiles cierra los ojos y se apoya en él un momento.

—Duerme —John dice, besándole la frente antes de dejarlo ir —Pero esto aún no se acabó, Stiles. Creo que no hace falta decir que estas castigado.

Stiles suspira y se recarga en la puerta —¿Cuánto tiempo? —pregunta tímidamente.

 —Aun no lo decido — dice caminando hacia su propio cuarto —digamos que “indefinidamente”

Stiles gruñe empujando la puerta para abrirla, pateándola para cerrarla detrás de él y lanzándose a su cama. Le gustaría dormir por siempre, así no tiene que enfrentar a su padre, o Derek, o Sc…

—¿Tienes algo de vendajes que te sobren?

Stiles se levantó rápidamente, sus ojos agrandándose cuando ve a Scott salir de una de las esquinas de la habitación, la baja luz que pasa por la ventana resalta su camiseta rota y ensangrentada.

—¿Qué…?

Scott se detiene delante de él, viéndose avergonzado. Juguetea con la pieza de tela que solía ser el hombro de su chaqueta, y en la piel debajo de esta hay una herida abierta de color rojo. No lo ve a los ojos.

—¿Cuánto tiempo has estado ahí? —Stiles pregunta quedamente.

—Un tiempo —Scott dice—Siento lo de mi mamá. Hablare con ella.

—Derek te hizo eso—Stiles dice con incredulidad, observando la herida, porque es la una explicación que tiene sentido. Scott se habría curado de inmediato de cualquier cosa, pero no de las heridas infringidas por un alfa.  

—Seh. Puede que lo haya seguido después de que te fuiste. No estaba muy feliz conmigo.

—Eres un idiota —le dice Stiles —¿Derek está bien?

—¿En serio? Tu…—Scott demanda antes de callarse y mirar hacia otro lado —Está bien, no tiene ni siquiera un rasguño.

Stiles le arroja una venda y él la coge fácilmente —Hazlo tú mismo.

—Stiles…

—No —Stiles dice.

—Si solo me dejaras explicarte —empieza Scott—No te culpo. No lo hago. Nunca quise que pensaras eso. Podía haber dicho que no, podría haberme quedado en casa, yo…

—No hagas esto. No es justo.

—¿Qué no lo es? —Scott pregunta.

—¡Esto! — Stiles sisea —Tu viniendo aquí, de esa manera, porque sabías que no podría estar enojado contigo si estabas herido, sabías que te perdonaría y estaríamos como antes…

—¡No es lo que estoy haciendo! —protesta Scott—Stiles, me conoces. Sabes que no planeo las cosas así de bien.

—No es solo sobre ti—Stiles dice—¿ok? No lo es.

—Lo sé, pero es un poco sobre mí. Y tienes que perdonarme —insiste Scott —Siempre me perdonas.

Stiles sacude la cabeza, pasando una mano sobre su cabello, se siente como arrancarse el corazón per sabe que tiene que hacer esto. Lydia tiene razón—porque Lydia siempre tiene la razón—no puede continuar así. Su vida entera ha sido consumida por hombres lobo, al punto en que no sabe quién es él sin ellos.

—Pero no es tan sencillo esta vez, ¿verdad? —Scott pregunta tristemente.

—Siempre serás mi mejor amigo—Stiles le dice de forma queda— Nunca nadie me entenderá como lo hacer, nadie se molestaría en intentarlo. Y nadie más sabe cómo cuidarte. Y eso es…no quiero que eso cambie, pero la ha hecho. Y está bien, creo, yo solo…debería…

—Stiles…

—No, mira, no tenemos doce —dice Stiles —El mundo ya no consiste en solo la escuela, nuestras salas de estar y la PlayStation. Estamos creciendo, y nos estamos alejando, y no somos las mismas personas.

—Por favor, no hagas esto…

—Así que siempre serás mi amigo. Pero no puedo estar en tu manada en este momento.

La expresión suplicante de Scott se rompe. —Porque vas a unirte a la de Derek.

—Dios, ¿es lo eso lo único que te importa? — Stiles exige, gritando tanto como le es posible con un susurro. —Métetelo en la cabeza, esto es sobre mí, esto es sobre lo que necesito. No es sobre ti, o Derek, o ninguno de ustedes. Lydia ha estado en lo cierto todo este tiempo.

—¿Qué significa eso? —pregunta Scott.

—Significa que me declaro neutral, considérame Suiza —dice Stiles — Hasta que aprendan a trabajar juntos, trabajaran sin mí.

—¿Qué es exactamente lo que estás diciendo? —Scott pregunta con urgencia, acercándose — ¿Qué si estuviera en problemas, no me ayudarías?

Stiles trata de no reírse de lo incrédulo que suena Scott, como si esa es la cosa más loca que ha escuchado jamás. No parece darse cuenta que eso es lo que le ha estado haciendo a Stiles desde el principio.

—Todavía lo haría —admite —Y si Derek me necesitará, lo ayudaría también, y nada va a cambiar. Así que te estoy pidiendo que me dejes fuera de esto. Solo un tiempo.

—Pero ¿qué hay de nosotros? —Scott pregunta quedamente— ¿Qué significa para nosotros?

—Significa que necesito que no me llames más —dice Stiles —No debería ser tan difícil. Por lo general lo haces sin siquiera intentarlo.

—Stiles…—Scott implora.

—No. No me hagas perdonarte, porque sabes que lo hare, como siempre, y no puedo…necesito que te vayas, ¿ok? Por favor.

—Ok— Scott dice con aire abatido. —Ok, me iré. Pero quiero que me llames si necesitas algo. Prometo que contestare. Lo prometo, Stiles.

Scott desaparece por la ventana, y Stiles se deja caer de nuevo en la cama. Siente como si hubiera sido desgarrado por la mitad, y casi llama a Scott para que regrese. Por un momento quiere meter todos los problemas debajo de la alfombra como todos lo demás porque lo más importante siempre ha sido mantener la amistad de Scott a cualquier precio. Stiles ha hecho de todo para mantenerlos funcionando, tratando de mantener apariencias, pretendiendo como si nada hubiera cambiado. 

La verdad es que todo cambio. Trata de imaginarse como sería todo si hubiera conocido a Scott ahora en vez de cuando tenían cinco años, si se hubieran encontrado así, y no puede.

No cree que las personas que son ahora fueran amigos.

Notes:

Cuando traduje este capitulo no puede parar de pensar: Scott y Stiles hacen tan bonita pareja, ya pelean como una jajajajaja

La parte del 69, espero que no hayan pensado nada cochinotes ¬v¬...o tal vez solo fui yo ¬w¬U
Como sea. Espero que les haya gustado!!! :)

Chapter 9: Capítulo 9

Chapter Text

Stiles no está completamente despierto cuando el zumbido de su celular resuena por toda la habitación. Deja que una de sus manos caiga aun lado de él, buscando entre las cobijas por su celular y después lo contesta sin si quiera abrir los ojos.

—¿Hgh? —dice.

— Que lindos modales —Lydia dice remilgadamente —Espero que no te haya levantado.

—Ugh —contesta Stiles, cambiando de postura hasta que esta acostado sobre su espalda y poniendo una mano sobre sus ojos.

—Bien —dice Lydia entusiasmada —Solo quería decirte que volví a Arnold, y lidié con Jackson. Ya no te tienes que preocupar por él, no volverá a causar problemas.

—¿Por qué suenas como mi sicario personal? —Stiles pregunta adormilado.

Lydia solo se ríe alegremente y corta la llamada. Stiles decide que nunca dejara de ser aterradora. Deja su celular en la mesita de noche, y es ahí cuando recuerda que su celular había conocido su final en el fondo de la represa de Beacon Hills.

Stiles se sienta rápidamente, sus ojos abriéndose al máximo cuando se despierta completamente. Mira el teléfono y después baja su mirada al piso a un lado de su cama, para encontrar la ropa de ayer lavada y doblada en una pila.

Derek había estado aquí. En su cuarto. Mientras él estaba durmiendo.

—Dios —Stiles gime, dejándose caer en la cama, devatiendose entre sentirse halagado o perturbado. —Ni si quiera puede disculparse sin que necesite una orden de restricción.

No ayudó que Derek tuvo que pedirle a Peter que clonara su teléfono, desde que la tecnología y Derek se llevaban igual de bien que Derek con cualquier otra persona. Se puede imaginar a Peter riéndose maliciosamente mientras leía sus mensajes y veía su historial de búsqueda.

—¿Por qué mi vida es así? —Stiles murmulla, alcanzando su celular sin muchas ganas. Escucha sonidos de pisadas y se vuelve a levantar, tomando el celular para después meterlo debajo de la pretina de su pantalonera.  Se baja la camisa justo al mismo tiempo que su padre abre la puerta y Stiles suspira de alivio.

Acaba de recuperar su teléfono, no necesita que su padre se lo confisque todavía.

—Papá —saluda Stiles, pasando una mano por sus ojos y tratando de aparentar que se acaba de despertar —¿Qué hora es?

—Las nueve— dice su padre, cruzándose de brazos y apoyándose en el marco de la puerta. Lo está mirando como si fuera un sospechoso, y Stiles traga duro. Su padre raramente lo ve de esa manera, no en realidad.

La única vez que puede recordarlo viéndolo así fue con el “accidente de Jackson”. Stiles se había prometido no decepcionar a su padre de esa manera de nuevo.

—Papá, mira…

—Noup—le interrumpe John —Yo voy a controlar este juego ahora. No más Señor papá bueno para ti.

Stiles gruñe. —Papá, no, por favor dime que no acabas de decir eso — se queja —Eso fue horrible. Eso es…

—La verdad —interrumpe —He terminado de dejarte hacer lo que tú quieras, Stiles. No es justo para ti, y no es justo para mí. Necesitas límites.

—Pero no soy bueno con los límites, sabes eso —protesta Stiles —Esa es la razón por la que nuestro sistema actual funciona bien.

—¿Te refieres a aquel en donde te digo que puedes hacer y tú haces cualquier cosa que se te dé la gana?

—Sí, ese, exactamente —Stiles concuerda —Ha funcionado por años

—No te estas ayudado, niño —dice, adentrándose en la habitación y caminando directo a la computadora.

Los ojos de Stiles se abren y prácticamente se cae de la cama para ganarle y llegar antes — ¿Qué estás haciendo?

John sacude el ratón con más fuerza de la necesaria para prender la computadora, y después apunta hacia ella —Desbloquéala —dice, cuando el aviso de la contraseña se abre.

—¿Por qué? —pregunta Stiles

—¿Tu por qué crees? —John pregunta de vuelta —Quiero saber en qué has estado metido, y cuando de causalidad estas en la casa, que últimamente, no es mucho, estas en esta cosa. Así que desbloquéala, o solo me la llevare.

—okay, okay —Stiles dice, acercándose para escribir su contraseña. Trata de recordad si hay algo incriminatorio abierto, y deja salir un suspiro de alivio cuando no ve ventanas abiertas con mensajes difíciles de explicar, como “así que, anoche fue luna llena, espero que te divirtieras y no mataras a nadie”.

Stiles observa cuidadosamente a su padre mientras busca el ensayo que dejo sin terminan en el escritorio. Lo único que tenía Stiles era sobre carga de información. La mayoría trabajaos de la escuela, trabajos de investigación o teorías. Uno de los archivos tiene quince hojas de investigación sobre el uso de características animales en un cierto comic en sus personajes, que realmente nunca fue asignado.

Pero entonces su padre encuentra la carpeta llamada “lectura ligera”, que llamo así para su propia diversión. Siente como su corazón late con rapidez por un segundo cuando abre la versión pdf del Bestiario. Trata de pensar en una clase de explicación, pero su padre solo bufa y cierra la ventana.

—Stiles, solo tu tendrías libros obscuros escritos en latín en una carpeta marcada como “lectura ligera” —dice, antes de pasar una mano por su cabello en frustración.

—Siento si te decepcione —Stiles dice —Sé que tal vez estabas esperando encontrar un montón de porno y mi blog en donde me quejo del gobierno y las limitaciones sociales.

—No sabía qué demonios esperar —John dice, antes de levantarse y caminar a su armario. Lo abre y empieza a mover a un lado sus zapatos, buscando por solo Dios sabe qué.

—¿En serio? ¿Esto es realmente necesario? — Stiles pregunta. En serio su padre debería conocerlo mejor, él no deja las cosas en donde cualquiera puede encontrarlas. Le enseñaron mejor que eso, y esto sería insultante si no doliera tanto. —¿Tal vez te gustaría tomar una muestra de sangre y orina, ya que estas en eso?

—Bueno, ahora que lo mencionas —John dice fuertemente, cerrando el armario con un azote.

—Estaba bromeando, papá—Stiles dice, quedamente —Era una broma. No crees que…

—Digamos que no lo he tachado de mi lista —dice de forma cansada. Observa a Stiles — Si quieres seguir mintiéndome, entonces así es como va hacer.

—Pero te voy a decir —insiste Stiles —Lo are. Pero aún estoy tratando de encontrar la mejor manera de hacerlo.

—No es tan difícil, Stiles. Solo tienes que hablar. Solías decirme todo.

—Esto es diferente —Stiles dice —¿Solo necesito tiempo, okay? Te prometo que sea lo que sea que estés pensando, no es eso. No he hecho nada malo.

—Bueno, tienes mucho tiempo si eso lo que quieres —John dice, sonriendo severamente —Considérate en arresto domiciliario.

Stiles hace una mueca de dolor —Si, me lo supuse.

—Te iba a quitar la computadora también, pero ya que mayormente la usas para investigaciones de nivel universitario solo por diversión, te dejare conservarla.

—Eres el mejor papá del mundo, ¿lo sabías? — pregunta Stiles.

—Solo no me hagas lamentarlo —dice John— Podría el control parental, pero tú eres al normalmente le digo que lo haga, así que. No video juegos. No Ula.

—Hulu —Stiles le corrige sin pensarlo —Y lo entiendo. No diversión.

—Quiero que te quedes en tu cuarto hasta que estés listo para hablar conmigo. Excepto para las comidas. Puedes bajar para comer.  — dice, antes de asentir de forma contundente y caminar hacia la puerta —Y ni siquiera pienses en escabullirte; estoy confiando en ti, incluso cuando no estoy seguro de que debería.

Stiles solo asiente, pero no puede arriesgarse a hacer una promesa. Quiere, pero no quiere arriesgarse a romperla. Su papá suspira y se va por el pasillo. Stiles se deja recarga en la puerta del armario mientras lo cierra, dando media vuelta y dejándose caer en el piso.

Presiona las palmas de las manos contra sus ojos tratando de mantener la compostura. No se había dado cuenta hasta ahora cuan cerca está de romper la relación que mantiene con su padre.

No sabe que es lo que debe de hacer. No puede bajar y decir “okay, lo diré. ¡Hombres lobo! Sip. Así que… ¿Puedes darme las llaves de mi coche, para que pueda seguir peleando contra las maliciosa fuerzas sobrenaturales?”

No ve que vaya a salir muy bien, y no es como que puede solo hablarle a Scott para que venga y sea la Exhibición A. Derek es una peor idea, porque su padre probablemente le dispararía solo con verlo. Podría llamar a Melissa, desde que es ella la que lo está chantajeando para decirle en primer lugar, pero no puede justificar el dejarle toda la culpa a ella. Sabe que Melissa y su padre son amigos, y esto podría separarlos. Ya ha arruinado suficientes cosas para su padre.

Se muerde el labio dándose cuenta de que se quedó sin pretextos, que finalmente va a tener que decirle a su padre la verdad.

No puede evitar seguir tratando de negociar consigo mismo, tratando de encontrar una manera de dejar a Derek fuera de todo esto. Stiles sabe que su padre nunca dañaría a Scott, ¿pero Derek? Si descubre lo que realmente paso, su padre puede ir detrás de él.

No piensa que Derek heriría a su padre, tampoco, pero ha visto como es cuando lo acorralan.

—Mierda—Stiles dice, dejando que caer la cabeza contra la puerta. No hay ninguna forma de que esto termine bien para nadie.

[…]

Stiles pasa la mayoría de la tarde acostado en su cama sintiendo lastima por sí mismo. Visualiza cada uno de los escenarios sobre cómo decirle a su padre, pero no puede predecir como reaccionara su padre. El tema de los hombres lobo, está seguro que su padre lo puede soportar. Le gustan los rompecabezas, así que esto sería una pieza faltantante para entender los últimos años. Probablemente estará aliviado de tener una respuesta.

Lo que no sabe es como su padre va a reaccionar a su participación. Stiles sabe que la tiene fácil la mayor parte del tiempo, que algunas personas han acusado a su padre de dejarlo convertirse en un salvaje; pero la verdad es que John siempre ha confiado en él. Tal vez no de abstenerse de hacer travesuras, pero sí de hacer lo correcto. Stiles siempre hizo su tarea sin que nadie le dijera, siempre fue a clases, y mantuvo la cocina llena de algo más que pizza fría.

A Stiles le gusta pensar que se comporta bien, pero no esta tan seguro de las elecciones que ha hecho últimamente. Vuelve a pensar en el fantasma de su padre que vio en la fiesta de Lydia, y sus acusaciones le resuenan en los oídos. ¿Su padre se sentirá enojado u orgulloso? ¿Lo enviará lejos, o lo encerrará, o posiblemente la más terrible de todas…se dará por vencido, de una vez por todas?

—Stiles —Su padre grita, tocando la puerta antes de abrirla. Se recarga en el marco de la puerta para mirar a Stiles con preocupación. —Tienes un visitante. ¿Lo recibirás?

—Pensé que estaba bajo arresto domiciliario —Stiles dice quedamente.

—Incluso los prisioneros tienen permitido visitantes. Tienes quince minutos —John dice, y se detiene durante un momento, antes de observar a Stiles con su típica mirada de cariñosa exasperación. —No tocar.

—Que gracioso —Stiles dice seriamente, incluso cuando se siente agradecido de una forma ridícula por la burla.

Allison entra después de que su padre se encamina a las escaleras, viéndose reservada e insegura. —¿Estas bien?

—¿Por qué estás aquí? —Stiles interrumpe, tratando de recobrar la calma por el miedo que siente de que le haya pasado algo a Scott. En este momento preocuparse por Scott no es su trabajo. —¿Qué ha pasado?

Ella titubea por un momento, antes de suspirar y mirarlo a los ojos —Scott quería saber si estabas bien —dice —pero no cree que quieras hablar con él.

—Probablemente porque le dije que no quería hablar con él— Stiles dice de forma cautelosa, no estando seguro de si sentirse aliviado o no. Una crisis sobrenatural puede ser más fácil de llevar que todo esto.

—Claro —concuerda Allison —Pero estaba preocupado por ti, y honestamente, Stiles, yo también lo estoy. Me dijo lo que paso.

—¿Qué te dijo exactamente? —pregunta Stiles.

—Que Derek te secuestro.

—¿Le dijiste a tu padre? —Stiles pregunta rápidamente, su corazón latiendo con fuerza al pensar en Chris Argent cazando a Derek. No está seguro de que Derek pueda ganar esa, y sabe que no habría ningún ganador de todas maneras.

—No le dije —Allison contesta rápido—Juro que no lo hice. Al menos, no aún. — lo mira a los ojos tranquilamente—Pero lo único que tienes que hacer es decirlo, y nos encargaremos de eso.

—Tienes que estar bromeando — Stiles susurra, su tono teñido con incredulidad. Ha visto a Allison reusarse a diseccionar una rana en biología, nunca ha sido capaz de conciliar que la misma persona podría despiadadamente cortar a la mitad a sus compañeros de clase. —No puedo creer que Scott haya tratado de meterte en esto. Es lo último que necesitamos. Tengo todo controlado.

—Te lastimo, Stiles…—Allison dice gentilmente —Teníamos una especie de tregua, pero esto podría romperla. Estaríamos en nuestro derecho de…

—¿De qué? —interrumpe —¿Cortarlo a la mitad con tu espada?

—Mi padre y yo preferimos la katana —Allison lo corrige sin pensarlo.

—Bueno—Stiles dice, agitando los brazos — ¡Lo que faltaba!

—No estoy sugiriendo que matemos a Derek—insiste, sonando a la defensiva —Si tan solo escucharas…

—No quiero herir a Derek, ¿ok? —dice Stiles —Si piensas que vas a obtener mi bendición estas equivocada. Y quieres volver a ser una princesa guerrera otra vez, tendrás que pasar sobre mi primero.

Allison lo fulmina con la mirada, sus ojos brillando peligrosamente. Stiles odia que este dejando que la pelea con Scott este arruinando su relación con Allison, pero no puede ver una manera de evitarlo.  Allison, con Scott, era una increíble aliada, divertida, dulce e inteligente. Allison, sin Scott, por otro lado, no era el tipo de persona que Stiles quería estar cerca.

—No estoy hablando de eso —Allison dice —No le haríamos daño, solo lo forzaríamos a alejarse. Él ya no pertenece aquí.

—Eso no es algo que tú puedas decidir —dice Stiles —Tienes que prometer que no le dirás a tu padre o a alguien más. Ellos no entenderían.

—Yo no entiendo— Allison dice, su voz calma y con un extraño toque profesional. Piensa que le puede ir bien en las fuerzas policiales, si es tan buena con una pistola como lo es con la flecha y arco. —Scott no entiende, tampoco, porque nada de esto tiene sentido. No tienes que dejarlo salirse con la suya.

—No lo hice. Me encargue de ello, ¿ok? Puedo tratar con Derek.

—Puedes pensar eso, ¿pero que si esto es solo el comienzo? —pregunta ella —Sabes que ha cambiado desde que se convirtió en alfa. Puede que no seas capaz de detenerlo, si lo lleva demasiado lejos.

—Ninguno de ustedes lo entiende, ¿verdad? Derek esta jodido, pero está intentando mejorar. Lo está haciendo todo mal, pero ya sabes, no mucho ha ido bien para él, así que estoy dispuesto a darle un descanso.

—No sabes en lo que te estas metiendo…—insiste Allison.

—Lo sé, probablemente mejor que tú, pero no has tenido los mejores maestros para enseñarte como son los hombres lobo —Stiles grita —¿Por qué estás aquí, realmente? ¿Por Scott? ¿o porque solo quieres una excusa para ir tras Derek?

—Stiles —Allison empieza a decir, sonando decepcionada de él.

—Mira, no estoy intentando ser un idiota —Stiles dice —Pero nunca hemos sido amigos, y considerando que Scott y yo no estamos hablando en este momento, no tiene sentido comenzar ahora.

—Esto no es justo — Allison dice, temblorosa— Stiles, eso no es justo. Somos amigos. Tú lo sabes.

—Si fuéramos amigos entonces no dirías nada —dice Stiles —estarías más preocupada por mí de lo que Derek puede hacer a continuación.

—Estoy preocupada por los dos. Porque cada vez que sales herido, es por él.

—O por tu familia —Stiles le corrige —No hay que olvidarnos de eso, porque sé que yo nunca lo hare. No presente cargos en contra de tu abuelo cuando me secuestro, y tú no tuviste problema cuando mentí por lo que paso.

Los ojos de Allison se abren como si la hubieran golpeado, y Stiles se arrepiente de sus palabras. Ella se recupera antes de que pueda disculparle, y da un paso adelante. —No, no lo tuve. —concuerda, su voz prácticamente vibrando por las emociones —Pero no se escapó de eso.

—No, supongo que no lo hizo —Stiles responde quedamente. —Pero la diferencia es que Derek nunca me lastimo.

—Me preocupa que te creas eso. Pero mantendré el secreto por ahora. Hace algo como esto de nuevo, y no prometo mantener esa promesa.

—No lo hará —Stiles dice rápidamente —Me asegurare de eso.

Allison asiente y se da media vuelta, yéndose son otra palabra. Su padre aparece en el momento en que se va, y Stiles realmente espera que su espionaje no haya tenido éxito.

—¿Quieres explicar eso? —pregunta, asintiendo con la cabeza hacia el precipitado retiro de Allison.

—Estaba aquí en nombre de Scott —Stiles dice amargamente —Scott y yo no estamos hablando por el momento.

Ve el momento en el que su padre se aferra a esa información, el detective dentro de él acomodándolo de cualquier manera en lo que le está pasando.

— Eso no es algo que ustedes harían — dice levemente — ¿Quieres hablar de ello?

—No sabría que decir — Stiles dice de forma queda.

—Así no es como eres, tampoco — John dice.

Stiles sólo se encoge de hombros, y su padre lo deja solo con un suspiro. Stiles sabe que no es justo desquitar su enojo con Scott en Allison, pero ella no ha sido inocente en todo esto. No sabe lo que significa que de todas las personas que podría culpar por esta situación, está culpando menos a Derek que al resto de ellos.

Chapter Text

El día dos de su arresto domiciliario comienza igual que el primer día. Stiles dibuja líneas con gis en la pared arriba de su cama, justo en donde sabe que su padre las pueda ver. Su padre sólo les lanza una mirada y bufa, pero no hace ningún comentario, y Stiles siente su respiración atorarse cuando cierra la puerta detrás de él.


A Stiles nunca le ha gustado estar solo. Su padre patrulla los pastillos y camina de a un lado a otro en el piso de abajo como un guardia en la prisión, pero no habla con Stiles. Lo está esperando pacientemente, esperando que Stiles hable primero. Stiles siempre se rompe primero.
Por lo que es una sorpresa cuando no pasa.


Su padre abre la puerta del cuarto sin tocar primero, el cual es un hábito que Stiles planea quitarle cuando todo esto termine. Está usando su uniforme y se ve preocupado.


—Me llamaron de la estación —dice de mala gana —Es importante, o no iría.


Uno de cinco días, Stiles piensa, porque tiene que ser un record. No recuerda que su padre se haya tomado tanto tiempo libre desde que Stiles hizo que lo despidieran, Stiles asume que eso no cuenta.


—Okay —Stiles dice —Entiendo.


Su padre hace una mueca y ya no lo mira a los ojos, rascándose la nuca. Stiles conoce los indicadores de su padre y se tensa, porque ese significa que está apunto de decir algo que no le va a gustar.


—¿Qué? —Stiles pregunta — ¿Qué está mal? ¿Paso algo?


—No, no, nada de eso —John dice —Sólo, Melissa esta abajo. Va a estar aquí hasta por un rato.


Stiles parpadea por un momento, preguntándose por qué Melissa querría pasar el rato aquí. De primero piensa que su padre le puede estar diciendo que estaban en una cita, excepto que una cita no tendrías sentido que su padre no está aquí, así que…


—O mi Dios, ¿me conseguiste una niñera? —Stiles grita —¿Conseguiste que Melissa me cuide? No puedes ir en serio. Papá, tengo dieciséis, no puedes…


—Puedo, de hecho —interrumpe, y Stiles puede ver cualquier vacilación que su padre haya tenido se esfumo por una pisca de enojo —Lo siento si no te gusta, pero no puedo confiar en que te quedes aquí, lo has demostrado.


—No puedo creer esto —Stiles dice —Dije que me quedaría aquí.


—Nunca lo hiciste —John señala —Sólo estaré fuera unas horas, y entonces hablaremos, ¿ok? Vamos a trabajar en esto, niño, tiene que confiar en mí.


—Seh —Stiles dice con voz turbia —Confió en ti. El problema es que tú no confías en mí.


Su padre mira a otro lado. —Supongo que no lo hago —concuerda — ¿Pero, puedes culparme?


Stiles quiere, pero no puede. No le ha dado ninguna razón a su padre para confiar en él, no después de todas las mentiras que ha dicho. No después de todos los problemas que ha causado. Lo sorprendente es que le tomara a su padre todo este tiempo para actuar.


—Ten cuidado —Stiles dice quedamente —Y no comas comida rápida.


Su padre sonríe levemente y asiente con la cabeza. Stiles lucha para estabilizar su respiración cuando se ve, pero puede sentir la habitación cerrándose. Unas manos lo trajeron de vuelta a la realidad, levanta la mirada y ve a Melissa mirándolo preocupada.


—Respira, Stiles —dice gentilmente.


Stiles suprime una risa, y entonces recarga la cabeza en sus manos, controlando su respiración hasta que los bordes negros retrocedan de su visión. Antes de esta semana no había tenido un ataque de pánico en años, pero ahora es como si tuviera que aprender a romper el hábito de nuevo.


—Supongo que es algo bueno que estuvieras aquí, después de todo.


—Sí — dice con ironía — Así que este arresto domiciliario significa que le dijiste, ¿o que no lo has hecho? Aunque supongo que no te dejaría salir de su vista si ese supiera la verdad.


—Le diré pronto —Stiles dice rápidamente —Dijiste que tenía una semana.


Melissa asiente —Lo hice —concuerda —Pero no pensé que la utilizarías toda. Necesita saber, Stiles. Esto no le está haciendo bien a nadie, menos a ti.


—Lo sé, pero no sé cómo — Stiles dice. Mira hacia Melissa — ¿Cómo fue, cuando lo descubriste?


—Aterrador — dice de forma gentil — Pensé que estaba en un sueño. Una pesadilla. Pero entonces me di cuenta de que Scott es aun Scott, sea lo que sea, y eso es lo único que me importó.


—¿y lo demás? —pregunta Stiles.


—¿Te refieres a la locura general de vivir en Beacon Hills? —Melissa pregunta, y Stiles asiente. —Honestamente, Stiles, no muy bien. No soy como tú, no son tan fuerte. Algunos días solo quiero enterrar mi cabeza en la arena. Quiero proteger a Scott, pero sé que no puedo. Y me asusta como no te puedes imaginar.


—Eres una de las personas más fuertes que conozco —Stiles dice —Esta bien no querer estar involucrada. Desearía que mi padre fuera a reaccionar de la misma manera, pero tengo la sensación de que eso no va a pasar.


Melissa ríe —Sí, buena suerte con eso —dice, antes de sacudir la cabeza —Sabes, digo que no puedo proteger a Scott. Lo sé, y lo acepto, aunque planeo intentarlo de todas maneras. Pero tu aun puedes salir de esto, Stiles. No tienes que estar involucrado.


—Sí, tengo que —Stiles dice —Yo…no sé cómo explicarlo, pero siento como si estuviera destinado a esto. Scott siempre quiso que las cosas volvieran a como estaban, y siempre me sentí culpable, porque yo nunca lo quise.


Melissa solo asiente —Sí, siempre quisiste tener problemas — dice con ironía —Supongo que eso tiene sentido —Se levanta de la cama y camina hacia la puerta —¿Qué dices si vamos abajo y hago chocolate caliente? Entonces puedes decirme porque Scott está deprimido en la casa peor de lo que lo hizo en su primera ruptura con Allison.


Stiles hace una mueca. —¿Qué tal si es solo el chocolate? —pregunta.
—Buen intento —Melissa dice, saliendo de su cuarto con una risa amortiguada.


Stiles se mueve para seguirla cuando escucha la vibración tenue de su celular. Se detiene y mira la puerta para estar seguro de que la costa esta despejada antes de sacar el celular debajo del cesto de la ropa sucia. Tiene treinta y cinco mensajes nuevos, pero no se molesta en mirar después del primero.


Urgente. Ven a la oficina.: Deaton.


Stiles frunce el ceño, preguntándose que podría querer el veterinario. Considera llamarle y decirle que no puede ir, pero entonces recuerda que este podría ser su última oportunidad de conseguir refuerzos. Si su padre no se toma bien las noticias, sería bueno tener medidas de seguridad instaladas de una vez. Podría colocar un anillo de ceniza de serbal y abastecerse de acónito por si acaso.


Stiles revolotea por la habitación un momento antes de reunir el coraje, y rápidamente se cambia los jeans y tenis.

Mientras se pone la sudadera, se encamina hacia su escritorio para escribirle una nota a Melissa. La deja simple en caso de que alguien más la viera: Tenía una pregunta acerca de un canino. Fui al veterinario.


Sabe que ella no estará feliz con él, pero no puede delatarlo sin delatarse a sí misma. No está siendo justo, pero si ha aprendido algo estos últimos años, es como no pelear justo.


Trata de no pensar en su papá, y toma consuelo en el hecho de que nunca prometió quedarse en casa. Su padre no entiende que Stiles tiene responsabilidades que no son normales para los chicos de dieciséis años, y Stiles abre la ventana y se arrastra por la cornisa. Nunca se ha escapado por la ventana. Siempre espera hasta que su padre se va a trabajar y sale por la puerta trasera, así que no está preparado para el aterrizaje forzado cuando se deja caer. No es tan fácil como Derek lo hace ver.


Maldice y mira por la ventana del primer piso, cachando un vistazo de Melissa en la cocina. Rodea la casa y saca su oxidada bicicleta por el frente. Se ve como si perteneciera a una pila de basura, pero aun funciona. Le lanza una lastimera mirada a su Jeep, y entonces se sube emprendiendo su camino hacia Deaton.


No llega tan lejos cuando siente a su celular vibrar en su bolsillo. Se detiene con un suspiro, y lo saca. La foto de Melissa aparece en la pantalla, y considera ignorarla.


Entonces recuerda que Melissa puede ser bastante aterradora, y probablemente cometió un error al decirle donde estaría. —Hey—contesta.


—Trae tu trasero para acá en este momento, Stiles —Grita Melissa.


—No puedo —Stiles dice —Tengo que hacer algo, ya sabes, relacionado con los lupinos. Esta puede ser la última vez antes de que mi padre me inscriba a una de esas habitaciones acolchonadas.


—No puedo seguir cubriéndote —Melissa le dice de forma cansada —No solo porque odio mentirle a John, pero porque vas a terminar herido, y no voy a perdonarme a mí misma. No voy a perdonarme por dejarte estar involucrado en esto.


—Soy yo el que te involucro en esto —argumenta Stiles —A ti y a Scott.


—Oh, cariño, eso no fue lo que paso —Melissa dice gentilmente.


—Tengo que mantener a mi padre a salvo —insiste Stiles, con voz fuerte —Por favor, tengo que hacer esto.


Se queda callada por un momento y entonces la escucha maldecir en un tono quedo.


—Bien, puedo darte una hora. Más que eso, y llamare a tu padre. Y Stiles, le diré todo.


—Gracias —Stiles dice, cerrando sus ojos —Te debo una.


—Me debes una grande —Melissa concuerda —Pero mientras regreses a tiempo estaremos a mano.


Stiles deja salir un suspiro de alivio, que dura el tiempo en que se tardo que dura el tiempo en que se tarda en darse cuenta de que la cadena de la bicicleta exploto. Se baja de ella y la mira mal por un momento antes de inclinarse y examinar el daño.


—No tienes mucha suerte con los vehículos de escape, ¿verdad?
Stiles se gira hacia la voz, haciendo una mueca cuando escucha la bicicleta caer atrás de él. Lydia se ríe de él desde el asiento del piloto de su BMW, inclinándose por la ventana con la barbilla apoyada en sus brazos.


—Esto se está volviendo familiar — continua, antes de sonreírle de forma burlesca —Vamos, te daré un aventón.


Stiles mira cautelosamente su expresión presumida —Deja de mirarme como si fuera tu damisela en peligro —Stiles dice —Porque no lo soy.


—Toda la evidencia apunta a lo contrario —Lydia dice —Stiles, solo metete en el coche. Puedes venir por tu bicicleta…o lo que sea que sea esa cosa, luego.


Stiles se traga su orgullo y se trepa en el asiento del copiloto, porque sabe que nunca llegara a tiempo a pie.


—¿Qué estás haciendo aquí? —pregunta —¿Me estas acosando?


—Me parece preocupante que estés entusiasmado por la posibilidad — Lydia dice —Pero no, ese honor le sigue perteneciendo a cierto hombre lobo malhumorado. Solo venía para asegurarme de que estabas bien. Allison me conto que te convertiste en Carrie.


—¡Mentira! —protesta Stiles.


—Hmmm, —Lydia dice, sin comprometerse a nada, mientras vuelve a la carretera. —¿Entonces en donde te dejo?


—La veterinaria


—¿Tu padre te dejó ya? —Lydia pregunta curiosamente —Sé que te sacaste el premio mayor del papá genial, pero esto es ridículo.


—No, —admite Stiles —pero Deaton dijo que necesitaba verme, e imagine que no haría daño hacerme con suministros. Necesito poner protecciones alrededor de la casa. No puedo tener a los lobos de Beacon Hills usando mi ventana como su puerta de perrito personal.


—Parece un truco practico —dice Lydia, pensativa —Tal vez pueda recoger algo para la próxima vez que Jackson vea una película de Nicholas Spark.


—No estoy seguro de que quiera contribuir a esa clase de tortura, incluso en Jackson —Stiles dice —Pero puede que sea bueno para ti tener una clase de protección, solo por si acaso. Nunca se sabe.


—La protección es clave —acepta Lydia —La pregunta es, ¿Qué estas tratando de proteger, tu virtud o tu vida?


—Oh, mira —Stiles dice, agarrando desesperadamente la puerta del coche mientras se estaciona en frente de la veterinaria —¡Ya estamos aquí!


—¡Stiles! —Lydia grita, siguiéndolo rápidamente.


Stiles la ignora empujando la puerta de la veterinaria y caminando directo a la parte de atrás —¡Deaton! —lo llama. Oye a Lydia entrar después de él, pero se satisface con solo mirarlo mal en vez de gritarle.


Deaton aparece como salido del aire y mira fijamente a Stiles con calma —Hola —dice.


—¿Hola? —Stiles repite con incredulidad —Dijiste que era urgente. Vine, en riesgo de ser castigado de por vida, ¿Y eso es todo lo que tienes que decir?


—Hola, Stiles —Deaton dice, y lo mira con esa expresión extraña que Stiles piensa podría ser una sonrisa en alguien más. Asiente con la cabeza a un libro en la mesa de examinación —Tengo el libro que pediste. Actuaste como si fuera importante.


—El libro…oh, ¿de los bunyips? —pregunta Stiles —Ya me he encargado de eso.


Deaton frunce el ceño. —Dijiste que era teórico —reprende.


—Y lo era —Stiles concuerda —Justo hasta que Derek le corto la garganta y me saco del agua.


Deaton deja escapar un suspiro, mirándose adolorido. —Dime que no fuiste a buscarlo por tu cuenta —dice — Deberías haber esperado por lo menos a tener el libro y haber pedido mi consejo. ¿Tienes alguna idea de cuan afortunado eres de que Derek fuera capaz de matarlo?Casi siempre viajan en parejas. Pudieron haber sido asesinados. 

 

Stiles extiende la mano y agarra el libro, pasándole los ojos por encima por un momento antes de ponerlo bajo su brazo. No le responde a Deaton. Había pensado en pedir consejo al veterinario, por supuesto, pero había estado bastante seguro de que el consejo de Deaton habría sido que se mantuviera al margen.


—¡No puedo creerlo! ¿Lo hiciste, no es así? ¡Fuiste tras esa cosa tu solo! —Lydia dice, antes de burlarse y mirar para otro lado —Te merecías ser secuestrado.


—¿Qué está haciendo la señorita Martin aquí, si puedo preguntar? — Deaton la mira con la expresión más inquieta que Stiles ha visto en él.


—Pensé que podrías darnos algunas protecciones —dice Stiles —Ya sabes, un poco de ceniza de serbal, un poco de acónito, y, ah… ¿cualquier cosa que mágicamente repele ciertas criaturas sobrenaturales?


Lydia se había movido hacia el armario y tomado un pequeño frasco de ceniza de serbal. —No parece la gran cosa.


—No lo es, es lo que se pone en él lo que le da el verdadero poder —Deaton dice —Aunque me temo que a usted no le servirá.


Stiles lo mira. —¿Qué quieres decir? —demanda —Lo he visto funcionar. Deje encerrado a Jackson a treinta millas de distancia.


—En tus manos, puede ser una fuerza poderosa —Deaton concuerda —Lydia, en camibio, es un caso especial. Por la misma razón que la mordida de Peter y el veneno del Kanima no la afectaron, la ceniza de serbal no reaccionara ante ella. —Mira a Lydia —Tu, querida, eres inmune a la magia.


—¿Quieres decir que no tengo que cargar el tarro de tierra, después de todo? —pregunta Lydia, regresando el frasco a la estantería antes de sacudirse las manos con fastidio —es bueno saberlo. Vámonos, Stiles.


—Me gustaría hablar un momento con Stiles, si no te importa —Deaton dice.


Lydia lo mira como si estuviera girando los diales en un microscopio, antes de mirar a Stiles. — Estaré en el carro —dice —Tienes cinco minutos, o me iré sin ti.


Lydia se va con un glorioso andar de tacones y cabello rojo, y Stiles se gira curiosamente hacia Deaton.


—¿Qué pasa?


—Scott me dijo lo que paso —Deaton dice.


—En serio — Stiles dice con calma —Honestamente, me sorprende que no lo haya publicado en Facebook.


—Quería que mirara sus heridas —Deaton dice con ironía —No lo haría hasta que me dijera como las consiguió. No quería decirme.


Stiles se muerde el labio, sus manos se retuercen nerviosamente a sus costados. —Estaba bien, ¿verdad? —pregunta de forma desinteresada.


—Lo estaba.


—Así que, ¿Vas decirme que delate a Derek, también? — demanda Stiles —¿Tal vez que llame a Chris Argent y le diga “adelante”?


—Por supuesto que no —Deaton dice —Pienso que Derek necesita tu ayuda, y esta fue una forma indirecta de pedírtela.


Stiles se ríe —Sí, podrías llamarla indirecta —Stiles concuerda —Tiene mi número. Podría haberme mandado un mensaje.


—Stiles…—Deaton empieza.


—¿Guárdatelo, ok? —interrumpe, Stiles —Derek no necesita mi ayuda. Ninguno lo hace. Necesito alejarme de ese mundo. No pertenezco en él.


—Dices que no perteneces, pero no ese no es el problema —Deaton le dice —El problema es que perteneces a todos ellos—Scott, Derek, tu padre. Ha dejado tus lealtades divididas.


—Pero escogí a Scott, desde el inicio —protesta Stiles —He estado con él en cada paso del camino, y he perdido completamente la confianza de mi padre por eso…


—En acción, sí, te has aliado con Scott —Deaton confirma — pero tienes simpatía con la otra manada, los comprendes y a sus incentivos en una manera que Scott no puede. También aportas la perspectiva humana, más específicamente por quien es tu padre, el policía y la mentalidad criminal. Te preocupas por las consecuencias y repercusiones de las que todos ellos ni se imaginan.


Deaton saca una botella larga de cenizas de serbal de un gabinete y la pone en una bolsa de papel, antes de alcanzar una botella de acónito seco. —Necesitas entender tu lugar en todo esto, antes de que puedas ayudar a alguien —explica, volviéndose a mirarlo mientras cierra la bolsa doblándola.


—Estoy comenzando a pensar que no tengo uno —Stiles dice quedamente.


—Te considerabas parte de la manada de Scott, ¿no? —pregunta Deaton.


—Sí.


—¿Y ayudarías a Scott a sabotear los planes de Derek para que hiciera las cosas a su manera? — Deaton pregunta suavemente.


—Sí —Stiles concuerda con una mueca de dolor —pero en nuestra defensa, los planes de Derek tiendes a ser horribles, así que probablemente hubieran fallado sin que interferíamos.


—Aun así —Deaton continua —El punto es, mira todo lo que has logrado, y todo mientras han estado en desacuerdo. Imagina si todos ustedes pudieran trabajar juntos.


—No creo que mi imaginación es tan buena. —Stiles dice, seco.


—Ninguna manada va a alcanzar su potencial sola, así que vas a tener que encontrar una manera —Deaton dice firmemente —Tienes que reunirlos a todos, eres el único que puede.


Stiles se da la vuelta, cerrando los ojos por un momento mientras intenta controlar su frustración.

—¿Por qué tengo que ser yo? —demanda —Porque no soy especial. No soy uno de ellos, así que ¿Por qué todo esto debería depender de mí? ¿Cómo es eso justo?


—Nunca dije que fuera justo.


Stiles no dice nada, aunque una parte de él quiera gritar y enojarse ante lo injusto de todo. Quiere explicar que está tratando de salir, no adentrarse en más. Pero siempre ha sabido que no hay escapatoria. No para él.


—Si optas o no por hacerlo, sin embargo —Deaton dice gentilmente, dándole la bolsa con los suministros —depende de ti.

Chapter 11: Capítulo 11

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Stiles tarda seis minutos en ir al estacionamiento, se preocupa por un momento que va a tener que caminar hacia su casa. Lydia aún está esperándolo, pero lo fulmina con la mirada todo el tiempo que tarda en entrar al coche.

—¿Quieres decirme que fue todo eso? —demanda.

—Deaton quiere que comienza pláticas de paz o algo así—dice, y deja caer su cabeza en el tablero.

—Hey, fíjate — comenta Lydia. Golpeándole el brazo hasta que se acomodó en el asiento. — tu estúpido cráneo duro podría dañar algo.

—¿Qué hago? —se queja, Stiles.

—Podríamos dejar que Alison mate a Derek —Lydia dice dulcemente —Problema resuelto.

—Por mucho que me gustaría echarle toda la culpa de mis problemas a Derek, no puedo —Stiles dice, encorvándose en el asiento mientras y abraza el libro y la bolsa que le dio Deaton. Mira el reloj del radio —¿Podemos irnos? Tengo que regresar antes de que llegue papá.

Lydia asiente y sale del estacionamiento. —Vas a tener que decirle.

—Eso me han dicho —Stiles dice —¿Tienes una idea de cómo lo deba de hacer?

—Intenta esto: Papá has visto Crepúsculo, ¿Verdad? —Lydia dice, haciendo su voz grave. — Bueno, soy como Bella Swan, porque tu obviamente eres Charlie, y Derek Hale es Edward Cullen excepto que es un hombre lobo. Jacob realmente no entra en todo esto salvo porque también es un hombre lobo. Pero no te preocupes, ¡Nadie es un vampiro!

—¡No soy Bella Swan! —protesta Stiles, encorvándose más— Vaya manera de patear a un hombre caído.

—Lo siento —Lydia dice —Pero la comparación era demasiado real para evadirla. He querido decirte esto por meses.

—Te odio —Stiles le dice.

Lydia se ríe. —¿Quieres que te deje en donde dejaste tu intento de bicicleta?

—No tengo tiempo —Stiles dice —Si no le gano a mi padre seré hombre muerto.

—Tu padre no te mataría —Lydia lo consuela.

—Pero Melissa McCall lo hará

—Entendido —Lydia dice rápidamente, pisando el acelerador —Vamos a llevarte a casa.

La pierna de Stiles se mueve nerviosamente durante todo el camino. Ojea el libro que Deaton le dio de manera distraída, leyendo sobre los lugares preferidos para asesinar y rituales de apareamiento de los bunyips. Lydia lo deja hacer, probablemente porque le tiene pena debido al caos en el que se ha convertido su vida.

Pero el momento en el que se detienen enfrente de su casa, ella lo detiene por el brazo antes de que pueda salir. —No les debes nada —dice —Especialmente a Scott. Lo sabes, ¿Verdad?

—SÍ. Lo sé.

—Stiles, mírame —Lydia dice firmemente —No les debes nada.

—Lo sé —Stiles dice de nuevo.

—Ok —Lydia dice, dejando ir —Pero tienes que decirle a Derek que si intenta algo como eso otra vez no tendrá que preocuparse por los Argent. Lo matare yo misma.

—Esa puede ser una mejor amenaza —Stiles sonríe.

Lydia se inclina hacia él y le da un beso rápido en la mejilla. —Solo ten cuidado —dice —es diferente para nosotros.

—Porque somos humanos —Stiles suspira.

—No, porque somos más inteligentes que el resto de perdedores juntos—Lydia dice—Ahora sal de aquí antes de que te castiguen de por vida.

Stiles se ríe y baja del auto. Lydia parece volar cuando da vuelta en la esquina de la cuadra, desaparece de la calle antes de que su padre aparezca en la calle justo por la dirección opuesta. Se escabulle por detrás de la casa antes de que su padre pueda verlo.

Camina cuidadosamente alrededor de la casa escuchando atentamente a por el coche patrulla, y no nota a que alguien viene detrás de él hasta que lo agarran. Grita, pero cuando gira ve que es solo Melissa.

Bueno, tal vez solo Melissa no es la mejor manera de describirlo. Porque ella definitivamente no se ve feliz con él.

—Stiles, entra —sisea, mientras empieza a empujarlo hacia la puerta de atrás, lo conduce a las escaleras el momento en el que ella cierra la puerta detrás de ellos. —Tu padre llamo, estará aquí en cualquier momento. Le dije que estabas dormido.

—Está en la calle — Stiles le confirma —Pensé que vendría más tarde. Nunca regresa tan rápido de una llamada.

—Sí, no quiero oírlo. Arriba, —Melissa, dice —Cama. Ahora.

—¿Alguien te ha dicho que das miedo? —pregunta, Stiles.

—Scott, todo el tiempo. Ahora, Stiles.

—¡Voy! —Stiles grita, mientras sube los escalones.

—¡Pero hablaremos de esto más tarde! —Melissa le dice, manteniendo la voz suave cuando escucha la llave en la puerta.

Escucha la voz amortiguada de Melissa recibiendo a su padre mientras cierra la puerta de su habitación con suavidad detrás de él. Se quita la sudadera y la lanza hacia un lado deshaciéndose de sus zapatos también, finalmente colapsa en la cama y espera que esta sea la última vez que tiene que hacer algo como esto.

La puerta se abre un momento después, y su padre se está aclarando la garganta. Stiles se levanta un poco. —Hey— dice con recelo.

La expresión de su padre es dura mientras lo mira, y nada de ese consuelo que había estado ahí antes de irse parecía haber sobrevivido el viaje. —Necesito que bajes —dice simplemente, entonces se da la vuelta y se va.

El corazón de Stiles se detiene por un segundo, porque eso no promete nada bueno. Rápidamente sigue a su padre, preocupándose por un momento de que ha sido descubierto, pero Melissa ya no está y esta cien por ciento seguro de que su padre no la hubiera dejado ir así de fácil. —Así que…—Empieza a decir con renuencia, parándose junto a su padre en la cocina. —¿Qué pasa?

—Siéntate.

Stiles se deja caer en la silla. — Okay —dice quedamente — Estoy sentado.

Su padre se pasa un mano por la cara. — Eres tan independiente que a veces olvido que aun eres un niño —dice, antes de mirar hacia otro lado —Tu madre estaría decepcionada de mí.

—¿Papá? —pregunta de manera nerviosa.

—Ciudadanos preocupados con sus teléfonos inteligentes están cambiando la forma en que el mundo funciona. —dice, y desliza una foto por la mesa —Se parecen mucho a ti y a Derek Hale, ¿no lo crees?

Stiles contiene una mueca de dolor mientras agarra la foto. Es una foto un tanto pixeleada de él y Derek sentados en el restaurante de Arnold. Stiles se muerde el labio, pero su primera reacción aun es tratar de cubrir esto, y sabe que la foto no es muy buena como para identificar a Derek.

—Ese solo era un camionero — Stiles dice, mirando hacia arriba — Me ofreció dulces y yo le dije que no había nacido ayer.

La expresión de su padre no cambia cuando saca otra foto y la desliza hacia él —¿Quieres intentar eso de nuevo?

—Mierda—dice Stiles, Derek es inconfundible en la segunda foto, viéndose como un James Dean versión hombre lobo con sus lentes de sol y su sonrisilla.

—La policía local reconoció a Derek Hale por los carteles de Se Busca de la vez pasada —su padre dice —Me enviaron esto para preguntar si deberían de estar preocupados de que este quedando con un menor de edad golpeado.

—Papá…—Stiles empieza a decir.

—Y lo que encuentro, es que el niño eres tú. Golpeado y tres pueblos a distancia de donde deberías haber estado —su padre lo mira fijamente mientras habla, y Stiles trata, pero falla de sostenerle la mirada.

Piensa, solo dile. Dile: Sí, lo sé, pero hey, está bien, porque Derek es un hombre lobo. Abre la boca, pero nada sale.

—Necesito que me digas que está pasando, chico — John dice de forma cansada —Porque para mí parece una clase de cita.

Stiles se reiría ante la ridiculez de eso excepto que no está seguro de que tan lejos está de la verdad. Aún recuerda la sensación de los labios de Derek contra los suyos, sus dedos ardiendo contra su piel mientras lo acercaba más hacía él.

—¿Stiles? — dice su padre, con aspereza, y los ojos de Stiles lo vuelven a mirar —Esa no es exactamente la protesta que estaba esperando.

—No estoy saliendo con Derek —Stiles dice rápidamente.

—¿Entonces quieres explicarme qué es lo que está pasando? —pregunta —¿Qué rayos estabas haciendo en Arnold, sin tu medicina, y pasando el rato con Derek Hale?

—No sé cómo responder eso.

—Podrías intentar con la verdad —su padre dice.

—No es tan simple —contesta Stiles —Esto…nada de esto tendrá sentido sin contexto.

—Entonces dame el contexto, Stiles —grita — Porque si no empiezas a darme respuestas, voy a ir con él. Y no seré amable cuando lo haga.

—Me…uh, me metí en un lio, así que llamé a Derek y fue a recogerme.

—¿Qué clase de lío? —demanda —¿Y por llamarías a Derek? ¿Por qué no podías llamarme a mí?

—Derek no es quien tú crees que es — dice Stiles —Nunca le ha hecho daño a nadie. Al menos, nadie que no se lo mereciera.

John deja escapar una risa incrédula. —Eso no es tan tranquilizador como piensas.

—Lo sé —Stiles hace una mueca de dolor —Lo siento. No estoy haciendo bien todo esto, pero aún no sé cómo decirte. Tengo la sensación de cuando te diga nada será lo miso.

—Me estas asuntando —John dice — ¿Te ha hecho daño?

—No, estaba intentando protegerme, en su típica manera loca —Stiles dice, antes de descansar la cabeza en sus manos. —Esto sería más fácil si tuviera ayuda visual.

Su única advertencia antes de que su padre le garre el brazo es un extraño sonido de respiración. Entonces su padre está moviendo gentilmente su brazo por la mesa y empujando hacia atrás la manga. Su muñeca estaba marcada ligeramente con púrpura. Recuerda que Derek lo había agarrado en el restaurante, no había sido demasiado brusco, pero tenía la fuerza de un hombre lobo y la piel de Stiles es muy sensible.

—Papá —Stiles dice rápidamente —No es…

—No, ya he visto suficiente —John grita, dejándolo ir. Se levanta de la mesa y empieza a caminar hacia la puerta. Stiles nota de forma ansiosa que aun esta usando la pistola.

—Para, hablare — promete Stiles, casi tropezando con sus pies cuando brinca de su asiento para seguirlo. Su padre abre la puerta bruscamente, y Stiles apenas y sale cuando la puerta se cierra detrás de él —¡Por favor! ¡Solo mírame!

Su padre se detiene y da la media vuelta, su expresión no cambia mientras espera.

—Derek es un hombre lobo —dice abruptamente —Y Scott también. También Isaac, Erica, Boyd y Jackson, pero Jackson era más escamoso que peludo al principio por eso Scott y yo lo encerramos en la camioneta para prisioneros. —Stiles respira profundamente —¿ves? ¡Hay una respuesta razonable para todo!

Espera la reacción, siente alivio ahora que está afuera. Lo hizo. Su papá sabe.

Excepto que la única reacción que obtiene es otra mirada furiosa de su padre antes de que se gire y empiece a caminar hacia el auto.

—¿No me escuchaste? —Stiles demanda, antes de caminar delante de él y ponerse delante de la puerta del carro. —Sé que esa es la versión super resumida, pero si tan solo nos sentamos, te diré todo.

John coge a Stiles por los hombros, y gentil pero firmemente lo mueve del camino.

—Sabes, esa clase de explicaciones eran lindas cuando lo peor de lo que tenía que preocuparme era que te quedaras toda la noche jugando video juegos — dice de forma dura. —pero ¿realmente esperabas que funcionaría con algo como esto?

Stiles lo mira con incredulidad dándose cuenta de que su padre no le cree. Su padre cree que es como en los tiempos en que solía culpar a los gremlins de casa de su habitación desordenada. Sabía que su papá no lo aceptaría tan fácilmente, pero no había contado en que lo rechazaría antes de escucharlo. Por lo menos, había esperado preguntas preocupadas y un interrogatorio sobre si estaba consumiendo drogas.

Claramente es su culpa por ser un sabelotodo el 95% del tiempo.

John se sube al asiento del conductor y cierra la puerta de un golpe, antes de bajar la ventana y mirarlo directamente. —Vuelve a la casa —Dice, dando reversa y saliendo de la entrada lo suficientemente rápido que le habría puesto una multa a alguien por eso.

Stiles da unos pasos hacia él, pero ya se ha ido, en su camino hacia la casa Hale. Stiles saca su celular en pánico, y trata de llamar a Derek. Maldice cuando la llamada se va directamente a buzón. Derek es muchas cosas, pero no ignora llamadas y siempre recuerdo cárgalo. No como Scott, quería asegurarse de que su manada pueda localizarlo.

 

Como si las cosas no estuvieran mal ya, ahora tiene que preocuparse de esto también. Intenta con Boyd y responde al segundo timbre.

—¿Sí? —Contesta.

—¡Boyd! Gracias a Dios —Stiles dice —Tengo que hablar con Derek.

—No sé dónde está — dice Boyd después de un momento — Tal vez intenta su teléfono.

—Lo hice —Stiles dice — ¿Y a qué quieres decir con que no sabes dónde está? Siempre sabes dónde está. ¿Ese no es un loco efecto secundario de la manada?

—Quería estar solo, después de lo que paso —Boyd le dice — Ninguno de nosotros lo ha visto desde la noche que regresamos. Pensé que si hablaba con alguien sería contigo.

Stiles traga duro — Sabrías si está en problemas, ¿verdad?

—No es que tengamos un sistema de altera incorporado —Boyd dice secamente — Derek…talvez lo tiene, cuando se trata de nosotros, pero no funciona también al revés. Stiles, ¿Qué pasa?

Stiles se detiene antes de hablar sin pensar de lo que paso. No necesita a su padre enfrentándose a toda una manada de hombres lobo en vez de solo uno. Uno ya es lo suficientemente malo, y Derek puede cuidarse solo. 

Por lo que Derek está totalmente bien en algún lugar, taciturno como siempre. Lo más probables es que perdiera el teléfono, o su cargador.

—Nada — Stiles dice — No es nada.

Cuelga antes de que Boyd pueda decir que está mintiendo y corre a su habitación. Se vuelve a poner los tenis y coge la sudadera, antes de caminar hacia la puerta. Se detiene antes de irse, mirando hacia donde dejos las cosas que le dio Deaton. Después de todo no le gusta la idea de usar ceniza de serbal o acónito en contra de Derek, pero lo coge de todas formas. Sabe que hará cualquier tipo de cosas que no realmente no quiere con tal de mantener a su padre a salvo.

Stiles sube al Jeep y hace el asiento hacia atrás, inclinándose hacia delante para rasgar algunas de las entrañas de su preciosa Jeep. 

—Lo siento mucho —le susurra ansiosamente, mientras trata de recordar las inst6rucciones de Lydia. Los carros nuevos son más difíciles de hacerles un puente, pero por suerte su Jeep es más viejo que él. —Te arreglare, lo prometo. O, ya sebes, le pagare a alguien para que lo haga. 

Consigue que el Jeep encienda en diez minutos, y no pierde más tiempo después de eso. Su padre ya le lleva ventaja de quince minutos.

Y eso significa que ya llego.

Chapter 12: Capítulo 12

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Sus tenis se hunden en la tierra cuando sale del Jeep. Stiles encuentra su balance agarrándose de la puerta del carro, y frunce el ceño hacia la tierra mojada bajo sus pies. No ha llovido en un mes y la finca Hale no está exactamente equipada con aspersores. El nudo en su estómago se retuerce volviéndose más apretado cuando se da cuenta de que algo debe de estar mal.

Hay un rayo de luz por el rabillo de su ojo, y ve el coche patrulla de su padre estacionada cerca de la casa. La puerta de la patrulla aún está abierta y las luces están encendidas, aunque apago la sirena. Stiles cierra la puerta del Jeep con gentileza y camina hacia la casa, con cuidado de no resbalar por el suelo mojado.

A penas y puede ver la puerta de entrada de Derek en la oscuridad, y es ahí cuando nota de donde viene el agua. Está saliendo debajo de la puerta, bajando por los escalones como una cascada casera. No sabe cuánto tiempo a estado así, pero ha sido el suficiente para que se haya esparcido por los cimientos y haya creado una especie de fosa.

—¿Papá? —llama — ¿Derek? — No hay respuesta, pero ve luz en las ventanas desde adentro, así que debe haber alguien ahí.  Avanza y abre la puerta.

El agua sale de la casa, empapándolo hasta las rodillas antes de que se propague y sea absorbida por el suelo. —¿Papá?

No sabe cuándo el agua se ha vuelto ominosa. Años antes, lo peor que podría pensar de esto es que es una falla en la plomería, o un día de lavandería que resulto mal.

Nada es tan simple ya, todo lo que puede pensar es: a los Bunyips les gusta el agua.

Recuerda haber leído que tienen el talento de crear pantanos de tierra seca e infértil. Stiles se maldice por no haber traído el libro de Deaton, mientras sube los últimos escalones.

Hay solo una delgada capa de agua en el suelo del lugar cuando entra a la casa. Está saliendo por la madera podrida de los paneles del suelo, no es lo suficientemente largo para llegar demasiado lejos. Aun así, puede escuchar agua corriendo de algún lado, no está seguro de cuánto tiempo tiene.

Esta oscuro adentro, aunque aún hay rayos de sol pasando por los árboles. No lo ayuda mucho, por la forma en que las delgadas líneas pasan por los orificios del techo solo le hacen más difícil distinguir cada cosa. 

Camina hacia la única escalera en pie de la casa, y el agua gotea perezosamente escalón por escalón. Busca a tientas su teléfono para activar la linterna, pero antes de que pueda dar otro paso alguien lo coge del brazo por atrás. Se queda quieto mientras trata de pensar en cómo zafarse, pero se detiene cuando ve la mano que rodea su cintura.

—Papá, ¡Gracias a Dios! —grita, mientras trata de que lo suelte —Tenemos que irnos de aquí, hace como cinco minutos.

—No podría estar más de acuerdo —su padre gruñe.

Stiles traga duro. —Claro, bien — dice — ¿Quieres aflojar el agarre? ¿tal vez? ¿Papá?

Su padre ha estado arrastrándolos lentamente hacia la puerta, y antes de que se dé cuenta que su padre lo esta sujetando del brazo ya están saliendo de la casa.

—¿Viste algo? —Stiles pregunta —Creo que sé lo que es. Derek puede estar en problemas, pero debes de traer a todos aquí primero. Llamare a los demás, ¿okay?

Stiles apenas y saca su celular cuando su padre ya se lo está arrebatando. — Maldita sea, —su padre murmulla. —Esto es lo que va a pasar, Stiles. Vas a esperar aquí, en el carro. Voy a encontrar a Derek y aclarar unas cosas. Entonces vamos a ir a casa, donde estarás castigado de por vida.  

—¿Qué? —Stiles protesta —No, espera, papá, no puedes volver ahí. ¿No piensas que todo esto es extraño? Ni siquiera está lloviendo, pero esta empapado aquí y …

Stiles es empujado sin ninguna gracia hacia la parte trasera de la patrulla de su padre antes de que pueda terminar de hablar. Abre la boca para protestar de nuevo y su padre levanta una mano.

—Basta, Stiles —dice — No te muevas de este carro, ¿entiendes?

—Solo llévame a casa —intenta Stiles, levantando una mano para agarrar la manga de su padre — ¿okay? Podemos hablar, lo prometo. Solo dame mi celular y…

La expresión de su padre se rompe a la mención del celular, como si pensara que Stiles está engañándolo para que le devuelva el teléfono. Stiles traga duro, pero no puede culpar a su padre por pensar mal de él. Stiles es bueno en esto, después de todo, y es él el que ha estado condicionando a su padre durante años para pasar por alto la verdad.

—Tienen que saber que hay algo mal aquí, papá —Stiles intenta — Por favor. Necesito que me creas.

—Sí, es extraño. Estoy seguro que el medidor de agua se rompió detrás de la casa. Es improbable que Derek siga por aquí, pero si aún está por aquí lo voy a encontrar, no tienes de que preocuparte. Y tú te vas a quedar en el carro.

—¡Papá! —intenta de nuevo. — No entiendes, ok, solo…

—Quieto — Su padre demanda de nuevo, y entonces cierra la puerta.

Stiles grita por el portazo y tira de la manija, pero ya se cerró automáticamente. Trata con la otra por si acaso y después golpea la rejilla que hay separando los asiento de atrás en frustración. Apenas y distingue a la figura de su padre mientras desaparece en la casa, porque se está poniendo más oscuro por momentos y hay algo anormal en eso.

Stiles cierra los ojos y respira profundamente. Hay una forma de salir de esto, porque siempre la hay. No tiene teléfono, ni armas y su padre está caminando hacia quien sabe qué.

Se puede controlar, totalmente. Está bien.

Escucha un extraño crujido y el carro se empieza a ladear, lo cual es injusto—ha atraído la mala suerte sin haberlo dicho en voz alta. Stiles se coge de la puerta, sosteniéndose con una mano en la manija y la otra presionando contra la ventana trasera. Mira por la venta de ambos lados, pero no puede ver anda.

El carro hace otro crujido y se mueve de nuevo. Stiles frunce el ceño hacia el frente y puede ver que la nariz del carro no se ha levantado.

Lo que significa que la parte trasera se está hundiendo en el lodo.

—Esto no está bien —murmulla. Los sumideros no son extraños de ver en la costa de California, pero cuando ejecuta las estadísticas en su cabeza el resultado al que llega es improbable. —¡Papá!

Trata con la manija de nuevo mientras grita, pero sabe que no va a suceder nada. Hay otro moviendo brusco y el carro esta empezado a ladearse de verdad. Tiene que empujarse contra el asiento trasero para mantenerse derecho.

Trata de pensar en lo que tiene: Algo de ceniza de serbal, algo de acónito, y lo que trae puesto. Necesita algo más que eso, él no es ningún MacGyver.

Toma otra respiración profunda y se sostiene de la puerta de nuevo. Trata de ejercer la mayor fuerza en sus piernas y hacer palanca, para poder patear el vidrio de la ventana. Está a punto de hacerlo cuando algo lo hace detenerse. Ignora otro espontaneo movimiento y gatea hacia la ventana de al lado.

Es una huella, una mano con tres dedos.

Viendo el lado bueno su padre está a salvo a dentro. En lado malo, es porque el Bunyip está afuera con él.

¿Qué es lo que había dicho Deaton? Usualmente viajan en pares, pero no solo pares, Stiles se da cuenta, recordando el pasaje que leyó cuando Lydia lo llevaba a casa. Compañeros. Los Bunyips se aparean de por vida y se quedan justos para siempre.

Derek solo había matado a uno de ellos.

El coche se sacude violentamente y la cabeza de Stiles choca contra la rejilla metálica. Muy apenas y se levanta, pero no puede distinguir nada. Cuando su vista se despeja, se da cuenta que la ventana trasera es de color negro. Medio enterrada en el barro. Se endereza lentamente, pero es difícil mantener el equilibrio. La patrulla de su padre debe de estar casi en vertical.

Stiles se recarga en la ventana lateral, y puede ver el barro afuera, pero no está cubierta aún.

Sabe que ya no tiene opciones. Probablemente se arrepienta de esto, pero su orgullo no es tan grande como para dejarse ser sepultado vivió para evitar humillaciones. Así que arrastra aire a sus pulmones y grita el nombre de Derek.

—¡Derek! — Stiles grita de nuevo — Sé que estás ahí afuera ¿ok? Y sé que puedes oírme porque tienes ese estúpido oído de hombre lobo. Necesito ayuda, ¿ok? Y dijiste que, si estaba en la manada, siempre estarías ahí para ayudarme. Consideremos esto una prueba.

Stiles apenas y termina su propuesta y la ventanilla se deshace. Cierra sus ojos y usa sus brazos para cubrir su rostro, pero se acabó en un segundo. Suelta una risa que es mitad aliviada y meditad histérica cuando ve a Derek mirándolo en lugar de un baboso Bunyip.

—Realmente no pensé que eso funcionara — Stiles dice en asombro.

—Stiles — gruñe Derek, antes de extender una mano. Stiles se empuja hacia adelante y lo agarra, y Derek utiliza el agarre para arrastrarlo fuera del auto. Cae encima de Derek justo cuando el coche cruje y se entierra hasta las luces delanteras.                                                                                                                                                                          

Stiles empieza a levantarse y se detiene cuando ve el rostro de Derek se tensa de dolor. Examina al hombre rápidamente, sus ojos centrándose en una mancha oscura atravesando la playera blanca.

—¿Qué paso? —demanda, mientras empuja la chaqueta de Derek. Reprime un jadeo cuando ve el daño.

—No te preocupes por eso— Derek dice. Se levanta hasta quedar de pie, arrastrando a Stiles descuidadamente consigo.

—Tienes un agujero en el estómago —protesta Stiles.

—Te dije que no te preocuparas por eso — Derek gruñe.

—¿Qué no me preocupe? ¡Puedo ver tus costillas! —grita de vuelta.

—Estoy bien, tengo esto bajo control —Derek lo fulmina con la mirada —Necesitas subirte al Jeep e irte a casa.

—Mi papá sigue ahí, no voy a ir a ningún lado—dice Stiles. Se aleja lentamente de Derek. No le gusta como se ve esa herida, pero un problema a la vez. Sabe que Derek ha salido de peores.

—No sacare, Stiles — Derek insiste.

Stiles bufa. —Apenas te mantienes en pie, —dice—Voy a ir por él, y entonces tú me vas a ayudar a decirle la verdad mientras te llevamos con Deaton, porque no te vez nada bien. En serio. Creo que te estas poniendo más pálido y ¡Oh por Dios! ¿Está detrás de mi verdad? El Bunyip está totalmente detrás de mí.

Stiles se congela, inmóvil ante la rara ansiedad en el rostro de Derek.

—Peor — dice Derek, con voz ronca — tu padre.

Stiles traga duro, no está seguro de que significa que hubiera preferido al Bunyip. Ese era territorio que conocía, eso era algo que podía pelear. Se da la vuelta lentamente para ver a su padre con el arma en mano, sus ojos fieros y determinados.

La pistola está perfectamente apuntada para pasar a Stiles e impactar a Derek. Derek con sus ojos aun rojos, y uñas un poco más largas por haberlo sacado del carro. Puede ver a su padre observar todas las piezas para después unirlas todas y obtener la imagen equivocada. Derek siento algo no muy humano, patrulla casi enterrada en el barro, Stiles justo en el medio.

—Stiles, ven a mí —John dice, y su voz es estable y calmada. Su padre siempre se mantiene calmado en situaciones así. Una vez vio a su padre convencer a una persona de no suicidarse, como si nada, como si estuvieran teniendo una discusión mientras comían.

Sus amigos probablemente se reirían, pero Stiles sabe que heredo esa calma. Mientras más fuera de control estén las cosas, lo más calmado que se siente. Es como si todo lo demás se ralentizará, como si lo estuviera viendo todo por una pantalla.

Así que Stiles está observando todas las piezas también; su padre, con el arma, Derek, con sus garras…y el bunyip está escalando desde el suelo. Estará entre ellos en segundos. Saca la botella de ceniza de serbal de su bolsillo, girando la tapa y dando un paso al frente. Derek ya vio al Bunyip por su puesto, y trata de alcanzarlo para detenerlo, pero su padre ni si quiera sabe lo que es un bunyip, y todo lo que él ve es Derek tratando de detenerlo.

—Papá—empieza, cuando ve a su padre tensando la mano con la que sostiene el arma —Esta bien. Solo necesito que no te muevas ¿ok? No…

El bunyip se levanta en sus patas traseras, liberándose del lodo. Había estado debajo de él, llevándose el carro a su guarida. Puede ver a su padre tomando aire mientras mueve el arma de Derek al bunyip, pero es demasiado inteligente para empezar a disparar ciegamente.

—Hola, Boba Fett —Stiles dice quedamente, soltándose del agarre de Derek para acercarse.

—Stiles, detente —su padre dice —No des ni un paso más.

Es difícil ignorar a su padre cuando usa ese tono, pero lo hace. Ignora el gruñido de Derek, también, porque Derek ataco al bunyip por sorpresa y no estaba herido la última vez. No tiene ninguna oportunidad de ganar, y el arma de su padre bien puede ser como una resortera para la fuerza del bunyip.

De primero el bunyip no le presta atención a su padre, y es toda la confirmación que Stiles necesita para saber que esa cosa esta ahí por venganza. Probablemente los siguió por el aroma, pero no sabe quién mató a su compañero. Pero entonces su padre se mueve, lentamente tratando de alcanzar a Stiles, y capta la atención del bunyip.

Sabe que ya no tiene tiempo, y deja que la ceniza de serbal se escape en el aire. Flota enfrente de él sin siquiera tocar el piso, yendo en una ola a atrapar al bunyip envolviéndolo como una red. Stiles tiene una mano suspendida en el aire, dirigiéndola como un maestro de orquesta, y el bunyip está gritando antes de que se dé cuenta de lo que ha hecho.

La ceniza de serbal se ha cerrado alrededor del bunyip, envolviéndose como una pitón antes de explotar y enviando a la creatura volando a seis metros.

Aterriza como un bulto de piel negra y que se retuerce, y Stiles se siente enfermo cuando el olor a piel quemada los alcanza. —Oh Dios — murmura, y da un paso hacia delate sin pensarlo. Su padre se apresura agarrándolo y forzándolo a mantenerse a tras de él.

—¿Qué demonios es esa cosa? —John demanda, viendo con cautela a Derek.

Derek camina hacia la creatura, agachándose a un lado con el ceño fruncido. Voltea a ver a Stiles por un momento para después volver a mirar hacia aquello. —Es un bunyip. —dice simplemente. Mirándolos de forma directa —Todavía está vivo.

—No quería hacer eso —dice Stiles, tratando de pasar por delante de su padre. Su padre le coge del brazo con un agarre de hierro antes de que se pueda acercar. —Solo iba a atraparlo, no quería…

No entiende que es lo que pudo haber pasado, al principio. Excepto que aún recuerda como Derek atravesó su barrera, y la manera en la que lanzo a Jackson sin ningún rasguño…su estado mental, se da cuenta. El poder de la ceniza, el efecto que tiene, todo está basado en el estado de su mente. Es controlada por la intención.

Y cuando la creatura se movió hacia su padre, había estado desesperado y aterrorizado. Casi había rasgado al bunyip en pedazos sin si quiera quererlo.

La creatura deja salir un gemido horrible y agonizante, sus extraños ojos de venado parpadeando hacia ellos en confusión.

—Papá…—susurra, su voz rompiéndose mientras mira a su padre. Ha pasado mucho tiempo desde que esperaba que su padre apareciera y mejorara las cosas. Ha pasado mucho tiempo desde que pensó que lo necesitaba, pero lo necesita ahora.

John suelta el brazo de Stiles y camina hacia el bunyip. Entonces levanta el arma y dispara, poniéndolo fuera de su miseria con un limpio disparo a la cabeza.

Chapter 13: Chapter 13

Notes:

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Chapter Text

Stiles deja escapar un suspiro tembloroso cuando el bunyip finalmente se queda quieto, la bala de su padre enterrada justo entre sus ojos. Stiles sabe que no había otra opción, pero no es tan satisfactorio como se sentía antes el ser el vencedor. Sabe que no ha habido ganadores en un tiempo.

Casi desea que el bunyip se desmorone en cenizas y desaparezca, pero solo descansa ahí, ensangrentado y ennegrecido. Se ve como una foca encallada, excepto por la extraña cara de perro.

El agua estancada alrededor de la casa está siendo absorbida por el suelo, como si estuviera siendo chupada al lugar por donde vino. El lodo empieza a quebrarse en finos patrones de telaraña mientras se seca extrañamente rápido.

Quita sus ojos de la destrucción cuando ve a Derek levantándose por el rabillo de sus ojos. Empieza a acercarse y su padre rápidamente se mueve alrededor del bunyip, poniéndose firmemente entre Stiles y Derek.

—¿Hombres lobo, huh? — pregunta con cautela, observando a Derek cuidadosamente y buscando por alguna señal de lo que vio antes. Los ojos de Derek se acararon, sus garras se retrajeron, ahora solo se ve pálido y mojado, y demasiado débil para ser una amenaza. —¿Esa era la verdad?

—Stiles —responde, aun cuando es Derek quien su padre está mirando mal. — Sé que debí decirte, Dios, hace mucho tiempo…pero no es exactamente fácil traer el tema a una conversación. Quiero decir, ¡Intente hacerlo! Lo juro que lo intente. Como, Hey, cuando estábamos viendo Teen Wolf y te dije que Scott me recordaba a Michael J. Fox. Si hubiera dicho, “seh, se parecen”, podría haberte dicho “no sabes cuánto, pero dijiste que no podías verlo, así que…

—Stiles —su padre le interrumpe.

—Claro, no necesitamos hablar de esto ahora —Stiles dice — Primero lo primero. Necesitamos llevar a Derek con Deaton.

John mira incrédulamente a Stiles — ¿Quieres llevar a tu novio al veterinario?

—¿Qué? — Stiles pregunta, su quijada cayéndose al suelo — ¿Qué, no, aun sigues con eso?  Era novio ilegal y hombres lobo, ¡nunca ambos!

John afila la mirada, pero se gira hacia Derek —¿Estas herido?

—El bunyip me ataco con la guardia baja — Derek dice de manera renuente — Me desmaye en el bosque detrás de la casa. Solo me levante cuando escuche a Stiles llamándome.

—Muéstrale — Stiles dice, agitando su mano imperiosamente hacia la camiseta de Derek. No tenían tiempo que perder hablando de todos los detalles de la noche, sabía que tiene que vendar a Derek ya.

—Se ve peor de lo que es —Derek le advierte, mientras remueve su camiseta a un lado con cuidado. El Sheriff finalmente guarda su arma cuando ve las heridas. Una de costilla está totalmente visible y una está quebrada consiguiendo casi perforar la piel. Aunque Derek puede probablemente curarse de esto por sí solo, si no ponen todo de nuevo en su lugar no sanara como es debido.

—Stiles, súbelo al Jeep— John dice, poniéndose en modo policía de nuevo. Stiles solo esta aliviado de que Derek vuelve a ser una “victima” para su padre, al menos por ahora.

Da un paso adelante y cuidadosamente se mueve hacia el lado sin heridas de Derek, poniendo el brazo alrededor de sus hombros para ayudarlo a subir al Jeep. —¿Quieres que llame a alguien de tu manada? — Stiles pregunta de forma queda, esperando no llamar la atención de su padre.

Los ojos de Derek siguen todos los movimientos de John. —Creo que eso solo complicaría las cosas —dice — Está manejando las cosas mejor de lo que pensé.

—Eso es probablemente porque el bunyip llego a ti antes —Stiles admite.

—¿Stiles, qué rayos? — John les grita —¿Le hiciste un puente al carro? ¿Cómo demonios sabes…? No importa, solo sube atrás, los dos.

—Tal vez puedas solo dejarme con Deaton, —Derek dice con cautela.

—No vas a salir de esta tan fácil —Stiles insiste — tú me metiste en este lio, tú me vas a ayudar a explicarle. Me debes eso al menos.

Stiles mete a Derek en el asiente trasero y después corre hacia el otro lado, subiéndose detrás de su padre. —Necesito mi teléfono — le dice — Le diré a Deaton que nos vea en la oficina.

Su padre le lanza el celular si una palabra, y después usa los cables sueltos para encender el auto. Stiles sabiamente no comenta como su padre fácilmente retomo los cables donde los dejos.

Stiles marca al número de Derek mientras observa nerviosamente dejarse caer en el asiento. — ¡Deaton! — dice tan pronto como contesta la llamada — Derek está herido, realmente mal. De manera-compañero-bunyip-enojado-buscando-venganza. Te necesitamos… ¿Qué? Sí, vamos para allá. Nos vemos. 

Cuelga la llamada, y mira a los ojos de su padre por el espejo retrovisor. —Ya está ahí. Dice que estará preparado para nosotros.

Stiles probablemente debería de estar más preocupado de las repercusiones de la introducción dramática de lo sobrenatural a su padre, pero Derek se estaba volviendo de un color alarmantemente blanco y la sangre comenzaba a atravesar su camisa. La organización en triaje1 dice que es más importante que Derek no se desangre que la preocupación de su padre nueva perspectiva de la vida.

—Derek, ¿Qué hago? — pregunta Stiles — Solo…que puedo…

—Estaré bien — dice Derek, ojos cerrados con fuerza — se necesita más para matarme.

Stiles sabe que eso es cierto, pero no puede detener la sensación de ansiedad y malestar en su estómago. Ni siquiera mira a su padre cuando se detienen en frente de la veterinaria, solo corre al otro lado del Jeep y ayuda a Derek a bajar.

Deaton está en la puerta, y se apresura para quedar al otro lado de Derek. Lo llevan adentro acostándolo en la mesa, pero Derek se está desmayando. Lloriquea algo inentendible y cierra sus ojos, quedándose quieto en la tabla. Sabe que va a empeorar antes de mejorar.

—Stiles, necesito que lo sostengas — Deaton dice, mientras se pone un par de guantes quirúrgicos.

Stiles asiente con la cabeza, moviéndose hacia donde está la cabeza de Derek. Coloca sus manos en los hombros de Derek, mientras que esté sujeta las orillas de la mesa. —Hazlo —dice Derek.

Deaton no vacila. Lleva las manos directamente a la herida, y presiona las costillas de Derek en su lugar. Derek grita y arque la espalda, pero no lucha contra el agarre de Stiles. Stiles sabe que no podría haber hecho nada de no haber sido así.

—Solo respira, —Stiles le dice —Concéntrate en tu respiración. Inhala y exhala

Sabe que no es como tener un ataque de pánico, pero sabe lo que es tener tu propio cuerpo fuera de control. Derek asiente con la cabeza, ahogando un jadeo.

—Solo un poco más — Deaton promete, mientras trabaja en ajustar la costilla. Esta vez Derek grita, pero se detiene antes de que empiece, y finalmente se desmaya. Stiles cierra los ojos, agradecido de que este inconsciente mientras Deaton termine.

—Va a estar bien — le asegura Deaton —Solo necesita descansar. En unos días estará como nuevo.

Stiles sacude la cabeza, queriendo creer eso. Toma un profundo respiro, y es cuando nota a su padre viéndolo. Está parado en la entrada con las manos colgantes a los lados como si no supiera que más hacer con ellos, y lo está mirando como si fuera un completo extraño.

Stiles se da cuenta de que ha sido tan estúpido, tan insanamente ingenuo, de pensar que esto resolvería lo que estaba mal entre los dos. La relación con su padre estaba fallando antes de que Scott fuera mordido en el bosque, no entiende como pensó que la verdad podría hacer algo más que empeorarlo todo.

—Papá — empieza a hablar Stiles, moviéndose alrededor de la mesa hacia su padre. Su padre

—Has hecho esto antes — John dice rígido.

Stiles ha pasado por mucho desde la primera vez que estuvo en esta oficina con Derek, sosteniendo una sierra para huesos y tratando de no vomitar. Probablemente se ve como todo un profesional ahora, y después de esconder esta parte de sí mismo de su padre por mucho tiempo, debe de ser un shock. Stiles solía ser un bobo. Solía ir por ahí dando información de cultura popular y tropezar con sus propios pies, y aun lo hace, pero ya no es natural. Tiene que esforzarse para ser esa persona estos días, porque se ha estado convirtiendo en alguien más.

—¿Hace cuánto? —su padre demanda —¿Cuantas veces…?

—Papá — dice Stiles, desesperadamente tratando de desaparecer esa expresión de los ojos de su padre.

—La última vez que te vi solo eres mi atolondrado, demasiado inteligente pequeño, y el peor problema en el que te metías era ser atrapado merodeando en el bosque después del toque de queda.

Stiles traga duro, se pregunta si su padre de alguna forma ha unido los puntos y se ha dado cuenta de cuando cambio todo.

—Eso fue hace casi un año —dice, y su padre retrocede antes de mirar hacia otro lado.

—Es como si ya no te conociera. — John dice pesadamente.

Stiles quiere preguntar, “bueno, ¿y de quién es la culpa?” pero se lo guarda para sí mismo. Ha estado poniendo un show para su padre, y si su padre se lo ha creído todo, no tiene a nadie más que culpar que ha sí mismo.

—Todavía soy yo, —Stiles dice, porque lo es. Todavía está aquí. Solo ha estado enterrado, con cada cadáver que ha visto ser enterrado.

La expresión de su padre se vuelve de piedra, y asiente con la cabeza como si hubiera llegado a una decisión. —Esto se termina ahora, —dice — ¿Me oyes, Stiles? No te quiero cerca de ninguno de ellos.

Stiles oye las palabras, pero no las entiende. —¿Qué?

—No puedo dejar que esto pase de nuevo. No te arriesgaras de esa manera.

—No pedí estar envuelto en esto —Stiles dice — En serio que no, pero pasó, y no sales de ello. Estoy en peligro. Tu estas en peligro. Todos estamos en peligro. En el momento en que te das cuenta de lo que hay haya afuera, el mundo se vuelve cien veces más peligroso, pero no puedes solo ignorarlo

—Lo harás

Stiles aprieta la mandíbula. —Pensé que tal vez podríamos trabajar juntos, pero si no quieres, está bien. Volveré a trabajar a escondidas de ti.

—Perdí a tu madre —John gruñe — ¡No me arriesgare a perderte a ti también!

—Entonces hagamos un trato — Stiles dice, mirando a su padre de manera desafiante —Dejare de arriesgar mi vida si tu dejas de arriesgar la tuya, porque yo también la perdí. Y ahora tengo que ver cómo te vas al trabajo y preguntarme, cada día, si este es el día en el que te pierdo también.

—Stiles… — John dice, y suena adolorido. La primera reacción de Stiles es retractarse, arreglarlo todo, pero sabe que esta pelea a tardado en llegar y las palabras siguen arrastrándose hasta salir de su garganta.

— ¡He cuidado de mí mismo desde que murió! — Grita — Y me ha ido bien.

—No desde donde lo veo —dice John —Soy tu padre, así que me vas a escuchar te guste o no. No vas a involucrarte en esto, y te vas a mantener alejado de Derek Hale y el resto. Trabajaremos en algo con Scott, pero el resto de ellos está fuera de los límites. ¿Entendiste?

—No

Su padre se queda muy quieto, se ve como si lo hubieran abofeteado. Stiles aspira en pánico. Trata de pensar pero no puede recordar ningún momento en el que le haya ducho que no a su padre. Su modus operandi siempre ha sido siempre estar de acuerdo con todo, y encontrar una brecha después, nunca resistirse abiertamente.

Pero tal vez eso ha sido parte del problema todo este tiempo, y tal vez solo ha empeorado las cosas por jugar este pequeño juego que tienen entre ellos. Este mundo imaginario en donde dodo está bien y no importa que su madre este muerta, donde solo tiene un amigo verdadero y no importa que lo acaba de perder, donde su padre desaparecer durante días en el trabajo, y no importa

—Stiles — el Sheriff dice nuevamente, pero esta vez suena más lastimero. Le toma un momento a Stiles para entender que es lo que ha causado el cambio de tono.

En algún momento mientras hablaba sus ojos se llenaron de lágrimas, y obviamente ha afectado a su padre de una forma que sus palabras no lograron. La última vez que lloro en frente de él, tenía diez años y su madre acababa de morir con su mano aun entre las de ella.

—No puedes tener ambas —Stiles dice, y se le quiebra la voz —Te amo, pero no puedes dejarme solo este tiempo, hacer que aprenda a cuidar de mí mismo, luego regresar y tratar de cambiarme. Porque, ¿adivina qué? Llegas tarde, y esto es lo que soy. ¡Así es como me enseñaste a ser! Así que no me voy a dar por vencido, no voy a parar. No por nada. Ni siquiera por ti.

—Nunca te deje solo —protesta John. — He estado aquí todo el tiempo, eres tan malditamente autosuficiente que nunca has necesitado mi ayuda.

— ¡Por supuesto que necesitaba tu ayuda! — Stiles llora —Y entiendo, okay, sé que habrías hecho cualquier cosa por mí. Sé que podría haber perdido tu ayuda. Pero estabas tan triste y no quería añadir más solo porque había brabucones en la escuela, o porque estaba enfermo. Eran cosas estúpidas, podía con ellas. Y entonces, de repente las cosas que no podía decirte ya no eran tan estúpidas, pero aun no podía decírtelo porque podía lastimarte, incluso podía matarte, ¿y qué se supone que debía hacer entonces?

—Hago este trabajo por ti —John dice — para mantenerte a salvo. Para mantener a esta ciudad a salvo.

— ¿Y por qué crees que yo hago esto? —Stiles pregunta de quedamente.

—No es lo mismo —John grita — Ni si quiera tienes diecisiete

—He madura mucho. No soy el mismo…tal vez tenías razón, en decir que ya no me reconoces, porque a veces, yo no lo hago tampoco. Pero no soy como cualquier otro chico de dieciséis años, papá. He visto cosas que ni siquiera…—Stiles se detiene. Sabe que, si dice demasiado sobre las cosas que ha visto, solo emporara las cosas. Quiere explicar que ha sido arrastrado al sótano de los Argent y apaleado por su anciano cabecilla, mientras sus amigos estaban siendo torturados justo a un lado de él, así que no había mucho que no supiera manejar.

Pero incluso Stiles no puede encontrar una forma de que esa historia se vuelva positiva.

—Tienes razón —John dice, y Stiles lo mira con sorpresa —Sé que tienes razón. Eres…eres el mejor chico que conozco, y ese es el por qué nunca me preocupo el dejarte solo. Solo necesito que estés a salvo.

Stiles entiendes eso, lo hace. Él es como su padre, después de todo. Se preocupa constantemente, pasa los menús de comida rápida por la trituradora cada vez que los encuentra, y cambia todo el tocino por tempeh2, así que no es como si su sobreprotección sea desconocida. Pero el tipo de sobreprotección de su padre es más relajada que la de Stiles, sin duda, de enfoque maniático.

—No estamos en Kansas, hijo, lo entiendo. Estoy haciendo todo lo posible por hacerlo —Se pasa una mano por la cara, haciendo una mueca y no viendo a Stiles a los ojos — así que, nuevo plan, ¿ok? Hacemos esto juntos ¿vale? Porque me rehusó a creer que estoy demasiado tarde.

El Sheriff3 lo mira de esa manera que tiene de usar su kryptonita parental. Es la mirada que su padre solía darle cuanto tenía un ataque de pánico, y le decía que respirara. Nunca ha sido capaz de decirle que no a esa mirada, lo alejaba del pánico cada vez.

—¿Dices que no te darás por vencido? ¿De dónde crees que sacaste eso? —John pregunta. —Los Stilinski no renuncian, y nunca voy a renunciar a ti, tampoco. Hare todo para mantenerte a salvo. Las reglas han cambiado, así que me tengo que acostumbrar…porque mi plan de respaldo es empacar todo y sacarnos de este infernal pueblo olvidado de Dios.

—Amas a este pueblo — Stiles susurra.

—Te amo más, — dice, y entonces lo abraza. Stiles se adhiere a él mientras contiene un lloriqueo. —Pero no pienses que te salvas de estar castigado, porque no lo estas. Probablemente nunca lo estés.

[…]

Stiles está recargado en el hombro de su padre, medio dormido, en las sillas de plástico baratas en la sala de espera de Deaton cuando Derek por fin se levanta en su usual forma de hacerlo.

Stiles se levanta como resorte casi lanzándolos a él y a su padre al suelo antes de que recobre el balance y camine hacia la mesa.

—Hey, hey, está bien, —dice rápidamente, y los ojos de Derek se despejan una vez que se detienen en los suyos.

Derek le da una mirada a su pecho, y después mira hacia arriba si ninguna preocupación. Stiles supone que no es la gran cosa en Mundo Derek. ¿Así que tus costillas casi salieron de tu torso? Toma una pequeña siesta, y cuando te leventes te sentirás mejor.  

—¿Estas bien? —Stiles pregunta de todas formas.

Los ojos de Derek lo miran como si fueran linternas de detectives, buscando algún daño. —¿Qué si estoy bien? —pregunta — Tu…

—Él está bien, tu estas bien. Todos estamos bien, —el Sheriff dice, apareciendo al lado de ellos de forma inesperada.

La mandíbula de Derek se aprieta como si no pudiera concebir la idea de que alguien lo tomara desprevenido. Stiles piensa que Derek no debería de ser tan severo consigo mismo, pero Stiles no vive en Mundo Derek. Todavía se está volviendo loco por todo el numerito con las costillas casi visibles.

—Sheriff —dice cortésmente Derek, sonriendo vacilante. Stiles contiene un resoplido, porque Derek no puede parecer inofensivo. Es demasiado divertido, porque Stiles sabe que realmente lo es.  Es solo que, no puede sacudirse el tipo de reputación que se ha construido y el cómo se ve no le hace ningún favor en ese sentido. Se ve como todo típico chico malo, todo envuelto en un paquete secretamente peludo.

—Derek Hale — su papá contesta secamente —así que, Hombre Lobo.

—Sí —Derek concuerda, como si realmente creyera que eso va a ser el fin de la discusión.

—Papá, Derek necesita dormir— interrumpe Stiles, tratando de quitar la atención del moreno. — Curarse toma mucho de los hombres lobo. Deberíamos llevarlo a casa para que pueda descansar.

—Solo unas preguntas primero —su papá dice, su voz engañosamente suave. Casi nunca pierde el temperamento, es la razón por la que es tan buen en su trabajo.

—Está bien, Stiles —dice Derek, mirando cuidadosamente a Stiles antes de mirar a John. —¿Qué quieres saber?

—¿Cómo? —John pregunta quedamente, sonando un poco perdido.

Stiles realmente odia escuchar ese tono de su padre, como si todo su mundo se estuviera cayendo. Stiles aún recuerda cuando se dio cuenta de que todo era real, pero Stiles no era como las demás personas. Había estado emocionado, instantáneamente curioso, y casi suicida en su interés.

Su padre era desde luego, más práctico y estaría alineando todos sus viejos casos sin resolver a su nueva manera de mirar al mundo, una razón para todos aquellos cadáveres.

Así que Stiles hace lo que se le da mejor cuando las cosas se están poniendo demasiado serias para que él pueda lidiar con ellas, —Nació así —Dice rápidamente, conteniendo una risilla —Casi como Lady Gaga, pero menos raro.

—Stiles, —su padre y Derek dicen al mismo tiempo.

Derek suspira y voltea a mirar a su padre. —Aunque, es verdad.

—Por supuesto que si —contesta Stiles —Lady Gaga es muy rara.

Derek frunce el ceño y se estira para agarrar su muñeca, su pulgar presiona suavemente sobre su pulso, y Stiles traga duro. No lo había notado, pero su corazón estaba latiendo como un colibrí, y el toque de Derek parece haberlo desacelerado.

Entonces ve los ojos de su padre estrecharse ante el toque, y Derek lo deja ir abruptamente.

Sabe que necesita aclarar todo, pero su mente parecía desviarse del tema. Como si estuviera atascado en automático, y su instinto es de minimizar el daño, poner todo esto como si no importara. Lo cual es difícil, considerando que la introducción de su padre a este mundo fue un bunyip enorme y asesino, que Stiles había destruido con un puñado de ceniza y el poder de su mente.

—Responderé cualquier pregunta que tenga, —Derek dice, su voz solemne y serie, y dios, Stiles olvida esto sobre Derek. Que es estúpidamente noble por debajo de todas sus amenazas vacías de violencia.

Los ojos de Stiles se abren de sobremanera y rápidamente sacude la cabeza en advertencia: porque sí, su padre necesita saber sobre lo sobrenatural. Su padre no necesita saber sobre cómo Derek Hale lo encerró en la cajuela de su auto y lo llevo a una cabina en el bosque.

John se detiene por un momento, mirando a Stiles de manera sospechosa antes de regresar su mirada a Derek. —¿Estas durmiendo con mi hijo?

Los ojos de Stiles se agrandan. — ¿Qué? ¡Oh por Dios! Papá, no…qué…por qué…hombres lobo, y ¿en esto es en lo que te enfocas?

Su padre lo ignora completamente, sus ojos enfocados solo en Derek.

Derek traga saliva, y hay un destello de culpabilidad en sus ojos antes de recobrar la compostura.

—No, señor, —dice.

Señor, Stiles piensa incrédulamente, y de alguna manera se le rompe el corazón. Derek, para su pequeño grupo de amigos se supone que es un adulto independiente, pero siéntalo delante del Sheriff y es dolorosamente obviolo joven que todavía es. Tiene la sospecha de que Derek antes era como Scott, confiado e inocente, lleno de luz.

El Sheriff mira a Derek por un momento. Stiles sabe que su padre no necesita el oído de un hombre lovo para ser un detector de mentiras humano. —Bien, —dice finalmente — Entonces pienso que Stiles tiene razón, tenemos que llevarte a casa. ¿Dónde vives?

—Uh, yo…—Derek mira impotente a Stiles, porque es difícil decirle al Sheriff de la ciudad tu dirección cuando vives en una estación de tren abandonada.

—Por favor dime que no te estaban quedando en la finca —Su padre dice en voz baja, y esa es la razón por la que es el mejor padre. Acaba de tener su mundo puesto de cabeza, pero no ve a un monstruo en frente de él, él ve a Derek Hale, el niño cuya familia entera murió y lo dejo sin una casa.

—Me he estado quedando con…un amigo —dice Derek, porque aparentemente es peor mentiroso que Scott, si eso es posible —No tienen que llevarme. Estoy bien…

—Debería venir a casa con nosotros, — dice Stiles, porque aparentemente su cerebro ha sido secuestrado por algún otro, loco Stiles. —¡Para dormir quiero decir! Ya sabes. En el sofá. No en mi habitación, en el piso o algo. Porque eso sería extraño. Pero en realidad no sería raro, porque ¿por qué es raro? Solo dos amigos, pasando el tiempo, recuperándose del ataque de bunyip. Probablemente pase todo el tiempo. Scott y yo lo hemos hecho muchas veces. Solo que nuestros ataques eran sobre bullys en el patio de la escuela que, relacionados con criaturas sobrenaturales empeñadas en una sangrienta venganza, pero ya sabes, la misma diferencia —. Stiles se ríe un poco, pero se obliga a detenerse cuando se da cuenta de que probablemente solo lo está empeorando.

—Claro, — su padre dice, imperturbable. Se ve extrañamente tranquilizado, en todo caso, por las insanas divagaciones de Stiles. No sabe si debería ofenderse o no por eso. John gira, regresando su mirada a Derek. — Te vas a quedar con nosotros, aparentemente.

—No creo que eso sea una buena idea — Derek dice de forma rápida.

—Y no creo que te hayas quedado realmente con un “amigo” —, dice su padre, y hace las comillas con sus dedos-en serio, comillas- y Stiles observa a Derek mientras mira a su padre con algo cercano al horror, como si finalmente se diera cuenta de que la personalidad de Stiles tenía que venir de algún lado.

—Deaton ya se te escapó— dice Stiles amablemente. —Dijo algo sobre los colmillos de bunyip siendo medicinales, y partió con un par de alicates. Parecía demasiado emocionado, si me preguntas. No creo que quieras quedarte aquí a solas con él.

Derek parece tratar de descubrir si habla en serio, y se vuelve para mirar a John. El sheriff solo asiente en confirmación, su rostro arrugado en disgusto. —Sí, eso en realidad sucedió—dice. —Y súper habilidades de curación o no, no podemos simplemente dejarte aquí solo.

Su padre no parece exactamente feliz con eso, pero Stiles sabe que su sentido del deber no le permitirá ignorar esta situación. Él sabe que su padre pondría su seguridad por encima de todo, porque Stiles es el de la misma manera, pero ahora que el peligro se ha ido y todos están empezando a calmarse, está asimilando la imagen más grande. Probablemente aún esté reescribiendo la historia con su nuevo giro sobrenatural y la historia de Derek. La historia ya era lo suficientemente horrible en la versión editada de los periódicos.

—Es un sofá decente. —su padre dice.

—Okay —Derek dice con voz baja —Tal vez por un par de horas.

Suena como un compromiso, una tregua vacilante, y Stiles siente que por primera vez puede respirar libremente desde que su padre conoce la verdad.

Notes:

1: Triaje, método usado para organizar la atención de las personas según los recursos existentes y las necesidades de los individuos.
2: El Tempeh es un producto alimenticio procedente de la fermentación de la soja que se presenta en forma de pastel.
3: Nadie, absolutamente nadie me ha dicho que sigo poniendo Sheriff en vez de alguacil como debería de ser. Así que lo voy a dejar así. YOLO .-.

Chapter 14: Capitulo 14

Chapter Text

Derek Hale es casi puro musculo, por lo que arrástralo dentro de la casa mientras se queda dormido como un licántropo narcoléptico es más fácil en teoría que en la práctica. Stiles trata de sostenerlo mientras su padre abre la puerta, y también ignora todas las miradas juzgadoras, como si la forma en la que Derek se apoya en el en su estado inconsciente es inapropiada.  

Supone que debería sentir alagado de que su padre este tan convencido de que podría salir con alguien como Derek. Excepto que su padre siempre piensa que Stiles es sorprendente, cuando no piensa que es exasperante, porque eso es su trabajo.  

—Aquí, lo tengo —su padre dice, tirando de Derek por el otro lado metiéndolo a la casa. Se las arreglar para llevarlo a la sala de estar y dejarlo en el sillón, y Derek duerme durante todo el rato. Stiles siente pinchazos de inquietud recorriéndole, porque las únicas veces que ha visto a Derek tan fuera de sí han sido bastante desagradables.  

—No se ve bien, — dice Stiles, preocupado — Usualmente tengo que golpearlo hasta que se despierte cuando esta así de mal. Aunque Deaton se veía muy seguro de que estaba bien. Aparentemente los colmillos de bunyip son antibacteriales en lugar de venenosos, lo cual no tiene ningún sentido pero aun así es un buen cambio, supongo. Aunque, para ser justos, se han realizado estudios sobre las propiedades antibacteriales del veneno de serpiente. Tal vez es…  

Stiles se detienen cuando ve a su padre frunciendo el ceño en su dirección, y se da cuenta de que probablemente no debería de estar hablando de venenos y la familiaridad que tiene con ellos. Trata de pensar en algo agradable y tranquilizador para decir como no te preocupes, solo era Jackson el que era venenoso, cuando su papá extiende la mano y la pasa suavemente por su frente. —Tienes un moretón, — dice con preocupación.  

—Papá, creo que deberíamos hablar acerca de tus prioridades. —suspira Stiles.  

—Las lesiones en la cabeza son serias— dice John su mandíbula se endurece de forma obstinada —Voy a llamar a Melissa.  

—Estoy bien, lo prometo. Sanara, —Stiles le asegura. Por alguna razón, eso hace que su padre lo mire de manera ansiosa.  

—Tu no…es decir, ¿Tú también sanas por tu propia cuenta? —Pregunta quedamente.  

—Así es como funcionan las personas, papá. Solo lleva un poco más de tiempo cuando se trata de mi —dice. —Pero si estas preguntando si estoy en la denominación de hombres lobo, la respuesta es no. Puedo hacer un poco de magia de vez en cuando, ¡Soy él normal, totalmente! No es como la magia en Harry Potter, así que ya sabes, no te estreses ni nada. Es más como Hechizo de Amor1, ¿la de Sandra Bullock? Como esa. Justo como pequeños pedacitos de magia, a veces. 

—Pedacitos de magia, a veces — el Sheriff suspira. —¿Cómo el polvo mágico que usaste para atacar al bunyip?  

—Sí, eso era ceniza de serbal, — dice Stiles. —Es más que nada ofensivo, se supone que es una barrera para mantener fuera a los hombres lobo y otros seres sobrenaturales. — Hace una mueca, tratando de no recordar la manera en la  que el círculo ardiente de ceniza de serbal lo había iluminado desde adentro, su miedo y preocupación alimentando al fuego. —Esa cosa del fuego fue en realidad la primera vez.  

—Quiero que vayas a descansar — decide John — Vas a necesitarlo, porque mañana, me vas a contar todo. Y me refiero a todo.  

—Necesito quedarme con Derek, —protesta inmediatamente Stiles, y después de esto no haberlo dicho.  

Aunque su papá no se ve enojado, y esta vez se está guardando sus sospechas. — Estará bien, —dice gentilmente. —Ve a dormir.  

—No podemos dejarlo aquí abajo como un perro callejero, darle un vaso de agua y una esquina para acostarse y esperar lo mejor — Stiles dice. — Le dije a Deaton que lo cuidaría.  

—Primero que nada, es un sofá, —John lo corrige. —Segundo, realmente necesito que vayas arriba y duermas, porque apenas y me estoy sosteniendo de pie.  

—Eso ni si quiera tiene sentido, — dice Stiles.

—No voy a dormir de todas maneras, niño —dice. —Yo lo vigilare. Tú, por otro lado, te ves como si te fueras a desmayar.  

— ¡Tú también! —protesta Stiles, aunque su padre lo este empujando hacia las escaleras. —No confias en que me quede a solas con él, ¿verdad? Te lo dije papá, no hay nada… 

—Cama, —lo interrumpe de forma cortante. — Ahora.  

Stiles va porque su padre realmente parece que apenas y está conteniendo un ataque de nervios, y aparentemente enviarlo a la cama como a un niño de seis años le dará el impulso de ego que necesita para pasar la noche. Stiles no puede decir que no está exhausto de todos modos, así que se va caminando como zombie a su habitación y colapsa en su cama para intentar dormir. Ni si quiera se preocupa por esas molestas tradiciones a la hora de dormir, como quitarse los zapatos. A diferencia de su padre, Stiles es bueno con las prioridades. 

Es un testimonio de lo cansado que esta cuando realmente consigue dormir por un rato, pero no es demasiado antes de que despierte por un ruido en su ventana. Probablemente dice algo de su vida que cuando oye el sonido de alguien entrando a su habitación, ni si quiera se asusta y solo intenta volver a dormir. En algún lugar de su mente adormecida, está pensando: Oh, es solo Derek, me despertara si es importante

Entonces recuerda que Derek está durmiendo casi como un muerto en el sofá en el primer piso.

Abre la boca para gritar, y una mano se estrella contra ella, ojos ámbar enmarcados por máscara parpadearon en la oscuridad. Erica se inclina sobre él, pero a diferencia del aura feroz que irradiaba la última vez que hizo eso, solo pudo ver su ceño fruncido y la preocupación en sus ojos ahora sombríos.

— ¿Por qué nuestro Alfa está dormido en tu sofá, oliendo a sangre y dolor? —demanda.

Stiles entre cierra los ojos hacia ella y Erica remueve lentamente su mano, alzando una ceja mientras lo hace como si lo estuviera retando a gritar. Debería saber que no es bueno hacerlo, pero su padre está armado y más que feliz de disparar, y él no quiere que le disparen.

— Boyd dijo que no tenían un sistema de alertas— Se queja, mientras se acerca para prender la lámpara de noche.

—Nos dijo de tu pequeña llamada —dice, levantándose de encima de él y sentándose en la esquina de la cama. —Tú eres nuestro sistema de alerta, idiota.

—Está bien, solo se está recuperando del ataque del bunyip—Stiles les asegura — ¿Se pueden ir?

— ¿Otro? —pregunta ella, frunciendo el ceño con preocupación e ignorando la petición de Stiles de que se vaya. — Sabía que no debíamos de dejar al idiota solo.

— ¿Llamas a tu alfa idiota? —Stiles pregunta con diversión. Erica lo asusta, pero eso es probablemente lo que Derek necesita. Alguien lo suficientemente agudo y valiente como para hacer lo que se le dice cuando se necesita, y para hacer lo que se necesita incluso cuando no se le dice que lo haga.

— ¿Ir tras un bunyip solo? ¿Después de té digiera que no lo hicieras? Sí, eso lo hace merecedor del título. — se burla.

—En realidad no fue tras él, esa cosa lo encontró. Estaba convirtiendo la casa Hale en un pantano aparecido por milagro, era todo un caos— explica, agitando una mano con desinterés. —Pero, Deaton lo vendo y está bien. No tienes de que preocuparte.

—Puede que no tengamos un sistema de alarma, pero la preocupación definitivamente está ahí, —dice Erica, viéndose incomoda.

—Hey, está bien, en serio, —Stiles le asegura. —También estoy preocupado, pero ya está…todo cerrado, donde no…estaba…y ahora solo esta descansado.

—Esa fue la peor charla de todas, —Erica dice resentida.

—Ya sé, perdón, —dice Stiles —Fue bastante aterrador. No tengo nada bueno que decir al respecto.

—Okay, definitivamente necesito verlo —insiste.

—No es una buena idea en este momento—, dice Stiles.

—No, no entiendes, —Erica dice, sonando desesperada de repente. —Necesito. Esto no es como…quiero decir, es el lobo. La manada. Y necesito verlo para asegurarme de que está bien. —Entonces los ojos de Erica se aguadan, las lágrimas se acumulan alrededor de los bordes incluso cuando ella se niega a dejarlas caer, y Stiles no tiene ni idea de que hacer. Nunca ha sido de ayuda alrededor de personas llorando.

Solo ha sido bueno en haciéndolas reír.

—Hey, está bien, —dice, y torpemente pone una mano en su brazo. Su aliento se detiene mientras se traga un sollozo, pero sus ojos son más claros cuando lo mira.

—No sabes cómo es, —dice ella. —Al principio, pensé que era invencible, como si estuviera arriba del resto. Luego, lentamente, me di cuenta de que también perdí algo que nunca iba a volver a tener. Se ha equilibrado un poco, pero ya no estoy completa si estoy sola. Ya no soy una persona completa si no estoy con ellos. Eso es lo que aprendí cuando trate de escapar. Eso es lo que los Argent me enseñaron.

— ¿Te arrepientes? —Stiles pregunta quedamente. — ¿De haber aceptado la mordida?

Su mirada se vuelve cautelosa, pero por una vez su reacción predeterminada no parece ser 'atacar'. —Sabes que no es tan simple—, dice ella. —Cuando haces algo, algo que cambia toda tu vida, luego lamentarlo, no solo elimina todo lo malo que ha sucedido desde entonces, lo toma todo lejos.


La sabiduría es una vida maravillosa, estoy impresionado—, dice Stiles, pero no la distrae.

Ella lo mira fijamente, totalmente seria. —Stiles, necesito verlo.

—No puedes, Catwoman —Stiles dice. —Mi papá esta abajo, armado, y aunque nunca le haría daño a un niño deliberadamente, ha tenido una pequeña llamada de atención sobre la población de hombres lobo, así que, puede disparar que si piensa que lo necesita y sabe que te regenerarías.

— ¿Le dijiste a tu papá? —sisea,  extendiendo la mano para agarrar su camisa, retorciendo su mano en el material hasta que tiene un buen agarre para arrastrarlo más cerca.  — ¿Le dijiste sobre m?

—Eres el último de sus problemas, te lo aseguro, —Stiles dice secamente. —No eres ni si quiera un punto en su radar de hombres lobo.

Erica frunce el ceño, pero lo deja ir. —Perfecto — dice, — ¿No puedes evitar arruinar las cosas, verdad?

Stiles se aleja de ella, moviéndose hasta que su espalda golpea la pared. —Si ustedes idiotas no me hubieran secuestrado, nada de esto habría pasado, —le recuerda. —En serio, Érica… ¿Qué te hice?

—Realmente no tienes ni idea, ¿cierto? —ella exige, mirándolo casi de manera acusadora, excepto por el forma en que ella no puede sostener su mirada. Cuando Érica está enojada, no hay nada que la detenga, así que no puede ser eso. —Eres muy distraído. Siempre me has gustado, Stiles. El problema es que me gustabas demasiado. No estaba bromeando acerca del crush.  

— ¿Huh? —pregunta. La ve en shock. No es tan distraído, así que había notado el coqueteo, claro que lo hizo. Solo que nunca pensó que fuera verdadero.

—Estaba medio enamorada de ti por mucho tiempo, —ella admite. —No tan malo como tú lo tenías por Lydia, por su puesto, pero pensé que íbamos a terminar juntos. Tenía un plan de cinco años.

—Yo tenía una de esos. Tuve que subir el mío a diez años, —dice Stiles, y traga saliva con inquietud.

—Sí, no renové mi suscripción. No soy tan persistente como tú, — dice con ironía. —Me di por vencida hace tiempo, pero de repente estabas en todas partes, de regreso a mi vida. Creo que, secretamente espera que me volvieras a salvar de nuevo.

—¿De nuevo? —Stiles pregunta. —No he…

—Ni si quiera te acuerdas —y se ríe libremente. —Por supuesto que no, no fue nada para ti. —Érica, perdón, realmente no sé de qué estás hablando.  —Estábamos en segundo grado, y Simon Masters estaba molestándome. Llegaste de repente, y lo aniquilaste, enfrente de todos, como si un fuera nada. — Érica sonríe tristemente, —De alguna formadescubriste que había repetido kínder, y lo dijiste enfrente de toda la clase, junto con tus sospechas de que su gusto por comer pegamento era la razón. Por supuesto, que después de golpeo, pero todos sabían que tu habías ganado la pelea. 

—Sí, —Stiles hace una mueca. —Eso solía pasar a menudo.

—Jackson te solía llamar el Niño Kamikaze, —dice, su tono extrañamente cariñoso.

—Jackson es conocido por convertirse en una lagartija que es controlada por alguien, — le recuerda. —No está permitido que diga algo sobre otra persona nunca más.

Érica se encoge de hombros, viéndose como si se estuviera arrepintiendo de decir todo esto. Pero Stiles sane que no puede dejar que se esconda de nuevo, porque no llegaran a nada si lo hace. Nunca pensó que estaría cerda de ser la Lydia de alguien, pero sí lo era, entonces quiere manejarlo también como ella.

O al menos, no quiere arruinarlos por completo para siempre. O ser golpeado en la cabeza con otra parte del coche, si es honesto.

—Pero por qué…—Stiles empieza vacilantemente. —Si te defendí, ¿entonces por qué me odias tanto?

Su máscara de indiferencia se cae, y por un momento se ve como la Érica que recuerda antes de todo esto. Se mira vulnerable y frágil, incluso cuando siempre ha sabido que tiene una espina hecha de acero.

—Porque después de que lo hiciste, te alejaste —, dice ella.

—Érica, lo…—empieza Stiles.

—No es tu culpa —Érica lo interrumpe —Yo no era tu responsabilidad. Tenías a Scott. Pero era…era como todos los cuentos de hadas hecho realidad, tu corriendo hacia mi rescate. Y me tomo años para darme cuenta que lo habrías hecho por cualquiera, que no tenía nada que ver conmigo.

—Lo siento, —dice, de todos modos. —Si te defendiera ahora, sería porque eres tú. —Stiles espera a que lo vea. —Lo sería. No tengo el complejo de héroe de Scott. Solo salvo a las personas que quiero.

— ¿A un me quieres? —pregunta titubeante. — ¿Después de todo?

— ¿Qué puedo decir? —Stiles dice. — Me siento inexplicablemente atraído por las personas aterradoras.

Érica se ríe de él, pero debido a que tiene toda la gracia social de un San Bernardo, se olvida de su fuerza de nuevo cuando juguetonamente trata de empujarlo. Stiles se golpea contra la cabecera, y su codo choca con la mesita de noche, haciendo que su despertador caiga al suelo.  

—Mierda —dice Stiles, con los ojos muy abiertos. —Érica, tienes que…

Su puerta se abre de golpe antes de que pueda decir el resto de la advertencia. Su padre tiene la pistola apuntando hacia abajo y ni si quiera se ve agitado. Stiles se pregunta por un momento si no ha estado acampando a fuera de su habitación como un guardia de seguridad.

Su papá mantiene el arma apuntando con seguridad hacia el piso, afortunadamente, pero se ve más que un poco irritado. Tal vez un 75% molesto y un 25% resignado. Stiles lo está llevando a una tumba temprana.

— ¿Qué diablos está pasando aquí? —demanda.

— ¡No es lo que piensas! —Stiles dice de inmediato, empujándose hacia arriba.

— ¿De verdad? —su padre pregunta. —Porque me parece que tienes a un hombre lobo en tu cama.

—Está bien, es un poco lo que piensas —, admite Stiles.

—Venimos a ver a Derek —, le asegura Érica a su padre, y de repente se ve muy inofensiva, sosteniendo sus manos con manicure y muy humanas. Su padre se apresura a guardar la pistola.

Mientras está contento de que su padre no vaya a dispararle, Stiles está un poco más preocupado por otra cosa.  

— ¿Venimos? —repite. — ¿Qué quieres decir con venimos?

—Se refiere a nosotros, —Boyd dice, mientras se desliza por la ventana con una gracia casi imposible, teniendo en cuenta lo solido que se ve. Jackson aterriza detrás de él, después de haber caído por la ventana sin siquiera tocar los lados; Stiles piensa con incredulidad, ¿En qué se ha convertido mi vida?

—¡Oh por Dios! —grita, antes de volverse enojado hacia Érica. —¿Han estado aquí todo el tiempo?

—Te acostumbras a no tener privacidad —, se encoge de hombros.

— ¡Yo no! ¡Estoy muy acostumbrado a mi privacidad! —Stiles se queja.

—Relájate, Stilinski —, Jackson se burla. —Tengo mejores cosas que hacer que escucharte a escondidas.

—Estábamos viendo a Derek dormir por la ventana, —admite Boyd.

—Por supuesto que eso estaban haciendo —, dice Stiles. —Necesita un mejor modelo a seguir.

Su padre suelta un gran suspiro, y ahí está, Stiles piensa triunfante. Ahora esta 40% irritado, 60% resignado.

— ¿Alguno de ustedes niños sabe cómo usar una puerta? —John exige. — ¿Saben qué? No importa. Solo…abajo, todos ustedes. Ahora.

Érica no necesita que se lo digan dos veces. Ya está afuera de la cama y a mitad de las escaleras hacia Derek antes de que Stiles pueda levantarse. Su padre la sigue, pero antes de que Stiles pueda salir Jackson está enfrente de él, un brazo extendió casualmente bloqueando la salida.

—Stilinski, deberíamos de hablar. —Jackson dice.

Stiles traga saliva, y trata de no recordar el aullido de Jackson cuando lo dejo atrapado con la ceniza de serbal. —Uh, ¿Te diste cuenta de que mi papá esta armado? — pregunta. —Ya sabes, si me matas, probablemente no lo tome bien. Solo digo.

—No te preocupes, Lydia dijo que no tengo permitido tocarte. —Jackson dice, con voz engañosamente agradable. Luego le lanza una sonrisa perfecta que le envía escalofríos a Stiles hasta los huesos. —Pero no debería haberse preocupado. Por lo que a mí respecta, estamos a mano.

Stiles entrecierra los ojos, esperando por algo más. Entonces repite lo que dijo Jackson en su mente, y sus ojos se abren. —Espera… ¿Qué?

—Me secuestraste, —Jackson dice. —Yo te secuestre. Estamos a mano.

Se da vuelta y se encamina hacia la puerta, conversación terminada, aparentemente.

Stiles se inclina para alcanzarlo. —Te secuestre por la verdad y la justicia, ¡por el bien de todos! —protesta. —Tú me secuestraste por eres un idiota.

—No tientes a la suerte, Stilinski. —Jackson dice fácilmente, y sigue caminando.

Stiles solo se queda ahí de pie fulminándolo con la mira, hasta que Boyd lo mueve gentilmente para poder pasar.

—Stiles, —Boyd dice, y comienza a bajar las escaleras. Boyd no se disculpa, pero así es Boyd. Así que Stiles en realidad no esperaba que lo hiciera, y no estaba del todo convencido de que hubiera alguna razón por la que debería.

—Estúpidos hombres lobo. —murmura, antes de bajar por las escaleras. Se estremece un poco por las pequeñas cortaduras en sus pies cuando la piel se estira. Piensa que la adrenalina le impidió sentir el dolor hasta ahora, pero tal vez dormir con los zapatos puestos no fue la mejor idea.

Derek está haciendo una impresión bastante aceptable de alguien parado cuando finalmente entra en la sala de estar, pero la ilusión de pierde principalmente cuando Érica es la que lo está sosteniendo.

— ¿Qué ha pasado? —Derek exige saber, y sus ojos se dirigen directamente a Stiles. — ¿Estas bien?

Érica resopla. —Claro, preocúpate por él, —dice. — Estas apunto de desmoronarte, pero por supuesto, vamos a ver cómo esta Stilinski.

—Hey, tuvimos un momento, —Stiles le recuerda. —Pensé que serías agradable ahora.

—Esta soy yo siendo agradable, —Érica le dice, y le lanza una sonrisa mientras se da la vuelta y deja a Derek en el sofá.

—Estos tres, — su papá explica —entraron por la ventana de mi hijo.

Derek le frunce el ceño a Érica.

—Lo siento, —dice. —Tendré una charla con ellos.

¿Vas a darles unos consejos? Stiles se pregunta, y luego resopla ruidosamente antes su broma interna. Su padre le lanza una mirada aguda, y Derek lo mira como si supera exactamente lo que está pensando, está la posibilidad de que sí lo sepa.

—No es necesario, —su padre dice. —Desde ahora Stiles pondrá una línea de ceniza de serbal en la ventana. En todas las ventanas. Así que supongo que tendrán que volver a usar la puerta.

La boca de Stiles se abre, y se prepara a rebatir, pero su padre ya cambio de tema.

—Y ustedes tres, no se pueden quedar aquí, —dice. —Es la una de la mañana, deben de irse a sus casas. No quiero tener que llamar a sus padres.

— ¿Llamar a sus padres? —Stiles repite. Eso es un riesgo al que no se han enfrentado en un tiempo. Correr por tu vida pone las cosas en una perspectiva diferente. — ¡Papá, no podemos involucrar a más civiles!

eres un civil, Stiles, —John dice, dando a su hijo una mirada de sufrimiento.  —Tú eres la definición de civil.

—Acordemos en no estar de acuerdo —, decide Stiles. —El punto es que cuanta más gente sepa, mayor será el peligro en el que todos estaremos. ¡Habrá pánico masivo! Casería de hombre lobo y brujas. ¡Literalmente cacería de brujas! ¡Podría ser quemado en la hoguera!

—Tiene razón, —Derek dice, mirando a John. —No todos lo van a tomar tan bien como usted. Tenemos que ser cuidadosos.

—Mis padre probablemente me envíen a Londres, —Jackson dice.

— ¿Eso fue una broma de hombres lobo? —pregunta Stiles.

Jackson lo mira molesto. — ¿Qué? No, idiota, tenemos familiares en Londres.

—Mis padres me echarían, —Boyd dice, encogiéndose de hombros. —Pero no se tiene de que preocupa, ellos piensan que estoy pasando la noche en casa de Jackson.

—Sí, y yo estoy con Danny, —dice Jackson.

—Los míos piensan que estoy en una pijamada con Miranda. — Érica se mete en la conversación.

—¿Quién es Miranda? —Stiles pregunta, curioso.

—La invente, — dice, su tono completamente indiferente. —No tengo amigos que sean mujeres.

—Cristo, — John dice, pasándose una mano por la cara. —Bien. Se pueden quedar, solo esta noche. No puedo albergar adolescente fugitivos.

—Técnicamente no son fugitivos, —Stiles dice. —O al menos, ya no. Érica y Boyd, tal vez lo era, pero es mucho esperar que Jackson se vaya huyendo.

Derek se recarga en el sofá y Érica se presiona contra su costado. Boyd cae al lado de ella, y Jackson se sienta en el suelo para apoyarse contra Érica.

—Se van… ¿Se van a quedar aquí? ¿Juntos? Es un lindo sofá, pero no es un gran sofá — dice su padre de forma vacilante. Mira a Stiles en busca de ayuda, lo que probablemente sea un error.

—Solo se van a acurrucar, como una pila de cachorritos. —Explica Stiles.

—No somos cachorros, —Derek dice, aunque Érica se acurruca contra él. Su padre los mira sospechosamente, parece que quiere separarlos.

—O-kay, sourwolf, —Stiles dice. —Excepto que lo son. —El contacto ayuda al proceso de regeneración, —Derek dice malhumorado, como si no quisiera admitir su debilidad. Su padre se releja un poco y asiente como si hubiera tomado una decisión.

—Vamos, Stiles — dice, empujándolo hacia las escaleras. —Dejémoslos solos.

Su padre lo sigue a su habitación, y luego cierra la puerta detrás de ellos como si eso les diera privacidad. Stiles no se molesta en decirle que Scott podría escuchar los latidos del corazón de Allison a casi una milla de distancia2, por lo que no tiene sentido fingir que los hombres lobo en el piso de abajo no escucharan cada palabra que dicen. Él puede dejar que su padre se aferre al menos a algunas de sus ilusiones.

—No me arrepentiré de esto, ¿verdad? —su padre pregunta, —no van a hacer nada raro, ¿verdad?

Stiles se recuesta en su cama.

—Son hombres lobo. Es bastante extraño todo el tiempo, pero no van a tener una orgía o algo así, si eso es lo que te preocupa.  

Su padre le da una mirada oscura. —Lo es ahora —, dice, lanzando una mirada sospechosa hacia la puerta. —Quise decir, ya sabes, aullando a la luna, matando cosas.

—Oh, —Stiles dice. —No, probablemente no. Ni siquiera es luna llena. Vamos, papá, sigue el paso.

Stiles se quita con cuidado los zapatos. Sus pies aun palpitan un poco, pero está contento de ver que no se haya filtrado sangre a través de los calcetines o las vendas. No sangre = problema de otro día. Se deja caer sobre la cama nuevamente, y frunce el ceño cuando ve a su padre agarrar lo silla de su escritorio apoyándola sobre la pared. Rápidamente se sienta. —¿Papá? ¿Qué estas haciendo?

—Voy a dormir aquí, —su papá dice.

—No puedes dormir aquí. ¿Y en una silla de escritorio? ¿Qué hay de tu espalda? ¿Te has vuelto loco?

—Mi espalda está bien —contesta. —Y aparentemente la habitación de mi hijo se ha convertido en la Grand estación para hombres lobo. Por la mañana cerraré la ventana, pero por ahora creo que dormiré mejor donde está toda la acción.

— ¿Qué? — pregunta. — ¡Por favor dime que no vas en serio!

—Tres adolescentes simplemente entraron por tu ventana del segundo piso como si fuera una puerta —dice su padre, mientras se acomoda en la silla. —Así que sí, Stiles. Lo digo en serio.

—Oh por Dios, —Stiles dice, poniendo la cabeza en sus manos. —Te vas a volver como Chris Argent, ¿cierto?

Su padre se recarga en la silla y cruza las piernas apoyándolas en el escritorio de Stiles. —Si estoy entendiendo bien la referencia, ¿te refieres a un padre sobreprotector? —pregunta, y Stiles asiente de manera renuente. John lo mira con algo parecido a la lastima. —Niño, manejo esta ciudad. Chris Argent no se compara conmigo.

 

1: En realidad se llama Practical Magic, pero en Latinoamérica se le conoce como Hechizo de Amor y en España como Prácticamente Magia.

2: 1.60934 kilometros.

 

Chapter 15: Capítulo 15

Notes:

(See the end of the chapter for notes.)

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De alguna forma Stiles se las arregla para dormir, aunque su padre este roncando como una podadora con una biela rota. Aun así se levanta temprano, su reloj burlándose de el con sus números rojos y demoniacos brillando 5:43, y no se puede volver a dormir. Sus pies duelen y tiene la boca pegada de tan seca que esta. Aún está usando sus jeans y por la forma en la que se había torcido en sueños le hace sentir como el botón se ha incrustado en su piel.

Se levanta de un empujón y agarra una pantalonera1 del suelo, antes de agarrar la gasa que sobro de la visita de Melissa.

— ¿Qué pasa? —su padre pregunta, la voz ronca por el sueño. Stiles sabe que si hubiera sido una amenaza su padre se habría levantado con la pistola en mano en tres segundos, pero Stiles es solo amigable ruido blanco2 en el mundo de su padre. Solía escabullirse a la habitación de sus padres cuando era pequeño, saltando en el estómago de su padre gritándole que se despertara. Su madre solo se reiría mientras su padre trataría de convencerlos de que estaba despierto, justo antes de darse la vuelta y regresar a dormir.

Stiles traga duro, porque el recuerdo duele. Odia que no pueda pensar en su madre sin el profundo dolor en el fondo del pecho. Sabe que ella no hubiera querido eso.

— ¿Stiles? —pregunta su padre, escuchándose más despierto.

—Solo voy al baño. Estoy bien. Vuelve a dormir —Stiles dice suavemente, con cuidado deslizándose por la puerta. Su padre no lo sigue, lo cual es alentador. El ambiente de guardia penitenciario se estaba volviendo demasiado pesado de ignorar.

Logra llegar al baño y cierra la puerta detrás de él, se quita los pantalones arrugados cambiándolos por la pantalonera. Se inclina en el lavabo para beber un poco de agua directo del grifo, para después colapsar en la tapa cerrada del inodoro. Se quita los calcetines para examinar sus pies adoloridos, se estremece cuando comienza a quitar las vendas. Todavía está tratando de desenredad los últimos trozos de gasa cuando oye como la puerta se abre.

—Papá, dije que estaba bien…— empieza, pero se corta a medio camino cuando ve a Derek parado en la entrada.

Se me infinitamente mejor que la noche anterior, y está usando una de las playeras de “Departamento de Sheriff de Beacon Hills” de su padre. Stiles tiene que contener una risa histérica, y morderse la lengua para no aconsejar a Derek que se la quede para su próxima foto policía. Porque, ironía.

—Olí tu sangre, —Derek dice, como el acosador3 que es. Se ve preocupado, así que debe de estar escuchando el corazón de Stiles de nuevo. Incluso Stiles lo puede escuchar, la forma en la que parece estar latiendo fuera de su pecho. Siente el pánico se acumula sin ningún motivo, porque debería sentirse aliviado. Su padre sabe. Él sabe, y todo va a estar bien ahora. Ellos van a estar bien ahora.

Stiles no lo ve moverse, pero Derek esta de repente en frente de él. Extiende la mano y captura las muñecas de Stiles, tirando de él hasta que Stiles finalmente se encuentra con sus ojos. Stiles puede sentir el pánico desvaneciéndose, justo como Derek lo había hecho con Deaton. No sabe lo que significa, que Derek tenga este poder sobre él.

— ¿Qué pasa? —Derek demanda, y es una forma tan Derek de preguntar. No es que Stiles no vea la preocupación, que está prácticamente luchando por liberarse de los ojos secretamente expresivos de Derek, pero el tono. Como si fuera una orden. Como si estuviera estancado hablando en su voz de Alfa todo el tiempo.

— ¿Por qué nunca puedes preguntarme algo sin que parezca que ya sabes la respuesta, y que es mi culpa? — Stiles pregunta.

Los ojos de Derek se agrandan un poco y deja ir sus muñecas, alejándose para sentarse en el suelo. Se recarga contra los armarios, con una pierna contra su pecho y la otra a lo largo del piso.

Stiles suque que tiene la intención de no parecer amenazante, pero Stiles lo ha visto arrancarle la garganta a alguien.

Bueno, era solo Peter. Pero aun así.

—Sé que nada de esto es tu culpa, Stiles. —Derek dice.

Stiles mira sus pies, estirando su pie derecho un poco para probarlo y haciendo una mueca cuando tira de los cortes. Es como tener cortes de papel en la planta del pie. Duele mucho más de lo que parece que debería.

—Lo siento. — Derek dice de repente, y Stiles casi se cae del retrete. Derek se acerca rápidamente, y se engancha a su antebrazo para mantenerlo en equilibrio.

—Creo que debo de estar falto de sueño, —Stiles dice. —Porque sonó como si dijeras que lo lamentabas.

—Me he disculpado antes. —Derek dice, sus ojos estrechándose.

—Sí, pero no creo que alguna vez lo hayas dicho en serio, — Stiles dice.

—Nunca quise que salieras herido —Derek dice con fuerza. Parece que es él el que tiene dolor. — Solo estaba tratando de protegerte.

—Lo sé, —Stiles dice.

— ¿Qué? —Derek pregunta con sorpresa. —Stiles…

— ¿Realmente piensas que dejaría que te salgas con la tuya, si no supiera que has tenido buenas intenciones a tu manera? — Stiles pregunta. —Pero solo porque entiendo, y estoy contento de que no hayas muerto por un bunyip, eso no significa que te perdono.

—No creo que deberías, —Derek dice.

Stiles lo quiere golpear. ¿Podría ser más perfectamente trágico? Es como si hubiera salido de la tapa de algún romance arlequín4. Es el héroe trágico por excelencia: las cejas melancólicas y el pecho perfectamente musculoso, lleno de aplastante culpabilidad y arrepentimiento.

¿Cómo se supo que debe agregar a eso? Incluso si todo el derecho, ¿Cómo es…

—Stiles, —Derek dice gentilmente. —Está bien. Entiendo. No me debes nada.

—No estoy muy seguro de eso. Me salvaste de un bunyip, no solo una, pero dos veces. Así que esta eso.

—Sí, —dice Derek. — Pero aun así saliste herido.

—Tú estabas peor. —Stiles le recuerda, sus ojos yéndose hacia el pecho de Derek. Sabe que debajo de la vieja playera de su padre la piel de Derek ya no está marcada, sin deja una cicatriz, pero la imagen de la herida se va a quedar con él por un largo tiempo.

—Es diferente. —Derek dice.

Stiles sonríe tristemente. —Sí. No creo que sea tan diferente como tú crees.

Derek solo estira su brazo y toma uno de los pies de Stiles en su regazo. Stiles comienza a protestar, antes de hacer una mueca cuando Derek tira suavemente de la última gasa suelta. Inmediatamente acuna el pie de Stiles con la palma de su mano presionando contra la planta, y luego comienza a drenar el dolor. Stiles deja escapar un pequeño grito de asombro mientras observa las líneas negras pulsando a través de las venas de Derek.

Traga saliva, parpadeando cuando la punzada de dolor se asienta y casi desaparece. Mira al hombre lobo fruncir el ceño y trata de alejarse, pero Derek no lo deja ir. — ¿Duele? — Stiles pregunta — ¿Cuándo haces eso?

—No, —Derek dice.

—Creo que eres un mentiroso. —Stiles entorna los ojos, observando cuidadosamente la expresión de Derek. 

—No me duele tanto como te duele, —admite. —Puedo manejarlo, Stiles.

Stiles suspira, pero no se aleja de nuevo. Se inclina hacia delante con fascinación, tratando de seguir las venas ennegrecidas mientras se arrastran hacia arriba a lo largo del brazo de Derek. —Es como si realmente pudieras controlar el dolor — dice. —Quiero decir, el dolor, no es una cosa. Todo está en tu cabeza. Es solo un cable del instinto de supervivencia, esa pequeña llamada de atención que dice, ¡Hey! Tal vez no deberías estás haciendo esto y se siente así de mal.

— ¿Y alguna vez la has escuchado? —Derek pregunta. — Por curiosidad.

Stiles magnánimamente decide ignorarlo. — Es increíble, de verdad. Tomas, algo que realmente no existe fuera de la mente, y lo conviertes en algo físico. Algo que se puede quitar o eliminar. Es extraño, es todo. No debería ser posible, pero no creo que ninguno de nosotros lo ha cuestionada. Pienso que lo tomamos por sentado.

— ¿Tomar que por sentado? —Derek pregunta, liberando en pie de Stiles y tomando el otro.

—Magia, —Stiles dice con simpleza. Hace una pequeña mueca de dolor cuando Derek arranca la gasa restante de su otro pie, pero Derek le quita el dolor casi antes de que se registre. —Scott quiso salirse en el momento en que fue mordido, y no lo puede ver. No puede ver la magia. No ve lo bueno.

—Después de todo lo que ha pasado. —Derek dice quedamente. —¿Cómo puedes tú?

—Durante un largo tiempo no sabía que mi mamá está muriendo,  ya sabes, —Stiles dice. —Nunca lo mostro. Ella solo, ella solo quería que cada día significara algo. Incluso al final…incluso cuando no se podía sentar por sí sola, aun podía reír. —Stiles mira hacia abajo para encontrar los ojos de Derek. — Nunca se dio por vencida, por nada, ni si quiera cuando sabía que era una pelea que no podía ganar. Y ella me hizo prometer que yo no lo haría tampoco.

—Suena como tú, —, dice en voz baja.

 

—Sí, —dice Stiles. —Mi papá me mira con así a veces, como si todo lo que pudiera ver es ella. Sin embargo el sarcasmo es por él. Ese es una rasgo Stilinski, de principio a fin.

—Sí, lo note. —Derek dice con ironía.

—Hablando de mi papá, —dice Stiles. — No necesita encontrarnos así. Ya sospecha lo suficiente.

—Estas herido, y es mi culpa. Me arriesgare. —Derek mira hacia arriba, algo en sus ojos que Stiles no puede interpretar. Derek extiende la mano y agarra la pasa para volver a vendarle los pies, y es aterradoramente eficiente para alguien en el que normalmente las heridas no son lo suficientemente largas para preocuparse por cubrirlas.

— ¿Por qué estás haciendo esto? —Stiles pregunta.

—Te dije…—Derek empieza.

—Se lo que me dijiste, —dice. — ¿Pero por qué estás haciendo esto?

—Es mi culpa que fueras herido, —Derek dice de nuevo. —Eso es todo, Stiles.

—¿Entonces por qué me besaste? —Stiles pregunta de repente. Eso no era lo que quería decir, pero la pregunta ha estado dando vueltas en su mente desde que paso. Stiles nunca ha sido bueno en censurándose a sí mismo, así que supone que solo era cuestión de tiempo antes de que saliera. Tiene suerte de que su subconsciente esperara que estuvieran solo para apoderarse de su boca.

Derek se congela, sus manos deteniéndose mientras cuando meten el último borde de la gasa. —Lo siento, — dice, y con eso son dos verdaderas disculpas de Derek Hale en el espacio de diez minutos. Stiles se pregunta su ha roto una especie de record. Derek aparta su pie, colocándolo suavemente en el piso. —No debí hacer eso.

—No, no puedes hacer eso, —Stiles explota. —Eso no es una respuesta. Merezco una respuesta, Derek.

—Tú eres el de las respuestas, ¿recuerdas? —Derek pregunta, y por fin lo está mirando, pero Stiles desea que no lo hiciera. No sabe si lo que está viendo es enojo o dolor. —Así que tú dime.

Está enamorado de ti como una niña de catorce años, había dicho Lydia. Excepto que Lydia tiende a simplificar demasiado cualquier cosa que tenga que ver con emociones humanas; no le gustan las cosas que no puede explicar.

¿Esta Derek realmente enamorado de él? ¿Y qué se supone que debe de hacer con eso?

Nunca ha pensado en Derek de esa manera, no en serio, y no porque no le atraiga. No es como si Stiles tuviera un problema para codiciar lo inalcanzable, Lydia, pero Derek es diferente. No solo es hermoso y está fuera de su alcance, sino que es algo enormemente desconocido.

Es posible que Lydia nunca le haya dado la hora del día antes de que todo esto sucediera, pero Stiles la conoce desde el fondo de su ser desde que tenían ocho años. Stiles necesita eso, este tipo de conexión más profunda que la piel, y Derek le ha dado muy poco para trabajar.

Solo ha tenido estos destellos de lo que hay debajo de la superficie, y se siente atraído por ellos, no se puede negar eso, pero Derek siempre se cierra antes de que pueda caer demasiado profundo.

—Te gusto, —Stiles dice finalmente. Suena extraño pero de un momento a otro está seguro de que es verdad. Regresa a todas sus interacciones con Derek y todo parece diferente, sabiendo esto. Cada acción parece tener un significado diferente.  

—Sí, Stiles, me gustas. —Derek concuerda, pero a un se las arregla pare que parezca una insulto. Stiles no sabe que es lo que encuentra reconfortante.

—Y me quieres en tu manada, —Stiles continúa.

—Sí.

—Para llegar a Scott. —Stiles termina.

Derek suspira, y mira hacia arriba con decepción. —Y lo estabas haciendo tan bien.

—Has tratado de que Scott este de tu lado desde el principio, no pretendas que no. —Dice Stiles.

—Sí, pero eso era porque éramos los únicos betas en Beacon Hills. Tengo una manada ahora. Si Scott quiere seguir pretendiendo que está bien solo, es su problema. Lo quiero en mi manada, siempre lo he hecho, —Derek dice. —Pero si tuviera que elegir entre ustedes dos, te elegiría a ti.

—Eso sería un mal negocio. Mira, Scott es el corazón —, explica Stiles —Es un idiota, pero él es el corazón. Él es al que necesitas, si tuvieras algún poquito de sentido común. Me preocuparía por el mundo si dependiera de nosotros dos solos.

—Pensé que estabas enojado con Scott, —Derek dice. —Y todavía lo defiendes.

—Los héroes rara vez son buenos amigos, —dice Stiles encogiéndose de hombros. —Están demasiado preocupados por las demás personas que por los que deberían de importar más.  

—Lo logra de alguna forma, cuando se trata de Allison, —Derek dice, enarcando una ceja escéptica.

Stiles lo fulmina con la mirada. —Gracias por eso. Como si necesitara el recordatorio de dónde caigo en la escala de importancia según Scott McCall.

—Tal vez lo necesitas. —Derek grita, agarra el brazo de Stiles para que se gire a mirarlo. —Porque te mereces algo mejor que eso, pero sigues dejando que se salgo con la suya.

—Ya no más, —Stiles dice. —Rompí con él. Le di el discurso “no soy yo, eres tú” y lo envié lejos.

Derek toma una respiración sobresaltada, mirando a Stiles como si acabara de abofetearlo. — ¿Qué? —pregunta con incredulidad.

—Sí, misión cumplida, —Stiles dice. —Eso era lo que querías que pasara, ¿verdad? ¿Ese era el punto de tu pequeño ejercicio?

—Stiles, no. —Derek dice, y algo en su voz lo hace sonar tan roto que Stiles tiene que mirar a otro lado. —Quería que se diera cuenta de lo que tenía. —Derek tira un poco del brazo de Stiles, obligándolo a mirarlo a los ojos otra vez. —¿Sabes lo primero que mis padre nos enseñaron? No le digan a los humanos la verdad, porque no pueden comprenderlo. Lo hice de todos modos. Se lo dije a Kate. Fue toda la confirmación que necesitaba para matarlos a todos.

—Derek…—Stiles empieza, su corazón deteniéndose por un segundo en con una simpatía enfermiza y profunda como el alma.

—No fui tan afortunado como Scott, porque el té tenía a ti —Derek dice. —Ni si quiera te tuvo que decir lo que era, tu eres el que le dijo. Y nunca te importo, y nunca cambio algo. Nunca pensaste, como lo detengo. Lo único que pensaste, como lo salvo. Y no creo que te des cuenta lo raro que es eso. Lo único que eres.

—Lydia sabe, y ella nunca… —Stiles empieza.

—No es lo mismo. —Derek dice. —No es como contigo. Nunca me has tenido miedo.

—Bueno, —Stiles arrastra las palabras.

—Nunca has tenido miedo de lo que soy  —Derek corrige. —Y lo necesitaba. Me hizo descuidado contigo, y no sé cómo arreglarlo. No sé qué es lo correcto aquí, Stiles. No sé si dejarte en paz, o arrastrarte a un más profundo.

Stiles no sabe cómo arreglarlo tampoco. No sabe si sobreviva estando más adentro, pero nunca le ha ido bien estando solo.  —Tal vez no haya respuesta correcta. —Stiles dice.

Derek lo mira entonces, poniéndose en  sus rodillas con una mirada determinada. —Cuando me llamaste anoche…dijiste que nos ibas a dar una oportunidad. Para mi manada. —Dice seriamente. — ¿Lo dijiste en serio?

—Yo…—Stiles se separa. Honestamente, ayudaría a cualquiera de la manada de Derek, pero todavía no se siente parte de ella. Érica y él tienen un largo camino por recorrer antes de que su relación comience a sanar, y no está seguro de que Jackson valga la pena. Boyd es grandioso, pero Boyd nunca lo entenderá, nunca se quedaran hasta tarde en la noche jugando videojuegos, ni se reirán de años de bromas internas. —No sé. Sólo sé que no podemos seguir como estamos.  

Siles mira a Derek y no le dice “porque esto me está destrozando” pero parece leerlo en su expresión de todas maneras. —Lydia dice, quiero decir, ella piensa que debería de dar un paso atrás.

Derek lo mira con esa mirada calculadora y de depredador, y luego asiente bruscamente. —Quizás deberías.

—Creo que anoche demostré que está fuera de mis capacidades no involucrarme, —, dice Stiles. —Lydia es buena para ser neutral. Lydia es la reina de “Above-It-All”, pero tengo que saberlo todo. Todo el tiempo. Es una enfermedad.

—Siempre cuidas de todo, —Derek dice. —Tal vez es tiempo que cuides de ti mismo. —Se pone de pie, su expresión se paga, transformándose en esa mirada familiar de ojos acerados que había estado usando cuando se conocieron. —Nos iremos antes de que tu padre se despierte.

— ¿Qué? —Stiles pregunta —No, no te tienes que ir, eso no es lo que…

—Necesitas que descubrir lo que quieres, Stiles —, dice Derek, no de forma desagradable. —Ven a buscarme, cuando lo hagas.

Derek desaparece por la puerta antes de que Stiles pueda recuperar el equilibrio, porque los estúpidos hombres lobo y su estúpida gracia animal siempre están dejando atrás a Stiles. Parte del dolor en sus pies regresa cuando la magia de hombre lobo de Derek desaparece, y tiene que agarrarse al fregadero para tratar de aliviar la presión cuando se levanta por primera vez. —Derek—, llama, en voz baja para que su padre no lo escuche, pero sabe que Derek todavía lo hará.

Se empuja por la puerta, tropezando hacia las escaleras y hacia abajo antes de apresurarse hacia la sala de estar. Respira de forma laboriosa, a punto de hablar, pero ya se han ido.

— ¿Stiles? Hey, ¿qué está pasando? —Su padre sale de la habitación y comienza a bajar las escaleras.

—Se fueron a casa, —Stiles dice quedamente, y se odia así mismo por el leve temblor de su voz. No se debería sentir abandonado, porque eso no tiene ningún sentido.

—Ven entonces. —Su padre pone una mano sobre sus hombros y comienza a llevarlo hacia la cocina. —Busquemos un poco de desayuno, y luego me pueden decir lo que Scott y tú realmente estaba haciendo en el bosque, esa noche que encontramos a Laura Hale.

Sigue a su padre a la cocina y saca su Adderall del armario. Porque ni si quiera puede pensar en este momento, por lo que no hay forma de que pasa el día sin el medicamento. Y si su padre nota que toma el doble de su dosis, bueno, no lo menciona.

Su padre siempre ha sido bueno eligiendo sus batallas, no es una lección que Stiles haya podido aprender. Él lucha todo el tiempo.

 

*********************

1: En el original utilizan track pants, en México se le conocen como pantaloneras o pantalones de deporte, pero el segundo nombre me parecía muy largo e ignoro como se les llama en otro lugar.

2: Básicamente el sonido de la estática.

3: En el original utilizan la palabra Creeper, y creo que ya todos sabemos a qué se refiere, sin embargo no encontré una palabra que se asemejara al significado, al menos en el español Mexicano. Pero si alguien tiene alguna mejor lo pueden dejar en los comentarios :3

4: Harlequin es una editorial conocida por sus novelas de romance. Y como yo lo conozco, lo más cliché que vas a leer en el mundo, aunque te entretienen bastante ewe

Notes:

Sí están en la universidad y trabajan al mismo tiempo (creo que todos hacemos eso) realmente espero que esten cuidando de si mismos y no se dejen caer en un coma como yo cada que el fin de semana llega, si pueden duerman en la tarde aunque sea media hora. :)

Chapter 16: Capítulo 16

Notes:

(See the end of the chapter for notes.)

Chapter Text

El Adderall empieza a funcionar después de que terminan de desayunar. Stiles puede sentir como se agudizan sus pensamientos incluso cuando sigue a su padre malhumoradamente por las escaleras hacia su habitación. Su padre, que lleva una lata de café vieja llena de clavos y su desgastado y confiable martillo, parece sacado de una comedia de los noventa.

— ¿En serio? —Pregunta, — ¿En serio? ¿Realmente vamos a hacer esto?

—Esto no es un castigo, Stiles, —su padre promete, entra a la habitación de Stiles y se dirige directamente a la ventana.

— ¿No crees que esto sea excesivo?

Su padre lo mira. — Y la reacción normal sería hacerte amigo de las creaturas de la noche e invitarlas a pasar.

—okay, —Stiles le concede el punto. —Tal vez con mi vida, esta es la reacción normal, ¡pero papá!

—Tus amigos pueden usar la puerta como personas normales. O mejor aún, solo llamarte, desde que su hora preferida de visita es después del toque de queda. —John dice.

—Pero ellos no son normales. —grita, Stiles.

Su padre tira de la ventana hasta la mitad y luego frunce el ceño. — ¿Tienes más de esa ceniza de serbal? —pregunta.

—Un poco, pero, papá…—Stiles empieza.

—Tráela, —John dice. —Necesitaremos conseguir más después. Mucho más.

— ¡No es como si creciera en los árboles! —protesta Stiles, antes de detenerse frunciendo el ceño. —Bueno, okay, en realidad, literalmente, crece en los árboles, porque no es ceniza real, si no virutas de un árbol de Rowan, o árbol de ceniza de serbal, como es coloquialmente conocido. Son originarios del Himalaya, ¿lo sabías? Y como dato curioso, hay una leyenda en Inglaterra de que el Diablo uso un árbol de Rowan para colgar a su madre. ¿Quién era la madre del Diablo y desde cuando la colgó?

— ¡Stiles! —Su padre trata de interrumpir.

—De todas maneras, es una rareza, así que es caro. Quiero decir, los Rowan se naturalizaron en los Estados Unidos, pero no sé si la ceniza tiene que venir de un Rowan “especial” o no, porque obtener información de Deaton es como tratar de mantener una conversación con una Bola 8 Mágica. —Stiles hace una mueca de dolor al pensar en ir de vuelta con Deaton. —Y me acaba de dar una provisión completa, así que no creo que me vaya a querer dar más solo porque decidí usarlo todo para tratar de vaporizar un bunyip.

—Stiles. —Su padre lo escudriña con la mirada, y Stiles se fuerza a mantenerse quieto.

— ¿Si, padre? —Pregunta inocentemente.

—Solo pon la ceniza de serbal en la ventana, por favor, —dice.

Stiles suelta un suspiro y coge lo último de ceniza de serbal de emergencia que había escondido en su escritorio. Lo tira hacia la venta, y ve a su padre abrir la boca, preparado para gritarle por ser tan descuidado, justo antes de que se dé cuenta de lo que está pasando—la ceniza de serbal se precipita hacia la ventana y se adhiere como si estuviera magnetizada, en una perfecta, y lisa línea.

—Eso es…diferente, —su padre dice, antes de cerrar la ventana suavemente sellando la línea. Sin embargo, parece recuperarse rápidamente de la exhibición sobrenatural, ya que inmediatamente busca un clavo para pasar por el marco.

— ¿Qué pasa si hay un incendio? — Stiles exige.

—Tienes mi permiso de romper la ventana, en caso de incendio, —su padre dice generosamente.

Stiles suspira y se tira de espaldas a la cama. —He estado bien, sabes, —dice, —Lo he estado manejando bien ¡Incluso he mantenido mis notas altas! Cuadro de honor, y todo.

—Sí, y eso es muy impresionante, —su padre dice, mientras pone el tercer clavo y luego se aleja. —Pero no voy a dejar que sigas arriesgando tu vida solo porque puedes hacer más de dos cosas a la vez.

Una vez terminada la humillante tarea de clavar la ventana de su hijo, John deja caer la lata de clavos y el martillo sobre el escritorio y se sienta en la silla frente a Stiles. —Así que, empieza a hablar.

—Está bien, pero una advertencia primero, probablemente deberíamos habernos emborrachado para esto, —dice Stiles, haciendo caso omiso de los ojos entrecerrados de su padre. Se arrastra y se para en su cama, extendiendo la mano para despegar la esquina un poster que está en la pared trasera, le da la vuelta y lo vuelve a pegar, se baja de la cama para que para que su papá lo pueda ver.

Es una línea del tiempo: hay recortes de periódicos y fotos, copias de informes policiales y teorías escritas a mano.  —En caso de que necesites evidencia real. Algo de esto te parecerá familiar. —Stiles dice, señalando hacia la pared con un encogimiento de hombros. Sabe que su padre no va a creer todo lo que dice como verdad.

Stiles no lo puede culpar. Puede haber terminado con las mentiras abiertamente, pero admite, aunque sea solo para sí mismo, que no está exactamente por encima de una mentira por omisión. Todavía hay muchas cosas que no quiere que su padre sepa.

 —Okay. Desde el principio, —Stiles dice. —Scott y yo fuimos a buscar el cuerpo de Laura Hale en el bosque, como ya sabes, y Scott estaba ahí, como también sabes. Lo que no sabes es lo que le sucedió, después de que nos fuimos.

Respira profundamente, y luego se deja caer para sentarse en el borde de la cama. —Es ahí cuando fue mordido por un hombre lobo Alfa—, dice Stiles.

—Jesús, —su papá dice, pasándose una mano por la cara. —Podrías haber sido tú, ¡o ambos!

— ¡Nadie planea para hombres lobo, papá! —Stiles protesta.

—No, ¡solo pensaste que había un asesino! —Su padre lo mira mal, y Stiles no puede discutir contra eso.

—Bueno, eso también, —admite. — ¿Pero qué asesino regresa a la escena del crimen? ¿Cierto? Eso es un mito total de la película.

Su papá se pellizca el puente de la nariz como si tratara de detener una migraña. — ¿Qué paso después?

—Me di cuenta de que se estaba convirtiendo en un hombre lobo, y comencé a entrenar a Scott para que no matara a nadie. —Stiles dice. —Derek intento ayudar, pero solo se aparecía de vez en cuando y decía cosas como ahora eres mi hermano, Scott, así que lo evitábamos en su mayor parte cuando podíamos. Esto puede ser difícil de creer, pero las habilidades interpersonales de Derek han mejorado a pasos agigantados este último año.

Stiles se pasa una mano por el pelo. —Luego fuimos a la morgue para que Scott pudiera obtener el aroma de Laura Hale...

—Lo siento, ¿Hicieron qué? —John interrumpe con fuerza.

—Cierto, —Stiles dice. —Probablemente debería de haber pedido por inmunidad antes de empezar con mi confesión, ¿huh? ¿Necesito un abogado? Pero que esto no…esto no es tan malo comparado con lo demás que hemos hecho desde ese entonces. Todavía estamos en territorio de delitos menores en este momento.

—Cristo, niño, —John dice. —Mira, tienes inmunidad legal, pero reservo el derecho de castigarte por el resto de tu vida.

Stiles lo mira detenidamente por un momento, antes de asentir. Ha sido castigado por el resto de su vida cinco veces ya, y hasta ahora no han durado más de tres semanas. —Trato, —dice. —Así que, ah, ¿en dónde estábamos?

—Estaban entrando a la morgue—, dice su padre con desaprobación.

— ¡Oh, cierto! Scott necesitaba el aroma para encontrar la otra mitad del cuerpo, lo que hicimos, como sabes, enterrado en el patio trasero de Derek —Stiles dice. —Lo que no sabes es que lo primero que encontramos fue la mitad de un lobo. Una especie de tradición, supongo. Un rito funerario de hombres lobo. Tuve que quitar todos los hechizos de Wolfsbane que puso Derek antes de que Laura volviera a ser humana. Ahora me siento mal por profanar la tumba de su hermana, pero en ese momento realmente pensamos que Derek la había matado. Pensamos que él era el Alfa, por eso te llamamos por el cuerpo.

—Espera un segundo… ¿eso significa que te escabulliste a la parte trasera del coche para enfrentar lo que pensabas era un Alfa, hombre lobo asesino? —Exige su padre.

—No nos detengamos en detalles insignificantes, —Stiles dice rápidamente. —Ve toda la imagen, papá.

—Stiles, —su papá dice, —No sé si estar orgulloso de ti o temer por ti.

—Orgulloso esta bien, —Stiles dice. —Yo iría con esa.

—Solo, continúa, —dice, agitando una mano hacia él, incluso cuando su expresión muestra claramente lo poco que quiere seguir escuchando.

—Ya, um, así que Kate Argent vino a la ciudad, —Stiles dice. —Argent siendo la palabra francesa para plata y todo eso, resulta que todos son cazadores de hombres lobo. ¡Sorpresa!

—No es realmente una gran sorpresa —, dice John. —Esa casi la entiendo. Pensé que tal vez Chris Argent estaba vendiendo armas ilegalmente o era un espía de la CIA, así que cazador de hombres lobo funciona para mí.

—Sí, bueno, Chris era el último de nuestros problemas. Su hermana era la psicótica. Le disparo a Derek con acónito, y tuvo que llevarlo al veterinario. Quería que le cortara el brazo, y yo estaba tratando de no desmayarme. Afortunadamente Scott llego con otra bala de acónito, porque aparentemente mientras que el acónito es mortal por sí solo, préndele fuego y ponlo en las heridas y es como si nunca hubiera sucedido nada. Magia. Imagínate.

Su padre parece abrumado, por lo que Stiles se apiada de él. —Aquí —, dice, agarrando un pequeño paquete de hojas grapadas de su mesa de noche y empujándolo hacia él. —Hice una hoja de concejos. Tiene las cosas más útiles allí, como los tipos de acónito y sus diferentes usos.

—Gracias, —John dice secamente. —Lo que siempre quise.

— ¡Estupendo!  —Stiles lo mira, eligiendo ignorar el sarcasmo. —No te preocupes, no habrá examen.

Su padre lo mira mal y la sonrisa de Stiles decae. Se aclara la garganta. —Okay, —dice. —Creo que lo siguiente es, bueno, el ataque a la escuela.

Su padre lo mira bruscamente, su atención se aleja de la hoja de apuntes de Stiles. —Cierto, —dice. — ¿Qué demonios paso esa noche?

—Um, sí. No fue nuestro mejor momento, para ser honesto, —Stiles dice. —Básicamente nos encontramos con Derek en la escuela, y tenía a Deaton atado en el asiento trasero del coche…

—Perdón, ¿dijiste que tenía a Deaton atado en el asiento trasero? —demanda. —Cuando Derek fue exonerado, pensé que todo fue hecho por Kate. Me estás diciendo que…

—Hey, solo está un poco amarrado… ¿solo lo suficiente para que no se escapara? — Stiles intenta. —Quiero decir, Derek pensó que Deaton era el Alfa, así que tenía sus razones. Y Deaton prácticamente se lo busco, con su aire misterioso y de lo sé todo pero no te voy a decir nada, así que, ya sabes, no culpo a Derek por sospechar.

—Pero Deaton no es un Alfa, ¿verdad? ¿Es solo un tipo? — pregunta John.

—No estoy seguro de lo que Deaton es, —Stiles dice. —Pero estoy bastante seguro de que tiene licencia de veterinario.

—Bueno, entonces no tenemos nada de qué preocuparnos, — su padre dice, pero su expresión dice ¿qué diablos, chico?

—De todos modos, nos estamos saliendo del punto. Estoy un 79% seguro de que Deaton está de nuestro lado, así que deberíamos estar bien. En aquel entonces, estaba bastante seguro de que no lo estaba. Porque Deaton desapareció justo antes de que Derek fuera herido. Es decir, fuera realmente, realmente grotesco. Estaba bastante seguro de que Derek estaba muerto. Y que Deaton lo había hecho. —Estuve muy equivocado esa noche.

—Pensaste que Derek estaba muerto, —el Sheriff se da cuenta. — ¿Por eso Scott y tú lo culparon a él?

­—Difícilmente podríamos explicar que en realidad era un hombre lobo alfa, tratando de tentar a Scott a matar a todos sus amigos para que su sed de sangre sea lo suficiente para que unirse a él en su búsqueda de venganza —, dice Stiles. —Yo estaba a favor de no decir nada, pero me obligaron a llamarte. Así que necesitábamos un chivo expiatorio y Scott nunca ha sido tan brillante como para pensar algo en el momento.

—Te obligaron a llamarme, —su padre repite, su voz extrañamente carente de tono.

—Sí, intente explicarles porque era una mala idea…—Stiles empieza.

—Stiles, ¿Por qué sería una mala idea llamar a la policía, cuando estas siendo aterrorizado por un asesino?  —John grita.

Stiles se encuentra con los ojos de su padre, su terquedad brillando directamente a través de la suya. —No lo sé, talvez porque verte siendo desgarrado por un alfa psicótico nunca ha sido realmente un número alto en mi lista de cosas por hacer.

—Sí, bueno, encontrar a mi hijo después de que eso le haya pasado ciertamente no está en la mía, —John dice seriamente. —Nunca dudes en llamarme. Jamás. ¿Entines? A partir de ahora, soy la primera llamada que haces.

—Okay, —dice Stiles. —Pero solo para que quede claro, todavía te habría entendido, incluso si usabas contracciones. Las contracciones no son el enemigo, papá, ya hemos hablado de esto, en realidad…

—Deja de tratar de distraerme, —John dice, agitando un dedo acusar hacia su hijo. —Sigue hablando. Quiero saber quién era el Alfa.

—Ya voy para allá, —Stiles promete. — ¡Esa es la trama! Tienes que vivir el suspenso.

— ¿Era Peter Hale, cierto? —su papá pregunta.

La boca de Stiles se abre. — ¿Cómo…?

—Bueno, era el único Hale vivo, y su él era un hombre lobo, entonces el lógico que se haya recuperado de su catatonia en lugar de simplemente desaparece de la faz de la tierra, — dice, y se encoge de hombros. —Ha esto me dedico, niño.

—Bien, sí, fue Peter. Que forma de estropear el final sorpresa, —Stiles dice. — Y ese tipo…quiero decir, pensé que Derek era el creepy, pero Peter peor. Él es el OC2. ¡Trato de salir con la madre de Scott! Tuve que detenerlos.

— ¿El accidente de coche? —John pregunta con incredulidad. —Te castigué durante dos semanas por eso.

—Sí, no te sientas mal por eso, —Stiles lo tranquiliza, agitando una mano desinteresadamente. —No me quede en casa durante la mayor parte de todos modos.

—Por supuesto que no lo hiciste. —John deja caer la cabeza entre sus manos con un suspiro. Stiles toma esto como una buena señal, ya que, obviamente, se dio por vencido en el recuento de sus delitos para ser usados en su contra después. Finalmente, su padre se recupera y se vuelve a sentar derecho. —Está bien. Dejare pasar esto, pretendamos que no me has ignorado cada vez que te he castigado. ¿Qué le paso a Lydia? ¿Fue Peter?

—Sí, la mordió, —Stiles dice, —Solo que Lydia, la diosa perfecta que ella es, era inmune a la mordida. Todavía no estoy seguro de que haya sido humana alguna vez, pero no es una mujer lobo. Probablemente para lo mejor.

— ¿Y dónde estuviste durante todo esto? —John pregunta.

—Estuve allí durante todo eso, —Stiles dice, golpeando nerviosamente una mano contra su pierna mientras lucha contra el impulso de caminar. Aún puede ver a Lydia cayendo, y sabía que no importaría lo rápido que corriera, sabía que nunca la atraparía antes de que cayera al suelo. —Me quería quedar con ella, pero Peter necesitaba que lo ayudara a encontrar a Derek. Me dejo llamar a Jackson para que fuera por ella, pero eso fue todo. No quería dejarla ahí, pero no tenía otra opción. Me llevo a una cochera, me hizo seguir a Derek a través del teléfono de Scott y luego me dejó varado.

—Hijo de perra, —John grita, mirando hacia otro lado. — ¿Te estaba acusando de huir cuando en realidad  te había secuestrado un psicópata?

—No es tu culpa, no sabías, —Stiles dice. —Fue mi decisión no decirte.

—Fue la equivocada, —su padre dice con énfasis.

Stiles traga duro. —Sí, lo sé, —dice. —Pero probablemente lo haría de nuevo. —se encuentra con los ojos de su padre. —Porque, ¿Qué hubieras hecho si hubieras sabido?

— ¡Habría ido detrás de él! —grita.

—Exactamente, y no hubieras tenido una oportunidad, papá, —dice Stiles. —Porque no puedes entrar caminando con tu insignia y tú arma y exigir que se rinda, Peter te habría destrozado.

— ¿Pero ustedes chicos lo manejaron bien? —exige.

—Derek y Scott son hombres lobo, —Stiles dice. —Chris y Allison Argent estaban armados hasta los dientes. Y, bueno, Jackson y yo llevamos cócteles Molotov.

—Cócteles Molotov…—su padre repite con incredulidad. — ¿En dónde…?

—Las hicimos con cosas de la escuela, —Stiles dice. —Lydia me dio la receta.

—Estoy empezando a preocuparme por todo, Stiles, —dice su padre.

—No es como que tenga la costumbre de hacer cócteles Molotov, —Stiles dice rápidamente. —Solo fue una vez. Quiero decir, para mí. Lydia hizo uno cuando estábamos atrapados en la escuela, pero de todos modos fue un desastre porque Jackson es un idiota o estaba intentando deliberadamente matar a Scott. Nunca he sido capaz de descubrir sus motivaciones para mi satisfacción.

Stiles finalmente se permite caminar un poco, dirigiéndose a su ventana, ahora inútil, antes de girar sobre sus talones. —De todos modos, Peter ya había matado a Kate en el momento en que llegué, no sé puede decir que era inocente. Bueno. Okay, para ser justos, realmente no lo podemos culpar por eso. Kate se merecía mucho más de lo que consiguió, porque ¿quemar a los Hale vivos? Esa parte la tuviste bien. Aun así, Peter no es mejor que eso.

— ¿Lo mataste? —Pregunta John, luciendo como si no quisiera saber la respuesta.

— ¿Algo así? —Stiles dice suavemente. —Fue más un trabajo en equipo. Derek lo mato al final, le arranco la garganta. No con sus dientes, para que conste. Después empezó con Yo soy el Alfa ahora, y mordió a Jackson porque es un idiota. Quiero decir, en serio. Boyd, Érica e incluso Isaac, lo entiendo, pero Jackson…

—Stiles…—su padre suspira.

—Aun no entiendes que tan grava fue eso, porque Jackson no se convirtió en hombre lobo, no al principio, —Stiles dice. —Se convirtió en Kanima. Lo cual es básicamente una especie de lagarto gigante, con una cola prensil3 espeluznante y sustancia clara que te paraliza por horas. Jackson fue quien mato a la mayoría de las personas el año pasado.

— ¿Jackson lo hizo? —Su padre se ve horrorizado. Se pone de pie de forma ansiosa. — ¿Creí que fue Matt? Si Jackson…

—No sabía lo que estaba haciendo, —Stiles dice rápidamente. —Matt era el que lo controlaba. Confía en mí, esa también la tuviste bien.

—Es por eso que secuestraste a Jackson, —Se da cuenta su padre. —El trasporte de la prisión.

—Intentábamos detener que matara a alguien más, —Stiles dice. —Si hubiera recordado que gilipollas reprimido era y no hubiera firmado el texto con “te quiero”, creo podríamos habernos salido con la nuestra.

— ¿Pero ya no es un Kanima? —John pregunta para estar seguro. — ¿ÉL es qué, solo un hombre lobo normal ahora? —se estremece. —Normal. Hombre lobo. Creo que eso es un oxímoron.

—En realidad, es tan normal como ellos pueden ser, —Stiles dice. —Quiero decir, creo que es lo mejor que podemos esperar, es Jackson. Al menos ya no mata gente. Lo cual es bueno, porque no me agrada el tipo pero realmente no quería matarlo.

— ¿Por qué estás hablando de matarlo como si esa fuera una opción? —su padre demanda.

—Porque era la única que pensé que teníamos —, dice Stiles. —Secuestrarlo realmente no funcionó. No nos escuchó. Y una vez que se transformaba, no había nada que lo detuviera. Viste que sucedió en la estación. Había una buena razón por la que pensé que debíamos hacerlo.

Puede ver el momento en el que su padre lo entiende: Cuatro oficiales muertos que podría haber vivido, y de repente las cosas ya no son tan claras. ¿Podría su padre haber sacrificado a Jackson para salvarlos? ¿Podría él? Él todavía no está seguro.

—No deberían lidiar con esto —, dice John con fuerza. —Ni si quiera yo puedo lidiar con esto.

—En realidad es mucho más fácil lidiar con esto si conoces a Jackson —, dice Stiles. —Porque es un imbécil y eso hizo que la idea de matarlo sea mucho más fácil de aceptar. Pero Scott es todo, no, Stiles, vamaos a salvar a todos, a todos los cachorros, ¡y luego al mundo! Y sabes que nunca he sido del todo bueno en decirle que no a Scott.

—Stiles, —grita. —Esto no es una broma.

—Sí. Lo sé —, dice Stiles. —Es solo que así es como tengo que pensar, o de lo contrario voy a necesitar tomar algún tipo de medicamento. Ya sabes, medicamento adicional.

— ¿Qué paso realmente en la estación? —John pregunta, obviamente tratando de protegerse a sí mismo para lo que sigue.

— ¿Quiere tomar un descanso? —Stiles pregunta con gentileza. —Te vez como si fueras a hiperventilar.

—Deja de perder el tiempo, —su padre dice.

—No lo estoy haciendo, —Stiles protesta, levantando las manos en señal de rendición. —Mira, estuviste allí para todo lo demás. Simplemente no sabías sobre la lagartija psicótica que Matt tenía en una correa, todo lo demás sucedió más o menos de la manera que crees. Matt hizo que Jackson nos noqueara a mí y a Derek, le disparo a Scott, Peter Hale regresó de la muerte, Gerard mató a Matt y robó a Jackson, Scott hizo otro trato estúpido con un Argent, Gerard comenzó a derretirse como la bruja del Mago de Oz, y, sí, no tengo idea que diablos le paso al tipo, para ser honesto. Eso es todo de segunda mano4.  De todos modos, Lydia curó a Jackson con el poder de su amor, y eso es todo. Excepto, ya sabes, nos invadió una “manada de Alfas”. Pero solo era posers. Allison los ahuyento con su ballesta.

Su padre lo mira por un momento. — ¿Cómo dices?

Stiles suspira pero se vuelve a parar, señalando a su pared de hechos extraños. —Esta todo en la línea del tiempo, papá, síguela.

John se deja caer contra la silla. —Peter Hale…Peter Hale que asesinó a todas esas personas y Derek mató, ¿Volvió de entre los muertos?

—Sí, —Stiles dice. —No es un zombi ni nada, si eso es lo que te preocupa. En realidad se ha tranquilizado un poco desde que volvió de la muerte. En estos días tiene que preocuparte más de que destroce tu ego que tu garganta.

—Stiles… ¿Cómo pudo…? No entiendo, —dice. — ¿Así que no estaba muerto?

—No, estaba bastante muerto —, Stiles resopla. —Lo enterramos debajo de la casa Hale.

—Lo enterraste…—su padre dice, mirándose horrorizado.

—Oye, no, está bien —, le asegura Stiles. —Estaba completamente muerto en el momento en que lo enterramos, lo prometo.

—No es la peor parte de esto, Stiles —, dice. —Oh Dios. ¿Cómo me perdí todo esto?

—Principalmente porque estaba interfiriendo, —Stiles dice. —No te culpes.

— ¿Necesito arrestar a Peter Hale?  —pregunta, mirando a su hijo seriamente. — ¿o a alguien más?

—No veo a Peter yendo fácil, y no es como si pudiéramos adjudicarle algo de todos modos. La catatonia a largo plazo es una cuartada bastante buena, considerando todas las cosas. —Stiles dice. —También tienen sus archivos médicos, que detallan claramente las heridas de las que nadie podría recuperarse, así que creo que sería difícil probar que él es Peter Hale, y no solo un gemelo perdido o un extraño bastante parecido.

Stiles se encoge de hombros. —Confía en mí, he pensado todo esto. Mucho. De todos modos, parece que en su mayoría es inofensivo ahora, y creo que a Derek le gusta tener familia alrededor. Incluso si es Peter. Y de todos las otras personas que hicieron cosas malas, no fueron tan hábiles como para volver a la vida, porque que no hay mucho necesidad de arrestar por el momento. En serio.

—Claro, —su padre dice sin expresión alguna. — ¿He sido completamente inútil en esta lucho, no es así?

—No, papá, nunca. Kate y Matt eran los verdaderos chichos malos, y lo descubriste a pesar de todo lo que estaba en tu contra, —Stiles le asegura rápidamente. — ¡Y si puedes encontrar a Gerard Argent, podrías completamente arrestarlo!

— ¿Por qué? —su padre demanda.

Stiles se detiene por un momento, tardíamente dándose cuenta de que se había saltado los detalles sangrientos en esa sección del cuento. —Uh, ¿por tortura y secuestro de menores? —dice, pero está formulada como una pregunta, y su padre entrecierra los ojos. —Érica y Boyd. —Stiles traga duro. —Estoy seguro de que testificarían. Y también yo. Pero más por el secuestro que la tortura, pero no lo tuve tan mal como ellos.

—No te secuestro el otro equipo.  —La expresión de su padre es mortal y Stiles instantáneamente quiere retirar todo lo que ha dicho. La mayoría de estas cosas están fuera del ámbito de lo que su padre está acostumbrado, que no está procesando todo como lo horrible que es. Secuestro y tortura son cosas con las que lamentablemente ya está familiarizado en este mundo.

—Quiero decir, está bien,  yo estaba bien —, dice Stiles rápidamente. —Pero Boyd y Érica, no estaban bien. Todo fue muy jodido. Así que sí. Detenlo, definitivamente.

—Deja de decir que estas bien, —su padre grita, y Stiles se estremeces, lo cual lo empeora. — ¿Qué se supone que debo hacer, Stiles? ¿Cómo se supone que debo ayudarte?

—No lo hago…—Stiles se detiene, antes de que pueda volver a decir que está bien. —No tienes que hacer nada.

John mira a Stiles serio. —Has terminando de ocultarme cosas —exige. —No quiero que algo como esto vuelva a sucedes. No quiero que me saques de tu vida así.

— ¿Qué? No, no lo hice, —Stiles protesta.

—Eso es exactamente lo que hiciste, —su padre dice. —Me excluiste, pequeño. Quiero que prometas que no vas a volver a hacerlo.

—No lo hare, —dice en voz baja. —Papá, lo prometo. Prometo que no lo hare.

—Ok, bien. —John dice. — ¿Así que, por qué no me dices que pasó la semana pasada?

Stiles se queda quieto. — ¿Qué?

— ¿Pensaste que me había olvidado de ti pequeño viaje a Arnold con Derek Hale? —pregunta.

—Bueno, estaba esperando que sí. —Stiles mira expectante a su padre, pero finalmente se rinde ante la mirada obstinada. —Sí, ok. Después de que te fueras para la conferencia, me di cuenta de que las recientes muertes por ahogamiento probablemente estaban relacionadas con un bunyip. Así que fui a la reserva para rastrearlo.

— ¿Solo? —John demanda.

— ¡No es como si pensara que lo encontraría! —Stiles protesta. —Fue puramente recuperación de información. Pero entonces vi algo debajo del agua, así que podría haber ido hacia la orilla. Y podría haber metido la cabeza bajeo el agua con esos googles realmente geniales que me compraste porque quería probarlas, y quizá también un poco porque quería ver si esa cosa que estaba viendo era un bagre, o, ya sabes, un bunyip.

—Dime que no lo hiciste. —su padre dice, su tono resignado hace que la pregunta sea básicamente retórica.

—Bueno, puedo decirte que no era un bagre, —Stiles dice, su voz falsamente ligera. —Derek apareció justo a tiempo. Estaba solo un poco golpeado, pero no quería que manejara a casa y él sabía que estabas fuera de la ciudad, así que me llevo a mí y a su manada a su casa de verano en Arnold para que se recuperara. No hay escapadas románticas ilícitas, lo prometo, y tienes que creerme, porque Jackson estaba allí. Nada mata al romance más rápido que Jackson Whittemore.

Stiles repite lo que acaba de decir en su mente. —No es que haya una posibilidad para el romance, Jackson o no. —Asiente entonces, mirando a su padre, y sintiéndose bastante satisfecho consigo mismo. Ni unas sola mentira en eso, no realmente.

—Está bien, digamos que creo que todo esto…—, comienza su padre.

— ¡Papá, la línea del tiempo! —Stiles dice, señalando al poster. —¡Todo está ahí! Tengo pruebas…

—Sí, pero permíteme mi escepticismo —, dice John. — Considerando cuánto me han mentido, creo me lo debes.

—Buen punto—, concede Stiles.

—Entonces, digamos que creo todo esto —, dice. — ¿Cuál es la situación actual?

— ¿Huh? —Stiles pregunta.

—Bueno, Jackson era un lagarto asesino y ahora solo es un hombre lobo común y corriente, lo que sea que eso signifique. Los Argent son cazadores tratando de matar a Scott y Derek, pero todos ustedes salen con Allison, Deaton es…lo que sea que Deaton sea, ¿Y dijiste que Isaac era un hombre lobo también? Pero no lo has mencionado.

—Sí, —Stiles dice. —Isaac no es de mis personas favoritas. Tiendo a olvidarme de él.

—Stiles, —John dice con desaprobación.

— ¿Qué? —grita. — ¿Qué quieres que diga? ¡Es una amenaza de cabello rizado, papá, y se robó a mi mejor amigo!

—Y eso… —continúa su padre, señalándolo. — ¿Qué está pasando contigo y Scott?

—De acuerdo, ¿Quieres un resumen de la dinámica de la manada?, aquí vamos, —dice Stiles raídamente. —Derek es el Alfa, y transformo a Jackson, Érica, Isaac y Boyd. A Scott no le gustó mucho la idea de estar en la manada de Derek, asó que hizo la suya.

— ¿Así que Scott también es un Alfa? —John pregunta.

—No, Scott es un beta con delirios de Alfa, —Stiles dice. —pero, si estamos compitiendo por Peor Alfa en Beacon Hills, es un especia de tira y afloja. Al menos Scott me tiene a mí, por lo que tiene cierta ventaja. Desafortunadamente, también tenemos a Isaac. Dejo a Derek para unirse a nosotros, como el hombre lobo empuñador de bufandas voluble que es. 

—Está bien, voy a ignorar el hecho de que obviamente tienes algunos problemas con Isaac Lahey y seguiremos, —John dice. — ¿Qué pasa con Allison?

—Allison se volvió un poco loca por un tiempo y usó a un par de nuestros compañeros de clase como practica de tiro. No una, sino dos veces —, dice Stiles, levantando dos dedos para un mayor énfasis. —Pero aparentemente esa mejor ahora, así que Scott está tratando de que vuelva a salir con él, otra vez.

Observa a su padre mientras intenta procesar todo, y ponerlo de alguna forma en la que tenga sentido. —Así que, espera… ¿Esto significa que ahora todos están del mismo lado, verdad?

—En teoría, —Stiles dice. —Principalmente trabajamos uno contra el otro por la misma causa.

— ¿Y estas en la manda de Scott, no en la de Derek? —pregunta.

—Por el momento no estoy en una manada, más como manada adyacente —, dice Stiles. —Estamos es…un descanso.

—Todavía me estas ocultando algo —, dice John, señalando acusadoramente a su hijo.

Stiles abre la boca, no muy seguro de lo que planea decir, cuando oye el timbre de la puerta. — ¡Salvado por la campana! —grita de alivio, antes de saltar hacia su puerta.

—Stiles, ¡Oye! —John lo llama. — ¡No hemos terminado aquí!

Stiles lo ignora, saltando los últimos escalones y casi chocando con la puerta. La abre, si aliento por su carrera, y se encuentra cara a cara con los famosos ojos de cachorro de Scott McCall.

—Hola, Stiles, —Scott dice, sonriendo vacilante.

Stiles cierra la puerta contra su cara estúpidamente esperanzada.

Notes:

Notas:

1: Stiles habla de que su padre debería de usar contracciones, el Sheriff dice algo como “i am the first call…” en vez de “i´m” esto en español no tiene sentido, ya que nosotros tenemos otras formas de conjugar los verbos.
2: Original Character. Se refiere a que le da mil vueltas en ser creepy a Derek.
3: Que sirve para agarrar o sujetar.
4: Stiles se refiere a que él no tuvo nada que ver con eso y fue producto de terceros.

Chapter 17: Capítulo 17

Chapter Text

Stiles mira fijamente la puerta cerrada, su aliento se contrae un poco cuando retrocede un paso. Honestamente, él no sabe si es la ira o el pánico lo que se está apoderando de él, y cuando oye a Scott decir su nombre lastimosamente desde el otro lado de la puerta, se tiene que contener para no abrirla de nuevo.

Entonces su padre aparece detrás de él, pasando por delante de él para abrir la puerta.

—Scott, es bueno verte, —dice, el traidor. —Por favor pasa.

Scott camina como si fuera directo a su ejecución, y Stiles no lo ha visto parecer inseguro de sí mismo desde que aprendió a controlar sus poderes. — ¿Es un mal momento? —pregunta torpemente, e incluso tan enojado como Stiles aun esta, la pregunta parece errónea viniendo de Scott. Esta siempre ha sido su segunda casa.

 —No, está bien, —su padre le asegura.

—Realmente no lo es, —dice Stiles.

—Stiles, —John dice con desaprobación. —Yo le pedí a Scott que viniera.

Los ojos de Stiles se vuelven hacia su padre en pánico. — ¿Qué? —pregunta. — ¿Por qué?

—Sé que Derek y su…manada son tus amigos, pero no los conozco. Conozco a Scott, y confió en él, —su papá dice. —Y Scott no puede mentir también como tú.

 Stiles lucha contra un allamarada de resentimiento. Su padre siempre ha bromeado que confía en Scott más de lo que confía en Stiles. Stiles no está seguro de que haya sido una broma, y nunca pensó que fuera particularmente justo. Él debe de saber que todos los secretos que han tenido los han compartido.

Stiles solo ha mejorado en esconderlos, es todo. Stiles puede decir mentiras que serán creíbles, mientras que Scott no es el mejor pensando algo en el acto. ¿Es eso confianza, de todos modos? ¿Es confianza, si en lo único en lo que puedes confiar es tu habilidad de detectar las mentiras?

—Creo que estas subestimando lo bueno que se ha vuelto, —Stiles dice. —Incluso me ha ocultado cosas.

Scott agacha la mirada, pero Stiles no se pierde el destello de dolor. —Señor Stilinski, yo…

—Hey, está bien, —su padre dice. — ¿Estas bien, chico?

Scott asiente aun cuando es obvio que no. Sus ojos se ven ensombrecidos y Stiles traga saliva, porque ¿Quién sabía que los hombres lobo pueden tener ojeras? ¿Cuánto no ha estado durmiendo como para que eso sea posible?

Su padre debe de verlo también, porque directamente atrapa a Scott en uno de sus abrazos patentados Stilinski. Stiles quiere aferrase a su resentimiento, pero Scott se ve tan destrozado. Es por eso que Stiles no había querido verlo. Nunca puede mantener su posición en contra de Scott, se desmorona como un castillo de naipes ante él.

— ¿Tu mamá lo sabe? —John pregunta en voz baja. Scott no suelta el abrazo, solo asiente con la cabeza contra el pecho de su padre. —Está bien, muy bien. Debería.

Stiles los mira impotente, y no sabe que debería hacer. Hicieron un pacto cuando eran más jóvenes para compartir a sus padres, pero en realidad no duró más de una semana. Stiles siempre ha sido un poco posesivo con su padre, pero ahora desea haber estado un poco más dispuesto a compartirlo. Scott había estado dispuesto a compartir a su madre, porque Scott te daría la camisa que trae puesta si pensara que la necesitas más que él. Era Stiles el que nunca había sido capaz de dejar que Melissa se acercara demasiado, a pesar de que el pacto había sido su idea para empezar.

—Está bien, vamos —, dice su padre, guiando a Scott hacia la sala. —Vamos todos a sentarnos y hablar.

— ¿No hemos hablado lo suficiente? —Stiles pregunta con esperanza, mientras los sigue a la sala de estar. —He hablado tanto que creo que estoy perdiendo la voz. En realidad, podría estar sufriendo en este momento, como la tensión en las cuerdas vocales. Eso existe. Los cantantes lo tienen. ¿Entiendes siquiera el nivel de verborrea que debo habar alcanzado para que esto ocurra, teniendo en cuenta lo mucho que hablo en un día normal sin sentirme mal?

—Y, sin embargo, todavía estas usando docenas de palabras cuando “me duele la garganta” hubiera bastado. —dice su padre con ironía. —Creo que estas bien.

— ¿Qué está pasando? —Scott pregunta de forma ansiosa. Se sienta en el sofá y continúa mirando a Stiles, como si quisiera que le dé un tipo de código para que sepa lo que se supone que debe de decir.

 —Le dije, —dice Stiles después de un momento, porque obviamente su papá no les dará tiempo a solas para concordar sus historias. —Le dije todo.

Scott parece desinflarse entonces, mirando a John con cautela. Su padre no se ha apartado de Scott en absoluto, pero todavía parece receloso y preocupado, y un poco devastado, parecido a Melissa, una vez que llegó a una decisión pero aún no estaba segura de cómo actuar. —Sí, —dice Scott. —Ya me lo imaginaba.

—Está bien, Scott, —su padre dice. —Stiles y yo hemos estado hablando de todo. Entiendo porque ambos han hecho lo que han tenido que hacer, aunque no apruebe todo. Solo quiero comparar notas. Asegurarme que todos estamos en la misma página.

— ¿Estas comparando historias? — Exige Stiles. — ¿Con Scott?

Su papá lo ignora, sentándose enfrente de Scott. —¿Puedes decirme que paso cuando Gerard tomo a mi hijo?

—Scott ni si quiera estuvo ahí, no sabe nada. —Stiles dice rápidamente.

—No estaba, —Scott concuerda. —Boyd y Érica no hablan de ello, y Stiles dice que estuvo ahí unos minutos.

—Estuvo desaparecido por horas. —John contrarresta.

—No sé…—Scott mira a Stiles.

—No lo mires, —su papá dice, volviendo a la línea de visión de Scott. —Mírame a mí. Solo quiero que me digas lo que tú sabes.

—Realmente no sé nada, —Scott dice, y parece un poco avergonzado al respecto. —Nunca hablamos de esto.

—No hablaron de ello, —John repite, y parece confundido ahora. Su padre siempre ha sido capaz de decir cuando Scott está mintiendo, y no lo está haciendo, por lo que todo lo que creía saber se ha ido por la borda. Lo última vez que se fijo fue que Stiles le decía todo a Scott, así que entiendo porque su padre no esperaba esa respuesta.

— Me golpea un par de veces, —Stiles murmura. —Eso es todo. Después me dejo ir, y regrese a casa. Fin de la historia.

— ¿Qué hay de Boyd y Érica? —, pregunta su padre, mirándolo.

—Llame a Chris Argent, —Stiles dice. —Él les algo así como el Argent sano. O, el Argent menos loco, de todos modos. Sabía que no permitiría que su padre torturara a un par de estudiantes de secundaria en su sótano. El los dejo ir.

Su padre asiente, antes de mirar de nuevo a Scott. — ¿Y Gerard? Stiles me dijo que no sabe que le paso, ¿tu si?

—Estas tratando de localizarlo —, Stiles se da cuenta, interrumpiendo antes de que Scott pueda responder. —Papá, sé lo que dije, pero Gerard está muerto. Tiene que estar…Scott, debe estar muerto, ¿verdad?

—Uh, —Scott dice, mirando entre ellos. — ¿No sé? ¿Creo? Como que desapareció.

Su papá asiente, viéndose frustrado. Stiles sabe que está tratando de ser gentil con Scott, no es como si fuera tan gentil con él, pero lo entiendo. Scott no es su hijo, y no han hablado mucho en un par de años. En realidad, ya no se quedaban a dormir de la forma en la que lo hacían antes—hoy en día tienden a pasar la noche en la cosa con el padre en el turno de noche, en lugar de ir a la casa con el que está presente para supervisarlos.

Pensándolo bien, Stiles no recuerda la última vez que su padre y Scott tuvieron una conversación real.

Convertirse en adolescentes los había cambiado a todos antes de que los hombres lobo aparecieran.

— ¿Y qué hizo que se derritiera como la bruja del oeste? —su papá pegunta.

Scott frunce el ceño.  — Um… ¿qué?

—La explicación de Stiles —, dice su padre, moviendo la mano quitándole importancia. Stiles lo mira mal.

— ¡Oh! —Scott dice, sonriéndole a Stiles. Stiles lo fulmina con la mirada, y la sonrisa se desvanece de sus labios. —Sí, podría ver eso, supongo. En realidad, no se estaba derritiendo, pero la sustancia negra comenzó a salir de todas partes. Fue bastante horrible.

— ¿Qué le paso? —John pregunta.

—Cambie sus píldoras por unas llenas de ceniza de serbal, —Scott contesta con facilidad. —Deaton me ayudo a volver a llenarlas, las tomo durante semanas, así que desarrollado bastante bien en su sistema.

—Deaton y tú, —su padre repite de forma lenta, y Stiles prácticamente puede ver a Deaton siendo mentalmente agredo a la lista de su padre de los que serán interrogados después. —Solo para ser claros, Alan Deaton ayuda a un niño de dieciséis años  a matar a alguien.

—Algo así, pero ya estaba muriendo, —Scott dice. — Y no lo estábamos matando, exactamente. Bueno, lo estábamos haciendo, pero solo si teníamos razón. Solo si él quería ser convertido, y eso probablemente lo mataría de todos modos y no hubiera sido bueno para nadie si no hubiera sido así. —Scott levanta la vista y se encuentra con los ojos de su padre, algo de esa nueva confianza brillando de nuevo. —Amenazo a mi mamá, y a Stiles. No tuve otra opción.

—Pudiste decirme, —Stiles lo interrumpe suavemente. —Esa era una opción.

—Trataba de mantenerte fuera de esto, —Scott dice, frunciendo el ceño preocupado. —Nunca pensé que Gerard iría detrás de ti, Stiles, lo juro…

Stiles resopla ruidosamente, desviando la mirada hacia las escaleras.  —Claro, —dice. —Manteniéndome en la oscuridad para protegerme, golpe de genio ahí, compañero.

Su padre se aclara la garganta. —Sí, —dice. —No conozco a alguien que haya intentado hacer algo como eso.

— ¡Esta bien! Camine directo a ese,  —Stiles dice con una mueca de dolor. —Este round es para ti.

John vuelve su atención hacia Scott. — ¿Y qué paso en Arnold? —pregunta.

Stiles entorna los ojos al darse cuenta de su padre obviamente ha identificado las partes más débiles de su historia, y en lugar de interrogarlo aún más y darle la oportunidad a Stiles de hablar hasta salir del problema, había buscado a Scott para una segunda opinión.

Es una buena estrategia, y Stiles no está seguro de cómo evitar que Scott diga demasiado sin que su padre note las señales. Lo ha acorralado completamente, y son momentos como este cuando Stiles se pregunta cómo fue capaz de esconderle todo esto a su padre.

— ¿Qué hay con eso? —Scott pregunta amablemente, al mismo tiempo que Stiles insistía, —Ni si quera estaba ahí.

—En serio, —su papá pregunta secamente. —Derek dijo que estabas ahí.

Es obviamente una trampa, Stiles la puede sentir. Derek no había dicho eso, y está bastante seguro que su padre nunca estuvo a solas con él. Trata de comunicarle esto a Scott a través de sus ojos y un rápido meneo de cabeza: no caigas, no caigas con eso…

— ¿Dijo eso? —Scott pregunta, el idiota crédulo, y Stiles baja la cabeza en resignación. —Sí, quiero decir, estaba ahí por un rato. No estuvo ahí la mayor parte del tiempo.

— ¿Por la mayor parte de qué? —su padre pregunta.

— ¡Objeción! —Stiles grita, dando un paso adelante para llamar su atención. —invita a la especulación.

—Anulado, —su padre dice con facilidad, manteniendo sus ojos en Scott.

Scott parece un ciervo asustado por las luces de los autos, pero Stiles está demasiado ocupado tratando de mantenerlo callado como para apreciar la ironía.

— ¿La cabaña? —Scott dice con nerviosismo, ahora, obviamente, está trando de descubrir cuánto sabe su padre, pero no es muy bueno en ello. Eso ni si quiera es una pregunta.

— ¿Si? ¿Qué hay con la cabaña? —John pregunta.

—Estaban ahí, —Scott dice, feliz de que la cabaña no sea una sorpresa.

—Derek y Stiles, quieres decir, —su padre pegunta para aclarar las cosas. — ¿Ahí es donde comenzaron su relación?

Los ojos de Stiles se abren en horror, se tambalea hacia adelante, agitando las manos para intentar llamar a Scott, pero Scott observa a su padre, con la cara inundada de alivio porque cree que ya sabe.

—Supongo, —concuerda. —Estoy seguro de que fue su primer beso.

Stiles siente su corazón detenerse. Ve los hombros de su padre tensarse como si realmente no estaba esperando esa confirmación, y la respiración de Stiles tartamudea y casi se detiene tan bruscamente que los ojos de Scott se disparan hacia él preocupados.

Que es cuando se da cuenta de lo que ha hecho.

—Y tú no sabías eso, —Scott dice, su expresión volviéndose desesperada. Se inclina hacia Stiles. — ¡Dijiste que le contaste todo!

—Es porque estaba parado justo ahí y le dije que le conté todo, —Stiles grita. —Aprende a leer entre líneas.

— ¡Stiles! —Su padre grita, mientras se pone violentamente de pie.

Stiles cierra la boca y se cruza de brazos, negándose a mirar a ninguno de los dos.

—Stiles no tiene la culpa, —Scott dice rápidamente. —Quiero decir, ¡No creo que Stiles quería! —Se encoge ante la expresión furiosa que aparece en rostro de John. —Es decir, no, no lo decía de esa manera…no quise decir eso. No sé nada.

—Oh por Dios, Scott, —Stiles gime, poniendo su cabeza en sus manos.  — ¡Por favor para de ayudar!

Su papá se levanta y camina hacia él. — ¿Te forzó? —pregunta, su voz demasiado calmada para que este algo más que furioso.

—No, papá, no, —Stiles dice rápidamente. —No lo hizo, lo prometo. Yo quería besarlo. Si no lo hubiera hecho, podría haber arrojado su trasero de hombre lobo a seis metros con la ceniza de serbal. ¡Pero eso es todo, solo un beso! Los besos no son ilegales ¡En Europa, se besan como tres veces solo para decir hola!

— ¿Así que por fin lo estas admitiendo? —John pregunta.

La mente de Stiles está trabajando horas extras tratando de llegar a algún control de daños: por extraño que sea, sabe que de los dos secretos que Scott pudo haber derramado, este podría ser el mejor. Su padre ya estaba bastante convencido de que él y Derek estaban en medio de una especie de amor secreto, de todos modos, así que, en todo caso, la confirmación podría tranquilizarlo. El Sheriff, al igual que Stiles, siempre puede manejar mejor una situación si conoce los hechos.

—No he estado mintiendo sobre esto, —insiste Stiles. Su padre se burla y Stiles niega con la cabeza. —No, no lo he hecho. Scott tiene razón, fue nuestro primer beso, y el único, y eso es todo lo que hay. No estamos en una relación, no nos hemos estado escabullendo a citas. No hemos tenido el tiempo, para ser honestos, incluso aunque hubiéramos querido. El resto de la manada realmente estaba con nosotros en la cabaña.

—Vi a Jackson en la cabaña, —Scott dice rápidamente, todavía tratando de ayudar. —Stiles no mentiría sobre eso.

—Eso es tan ridículo que ni siquiera sé cómo responder. —su papá dice.

Stiles se encoge, pero sabe que probablemente se merecía eso.

—Esto cambia las cosas, lo sabes, ¿verdad? —John pregunta, volteándose hacia su hijo. —No estoy diciendo que no lo puedes ver, pero no te quiero solo con él. O el resto de la manada está contigo, o yo estoy allí o estas en un lugar público. Oye, Stiles, ¿me estas escuchando?

—Sí, solo estoy realmente, realmente confundido, —Stiles dice. — ¿Me estás dando permiso de salir con Derek Hale?

—No, —su papá dice, su rostro se contrajo brevemente en desagrado. —Solamente no lo estoy prohibiendo, porque tengo una idea aproximada de como acabaría eso para los dos, y no es bonita. Pero debes ser honesto conmigo, eso es lo que quiero a cambio. Permanece honesto conmigo, y no tengo que cargar mi .45 con balas para lobos. ¿Tenemos un trato?

—De acuerdo, —Stiles dice rápidamente. —Pero, ¿Qué pasa si ser honesto es lo que te hace desear cargar las balas de acónito?

—Entonces no es algo que deberías estar haciendo en primer lugar, así que no lo hagas, y no tendremos problemas. —dice su papá.

Stiles considera eso. Es una especie de trampa “condenado si lo hace, condenado si no lo hace”, ya que es prácticamente incapaz de mantenerse fuera de problemas. No está seguro de lo que está obteniendo del trato, considerando que no está saliendo con Derek, sin importar lo que su padre cree, pero sabe que su padre podría seguir la ruta de “nada de contacto” si no lo toma.

—Okay, —finalmente dice.

—Okay, —John repite. —Ahora ustedes dos…—los señala con su dedo. —Arreglen esto, sea lo que sea. —Señala directamente a Stiles. —Y hablaremos más de esto más adelante, puedes contar con eso. Pero ahora mismo necesito un trago.

Stiles abre la boca para protestar, y su padre niega con la cabeza. — ¡Aht! Ni una palabra, Stiles.

Stiles cierra su boca. Entonces su padre comienza a alejarse, y no puede evitarlo. —Está bien, pero ya conoces la regla, papá —. Grita después de él. — ¡Dos dedos debajo de la orilla!

Su padre simplemente lo despidió con un movimiento de mano antes de desaparecer en su oficina. Stiles se vuelve para mirar a Scott como si fuera su culpa, que ha decidido que es.

 —Gracias por eso, —dice. —Eso es simplemente maravilloso. Todo iba bien cuando le dije que ayude a quemar vivo a Peter Hale y que Jackson podía, por poco tiempo, convertirse en una lagartija psicótica del tamaño de un hombre, pero llegas como si nada y le dices que me viste besándome con Derek Hale ¡y lo rompes!

— ¿Tal vez es acumulativo? —Scott sugiere, inseguro.

—Oh, ¿Qué, invertiste en un calendario de una palabra por día? —Stiles grita, su voz teñida con un poco de desdén.

La expresión de Scott se cierra, su mandíbula se aprieta, y Stiles se arrepiente tan pronto como lo dice. Scott no es estúpido, él fue una de las primeras personas en darse cuenta de eso, pero siempre ha habido esa división entre ellos. El hecho de que Stiles puede terminar un ensayo en cuestión de 7 minutos y aun así obtener una A1, mientras que Scott tiene que trabajar en el por un mes y solo lograr una C.

Pero su inteligencia es la única ventaja que Stiles tiene en esta relación, y cuando su instinto de supervivencia se activa, parece que no puede evitar usarlo.

—Lo siento, —Scott dice firmemente. —No tenía idea de por qué me pidió que viniera, pensé que solo estaba preocupado por ti, o que necesitabas ayuda para comprobar que todo era real. Stiles. Stiles, ¿podrías por favor mirarme? Esto no es mi culpa.

—No, es mía, ¿recuerdas? —Stiles dice.

—Es de Derek, —Scott grita. —Lo empezó todo cuando te secuestro…

—Derek, —Stiles se ríe. — ¿Por qué no estoy sorprendido que lo quieres culpar de todo?

—Tal vez porque es ahí donde generalmente pertenece, —Scott dice.

—Estoy harto de jugar la parte de la cuerda en su pequeño juego de tira y afloja. —dice.

—Él lo empezó, —insiste Scott.

Stiles se ríe con incredulidad, retrocediendo un paso. —Dios, a veces te odio, —dice. —Realmente te odio.

—No, no es cierto, —Scott dice tembloroso, sus ojos se vuelven vidriosos como si estuviera conteniendo las lágrimas. —Stiles, no lo haces.

—Estoy harto de que los dos me usen para lastimarse. No entiendo cómo comenzó pero quiero que se detenga. Así que vamos a olvidarnos de eso, por un minuto, ¿de acuerdo? —Stiles pregunta. —Vamos a olvidarnos de las prerrogativas de las manadas y hombres lobo y solo por esta vez, trata de recordar que solíamos ser mejores amigos.

— ¿Solíamos? —Scott pregunta con voz quebrada. —Stiles, nunca paramos de serlo.

—Lo hicimos, —Stiles dice. —Lo entiendo, okay, lo hago. Estaba lidiando con ello, y estaba bien. Entiendo.

— ¿Qué entiendes? —Scott demanda. —Porque no entiendo. No sé de donde viene todo eso tan repentinamente…

—No es tan repentino, —Stiles dice. —Has estado saliendo todo el verano con Isaac. ¿Cuándo fue la última vez que me llamaste, Scott, en serio? ¿Por qué no vez tú celular? Porque ni si quiera puedo recordar.

Scott parece sorprendido por un momento antes de que sus ojos se abran y se da cuenta de que Stiles tiene razón. No es que no hayan hablado, Stiles le llamo. Stiles iba a su casa. Solían ser socios iguales, pero Stiles lleva meses cargando con su amistado solo.

—Sé que no soy una persona fácil, —Stiles dice, odiando la forma en que su voz parece temblar. —Lo sé. Pero nunca había importado, no para ti. Siempre enfrentábamos todo junto. Ahora vas y haces planes sin mí y me dejas atrás y nunca respondes cuando llamo, nunca estas allí cuando te necesito, porque estás salvando a alguien más. Y tal vez es ahí donde deberías estas, tal vez es ahí donde necesitas estar, pero soy egoísta, Scott, lo sabes. —Stiles frunce los labios. —Solo quiero mi mejor amigo devuelta.

—Nunca me perdiste. —Insiste Scott.

— ¡Sí lo hice! — Stiles grita. —Puse mucho en nuestra amistad, ya sabes. No has sido un paseo en el parque todos estos años tú tampoco. ¡No estoy hablando de que te convertiste en un maldito hombre lobo y trataras de matarme! Recuerdas cuando estábamos en tercer grado2 estabas convencido de que la señorita Brown necesitaba que le levantaran el ánimo, así que nos escondimos debajo de la mesa en la parte de atrás cuando todos salieron para el recreo y pintamos un mural detrás de su escritorio. Estuve castigado por años. ¡Tenía ocho!

—Aunque, el mural fue tu idea, —Scott protesto débilmente. —Yo sugerí cupcakes.

— ¡Irrelevante! —Stiles llora. —Oh, y qué tal en quinto grado, cuando inexplicablemente  “olvidaste” que teníamos que escribir un informe de un libro de diez páginas hasta un día antes de la fecha de entrega, y tuve que escabullirme e ir a tu casa para ayudarte a las doce de la noche. ¡Y las otras cuarenta y nueve veces que ha pasado desde entonces!

—Stiles…—Scott empieza, levantándose del sillón. Se acerca con nerviosismo, pero Stiles solo suelta una risa extraña y rota, y da un paso atrás.

—Y Allison. Oh por Dios, con Allison. ¡Lo entiendo, amigo! ¡Estás enamorado! Pero ten un poco de decoro, ¿quieres? Quiero decir, ¿realmente tienes que estar tan enamorado que estas recitando las letras de Justin Bieber todo el tiempo? ¿Alguna vez has oído hablar de la expresión: no beses y digas? ¿En serio? ¡No necesito saber todo eso!

Scott lo mira con preocupación, acercándose de nuevo con una mano medio alzada antes de bajarla frunciendo el ceño. —Stiles, necesitas calmarte, ¿okay?

Stiles sabe que Scott está escuchando su corazón frenético y traicionero. No le importa. Este no es un ataque de pánico. Por una vez Stiles está en control.  Va a terminar todo esto, y no le importa a que costo.

—Luego está el momento en que casi me ahogo tratando de mantener a Derek fuera del agua, y tú me colgaste, — dice. — ¿Recuerdas eso? Eso fue divertido. ¿Qué tal vez que me secuestraron de la cancha de Lacrosse? Me llevaron al sótano de los Argent y me usaron como saco de boxeo mientras Boyd y Érica estaban siendo torturados a menos de un metro a mi izquierda, ¿y dónde estabas de nuevo? ¡Cierto! Estabas tratando de salvar a Jackson.

—Stiles, por favor…—Scott dice, y eso es lo que finalmente rompe con su monologo. Stiles lo observa y Scott tiene una expresión como si se estuviera desangrando. Scott siempre ha mantenido en corazón bajo la manga, siempre tratando de salvar a todos. Siempre ha sido el trabajo de Stiles protegerlo, pero supone que ambos han fallado en sus roles, este último año. En realidad, nunca se recuperaron del cambio de poder que hubo cuando Scott se convirtió en un hombre lobo, convirtieron a Scott en el protector, ¿y dónde diablos dejó eso a Stiles?

Stiles solía proteger a Scott de los brabucones del patio del recreo con el solo poder de su sarcasmo y siempre solía llevar un inhalador extra en su mochila por si acaso, y Scott ya no necesitaba eso. Ya no lo necesitaba, así que lo estaba dejando atrás.

— ¿Quieres saber cuál es la peor parte? —Stiles pregunta, mientras cae contra la pared. —Sé que es porque eres una buena persona. Sé que es porque estas tratando de salvar a todos. Pero yo no soy una buena persona, ¿okay? Tu eres el héroe, no yo. Y si hubieras estado en peligro, no me hubiera importado nadie más. Me hubiera preocupado solo por ti.

— ¿Piensas que no elegiría salvarte a ti primero? —pregunta Scott.

— ¡No lo has hecho! —Stiles dice. —Incluso al principio, cuando te convertiste por primera vez, podrías controlarte con Allison, pero no conmigo, ¿y las conocías desde qué? ¿Hace cinco minutos?

Stiles parta la vista y se desliza por la pared hasta tocar el piso. Scott observa cautelosamente su caída.

— ¿Te sientes mejor? —Scott pregunta, su voz se enrollaba extrañamente alrededor de las palabras, tensa como un resorte.

—Sí, de hecho. —Stiles dice tercamente, aun negándose a mirarlo a los ojos. —Eres libre de irte.

—Oh, no lo creo. Si has terminado, entonces es mi turno. —Scott dice, arrodillándose enfrente de él. —Sí, la he jodido, pero también tú. No te atrevas a decir que no me importas. Sabes que no te haría daño si pudiera evitarlo, y si casi lo hago en las primeras lunas llenas, es solo porque no te ibas, eras el único que estabas allí. Lo siento por intentar hacerte daño. Hubiera lastimado a Allison también, si Derek no me hubiera detenido. No fui yo, no tenía control.

Stiles sabe que eso es cierto,  sabe que nunca ha sido justo sostener eso en su contra. —Lo sé, —admite. —Lo sé, lo siento.

—Y lo que sucedió en la piscina, —dice tembloroso Scott. — ¿Crees que no he repasado esa noche en mi cabeza un millón de veces, pensando en lo que podría haber pasado si no hubiera llegado a tiempo? Si hubiera muerto, y la última vez que hable contigo, ¿me pediste ayuda y ni siquiera me di cuenta?  Pensé que solo era una llamada, como cualquier otra que habíamos tenido alguna vez, y está ocupado, y no pensé. Nunca me perdonare por eso, ¿okay? No lo haré.

Scott deja escapar un suspiro tembloroso. —Y trate de buscarte, Stiles, siempre te buscare. Isaac y yo estábamos listos para seguir tu rastro, pero Derek necesitaba nuestra ayuda. Primero teníamos que asegurar a Jackson, o nadie habría estado a salvo, pero siempre iría por ti. Pero luego tu papá me envió un mensaje que decía que te había encontrado, y yo sabía que estabas a salvo.

Stiles mantiene los ojos en el suelo. Esto no es algo que él no haya descubierto por sí mismo, y racionalmente incluso sabe que Scott tomó la decisión correcta. Pero ser el último pensamiento aun dolía.

—Y entonces tu no, no hablabas de eso, así que pensé que necesitabas espacio, —Scott dice. —Luego sucedió todo eso, encontré a Jackson y Érica buscando en tu habitación, riéndose de como Derek te había llevado. Estaba aterrorizado, porque pensé que tal vez, tal vez te llevo para convertirte, o tal vez te lastimaron, por accidente o incluso a propósito, e intentaban encubrirlo.

Stiles mira hacia arriba entonces, sus ojos se agrandan cuando se da cuenta de lo que Scott había pensado. No sabe que esperaba, pero incluso con todas sus guerras con la manada de Derek, en realidad nunca había bajas reales en ninguno de las manadas. No se lastimaban el uno al otro, al menos no algo que no pudieran curar. No se le había ocurrido que Scott estaría preocupado de que Derek hiciera algo como morderlo sin su consentimiento, Stiles siempre ha sabido, instintivamente, que eso es algo que Derek nunca haría.

—Él nunca…—protesta.

—No actúes como si nunca te lastimarían, —Scott grita. —Porque lo harían. Lo han hecho.  Así que tal vez no reaccione bien, pero eso es porque no había dormido desde que descubrí que estabas desaparecido. Es porque he estado siguiéndote el rastro a pie todo el día, y cuando te encuentre, ¡estabas besando a Derek! No sabía… ¿Qué se suponía que iba a hacer con eso?

—Bueno, no sé. Esperaba que no asumieras que era una trama diabólica diseñada por Derek y yo para atraerte a Arnold para que pudieras vernos comernos la boca, —Stiles dice con ironía.

—Lo sé, lo siento, —dice Scott. —Estaba confundido y realmente preocupado. Stiles tienes que saber, no hay ningún escenario en el que no seas mi mejor amigo. Eres la persona más brillante, leal y divertida que conozco y sé que nunca te he merecido. Sé que tuve suerte y que si alguien más se tomara el tiempo para realmente conocer lo increíble que eres, te perdería.

Stiles arquea una ceja con incredulidad.  —Scott…

—No, —Scott lo interrumpe. —Déjame terminar, debes saber que pelearía por ti, ¿okay? No me importa si estas en mi manda o en la de Derek, o en ninguna. Porque eres mi mejor amigo, Stiles, eres mi hermano

— ¿Ensayaste todo esto? —pregunta Stiles, e intenta sonar informal, pero su voz se astilla y se quiebra. Scott pretende que no lo nota, y entonces Stiles recuerda porque lo ama tanto.

—Mucho, delante del espejo. —dice tímidamente Scott, antes de tirar de la manga de su sudadera para revelar un lío de tinta. —Y escribí algo de eso en mi brazo, pero eso no funcionó tan bien.

Stiles resopla, antes de esconder su cabeza en sus brazos. —Estaba equivocado, —dice. —No has cambiado en absoluto.

Scott se da vuelta y cae para sentarse al lado de Stiles, empujándose contra él hasta que están hombro con hombro. —Sabes, incluso si me dijiste que no fuera contigo esa noche, igual habría ido contigo, —dice. —Porque ibas a ir, entonces, ¿Dónde más estaría?

Stiles aprieta los ojos, permitiéndose apoyarse en Scott, su cabeza cayendo sobre su hombro. El contacto parece estabilizarlo, hacer que su corazón vuelva a su ritmo normal, igual que cuando los dedos de Derek se arrastran por su muñeca.

—Siempre me tendrás. Siempre nos vamos a tener el uno al otro —, le asegura Scott. —Sé que las cosas han estado locas, pero pensé que estábamos bien. Pensé que estabas bien, porque cada vez que pregunto, me dices que estas bien.

Stiles no ha estado más que bien desde que su madre murió. Es la respuesta, la que finalmente lo saco de la terapia y que evito que su padre lo mirara como si estuviera a punto de romperse. Es la respuesta que aprendió a dar después de calmarse solo de un ataque de pánico, o cuando llego a casa de la escuela para encontrar otra botella vacía de Jack Daniels en la basura de la cocina que no había estado allí el día anterior.

—No estoy bien, —Stiles admite.

Porque Stiles no ha estado bien desde que su madre murió.

 

 

1: Sistema de evaluación estadounidense: Se asigna una A para el valor entre 90 a un 100. Una B para 80 a 89. La C entre 75 a un 79. D cunado se saca entre 70 a 74. Y la F para cuando se reprueba la clase.

2: En tercer grado los alumnos tienen entre 8 a 9 años.

Chapter 18: Capítulo 18

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Capítulo 18

 

Su padre los encuentra apoyados el uno contra el otro una hora más tarde, y solo los mira con  resignada simpatía. Stiles no puede decir cuánto ha bebido, porque su padre nunca ha estado borracho en particular, no se pone contento y no se enoja. El solo guarda silencio, pero se pone de esa manera sin el whisky a veces también.

John se arrodilla frente a ellos. —Muy bien, vamos, niños, fuera del piso —, dice, tendiéndoles las manos para que se pongan de pie. — ¿Por qué no llamamos a Melissa, vemos si ella quiere venir a cenar? ¿Suena bien? 

—Estoy muriendo de hambre,  —Scott admite, mientras toma la mano de John y se levanta con gracia. Stiles hace lo mismo, sin la gracia, y luego vuelve a apoyarse contra la pared.

—Sí, suena como un plan —, asintió Stiles, mientras vagaba hacia la cocina. Toma su Adderall y tira una de las pastillas en su mano antes de tragarla.

—Sabes que no debes tomar eso tan tarde, —dice su padre suavemente. —No dormirás.

—Las olvide, —dice, encogiéndose de hombros.

Su padre se inclina en la puerta de la cocina, mirándolo cuidadosamente. Stiles puede escuchar a Scott arrastrando los pies con torpeza por la sala de estar, y esta incómodamente consciente del hecho de que su amigo puede escuchar cada palabra.

—Stiles, —dice John, pasándose una mano por la cara. —Lo siento.

— ¿Por qué? —Stiles pregunta con desconcierto. Se da vuelta para mirar a su padre por completo, sorprendido por la sinceridad de una disculpa que no puede rastrear hasta la fuente.

—No manejé la noticia sobre ti y Derek Hale muy bien —, admite su padre.

—Supongo, —Stiles dice. —Es un poco raro que manejaras mejor la notica de los hombres lobo. ¿Qué hay con eso?

—Me contaste sobre los hombres lobo. Bueno, eventualmente. Creo que ese es problema. —, dice su padre. —Me preocupa que me digas cómo hiciste Molotov y luego los usaste contra alguien, antes de que me digas que besaste a un chico. ¿Es porque es un chico? Porque esta es la parte que no me molesta, lo sabes ¿verdad?

—Lo sé. Pensé que sería más la diferencia de edad y los antecedentes penales —, dice Stiles. —Y también, ya sabes, hombre lobo.

—Nos es todo insignificante, Stiles —, dice John irónicamente. —Es solo que… los agujeros en tu historia, estoy empezando a sospechar que todos tienen forma de Derek. Lo estás protegiendo. Me ha preguntarme que tan serio es esto entre ustedes.

—Él no es el villano, papá, —Stiles le promete.

—No creo que esa sea realmente la recomendación más sobresaliente para su personalidad que tú crees que es, —dice John con ironía.

Scott aparece en la cocina detrás de él, de la nada, sonriendo demasiado brillante. —Llame a mi madre, —dice. —Ella dice que vendrá tan pronto como termine su turno, probablemente alrededor de media hora.

Stiles lo mira con gratitud. Scott siempre ha sido bueno para diluir una situación tanto con su actual inconsciencia como con su falta de conciencia. Aunque Stiles no está seguro de cuánto tiempo más Scott podrá llevar a cabo su acto de inocencia con su padre, ahora que está al tanto de los hombres lobo y que probablemente se dará cuenta de su súper oído.

John se endereza.  —Bien, —dice. —Ha pasado mucho tiempo desde que hicimos algo así, solo nosotros cuatro. —Mira a Scott y Stiles con preocupación. — ¿Ustedes dos arreglaron las cosas?

—Sí, —dice Stiles. —Quiero decir, las cosas aún son diferentes, pero eso no tiene que ser algo malo.

—No, —su padre concuerda, aunque parece reacio. — Aunque, a veces desearía pudiéramos volver a como las cosas eran antes.

—Iríamos muy atrás, —Stiles dice.

Scott se acerca y pasa su brazo sobre los hombros de Stiles, tratando de devolver la atención hacia él. — ¿Por qué no vamos a jugar algunos videojuegos hasta que llegue mi mamá? —pregunta a la ligera.

—No hay hecho eso por un tiempo, —dice John, luciendo aliviado.

—Sí, suena divertido, —Stiles dice, y él sabe que ya lo está haciendo de nuevo, poniendo el acto de “normal” para su padre, pero después de tantos años de condicionamiento, no está exactamente seguro de cómo se supone que debe parar.

Sigue a Scott escaleras arriba hacia su habitación, y luego cae hacia atrás en su cama. Scott se derrumba sobre él, usando una de sus piernas como almohada para el cuello. Es extraño lo normal que se siente, a pesar que no han hecho esto durante años.

—No puedo creer que tu padre haya cerrado tu ventana con clavos, —dice Scott, mientras pasa los ojos por la ventana con incredulidad.

—Lo sé, —dice Stiles con tristeza. —Lo bueno es que eres uno de los pocos hombres lobo que todavía recuerda cómo usar una puerta.

Scott ríe ligeramente, antes de inclinar la cabeza hacia un lado para mirar a Stiles. —Entonces, ¿Supongo que en realidad no vamos a jugar?

Stiles suspira y sacude la cabeza. — ¿Realmente quieres?

—Nah, —Scott dice, sacudiendo la cabeza. —Parecía que necesitabas una distracción.

—Sí, bueno, gracias por venir a mi auxilio, —dice Stiles. La declaración esta involuntariamente llena de subtexto, y Stiles suspira cuando ve a Scott ponerse tenso. —Lo digo en serio.

—Stiles, —Scott empieza seriamente. —Sabes que…

—No me vas a dar otra declaración de amor inmortal, ¿o sí? —Stiles interrumpe, lanzándole una sonrisa a medias. —En serio. ¿Allison sabe lo que sientes por mí?

—Ella puede ser mi Leia, —Scott le dice con seriedad. —Pero tú siempre serás mi Luke.

— ¿Por fin viste Star Wars? —Stiles pregunta emocionada, sus ojos se iluminan mientras se sienta en la cama.

Scott asiente solemne. —He tenido mucho tiempo para pensar estos últimos días. Sé que siempre me pides que las vea, ¡Así que los alquile! ¡Vi las dos, hasta al final!

Stiles suspira pesadamente y vuelve a caer en la cama. —Scott, hay tres. Bueno, técnicamente seis. Pero…no, hay tres. Y odio ser el que te diga esto, pero eres tan Luke que ni siquiera es gracioso. Si alguien es Han Solo, soy yo.

—Si soy Luke, estoy seguro que eso te hace Leia, —Scott dice. —Porque somos familia, ¿cierto?

— ¿Por qué siempre soy la chica? —pregunta Stiles.

— ¿Cuándo has sido la chica? —Pregunta Scott, arrugando su rostro.

—Fue toda una conversación, olvídalo. — dice.

—Mira, solo pensé que deberías ser Leia porque ella es la inteligente y sarcástica, ¿verdad? Y engañosamente badass. —Scott explica.

—Bueno, todo eso es verdad, —Stiles concuerda. —Es mejor que una princesa Disney, supongo. Excepto que Disney planea comprar a George Lucas y Leia es una princesa, así que…

—Deja de analizar las cosas, —dice Scott. — ¿Quién crees que es Han? Siento que alguien debería ser Han.

—Apuesto a que quieres que sea Isaac —, dice Stiles con resentimiento.

— ¿No están Leia y Han haciéndolo al final? —Scott pregunta con el ceño fruncido.

—Oh, Dios mío —, grita Stiles. — ¡No! Simplemente no, Isaac no es Han.

—¿Quizás Derek es Han? — Scott se aventura vacilante.

—Más como Chewbacca—, Stiles resopla. —Y no puedes soportar a Derek, ¿recuerdas?

—No... No lo odio, Stiles—, dice Scott. —Simplemente no confío en él.

—O en mí—, dice Stiles.

—Confío en ti con mi vida—, dice Scott con seriedad. —Solo... tal vez no siempre confío en ti con la tuya.

Stiles asiente. Realmente no puede estar enojado por eso; no confía en Scott con su propia vida, todo el tiempo. No confía en Scott para pasar la clase de Historia sin él, algunos días.

— ¿De verdad creías que estaba trabajando contra ti con Derek? —pregunta.

—No…simplemente no sabía que pensar, para ser sincero, Stiles, —dice Scott. —Isaac y yo estábamos siguiendo tu rastro. Isaac sabía que Derek tenía un lugar en Arnold, recordaba que lo había mencionado. Nos separamos y encontré tus zapatos en la carretera…

— ¡Tío! —Stiles interrumpe,  doblando los codos para elevarse. — ¿Encontraste mis zapatos? ¿Los tienes?

—Lo siento, ah, ¿no? —Scott responde, como su fuera una pregunta. —Estaba un poco preocupado en ese momento, preguntándome porque no estabas en ellos. Los deje ahí.

Stiles frunce el ceño. —Amaba esos zapatos.

—Haz que Derek te compre unos. —Scott dice.

—Lo hare, —Stiles dice. —Pero gracias a ti, probablemente mi padre esté planeando formas de matarlo en este momento. Incluso le di una hoja de cómo usar acónito, no lo pensé muy bien.

—No lo hará, lo sabes. Al menos, no sin razón. —dice. —Quiso decir lo que dijo. Su corazón no tartamudeo ni una vez. — Scott pasa saliva. —Pero… ¿qué hay de ti?

Stiles lo mira bruscamente. — ¿Qué quieres decir?

—Bueno, ¿es eso lo que quieres? —pregunta. — ¿Una relación con Derek?

— ¿Por qué lo dices cómo si estuviera planeando contraer una enfermedad terminal? —Stiles pregunta, y tira de sus piernas colocándolas contra su pecho, causando que Scott se caiga y golpee el colchón.

Scott suspira, girando la cabeza para mirarlo mientras se levanta. —Es solo…es extraño, Stiles. Ustedes ni siquiera se llevaban bien. Apenas hablan. Bueno, él no habla.

—No todos podemos ser el romance adolescente de libros de texto que eres, Scott. A veces la vida es caótica. A veces terminas con algo que no planeaste.

—Así que sí quieres una relación con él.

—No sé, —Stiles dice finalmente. —Crep que me necesita.

—Stiles, —comienza Scott, vacilante. — Sé cómo eres, ¿de acuerdo? Sé que cuando te apegas, empiezas a trabajar al 110%. Intentas cuidar de todos nosotros, y eso es genial. Me encanta tu forma de ser. Pero…

— ¿Pero qué?

—Pero antes de que saltes a esto de la misma forma en que haces todo lo demás, tal vez necesitas poder darme una mejor respuesta que “no ´se” cuando te pregunte si esto es lo que quieres, —dijo Scott con firmeza. —No hagas esto solo porque te gusta que te necesiten.

—Golpe bajo. —Dice Stiles, levantándose y medio cayéndose de la cama antes de poder mantenerse en pie. Scott deja escapar un pequeño sonido de protesta cuando Stiles casi lo lleva con él. —No necesito que me necesiten.

— ¿Sabes qué es una locura? —Scott levanta una ceja. —Tu corazón se mantuvo estable. Supongo que eso significa que te estas mintiendo a ti mismo.

Stiles lo mira. —Apenas te he perdonado, ya sabes. Todavía estas en libertad condicional,  —dice. — ¿Estás seguro de que quiere hablar de esto ahora?

Scott levanta la mano, rindiéndose.  —Solo estoy preocupado, —dice. —también mi mamá, por cierto. Quiere hablar contigo, pero no estaba segura de cómo abordar la situación ahora que tu padre sabe. Ella sabe que él va a estar enojado con ella por mantener el secreto por tanto tiempo.

—Oh, Dios mío, tu madre —, susurra Stiles con horror. — ¡Le dije lo que Derek hizo! Le conté que choque el Porsche. Si le dice a mi padre…—Coloca las palmas de sus manos contra las sienes mientras trata de pensar. —Es solo una última mentira, ¿es tanto pedir? No puede saber. Se asustaría completamente. Y si alguna vez descubre que Derek me metió en la cajuela…

— ¿Chocaste el Porsche? Y espera, ¿qué hizo Derek? —Exige Scott, su voz hace un eco extraño con el bajo nivel de un gruñido.

—Oh, no empieces —, responde Stiles. —Érica me golpeo con un carburador y me arrojo un contenedor de basura, y nunca te molestó. Solo quieres una excusa para que puedas estar enojado con Derek.

— ¿Érica hizo qué? —Scott pregunta con enojo, el gruñido aun ahí. —Stiles, ¿qué diablos? ¿Qué más te han hecho que yo no sepa?

—Te dije sobre eso. — Insiste Stiles.

— ¿Estás hablando de esa vez en que intentamos evitar que Boyd se convirtiera? Porque lo que recuerdo es que dijiste que Érica te detuvo e inutilizo tu Jeep, —Scott grita. —Nunca dijiste como te detuvo.

—Sí, bueno, tu nunca preguntaste, —Stiles le recuera. —En serio, ¿qué voy a hacer? Va a llegar pronto.

—Mi mamá no te va a delatar, —dice Scott con decisión. —Está realmente preocupada por ti, Stiles. Como, seriamente preocupada. Ha estado enojada conmigo, porque cree que hice algo para disgustarte.

Stiles levanta una ceja y Scott se sonroja. —Está bien, en cierto modo te moleste, —dice Scott. — ¡Lo siento! No era mi intención.

—Sí, sí, —Stiles dice, mordiéndose el labio. Era extraño de él haberle dicho tanto a Melissa en primer lugar, pero había estado en medio de una resaca de Adderall y a dos pasos de un ataque de pánico. Había necesitado hablar con alguien.

—Ella está aquí, —le informa Scott, y un momento después, Stiles puede escuchar el sonido del auto deteniéndose.

—Mierda, —Stiles dice. —Okay. Necesito que este sola.

Scott hace una mueca. —Uh, Stiles, no te voy a ayudar a conseguir a mi mamá sola, —dice. —He visto tu camiseta de madres solteras.

Stiles pone los ojos en blanco. —Solo necesito aclarar nuestra historia, —dice. —Melissa aguantara el interrogatorio mucho mejor que tú, pero eso solo su no quiere decírselo.

Stiles oye la puerta principal y sale de su habitación, comenzando a bajar las escaleras con Scott sobre sus talones. Ve a Melissa parada incómodamente en la entrada, en encontrarse realmente con los ojos de su padre.

Él está tratando de encontrar una manera de alejarla de su padre o de pedirle silencio con una especie de mensaje intricado de manos cuando Melissa mira directamente a su padre y habla.

—Pensé que iría a recoger algo para nosotros, ¿quizás algunas hamburguesas? —dice, demasiado casual. —Stiles puede venir conmigo.

—Está castigado, —John dice rápidamente. —Podemos ordenar algo.

—Prometo no dejarlo bajar del auto. —contesta fácilmente, Melissa.

Se miran fijamente el uno al otro como si fuera una especie de rara batalla de voluntades entre los padres. Scott sigue mirando de uno a otro como si intentara seguir los movimientos en un partido de tenis. Stiles sabe que su padre es increíble, y no es alguien con quien meterse, pero honestamente apostaría su dinero a que gana Melissa.

Finalmente, su padre mira hacia otro lado. —Espero papas fritas.

—Hecho, —, dice Melissa agradecida.

—Esperen un momento. No estoy de acuerdo —, protesta Stiles, a pesar de que esta es exactamente la clase de oportunidad que él había estado intentando orquestar, La salud de su padre es lo primero. — ¡Las papas fritas no están en la lista de las cosas que puedes comer! Melissa esperaba más de ti. ¡Eres enfermera!

—Una vez no dolerá —, dice, mientras gira hacia la puerta. —Zapatos esta vez, por favor, Stiles.

Stiles mira sus pies cubiertos con calcetines de algodón y suspira, girándose hacia las escaleras. Se apresura a su habitación y se pone los zapatos, agarrando su sudadera con capucha de la parte posterior de la silla de su escritorio. Puede escuchar a todos hablando débilmente en la planta baja, y es una de las pocas veces que desea tener poderes de hombre lobo.

Se dirige hacia las escaleras y todos dejan de hablar para voltearse a mirarlo. Melissa sonríe extrañamente. —Volveremos en seguida —, dice, extendiéndose para darle a Stiles un suave empujón hacia la puerta.

—Me quedaré aquí, entonces, ¿supongo? —Scott pregunta confundido.

—Está bien, cariño —, dice Melissa con facilidad, antes de cerrar la puerta detrás de ello.

—No sé si debería o no estar aterrorizado en este momento, —dice Stiles, mientras Melissa lo dirige hacia el auto.

—Tenemos que hablar—, dice ella, apuntándole con los ojos entrecerrados mientras Stiles se mueve hacia la puerta del lado del pasajero.

—Aterrorizado entonces —, dice Stiles, sin embargo se mete en el auto.

Melissa entre de su lado y enciende el auto, saliendo a la carretera como si realmente estuvieran en camino a recoger hamburguesas. Por un momento, Stiles piensa que tendrá que encontrar una manera de romper el incómodo silencio a pesar de la insistencia anterior de Melissa de que necesitan hablar. Deja escapar un suspiro de alivio cuando ella finalmente mira hacia él y rompe el silencio por su cuenta.

—Tú y Scott parecían estar bien —, dice vacilante. —Ha estado lloriqueando durante días como… bueno, como si acabara de perder a su mejor amigo. —Ella frunce el ceño un poco, antes de mirarlo rápidamente. — ¿Quiero saber lo que hizo? Porque voy a ser honesta contigo, chico. No pensé que nada los podría separar.

—No fue solo una cosa, y no fue solo él, —Stiles dice. —Fue más como…osmosis. Y estamos bien ahora. Bueno, en su mayoría. —Se gira para mirarla. — ¿Qué hay de ti y mi papá?

—Creo que vamos a tener que trabajar un poco —, dice Melissa. —Llamó antes y hablamos brevemente. No puedo decir que se haya emocionado conmigo. O con cualquiera de nosotros. Realmente no lo culpo. Si él sabía de Scott todo este tiempo y no me dijo… —se desvía. —Bueno, digamos que podría no ser tan indulgente.

—Pero te hicimos guardar el secreto —, protesta Stiles.

—Ustedes, niños, no me dicen que hacer, ¿recuerdan? —ella pregunta. —Soy la madre.

—Tú no eres mi madre —, dice, como si la respuesta estuviera programada.

Melissa se queda muy quieta. Es lo que siempre ha estado entre ellos, ese conocimiento de lo que no son, pero en realidad nunca lo han dicho en voz alta. No es como si alguna vez hubiera sido necesario, ambos saben que es verdad. No es algo que ninguno de ellos olvide nunca.

—Stiles, —dice Melissa. —Llámame como quiera, pero soy algo.

—Por supuesto que lo eres, —dice Stiles, su voz áspera. —Tú eres Melissa.

—Bueno. —Melissa asiente entonces, como si se diera cuenta de lo que realmente significa para él. —Pero sigo siendo el adulto, ¿de acuerdo? Soy responsable de ti cuando estás conmigo, te guste o no.

—Tú no eres…

—Lo soy —, interrumpe. —Tu padre me ha confiado mucho a lo largo de los años, Stiles. Y hasta que todo esto sucedió con los hombres lobo y las mentiras y…pensé que lo hice bien, ¿de acuerdo? Pensé…pero necesito saber algo, y necesito que me digas la verdad —. Ella respira profundamente y se niega a mirarlo de nuevo. — ¿Estas durmiendo con Derek Hale?

Los ojos de Stiles se agrandan. — ¿Por qué todos piensan de repente que tengo juego?

—Scott me dijo que te vio besándolo. —Melissa insiste.

—Claro, —Stiles dice. —Estoy empezando a sospechar que su monologo interno es expresado por Kristen Bell. Mira, Scott no sabe de qué está hablando, ¿de acuerdo?

—Stiles, por favor. No me mientas. No sobre esto —, dice Melissa, y suena extraña, algo desesperada en lugar de su habitual tono de voz. —Porque una cosa es mentir sobre el hecho de que mi hijo es un hombre lobo, pero si le he dicho a tu padre que estas durmiendo en mi casa mientras ese hombre te ha estado lastimando, nunca me lo perdonare.

Melissa deja escapar un sonido lastimado y roto, casi como un sollozo y repentinamente se orilla aun lado de la carretera. Se estaciona con manos temblorosas, y Stiles la mira con horror cuando se da cuenta de que está llorando.

— ¿Qué estas…?—empieza, tragando duro. —Por favor no llores. Sabes que no puede soportar cuando las chicas llorar. O los chicos, en cualquier caso. Los bebés están bien, supongo, pero solo porque eso es todo lo que haces. Sin embargo, no puedo manejar esto, okay, necesito que te detengas.

—No estoy llorando, —insiste Melissa, en medio de respiraciones sospechosamente atrapadas, lo que perjudica su credibilidad.

—Claro, —dice Stiles. — ¿Estos vamos a fingir que estas goteando? —Melissa se gira para mirarlo y Stiles levanta las manos en señal de sumisión. —Está bien, está bien. Estoy seguro de que la gente tiene fugas todo el tiempo, está bien. 

—Solo… ha estado haciendo todo esto mal —, dice ella, respirando hondo para calmarse. —Te he dejado y a Scott ponerse en peligro una y otra vez.

—No, no lo has hecho, —dice Stiles. —El peligro viene a nosotros, nunca hubo otra opción más que enfrentarlo.

— ¿Y Derek? —Melissa pregunta. —¿Tenías una opción?

— ¡No estamos durmiendo juntos! —Stiles protesta. —Así que, una: no hay una relación, ¿okay? No hay un yo y Derek. Y dos: incluso si lo hubiera, él no me haría daño. Derek no es así.

—Oh, claro—, dice Melissa, riendo ásperamente. —Sé una cosa o dos acerca de enamorar del chico malo, Stiles.

—Oh. Dios mío. ¿No podemos, por favor, no hablar sobre chicos? —Stiles pregunta. —por favor, ¿Podemos?

—Scott ya me conto todo sobre Derek Hale, —continua Melissa. —Sé que mordió a esos otros niños.

Stiles suspira. El pasado de Derek suena lo suficientemente sombrío como para ser explicado a través del punto de vista bastante parcial de Scott. —Mira, no voy a decir que no estaba actuando un poco como un traficante de drogas, eliminando a los débiles —, dice. —Pero hay otra manera de verlo que Scott simplemente no puede vez. El padre de Isaac lo estaba golpeando hasta sacarle la mierda, y nadie más estaba haciendo algo. Érica estaba a punto de matarse a ella misma, estaba tan desesperada por encajar. Boyd solo...se estaba desvaneciendo. No tenía a nadie. No podía conectarse, Derek los salvo.

— ¿Y qué hay de ti? —demanda. —Me dijiste que estaba practicando sus habilidades de secuestrador contigo, ¿Qué significa eso, Stiles? No pensé, quiero decir, hasta que Scott me hablo sobre el beso, pensé que era, no sé, casi inofensivo, al menos en comparación con lo que son nuestras vidas, pero ahora me estoy volviendo loca…

—Acababa de salvarme la vida y, en primer lugar, no estaba tan emocionado de que me arriesgara. Lo llamo custodia preventiva —, dice Stiles, mirándola. —Sé que Scott no puede verlo, pero no es un mal tipo. Realmente no lo es. Esta roto, pero está tratando de no estarlo. No creo que merezca que lo lastimen más, eso es todo. Creo que ha sido herido lo suficiente.

—Está bien, conozco este discurso, —dice Melissa. —Le di este discurso a mi madre cuando tenía diecinueve y estaba embarazada.

—En realidad no puedo quedar embarazado, y dudo seriamente que el señor McCall anduviera por ahí mordiendo adolescentes —, dice Stiles. —Así que estoy bastante seguro de que nuestros discursos no son tan similares como pareces pensar.

—Oh touché —.Melissa pone los ojos en su dirección. Stiles siempre se ha preguntado como Scott ha logrado mantenerse tan libre de sarcasmos cuando tiene que aguantar a los dos. —Sabes exactamente de lo que estoy hablando, chico.

—Puedo prometerte que no. Todavía sigo virgo intacto, ¿vale? El otro día salía a pasear con toda una manada de unicornios, así que de virgen soy todavía. ¿Estamos satisfechos? —Stiles pregunta. 

—Ojala Scott aun pudiera ver unicornios, —suspira Melissa.

—Basándome en las cosas que he oído, estoy bastante seguro de que los unicornios huirían de Scott —, dice Stiles.

—No necesito saber eso, Stiles—, dice ella con firmeza.

—No tienes que preocuparte por mí, sabes —, dice Stiles —Si de eso se trata.

—Siempre me preocupare por ti —, dice Melissa en voz baja. — ¿Recuerdas cuando nos conocimos? Tú y Scott acababan de comenzar el primer grado, y fue justo cuando comenzó a tener esos horribles ataques de asma. Le envié una nota del médico para que no lo dejaran salir durante el recreo. —Melissa sacude la cabeza, mirando a Stiles con cariño. —En el tercer día de escuela, vengo a buscarlo y un pequeño niño de ni siquiera un metro de altura con ojos de venado camina hacia mí, y me entrega una petición firmada de “Liberen a Scott”

Melissa se ríe ligeramente, a pesar de que todavía tiene lágrimas no derramadas en sus ojos. —Hiciste que toda la clase firmara, todo con un crayón purpura.

—Jackson en realidad se abstuvo —, le recuerda Stiles. —Dijo que su padre siempre le dijo que no firmara nada sin un abogado presente.

— ¿Por qué eso no me sorprende? —pregunta. Toma una respiración temblorosa, golpeando nerviosamente una mano contra el volante. —Nunca pregunté qué te hizo hacerlo.

—Presionaba su cara contra la ventana para mirarnos cuando todos salíamos a jugar —, dice Stiles, y se encoge de hombros. —Conoces a Scott y sus ojos enormes y tristes. No podía divertirme mientras estaba allí mirándonos como la respuesta de Beacon Hill a Tiny Tim1. Algo tenía que hacerse.

—No fue la petición la que funciono, ya sabes —, dice en voz baja. — ¿Recuerdas lo que me dijiste?

Stiles mira por la ventana del lado del pasajero y se encoge de hombros. —Fue hace mucho tiempo, —dice.

—Me prometiste que no dejarías que Scott se lastimara, que tenías un inhalador adicional por si acaso y que estabas investigando el asma para poder reconocer los signos de un ataque. En realidad tenías una lista de verificación —, dice ella, ahogándose la risa. —Prometiste cuidar de él, y siempre lo has hecho.

Ella se ríe de esa manera cariñosa y exasperada que siempre usa cuando piensa en él y Scott.  — ¿Sabes que nunca tuve que ayudarlo con su tarea? Ni siquiera tuve que enseñarle a conducir, porque ya lo habías hecho en la Reserva cuando tenían catorce años —, su voz toma un tono afilado y Stiles hace una mueca.

—Todavía no lo olvidas, ¿eh? —pregunta.

—Nunca superare eso, Stiles, los dos podrían haber muerto —, dice ella, antes de sacudir la cabeza y mirando hacia otro lado. —Lo juro, a veces siento que estamos compartiendo custodia.  

—Me siento así todo el tiempo —, dice Stiles con un suspiro. Mueve la cabeza por el asiento hasta que la mira. — ¿De qué se trata realmente? ¿Por qué este viaje por el carril de la memoria?

—Todos estos años nunca lo he cuestionado —, dice en voz baja. —Solo te deje hacerlo, desde ese día en que me convenciste para que Scott volviera a salir al receso, y nunca pensé en preguntarme quien estaba cuidado de ti.

Melissa se gira para mirarlo con tristeza. —Todos pusimos demasiada presión en ti, lo reconozco, al menos John no tenía idea de lo mucho con lo que estabas lidiando, pero yo no tengo excusa. Dios, nunca me va a perdonar, ¿verdad?

 —No te culpara, —Stiles dice.

—Tal vez. Pero, no sabe todo, ¿cierto?

—No, y por favor, no le digas, —dice Stiles con seriedad. —Ya está lidiando con muchas cosas, yo solo…no creo que él pueda manejar, ¿vale? Tal vez algún día, pero por ahora, no necesita saberlo. Sé que existe toda esta filosofía de que la verdad es lo primordial en relaciones sanas o algo así, pero a veces la verdad duele. A veces no ayuda a nadie. Así que si pudieras…  

—No le diré, —Melissa dice.

—Lo sé, y odio tener que preguntarte pero…espera, ¿qué? —Stiles pregunta, volviéndose hacia ella con los ojos muy abiertos. — ¿Dijiste que no le dirías?

—No creo que John me perdone por completo, y quizás no debería, porque sé que no aprobaría lo que voy a decir. Pero te conozco, Stiles. Sé que jurarías sobre una pila de Biblias que le dirías todo y después voltearte y mentir el momento que pienses que eso es lo que debes de hacer para protegerlo. Así que quiero que vengas a mí, en cambio. Si puedes no puedes ir a él, entonces cuenta conmigo. —Lo mira. —Quiero que sepas que puedes confiar en mí, ¿okay?

—Confió en ti —, dice Stiles, pero su voz carece de cierta convicción y los ojos de Melissa se alejan porque ella también lo nota.

—Puedes, Stiles. Puedes venir a mí con cualquier cosa —, dice ella. —Incluso si solo necesitas condones, o lubricante.

— ¡Oh Dios mío! ¡Se lo que “cualquier cosa” significa! —Stiles lloriquea, cubriéndose la cara con las manos. —Por favor detente.

—Solo…—Melissa se detiene. —Se fui yo quien te empujo contra un rincón sobre todo esto en primer lugar, simplemente creo que él tenía derecho a saber sobre el peligro en el que estas. Pero no podemos contarle todo a nuestros padres, yo lo sé, y Dios sabe que cosas Scott ha hecho que no quiero saber. —Melissa lo mira. —Pero puedes hablar conmigo, ¿de acuerdo? Puedes confiar en mí.

—Bueno, eso espero. Criamos a Scott juntos, —dice Stiles con ironía.

Melissa se ríe alegremente, todo rastro de lágrimas desapareció. Scott tiene eso de ella, Stiles se da cuenta. La forma en que pueden pasar de triste a feliz en un segundo, dejando que el dolor desaparezca y siguen adelante.

Stiles nunca ha podido hacer eso, no importa lo bueno que sea pretendiendo que puede.

— ¿Así que realmente no dirás nada? —Pregunta, solo para estar seguro.

—No diré nada—, promete ella. —Pero ayúdame, Stiles, si Derek te lastima, no tendrá que lidiar con el Sheriff, ¿me entiendes? —Melissa mira hacia delante y enciende el auto, volviendo a la carretera. —Tendrá que lidiar conmigo.

 

 

1 Tiny Tim: fue un cantante y vocalista, compositor, cantautor, cronista y trovador. Artista estrafalario que hacía uso de trajes y corbatas de colores y acompañado de un ukelele e interpretaba canciones antiguas en su inconfundible voz de falsete/vibrato

Chapter 19: Capítulo 19

Notes:

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Chapter Text

Cenar solo los cuatro es agradable, y casi normal. Stiles roba las papas rizadas de su papá más rápido de lo que él puede comerlas, y su papá lo deja. Scott y Melissa se ríen entre sí más fácilmente de lo que ha visto por un tiempo, y después de que comen, Scott y Stiles realmente van a jugar un videojuego para que Melissa y John puedan hablar solos.

Por supuesto, Stiles utiliza el súper oído de Scott, porque ¿para qué sirve si no para espiar a sus padres?

—Pero, ¿qué están diciendo? —Stiles exige, por aproximadamente setentava vez.

Scott simplemente se encoge de hombros y usa viciosamente su distracción para intentar vencerlo en combate  por una vez. Stiles en realidad no está seguro de que es este video juego al que se supone deben estar jugando, pero sigue pretendiendo presionando los botones. —Scott, —se queja.

Scott deja escapar un suspiro. —Están diciendo que buen chico eres, —dice, con todo de gran paciencia, —y que tan maduro y estúpido…

— ¡Hey! —Stiles grita. — ¡Una de esa no pertenece ahí!

—eres para alguien tal inteligente. —Scott continuo, sin molestarse.

—Un poco mejor, —Stiles bufa. —Sigue.

—Y que mi mamá mantuvo el secreto porque tenía miedo por mí, y lo siente, y él lo siente, y los dos los sienten, y ahora van a comer galletas porque logro pasarlos y esconderlos en la caja fuerte de su oficina…

—Lo sabía, —Stiles gruñe, empezando a pararse. —Sabía que tenía que conseguir galletas de alguna parte.

Scott lo agarra y lo tira hacia abajo. — ¡No puedes hacerles saber que estaba escuchando! —le recuerda.

 Stiles entorna los ojos. —Habrá que hacer algo con respecto a esta reserva oculta de galletas. —dice, muy en serio. —Pero supongo que puedo esperar un tiempo.

— A veces me asustas, ¿sabes? —Scott pregunta, antes de girar hacia la pantalla mientras el sonido de la muerte del juego sonaba. — ¿Me acabas de matar? ¿Cómo? ¡Ni si quiera estabas prestando atención!

Stiles mira el control remoto en sus manos y se encoge de hombros. Levantando una mano para morderse nerviosamente las uñas. — ¿Qué están diciendo ahora? —pregunta.

— ¿Pensé que dijiste que mi mamá no iba a decir nada? —Scott pregunta. — ¿Por qué estás tan preocupado?

—No va a decir nada sobre Derek, —Stiles explica. — Hemos hecho muchas otras cosas que preferiría que mi padre no supiera.

Scott frunce el ceño cuando se da cuenta de que, sí, eso es bastante cierto. Luego se encoge de hombros y vuelve al juego, porque el umbral de Scott para pensar en el futuro solo se extiende por unos tres minutos antes de apagarse.

— Yo solo…tampoco quiero que se peleen por mi culpa, —dice Stiles con un suspiro. —He causado suficiente dalo en los últimos días.

—Está compartiendo sus galletas con ella, —Scott dice, mirándolo. —Creo que van a estar bien.

—Eso es verdad, —Stiles concuerda, porque la lógica de Scott puede ser de nivel de jardín de infantes, pero tiene sentido. — ¡Y mientras más galletas como Melissa, menos hay para él! —Sonríe, para borrarse después con culpabilidad. —Oh, lo siento. Sé que es tu mamá.

Scott lo mira como su estuviera loco. Es una mirada que lamentablemente Stiles está acostumbrado.

—Está bien, Stiles. —dice, dándose la vuelta girando los ojos. —No soy tan estricto como tú. Mi mamá tiene permitido comer galletas.

Scott se niega a escuchar a escondidas por él, alegando que no puede escucharlos en la oficina de su padre. Stiles está bastante seguro de que está mintiendo entre dientes, ya que puede escuchar los latidos del corazón de Allison a una milla de distancia, pero el gran amor de Scott por todas las cosas que Allison hace no debe descartarse como un factor mitigante, y Stiles no puede demostrar que los puede escuchar.

Melissa viene por Scott, y Stiles los acompaña a la puerta con su padre. Entonces es solo él y su papá otra vez, y Stiles realmente quiere hablar sobre las galletas pero sabe que este probablemente no es el momento.

 — ¿Tu y Melissa están bien? —prefiere preguntar.

 

—No estoy contento con nada de esto, pero no puedo culparla —, suspira. —Si hubieras sido tú, bueno, tampoco estoy seguro de que hubiera confiado en alguien. Tal vez ni siquiera ella.

Stiles asiente, luego toma una respiración profunda. — ¿Y qué hay de nosotros? —pregunta vacilante. — ¿estamos bien?

—Voy a ser honesto aquí, chico —, suspira John. —Lo que realmente quiero hacer es mantenerte encerrado en algún lugar para que estés a salvo, pero aparentemente sabes cómo hacerle puentes a los coches, y no me gustan mis posibilidades de éxito.

—Solo lo he hecho una vez —, protesta Stiles sin convicción. —No es como si estuviera planeando hacer una carrera profesional. En cualquier caso, no sería un plan a largo plazo muy inteligente. Los autos se están volviendo cada vez más aprueba de robo ya que hacen que el cableado sea casi inaccesible y ponen medidas de seguridad en la columna de dirección, así que realmente toda la técnica se está volviendo obsoleta, o al menos demasiado complicada para que yo tenga el tiempo o la inclinación…

—No es realmente el problema aquí —, su padre interviene. —Soy un policía, Stiles. No necesito que me des un resumen del cableado.

—Correcto —, dice Stiles. —Lo olvide, tú también sabes cómo hacerlo.

—No se trata de mí —, dice su padre rápidamente, lo que hace que Stiles se pregunte por un momento si tal vez el conocimiento de su padre sobre el cableado no es por su trabajo, después de todo. —Esto es sobre ti, y lo que vamos a hacer al respecto.

—Creí que habías decidido, —suspira Stiles. —Castigado de por vida, ¿recuerdas?

—Sí, pero mi imagino que te debo al menos la posibilidad de libertad condicional —, dice, y se pasa una mano por el pelo. —Mira, niño. No sé qué más hacer aquí, así que hare lo que siempre ha funcionado. —frunce el ceño hacia Stiles. —Voy a culparte hasta el inferno1

—Papá, —dice Stiles, con los ojos muy abiertos. — ¿Qué…?

—Si tratara de forzarte, encontrarías una forma de evitarlo—, dice John. —Te conozco lo suficiente como para saber eso. Así que este soy yo preguntando, Stiles. Este soy yo suplicando. Porque este último año, no ha sido fácil para mí tampoco. Casi pierdo mi trabajo, y la única razón por la que lo recuperé es que perdimos la mitad de nuestro personal. Pensé…sentí que también te estaba perdiendo a ti, y ahora que sé lo que realmente estaba pasando, necesito saber que estás a salvo.

— ¿Qué quieres que haga? —pregunta Stiles. Su tono está teñido de desesperación, porque está bastante seguro de que hará todo lo que su padre le pida ahora mismo. Stiles siempre ha sido un imbécil para el Guilt trip, pero su padre casi nunca recurre a usar uno.

— ¿Quiero dos semanas? —dice John. —Dos semanas sin que huyas haciendo lo que sea que quieras, dos semanas para que trate de resolver esto. Dos semanas, Stiles. Eso es todo lo que pido. No creo que sea mucho.

—Dos semanas sin meterme en problemas —, dice Stiles, dejando escapar un suspiro de alivio. —Creo que incluso yo puedo manejar eso.

—Te das cuenta que nos acabas de que nos acabas de maldecir —, dice su padre.

—Uh, si te hace sentir mejor, no creo que los hechizos sea algo real, —dice Stiles. —Al menos no a menos que los fae2 estén involucrados.

—Por favor, dime que estas bromeado —, dice John.

Stiles le da una palmadita a su padre en el hombro. —Buenas noches, papá —, dice alegremente, antes de comenzar rápidamente a subir las escaleras a su habitación.

[…]

Stiles se despierta a la mañana siguiente sintiéndose más como él mismo que en años. Agarra una camiseta grafica que dice con orgullo: “¡SIEMPRE SE TU MISMO! A MENOS QUE PUEDAS SER BATMAN—ENTONCES SIEMRPRE SE BATMAN”

Érica se la había comprado antes de su experiencia de tortura con Argent, como agradecimiento por ayudarla cuando estaba sufriendo su ataque de epilepsia. Siempre le ha gustado, y ahora que han vuelto a hablar, ha decidido que puede rescatarla desde donde lo había arrojado con rabia debajo de su cama.

Se pone los vaqueros y unos converse, y luego sale volando por las escaleras, lleno de energía y un poco nervioso por el hecho de que todavía está castigado. Él sabe que probablemente rebotará en las paredes muy pronto, pero incluso eso no lo molesta, porque al menos las cosas están volviendo a lo normal. Rebotar en las paredes es su línea de base, honestamente.

Se desliza hasta detenerse en la cocina para tomar su Adderall, engulle su dosis regular, y se congela.

 Porque Chris Argent está sentado en la mesa de la cocina, tomando una taza de café. Sonríe serenamente, y Stiles retrocede hasta que sale de la cocina, y luego se da la vuelta y casi choca con su padre.

—Papá, —Stiles dice con urgencia. —Papá, Chris Argent está en nuestra cocina.

—Sí, hijo, lo sé, —John dice.

—Siente que deberías estar más preocupado por esto, —dice.

Chris se aclara la garganta detrás de él, y Stiles se gira para enfrentarlo con una sonrisa amplia y falsa. —Bueno, si no es Marilyn Munster3 —, dice Stiles.

Su padre le da una mirada como si le diera un golpe en la cabeza si todavía no estuviera un poco herido, pero la forma en que se desliza la sonrisa de Chris hace que valga la pena.

—Stiles —, saluda con cautela.

—Le dije a Chris que viniera, —, John explica.

—Si esto es para verificar aún más me historia —, dice Stiles, —Siento que debo advertirte que Chris miente casi sobre todo, todo el tiempo. Es toda su vida, mentir sobre cosas. Hola, soy nuevo en la ciudad, ¿ves? Vendo armas, ¿qué es lo que dices? Por supuesto que no, no las uso para cazar despistados hombres lobo como deporte…

John se acerca y pone su mano sobre la boca de Stiles, interrumpiéndolo, y sonríe a modo de disculpa a Chris. —Lo siento por él —, dice.

—Estoy empezando a acostumbrarme a eso —, dice Chris con indiferencia.

— ¿De verdad? —John pregunta. — Han sido dieciséis años y todavía no me acostumbro.

Stiles retira la mano de su padre y le devuelve su atención a Chris. — ¿Por qué estás aquí? —demanda.

—Stiles —, su papá suspira. —Sé que te enseñé modales en algún momento.

—Solo puedo conservar cierta información, papá—, dice. —Descarto lo que no es relevante.

Chris sonríe lentamente. Es una bonita sonrisa, objetivamente. Si Stiles lo viera en la calle, pensaría, parece un buen tipo. Pero sabe exactamente de lo que es capaz, sabe todo lo que está pasando debajo de la superficie cuidadosamente estructurada, y agrega amenaza a casi todo lo que hace. Probablemente corta el césped de amenazadoramente.

—Estoy aquí para ayudar —, dice Chris.

Caso y punto: oferta de ayuda agradablemente hablada = amenazante.

Stiles se sorprende repentinamente con el pensamiento horrible de que Allison ha vuelto a incumplir su palabra y Chris sabe, pero su padre fue quien lo invito. Si Chris supiera lo que Derek hizo, ¿seguramente había actuado antes?

—Me ayudara a enseñarte a disparar —, explica su padre.

Stiles se siente aliviado de que no se trate de Derek durante treinta segundo, antes de comenzar a enloquecer. —Espera, ¿qué? ¿Disparar? ¿Disparar qué? —demanda.

—Una pistola, Stiles —, dice su padre con paciencia.

— ¿Vas a confiarme un arma? —Stiles pregunta con incredulidad. —Tal vez no recuerdes la maliciosa batalla de Nerf Gun del 2009. Casi pierdo un ojo. Me gustan mis ojos, papá. Tengo en buena autoridad que es una de mis mejores características.

—Necesitas tener una forma de defenderte—, dice.

— ¡Tengo una manera de defenderme! Me escondo detrás de Scott —dice Stiles. —Y a veces Derek, pero casi siempre me grita que corra y luego termina herido porque esta distraído. El peor escudo de hombre lobo de todos los tiempos, para ser honesto.

 — ¿Por qué es que cada vez que intentas tranquilizarme, me siento aún más preocupado? —, pregunta John, mientras se acerca, pellizcándose el puente de la nariz.

—No lo sé —, dice Stiles. —Creo que soy bastante asombroso en ser tranquilizador.

—Chris sabe mucho más sobre esto que yo —, dice su padre. — Creo que debemos aprovechar eso, y él está dispuesto a ayudar.

—Pero no quiero ser un cazador —, dice Stiles. —No podría cazar nada. Ni si quiera podría cazar pequeños conejos. Especialmente no conejos pequeños. Pero tampoco ciervos. Llore durante Bambi. Bueno, Scott lloro lo suficiente por los dos. Fue traumático.

—Stiles…—comienza su papá.

— ¡Tengo un punto! —Stiles grita. —Definitivamente no estoy listo para querer cazar hombres lobo, muchas gracias.

— ¿Qué hay de aprender a defenderte contra los hombres lobo que quisieran matarte? —Chris pregunta amablemente, como si estuviera preguntado por el clima. ¿Es un hermoso día, no es así? Espero que no tengas que matar a nadie.

—Lo he estado haciendo bien hasta ahora —, dice Stiles.

—Stiles, hay cosas que necesitamos saber —, dice su papá. —Estas cosas están ahí afuera, bueno, por lo que parece, no todos los hombres lobo son tan relajados como Scott. Necesitamos saber que podemos hacer para detenerlos, si es necesario. Si no te quedas fuera de esto, entonces necesitas sabes cómo mantenerte seguro.

Él sabe que su padre tiene razón, y no es que a Stiles le guste ser el menos intimidante de todos su amigos, simplemente cree que lo compensa todo con sus brillantes deducciones y encanto.

—Pero soy el compañero inteligente, —explica Stiles. —Casi siempre me quedo al margen y le digo a la gente qué hacer de una manera muy sarcástica pero ultimadamente entrañable.

—No recuerdo que estuvieras muy lejos cuando derribamos a Peter Hale —, dice Chris con ironía.

Stiles se gira para fulminarlo con la mirada, agradecido de que al menos le haya contado a su padre la verdad sobre esa pequeña historia en partículas. —Probablemente me vi muy bien esa noche en comparación con Jackson—, explica.

—Jackson, antes de ser hombre lobo, esta tan valiente como el León cobarde4, así que puede ver por qué estas confundido.

 —Nos llevara a un área de entrenamiento que ha establecido en la Reserva —, dice su padre, obviamente ignorando la indignación de Stiles, porque te un filtro incorporado cuando se trata del balbuceo de su hijo.

—Papá, la Reserva se conserva, por eso la llaman Reserva. No hay campos de entrenamientos de armas en la reserva, y si lo está utilizando como uno, está en contra de la ley. ¡Oye! Querías arrestar a alguien…—, Stiles hace un gesto exagerado hacia Chris. — ¡Esta prácticamente envuelto para regalo!

— ¿Cuántas veces has entrado en la Reserva, Stiles? —su papá pregunta.

—No sé, solo como cuarenta, cincuenta veces, máximo —, dice Stiles. — ¿Cuál es tu punto?

Su padre levanta solo una ceja, y así es como termina abrochándose el cinturón de seguridad en la parte de atrás de la Suburban de Chris, por lo que habría sido el viaje en automóvil más incómodo de su vida si Melissa no los hubiera vencido a todos desde la noche anterior.

—Allison está allí esperándonos —, explica Chris, mientras sale a la calle. —Está poniendo algunos objetivos. Te enseñaremos los tipos de municiones que funcionan mejor contra lo sobrenatural. Necesitaras, como mínimo, algunas de acónito estándar.

— ¿Allison va a estar ahí? —pregunta con cautela, no estoy seguro si eso hace que todo sea mejor, o peor.

—Sí, ella utiliza más el área—, dice Chris, con el tipo de tono que significa que cree que está por encima de la práctica de tiro.

Stiles frunce el ceño y golpea sus dedos contra el teléfono celular en su bolsillo. Quiere llamar a Scott, ya que Scott querría saber cualquier información relacionada con Allison de inmediato, pero su padre no se lo ha devuelto oficialmente. Simplemente se le olvido quitárselo de nuevo, y Stiles no se lo había recordado. No está convencido de que su padre lo compre como una excusa valida, así que probablemente sea mejor que no sepa que lo ha recuperado.

Se inclina hacia atrás en el asiento y mira por la ventana, contento de ver que al menos se están acercando a la Reserva desde el lado opuesto de la tierra Hale. No se le haría imposible que los Argent usaran el terreno a lo largo de la línea de la propiedad, pero está contento de que se haya equivocado.

Por supuesto, ahora mismo su padre tiene a la propiedad Hale condenada por la seguridad pública, por lo que es probable que Derek no esté allí. Había dio una especie de mal necesario cuando John tuvo que llamar a un remolque para sacar la patrulla del suelo.

Supone que eso significa que Derek está sentado solo en su pequeño vagón, meditando, probablemente en la oscuridad como una especie de supervillano.

Frunce los labios mientras trata de alejar la preocupación de forma frustrada, y ni siquiera se da cuenta de que están en la Reserva hasta que Chris se detiene bruscamente.

—Podemos caminar desde aquí —, dice Chris, y se resbala del auto.

Él sale con su padre y lo sigue adentrándose en los árboles. Allison ya está allí, con su arco levantado mientras deja volar una fleca. Tiene el cabello trenzado en la espalda y unos ajustados jeans negros, como si estuviera vestida en homenaje a Katniss Everdeen.

Stiles no lo dice en voz alta porque le prometió a Scott en múltiples ocasiones que jugaría bien con ella, y también porque Chris le dio un nuevo significado al término “armado y peligroso”

Allison le sonríe vacilante, bajando su arco. —Hola, Stiles —, dice ella, toda esperanzada y dulce.

A veces, Stiles se pregunta si Allison en realidad tiene dos personalidades diferentes, o si es un poco como Hulk. La modesta Dra. Banner 89% del tiempo, pero moléstala…

—Deja de mirarme así —, dice en voz baja.

—Lo siento —, dice torpemente. No trata de ignorarlo o poner excusas, porque ambos saben exactamente lo que ve estos días cuando la mira.

Su papá le da una mirada curiosa. Stiles supone que su versión editada y un tanto sarcástica de la depresión nerviosa de Allison no le ha hecho justicia, porque parece estar cayendo en su acto de inocencia. Incluso Stiles lo cree, a veces. Ese es el problema.

Chris se aclara la garganta. — ¿Trajiste las armas? —le pregunta a ella.

—Están allá —, Allison dice, inclinando su cabeza hacia atrás. —Ya puse los blancos, también. Solo a tres metros, para empezar.

Stiles siente por su tono que “tres metros” en el blanco de practica equivalente a jugar bolos con parachoques, pero no va a protestar. Ni siquiera quiere estar aquí, y puede sentir la incomodidad tirando de su piel. No es que Stiles esté exactamente en contra de la violencia, o que tenga alguna objeción moral particular a las armas. El entiende exactamente qué tan necesarias son de vez en cuando, y está más que agradecido de que su padre tenga ese tipo de protección cuando sale a patrullar.

Simplemente no es para él. Stiles siempre ha querido ser un detective, pero más como Sherlock Holmes que Steve McGarret. Nunca ha podido realmente imaginarse portando un arma.

Su padre se dirige hacia los blancos y Stiles lo sigue a regañadientes, contento de poner algo de distancia entre él y Allison, por lo menos.

—Wow, —dice Stiles. —Eso es un montón de armas. ¿Tienes permiso para todo esto, Chris? —Mira a su papá. — ¿No quieres ver los permisos para todo esto, papá? ¿No te preocupa nada que un residente de tu ciudad tenga suficientes armas para acabar con el apocalipsis zombi?

—Las armas no matan Zombis —, le dice Chris, completamente serio, y Stiles honestamente no puede decir si está hablando en serio o no.

—Y yo no estoy en servicio —, agrega su papá encogiéndose de hombros.

Stiles resopla. —Y te preguntas de dónde viene mi moral flexible —, dice. —Aprendo de ejemplos, papá.

Su padre tomo una especie de pistola, tal vez una Glock, la cierra y luego dispara al objetivo. Dispara cinco veces y todos golpean en el anillo central. Se vuelve a mirar a Stiles. —Está bien, sigue ese ejemplo, niño.

—Bien, —dice Stiles, mirando las armas. — ¿Solo agarro una o…?

Chris  le lanza una mirada como si le gustaría poner los ojos en blanco, pero es demasiado madura para ese tipo de cosas, y se arrodilla para agarrar una pequeña pistola. Se la ofrece.  — Comienza con esto. Está cargada con  rondas estándar, pero tengo algunas balas de acónito que encajan en ese modelo si te gusta.

A Stiles no le gusta, pero al menos no parecía que perteneciera a una película de Michael Bay. Se mueve para pararse frente al objetivo y apunta con cuidado el arma. Hace una mueca ante el reculeo de la pistola cuando aprieta el gatillo, pero le da al blanco, aunque sea apenas.

—Está bien, está bien —, dice su papá. —Solo, aquí, levanta un poco las manos. Separa los pies, debes mantener el equilibrio o el reculeo te lanzara haca atrás.

Stiles suspira e intenta de nuevo, pero esta vez el disparo se entierra en la corteza del árbol, justo encima de donde está el blanco. Chris regresa con Allison, obviamente no está dispuesto a quedarse y ver su terrible fracaso. Stiles no lo culpa.

—Stiles, está bien —, dice John. —Es tu primera vez con un arma, no puedes, espera, es tu primera vez con un arma, ¿verdad?

—Sí, papá —, le asura Stiles. —Hubo una vez con un lanzagranadas, pero no creo que eso cuente.

—Stiles…— dice su padre con horror.

— ¡Es una broma! —Stiles lloriquea, volviéndose a mirarlo. —Pensé que sabrías que era una broma.

—Todos tus amigos son hombres lobo —, dice John. —Solo calmémonos con el sarcasmo por un rato, hasta que me acostumbre a esto, ¿qué dices?

—Lo siento, —murmura Stiles, volviéndose hacia el objetivo. Respira hondo y trata de seguir las instrucciones de su padre, pero cuando dispara solo logra golpear el anillo más externo.

Trabajan en ello durante aproximadamente media hora, probando un par de armas diferentes, pero el tiro de Stiles no mejora mucho. Aprende sobre los disparos y sobre cómo activar el seguro, y cómo la bala sale básicamente de la fuerza de una explosión interna: absorbe la información como una esponja, pero la práctica, el hecho real de disparar el arma, no. Parece que mejora. El objeto todavía se siente extraño en sus manos, y lo más cerca que se acerca al centro del blanco es al tercer anillo.

—Eso está mejor —, dice su padre, pero suena apagado. Se está poniendo, bueno, no frustrado, exactamente, más bien preocupado.

—Bueno, supongo que no puede ser genial en todo, ¿eh? —Stiles dice torpemente. —De todas formas, realmente no me gustan las armas. Parece que es como pedir problemas. ¿Sabías que tienes cuatro veces más probabilidades de recibir un disparo si tienes una pistola?

—Solo necesitas práctica —, le asegura John.

Stiles retiene un suspiro de frustración. —No quiero practicar, no…

—Oye, oye —, su padre interrumpe. —Está bien, ¿vale? No tienes que dominarlo, ni si quiera tienes que ser bueno en esto. Solo quiero que estés familiarizado con ello, ¿Vale? Quiero que puedas manejarte con un arma, porque lo necesitaras, con todo lo que está pasando.

Stiles asiente, porque su papá tiene razón. Al menos debería saber lo básico. —Sí, está bien —, dice.

—Sabes —, dice su papá, su voz extrañamente melancólica. —, tu madre tampoco podía disparar. La llevé al campo de tiro en una de nuestras primeras citas, tratando de impresionarla. Ella casi me disparo en el pie…

— ¿Qué? — Stiles pregunta, dando una risa de sorpresa. —Nunca me dijiste eso.

—Me hizo prometer que no se lo diría a nadie —, dice John con una sonrisa cariñosa. —Pero no habías nacido en ese tiempo, y siento que no se molestaría si te digiera.

—Nunca hablamos de ella —, Stiles dice.

—Lo sé. —John suspira.

— ¿No crees que deberíamos? —pregunta titubeante.

Su padre se queda muy quieto, y Stiles se queda sin aliento, parpadeando de repente, con lágrimas inconvenientes. Desde su muerte, cualquier mención de su madre se ha convertido en un arma, y él no puede hablar de ella sin destrozar a su padre.

John solo se acerca, atrapa sus manos y las coloca de nuevo en su lugar, levantando su agarre en el arma. —Pruébalo ahora —, dice, su se escucha extraña.

Stiles está apunto de apretar el gatillo cuando ve un destello de cabello rubio a través de los árboles. Su disparo se vuelve salvaje, apenas golpeando la media pulgada exterior del blanco y su padre suspira pesadamente detrás de él.

—Cristo, niño —, dice su papá. —Prácticamente apunté ese para ti.

—Todavía no tengo control sobre el retroceso —, dice Stiles rápidamente. —Obviamente, sentarme en el banco viendo a otros jugar Lacrosse no ha sido el entrenamiento de fuerza increíble que pensé que sería.

— ¿Por qué no nos tomamos un descanso? —, dice su papá, sacando el arma rápidamente de sus manos. ¿Qué?, lo que sea. Si su padre ni siquiera confía en él para sostener un arma sin supervisión constante, todo esto parece contraproducente.

Stiles levanta la vista y ve el destello de color otra vez, luego esta Érica, de la nada, apoyada contra un árbol a unos seis metros de distancia. Se lleva el dedo a los labios y hace un guiño, antes de desaparecer directamente en los árboles.

—Sí, un descanso suena bien —, dice Stiles. —Voy a caminar un poco, tomar un poco de aire, ¿si eso está bien?

Su padre asiente, luego levanta la mirada con el ceño fruncido. —Sólo mantente a la vista.

Stiles lucha contra una oleada de vergüenza, contento de que Allison este demasiado ocupada observando un árbol para escuchar. Se marcha en dirección opuesta a su padre, Chris y Allison.

—Érica —, le susurra con enojo, seguro de que ella puede oírlo— ¿qué demonios estás haciendo? ¡Érica!

No hay respuesta, y él, furtivamente, saca su teléfono celular de su bolsillo, girándose para que nadie pueda verlo. Considera llamar a Érica, pero luego pasa por alto eso para ir directamente a la fuente.

— ¿Qué pasa? —Derek exige, el segundo que atienda la llamada.

— ¿Me estas espiando ahora? —Stiles pregunta.

—No sé de qué estás hablando.

—Está bien, aquí un pequeño consejo: cuando necesites vigilancia encubierta, no envíes a Érica —, dice Stiles. —Ella es una reina del drama y media, y es un poco difícil de perderse todos los rizos rubios que saltan mientras se ríe entre los árboles. Es como si estuviera audicionando para la producción del hombre lobo de La Novicia Rebelde, o algo así.

Hay un silencio mortal en el otro extremo de la línea, y Stiles cree que Derek probablemente se arrepiente de toda su manada. Stiles no puede culparlo realmente.

—No envié a Érica, —Derek dice.

—Sabes, solo porque no puede escuchar tus latidos, no significa que no sé cuándo mientes —, dice Stiles. —Tienes una seña. Siempre vas con la negación directa a la Bill Clinton, y obtienes esta extraña y pequeña contracción de la mandíbula, como si te estuvieras preparando contra la injusticia que estas a punto de hacer. En realidad es algo refrescante, pero sobre todo es simplemente triste.

—Ni siquiera puedes verme, Stiles. —dice Derek.

—Puedo oírlo en tu voz —, responde Stiles al instante. —Desvía la atención, Derek. Tienes que desviarla a atención.

— ¿Por qué sigues tratando de enseñarme como hacer mejor las cosas malas? —Pregunta Derek.

Es una pregunta valida, y Stiles tartamudea durante un minuto porque no tiene ni idea de cómo responder a eso. Por todos los derechos, nunca debió haber ayudado a Derek a convertir su ridículo plan de secuestro en algo pasable en primer lugar, y desde luego no debería estar enseñándole a engañar mejor.

—Tu verdadero nivel de ser patético me inspira simpatía—, dice finalmente. —No me puedo contener.

—Stiles —, gruñe Derek, —necesito que me escuches, ¿vale? No estás a salvo. Los Argent no son seguros. No puedes confiar en ellos.

—Así que estás espiando —, dice Stiles, reivindicado. —Estoy con mi papá, Derek.

—Él no sabe lo que han hecho —, dice Derek. —Ni siquiera finjas que le diste toda la historia.

—Le di una versión bastante precisa de hecho —, se defiende Stiles. —Fue bastante detallado, en realidad. Es posible que lo haya distraído con unos pocos aspectos extravagantes y que haya dejado de lado un par de puntos clave de la trama, pero en realidad, ¿Cómo explicas como quedaste atrapado en una piscina durante dos horas manteniendo a flote el culo de un hombre lobo? ¿El hecho de que no solo me escavillo a un Rave sino que también me encerré en una habitación con un Jackson hibrido para ver si podíamos “comulgar” con un kanima?

—Acabas de explicarlo —, dice Derek secamente. — A mí.

—Sí, pero estabas allí—, dice Stiles. —Y realmente tenía que estar allí.

—Todavía quieres protegerlo. Lo entiendo, Stiles —, dice Derek. —Lo entiendo, lo entiendo. Pero él también quiere protegerte, y aun no está trabajando con todos los hechos. Así que es mi trabajo asegurarme de que estés a salvo.

—Le dije lo que era relevante —, dice Stiles.

— ¿Le dijiste todo lo que Chris Argent ha hecho? ¿Qué amenazó a Scott? ¿Le contaste todo sobre tu amiga Allison? —el demanda. —Porque estoy bastante seguro de que serían arrestados ahora mismo, si lo hubieras hecho.

—Al final nos ayudaron—, dice Stiles a medias.

—Eso está por verse —, dice Derek, con un cierto nivel críptico, que generalmente solo lo maneja el Hale mayor.

—Solo quiere que pueda defenderme. —le asegura Stiles.

— ¿Contra mí? —pregunta Derek.

—No —, dice Stiles, sacando la palabra. —Esto puede sorprendente pero no todos los hombres lobo son tan tiernos como tú.

—Solo trato de hacer lo correcto aquí —, dice Derek, y suena cada vez más molesto y frustrado, y Stiles no debería disfrutar de ese tono de voz tanto como lo hace.

—Está bien, está bien. Entonces ¿qué tal si la próxima vez que quieras saber lo que estoy haciendo, me preguntas? —, dice Stiles. —Concepto revolucionario, lo sé, pero es una locura que podría funcionar.

—Deje que te daría espacio, —dice Derek.

—Sí, sí lo hiciste, ¡pero haberme espiado con tu pequeña tropa de betas no es espacio! —grito Stiles. —Supongo que eso no es realmente algo porque lo que eres conocido, ¿verdad?

—En realidad, lo es —, dice Derek. —Simplemente no lo es cuando se trata de ti.

Luego Derek le cuelga, y la boca de Stiles se abre con indignación. —Estúpido lobo amargado—, murmura.

Se gira y casi se estrella directamente con su padre. Su padre es, aparentemente, magnifico en la vigilancia encubierta. Le podría enseñar a Érica una cosa o dos.

—Stiles —, dice con cautela. —Veo que tienes tu teléfono. Quería preguntarte de donde vino, ya que me dijiste que el tuyo había sido destruido. ¿O era otra mentira?

—No, realmente se destruyó—, insiste Stiles. —Estaba en mi bolsillo cuando estaba en la reserva con el bunyip.

John levanta una ceja, interrogándolo sin siquiera tener que hablar.

—Derek me consiguió uno nuevo —, explica Stiles rápidamente. Más tarde se da cuenta de que se escucha diferente a como lo tenía en la cabeza.

—Derek te compró un teléfono nuevo —, repite su padre.

—No me mires así—, dice Stiles. —Él no es mi sugar daddy. El solo estaba siendo amable.

—Derek Hale estaba siendo amable—, dice John.

— ¿Hay un eco? — Stiles pregunta, y los ojos de su padre se estrechan. Stiles traga duro. Probablemente debería atenuar los comentarios sarcásticos hasta que su padre este más aclimatado a la nueva ley. —Quiero decir, sí, eso es correcto.

Su papá suspira. —Me vas a sacar canas, chico, lo sabes, ¿verdad?

—Estadísticamente, los caucásicos tienden a ponerse grises mucho antes que el resto de la población, y considerando tu edad, en realidades estas un poco adelantado—, dice Stiles. —No estoy seguro de que puedas echarme la culpa a mí.

Por un minuto, su padre parece adecuadamente distraído, pasándose una mano por el pelo con una expresión complacida de que aparentemente está batiendo las estadísticas, pero luego sus ojos regresan al teléfono en las manos de Stiles y frunce el ceño.

— ¿Me lo vas a quitar? —Stiles pregunta.

Su padre lo mira especulativamente. — ¿Quieres que lo haga?

Stiles lo mira fijamente con lo misma atención, sintiendo el punto muerto y sin saber si se trata de una especie de trampa. — ¿No?

—Tenemos un acuerdo, Stiles —, dice John. —Dijiste que obtendría dos semanas, y confío en que sigas así, así podrás tener el teléfono. De todos modos, me ahorra el tener que conseguirte uno nuevo. Tendré que enviarle una tarjeta de agradecimiento a Derek Hale.

Stiles trata de imaginar la expresión de Derek si recibe una tarjeta de agradecimiento de su padre y, honestamente, no puede.

—Solo necesitas darme su dirección —, dice su padre casualmente, y ahí está el motivo oculto.

—Tiene un apartado en correos —, dice Stiles, que es mentira total, y rompe su regla de no mentir, pero honestamente ni siquiera sabe la dirección real de la espeluznante guarida de Derek de todos modos, y duda seriamente que este en la ruta de servicio del correo postal local.

—Oh, bien, Stiles, ¡ahí estas! —Allison dice alegremente, corriendo hacia él, y Stiles cambia de opinión. El ama a Allison. Tiene un tiempo muy oportuno.

Tiene su carcaj tirado sobre el hombro y un arco en sus manos, y le dice que la siga. —Quiero que pruebes esto.

— ¿No recuerdas el incidente con el arco? —Stiles le pregunta.

—¿Qué incidente? —su papá pregunta con suspicacia.

—Ya voy, Allison—, dice Stiles rápidamente, antes de correr a su lado. Su padre lo deja escapar, probablemente porque está en su límite de nueva información por hoy.

Allison le tiende el arco cuando se acerca lo suficiente y él se lo quita. Solía querer ser Robin Hood incluso antes de ser Sherlock Holmes, así que le gustan los arcos. Simplemente no le gustan sus posibilidades de poder usarlo con cualquier nivel de competencia.

Comienza a acercarse al objetivo y Allison lo detiene. —Pruébalo aquí —, dice ella. —Estamos lo suficientemente cerca para lo que quiero probar.

—Para ti tal vez —, dice Stiles, pero toma la flecha cuando ella se la da. Intenta arreglarlo de la forma en que la ha visto hacerlo, pero debe hacerlo mal porque ella no puede resistirse a intentar corregirlo.

Él se aleja de su toque por instinto, y ella retrocede un paso, pareciendo dolida. —Lo siento—, murmura.

—Tienes que dejarme ayudar —, dice en voz baja. —Necesito que confíes en mí.

—No tomes esto de la manera equivocada, pero para ti eso es pedir demasiado —, dice Stiles.

—Lo sé —, dice Allison. —Pero necesito que lo hagas de todos modos.

Stiles respira hondo y asiente, y Allison se acerca de nuevo. Ella levanta sus brazos, colocando sus dedos y tirando un brazo hacia atrás por la muñeca. —Necesito que mires el blanco —, le dice ella, —e imagina que la flecha da en el centro.

— ¿Visualización positiva? ¿Esa es tu solución? —Stiles pregunta secamente, mientras se aleja. Trata de mantener su postura. — ¿No es eso una nueva era para la cazadora mortal?

—Solo imagínalo, y déjalo ir —, dice otra vez.

Stiles presiona sus ojos con fuerza por un minuto, endureciéndose, imaginando que la flecha da en el blanco, luego los abre y deja que la flecha vuele. Sale disparada del de la cuerda, surcando por el viento y golpea el objetivo justo en el centro. Stiles mira con incredulidad, una sonrisa florece en su rostro cuando se gira para mirarla.

— ¿Viste eso? —pregunta. —¡Eso fue increíble! Obviamente, soy secretamente un bad ass. ¡El arco y la flecha son definitivamente mi arma!

El mira a Allison otra vez, y se sorprende al que ver que ella no está celebrando con él. Lo mira con incredulidad, sus ojos increíblemente abiertos.

— ¿Qué? —Stiles pregunta, sintiéndose inquieto.

—Tu forma estaba mal —, explica en voz baja. —La forma en que estabas de pie estaba desequilibrada y tenías el arco inclinado demasiado bajo, no debería haber llegado al objetivo en absoluto, sin mencionar que diste justo en el centro.

— ¿Me estas acusando de hacer trampa? —Stiles exige. — ¿En arquería?

—Algo así. —Dice, y luego saca una segunda flecha y la mira con el ceño fruncido. —Pensé que tal vez podría ayudar un poco, pero no me di cuenta…

—Allison, ¿de que estas hablando? —pregunta. —Probablemente es solo suerte de principiante, pero no hice trampa.

—No a propósito —, dice Allison rápidamente. —Pero estas flechas están llenas de ceniza de serbal. Y, Stiles, he oído lo que puedes hacer con la ceniza de serbal.

Stiles vuelve su atención a la flecha en su mano. Ceniza de serbal. Podía ordenarle que fuera a donde quisiera, por lo que tenía sentido. Si estaba atrapado dentro de la punta de la flecha, eso haría que tirara del resto de la flecha. El método de visualización positiva de Allison adquiere un significado completamente nuevo.

Toma la flecha de la mano de Allison, y se vuelve hacia el objetivo. Es consciente de que Chris y su padre están detrás de ellos ahora, observando. Toma la flecha y la arroja suavemente hacia el blanco. La flecha se estabiliza en el aire y se lanza directamente al centro con mucha más fuerza de la que debería haber tenido, dividiendo la primera flecha en dos.

—Eh, —dice Stiles. —Está bien. Así que tal vez estaba haciendo trampa un poco.

—Tomaremos una caja entera de eso— le dice su padre a Chris.

Notes:

1: La frase original: “I'm gonna guilt the hell out of you." Se refiere al “Guilt trip” no estoy segura de que haya una forma corta de decirlo en español y si lo hay por favor déjenme un comentario para poder editarlo. Guilt trip es un sentimiento de culpa o responsabilidad, especialmente uno injustificado inducido por otra persona.

2: Fae, proviene del nombre faerie. En la mitología griega y romana las llaman Hadas

3: Personaje sacado de una serie de televisión estadounidense The Munsters de los años 60. Marilyn era la única que pasaba por humana así que supongo que lo está comparando con los monstruos de su hermana, padre y esposa.

4: Personaje del El maravilloso mago de Oz, escrita por L. Frank Baum

Chapter 20: Capítulo 20

Notes:

(See the end of the chapter for notes.)

Chapter Text

Cuando llegan a casa, su padre insiste en que las flechas permanezcan en su oficina en la caja fuerte de las armas, aunque no la cierra en caso de que Stiles tenga que conseguirlas rápidamente. Stiles supone que es un buen compromiso, y siendo honestos, si las hubiera mantenido en su habitación, solo las habría hecho bailar como los trapeadores de Fantasía, por lo que probablemente sea lo mejor.

— ¿Crees que deberíamos comprarte un arco? —pregunta su papá, frunciendo el ceño ante la caja de flechas. 

—Eso sería totalmente genial, pero Allison dice que mi forma apesta, y probablemente solo sería una pérdida de tiempo para mí intentar disparar cuando puedo lanzarlas —, Stiles se encoge de hombros. — ¡Oh! Aquí hay una idea. ¿Crees que podríamos encontrar algunas estrellas ninjas con ceniza de serbal? Me pregunto si podrá mandarlos a hacer.

Su padre solo sacude la cabeza y sale de la oficina.

— ¿Qué? Papá. ¡Papá, hablo en serio! —Stiles insiste, siguiéndolo.

— ¿Qué tal en lugar de estrellas Ninjas, pedimos un poco de pizza? —pide.

—Tuviste papas fritas y una hamburguesa anoche —, le recuerda Stiles. —Es como si quisieras tener un ataque al corazón.

—Comí tres papas fritas, Stiles, antes de que te metieras el resto en la boca —, dice John. —Podemos pedir la vegetariana, supongo, si eso te hace sentir mejor.

—Con corteza delgada, sin salsa extra, y tienes un trato —, dice Stiles.

—Bien —, su padre suspira, aunque claramente no está contento con eso. —Llamare. ¿Quieres pan de ajo?

— ¿Para que puedas robarlo y comértelos todos tú mismo? —Stiles pregunta. —Creo que no. Mountain Mike´s tiene ensaladas. Pide dos. Sin embrago, no pidas aderezos. Puedes echarle un poco de aceite de oliva si es necesario.

—Recuerdas que soy el papá, ¿verdad? —John pregunta.

—Sí, y como papá, deberías de aprobar la ensalada—, le recuerda Stiles.

—Eso es justo—, suspira, sabiendo cuando ha sido derrotado. Se dirige a la cocina para ordenar y Stiles se gira para subir las escaleras.

Sus pies casi han sanado desde que Derek uso su magia de hombre lobo, pero después de correr por el bosque están un poco adoloridos. Solo quiere quitarse los zapatos y relajarse y comer pizza y…

— ¡Oh Dios Mío! —Stiles llora, mientras es arrastrado a su habitación y luego empujado hacia la puerta con fuerza suficiente para que se cierre con un clic detrás de él.

Derek lo mira de reojo, con las manos puestas en su camisa. Sus ojos no son del todo rojos, pero está lo suficientemente enfadado por algo que Stiles puede ver lo que parece lava fundida a través de las gritas de color en sus irises.

—Ow. Está bien. Hola —, dice Stiles. — ¿Entonces supongo que ahora estamos renunciando por completo a la idea del espacio?

—Estaba dispuesto a darte espacio cuando pensé que ibas a dar un paso atrás de todo esto —, dice Derek. —Cazar en el bosque con Chris Argent, eso no es retroceder, Stiles. Es moverse en la dirección equivocada.

— ¿Qué, crees que salir con los Argent fue mi idea? ¡No tuve exactamente una elección! —Stiles dice. —Mi padre quería que aprendiera a disparar, y sabe que las balas normales no van a hacer mucho contra nuestras varadas criaturas de la noche, así que le pidió ayuda a Chris.

— ¿Por qué no me dices exactamente lo que pasó? —Derek exige, lo cual es ridículo, porque Derek ya lo sabe, y Stiles sabe que Derek ya lo sabe, porque Érica, la pequeña espía que es, estaba observando cada uno de sus movimientos.

— ¿Realmente vamos a hacer esto? —Stiles pregunta.

—Querías que te preguntara, ¿verdad? — pregunta con voz dura. —Así que esta es mi pregunta. ¿Qué has estado haciendo hoy, Stiles?

—Siento que esto es una especie de trampa, así que me escudo en la quinta1 —, dice Stiles. — ¿Cómo llegaste aquí de todos modos? Mi ventana está cerrada con clavos.

—Abrí la cerradura de la puerta trasera —, dice. —Y espere aquí por ti.

—Está bien, sabes que eso es espeluznante, ¿verdad? —Stiles dice. —Hay una prueba en Cosmo que creo que debes tomar “Podrías ser un acosador si…

—No trates de distraerme —, dice Derek, antes de vacilar por un segundo y distraerse de todos modos. — ¿Por qué estás leyendo el Cosmopolitan?

—Era de Lydia, y estaba aburrido —, dice Stiles. — ¡Ese no es punto!

—Tienes razón —Derek está de acuerdo. —El punto es que no quiero que te acerques a los Argent otra vez. Si tienes que hacerlo, inventa algo. Dile que Chris te amenazó…

—En realidad no tendría que inventarlo —, interrumpe Stiles.

—Qué —, dice Derek, sus ojos se agudizan. El brillo maniaco y rojizo parece desaparecer cuando se enfocan completamente en él; de alguna manera, es aún más desconcertante.

— ¿No me digas que pensaste que tenías el monopolio de tirarme a las paredes? —Stiles pregunta. —No fuiste mi primero, Derek Hale, y dudo que seas el último.

— ¿Qué te dijo? —Derek exige.

— ¿Cómo se supone que debo recordar eso? Fue hace meses —, dice Stiles. —Si mantuviera una lista de las amenazas que recibí, ni siquiera estaría entre los diez primero. Tú serías el número treinta y cinco. Porque vamos. Con mis dientes. No estas engañando a nadie. 

—No lo subestimes, Stiles —, dice Derek. —Es un cazador, lo que te ver es solo una parte que aprendió a jugar. No se puede confiar en él.

—Sí, lo sé. ¿Crees que podrías, tal vez, no lo sé, déjame ir? —Stiles pregunta. Derek lo deja ir abruptamente, como si hubiera olvidado que aún lo tenía atrapado. Da un paso atrás y Stiles empuja la puerta. — ¿Quieres decirme de que se trata todo esto? Porque pensé que estábamos progresando. Pensé que habíamos superado el me aventaras a las paredes.

—Sabes de que se trata, Stiles. —Le responde Derek enojado.

Stiles frunce el ceño, porque realmente no sabe. —Uh, ¿no? Pensé que ya habíamos solucionado esto cuando hablamos antes.

—Eso fue antes de que fueras y comenzaras a usar magia —, gruñe Derek.

— ¿Te refieres a la cosa con las flechas? — pregunta. Derek levanta la ceja en una especie de sí, duh, que pudiera encontrar hilarante si estuvieran en mejores circunstancias. En serio, hay hojas y hojas de bromas de Mean Girls que podría hacer acerca de Derek Hale. La próxima vez que vea la película tomara notas. —Ok, mira, no es como si supiera que soy una especie de Jedi con la ceniza de serbal. ¿Y no es bueno, de todas maneras? Que tenga una forma de defenderme, nunca te ha molestado cuando uso la ceniza de serbal antes.

—No tienes idea, ¿verdad? Maldita sea, Stiles —, le responde.

— ¿Qué? ¿Cuál es el problema? Puedo mover flechas con mi mente —, dice Stiles. — ¡No es como si las fuera a usar en ti!

—No me preocupa que puedas hacerlo —, dice Derek, relajándose ligeramente. Se pasa una mano por el pelo con irritación y esta tan fuera de lugar que hace que Stiles se ponga nervioso. Derek podría gritas y ponerse tenso, pero rara vez pierde la calma. —Me preocupa que Argent sepa que puedes hacerlo.

— ¿Crees que voy a ser reclutado en el Ejercito de Cazadores? —Stiles pregunta con incredulidad. — ¿De eso se trata?

—Crees que esto es una broma, pero eso es exactamente lo que me preocupa —, dice Derek. —Las personas con tu talento son raras, y cuando los cazadores se enteran de ellos, encontrar la manera de obtener su ayuda, estén dispuestos o no.

—Creo que Chris es aterrador como el mismo diablo, ok, pero es una buena persona en algún lugar muy profundo, y no lastima a los niños  —, insiste Stiles. —Nos amenaza, pero no nos hace daño.

—Puede mantener sus propias manos bastante limpias al respecto, pero tiene un historial de confiar en las personas equivocadas —, dice Derek, antes de fruncir el ceño mientras se gira para explorar la habitación, de repente se distrae. —¿Por qué ha estado Scott aquí?

— ¿Lo estás diciendo por tus locos sentidos de hombre lobo o me estas espiando incluso cuando estoy en mi casa? —Stiles pregunta con amargura.

—Puedo oler que estaba aquí —, dice Derek, con su atención centrada en Stiles. —Pensé que no estabas hablando.

—Estamos tratando —, dice Stiles. — ¿Por qué te importa si estoy saliendo con Scott otra vez? Pensé que habías dicho que no estabas tratando de separarnos.

—Me importa porque él ha hecho tratos con los Argent antes, y lo hizo a nuestras espaldas —, dice Derek. —No me gusta que estés en medio de esto otra vez. Una de estas veces vas a salir lastimado.

—Scott ni si quiera puede deletrear malicioso. Su único problema es la falta de atención —, dice Stiles. —Nunca dejaría que me lastimara deliberadamente.

— ¿Estás seguro de esto? —Derek exige.

—Absolutamente —, dice Stiles.

—Está bien. Así que no lo haría deliberadamente, pero esa es una aclaración bastante especifica. Ambos sabemos que no te pondría en primer lugar, ¿verdad? ¿Si se trata de lo que Allison quiere y tú? —Derek vuelve a acercarse mientras pregunta, y Stiles tiene que luchar para no retroceder contra la puerta.

— ¡Jesús, tú y Scott! —Stiles dice en frustración. —Estar harto de esto. Son como dos perros con un hueso. Y ni siquiera quise hacer un juego de palabras, es la mejor manera de describir mi vida en este momento.

—No fue un juego de palabras, —dice Derek rotundamente. —Porque en realidad no soy un perro.

— ¿Vas a discutir semántica? ¿En serio? ¿Conmigo? —Stiles recalca con presión.

—Stiles, no estoy…—Derek se interrumpe por la frustración, sus fosas nasales se abren brevemente antes de que pueda controlarse. —No estoy tratando de crear una brecha entre tú y Scott. En realidad, estoy tratando de ayudarte a evitar que algo que se interponga entre ustedes más tarde. Así que no te involucres con los Argent, y esto no será un problema.

—Puedo manejar a los Argent, ¿de acuerdo? No me gustan, y no confió en ellos —, dice Stiles. —Pero tienes que confiar en mí, al menos lo suficiente como para saber que no me voy a quedar estupefacto en el momento en que Chris Argent me muestre cierta falsa bondad. No soy Scott.

—Confió en ti —, dice Derek.

—Sé que no, pero…—Stiles vacila mientras rebobina las palabras de Derek. —Espera, tú…oh está bien,  ¿eso está bien? —Se muerde el labio un momento en confusión. —Entonces, ¿de qué se trata esto?

—No sabes cómo son realmente los cazadores —, insiste Derek. —No sabes de lo que son capaces las personas como ellos. ¿Qué pasaría si algo sucede y Chris necesita tu ayuda? ¿Qué pasaría si Allison está en peligro y tu talento para usar la ceniza de serbal podría salvarla? ¿Crees que dudaría?

—Si fuera su vida en la línea, ayudaría, me preguntara o no —, dice Stiles. —No confió en ellos, pero no significa que los quiero muertos. Y sus métodos pueden ser diferentes, pero en realidad ellos quieren lo mismo que nosotros…

— ¿Elegirías a los cazadores sobre nosotros? —Derek reclama.

—Simplemente no lo entiendes, ¿verdad? —Stiles pregunta. —¡Estamos juntos en esto! Y si queremos que esto funciones, debemos comenzar a trabajar con ellos.

—Nunca trabajare con ellos —, gruñe Derek, avanzando hacia Stiles, lo suficientemente cerca que casi si tocan. Sus ojos se enrojecen y Stiles toma una bocanada de aire, antes de inclinarse y escaparse por un lado.

Se gura para caminar de espaldas a su escritorio, extendiendo una mano para mantener alejado a Derek. —Mira, necesitas calmar tos ojos de alfa, ¿de acuerdo? —pregunta, más desconcertado que asustado.

Por lo general, tiene un buen control sobre lo que provocara a Derek, principalmente porque tiene un mal hábito de hacerlo intencionalmente, pero no puede deshacerse de la sensación de que algo está pasando aquí que no entiende.

—Estoy completamente bajo control —, dice Derek, y aunque sus ojos permanecen rojos, el tono es demasiado fuerte para que eso sea todo menos la verdad. —Tú eres el problema, Stiles. No puedes seguir jugando a esto desde todos los lados. Sé que tratarías de protegernos contra los Argent, pero eso no significa que no te usarán. Los Argent son buenos en eso, y no les importa la edad que tengas.

— ¿Por qué tengo la sensación de que ya no estamos hablando de mí? —Stiles pregunta en voz baja.

Derek lo mira, apretando su mandíbula. —No voy a pretender que soy imparcial cuando se trata de la familia Argent —, dice. —Pero eso no significa que estoy equivocado.

— ¡Nunca dije que lo estuvieras! ¿Aún no te has dado cuenta de que he estado de acuerdo contigo?

—Me he dado cuenta de que no has prometido hacer lo que te dice —, responde bruscamente.

—Bueno, si eso es lo que estas esperando, es mejor que te instales. Porque eso nunca va a suceder —, resopla Stiles.

Derek entrecierra los ojos y se acerca más, y en lugar de ir al otro lado del escritorio como una persona racional, Stiles sigue avanzando hacia atrás caso sentándose sobre él y luego trata de caminar hacia el otro lado. Derek lo toma por debajo de las rodillas y lo tira hacia el borde del escritorio antes de que llegue muy lejos, y luego se coloca entre sus piernas para mantenerlo en su lugar.

—Um…esto es incómodo —, dice Stiles. Se mueve un poco, inclinándose hacia un lado, pero incomodo o no es eficiente. No hay forma de que escape de la mano de Derek con gracia. Lo que no quiere decir que no tenga opciones: Stiles y Gracia nunca han sido tan buenos conocidos, de todos modos.

—Stiles —, gruñe.

—Es realmente un poco lindo como piensas que decir mi nombre de diferentes maneras es una forma de comunicación —, dice Stiles. —Pero en realidad, no lo es. No hablo hombre lobo. Realmente no puedo captar matices en el timbre de tu voz.

—Quiero que te mantengas alejado de ellos —, dice Derek.

— ¿Esperabas que obtuviera eso de mi nombre? —Stiles pregunta con incredulidad.

—Stiles —, le responde Derek.

—Y ahora lo estás haciendo de nuevo. Literalmente, acabamos de hablar de esto —, dice Stiles con paciencia. —Ni siquiera estoy pidiendo oraciones completas, solo tres, cuatro palabras unidas…

—Quédate. Lejos. De ellos —, Derek gruñe.

—Impresionante —, dice Stiles. —Pero ahora nos encontramos con el problema de la repetición.

Derek agacha la cabeza con frustración, respirando profundamente por la nariz. —Stiles, lo juro por Dios. —Presiona sus ojos para cerrarlos justo cuando comienzan a brillar con un tono más profundo de rojo, y luego los abre cuando están limpios nuevamente. — ¿Quieres hablar sobre problemas de comunicación? Apenas puedo decir nada y tienes una observación inteligente…

—Eso es porque el sarcasmo es mi superpoder —, interrumpe Stiles. —Tienes colmillos, tengo mi brillante ingenio.

Derek solo lo mira, y esta vez no hay palabras necesarias.

—Está bien, veo tu punto —, reconoce Stiles.

—Vas a mantenerte alejado de ellos —, dice, sobre enunciando cada palabra.

—No —, dice Stiles.

—En realidad no era una pregunta —, dice Derek peligrosamente.

—No estoy de acuerdo con nada hasta que me digas de que se trata realmente. Todavía estas ocultando algo —, insiste Stiles. —Chris y Allison no son amenaza suficiente para que estés preocupado.

Derek abre la boca para decir algo, antes de cerrarla con el ceño fruncido. Se ve preocupado. —Alguien viene —, dice.

Se aleja de Stiles tan bruscamente que el menos se desequilibra. Está a punto de caer hacia atrás cuando Derek se estira y agarra su brazo, tirando de él hacia adelante para detener su caída con tanta fuerza que termina chocando contra Derek.

Derek sigue sujetando su brazo con una mano, y la otra automáticamente alrededor de su cintura para mantenerlo estable. Stiles se derrumba contra él con una exhalación sorprendida, mirado sus ojos justo a tiempo para verlos ensancharse mientras observan la puerta en el momento en que se abre.

El corazón de Stiles se detiene, porque su papá lo va a matar. Esto es, su vida se acabó. Prometió dos semanas y ni si quiera podía cumplir veinticuatro horas. Libertad condicional denegada. Visitas revocadas. No se conceden permisos.

Stiles se da la vuelta lentamente, preparándose, y se sorprende por la hermosa visión de una diosa con el cabello rubio fresa en lugar de su padre con si .45 favorita. Parpadea por un minuto, preguntándose porque Derek se muestra tan cauteloso cuando solo es Lydia.

—Bien, bien, bien —, dice Lydia con frialdad, echándose el pelo hacia atrás mientras le lanza una sonrisa peligrosa a Derek. —Hola, Derek.

—Lydia —, responde con cautela.

—En caso de que no lo supieras, ya que este tête-à-tête2 fue claramente planeado tan bien, el Sheriff está abajo mirando algún tipo de deporte, y si no te has ido en los próximos veinte segundos, empiezo a gritar —, ella dice amablemente.

—Lydia, —intenta Stiles.

Lydia levanta una mano para detenerlo, manteniendo sus ojos en Derek. —Estoy bastante segura de que al Sheriff no le complacería encontrarte aquí, y estoy aun más segura de que no le agradaría realmente lo que sucedió en Arnold. Si quieres arriesgarte, eso depende de ti. —Ella sonríe dulcemente otra vez. —Ah, y quedan cinco segundo, si no contaste.

—terminaremos esto más tarde —, le dice rápidamente Derek a Stiles, antes de estabilizarlo y luego desaparecer en el pasillo, esquivando a Lydia.

—La ventana del baño todavía funciona —, Stiles lo llama en voz baja tras él. Se vuelve hacia Lydia, y ella se inclina en la puerta examinando un clavo con una expresión de aburrimiento en su rostro, como si no hubiera destrozado completamente a un hombre lobo alfa.

—Lydia —, se queja Stiles. —Finalmente estaba llegando a algo.

—Lamento mucho interrumpir tu pequeña seducción, pero necesitamos hablar —, dice ella.

—No quise decir eso —, protesta Stiles a la vez, sonrojándose. — ¡Estaba tratando de obtener información!

—Es adorable que pienses que eso es lo que estaba sucediendo, Stiles —, dice ella, pasándose por la habitación como si le perteneciera para examinar la obra de su padre en su ventana con un ojo crítico. —Pensé que ibas a mantenerte alejado de los hombres lobo, ¿no fue eso lo que acordamos? Más cerca y habrías estado en su regazo.

—Trate de mantenerme alejado —, dice Stiles. —Pero siguen apareciendo.

— ¿Y supongo que no fuiste corriendo a la casa Hale para enfrentarte con un bunyip? —pregunta.

— ¿Qué? ¿Cómo…?—, comienza.

—La línea directa sobrenatural es completamente funcional —, dice ella fácilmente. —Derek le contó a Érica quien le conto a Isaac quien luego le contó a Scott, quien le conto a Allison quien me contó a mí. Luego Jackson también me lo dijo a mí, porque he estado trabajando para des-programarlo como el subordinado de Derek.

—¿Es por eso que viniste? —Stiles pregunta. —Porque si es…

—Tengo información —, Lydia lo interrumpió, mirándolo de forma especulativa. —Sn embargo, siento que debería ocultarlo por tu propio bien. Claramente tienes suficiente de que preocuparte.

—Tienes que decirme ahora —, dice Stiles. — Causare más daño sabiendo que hay algo que se necesita saber sin saber que es, de lo que haría si ya lo supiera.

—Me preocupa que eso sea cierto. Muy bien. ¿Te habrás dado cuenta de que Peter no ha estado por aquí por un tiempo? —Ella pregunta a la ligera.

—Uh, ¿en realidad, no? —Stiles dice. —Pero eso es probablemente solo porque me esfuerzo en evitarlo.

—Sí, bueno, él ha estado tratando de seguir a Gerard —, dice Lydia, cruzándose de brazos. —Quiere asegurarse de que está muerto, ya que asume, muy probablemente esté en lo correcto, que Kate Argent no habría matado a los Hale si Gerard lo la hubiera mandado.

— ¿Cómo sabes eso?

—Me aseguro de saber a qué se dedica Peter —, dice Lydia de manera uniforme.

— ¿Entonces piensa que Gerard podría estar vivo? —Stiles pregunta. — ¿Cómo es eso posible? Dijeron que la mordedura te mata o te convierte, pero, oh Dios mío, ¿crees que ahora es un hombre lobo? ¿Un hombre lobo geriátrico demente con una inclinación por perseguir a adolescentes perfectamente inocentes? Estoy jodido.

Lydia resopla. —Como si pudiera pasar a través de tus detalles de protección.

Stiles la mira confundido. — ¿Eh?

—Tu padre apenas te deja fuera de su vista, y Derek tiene a su manada vigilándote casi todo el día —, dice Lydia. —Gerard te persiguió una vez para tratar de llegar a ellos, no es inconcebible que intente hacerlo de nuevo. Los Argent, sean lo que sean, nunca han sido particularmente originales. Pero esta vez, estamos mejor preparados.

—Eso es… ¡Oh, ese hijo de hombre lobo! —Stiles grita. Todo comienza a encajar en su lugar: la loca sobreprotección e irritabilidad de Derek acerca de su encuentro con los Argent. Chris y Allison no eran los Argent por los que estaba realmente preocupado. —Es por eso que Derek esta tan enojado sobre el entrenamiento con los Argent. ¿Hace cuando tiempo lo sabe?

—No lo sabe, todavía no —, dice Lydia. —Todo lo que saben es que no han podido encontrar un cuerpo. Aunque con nuestras vidas, no es como si eso fuera exactamente definitivo en cualquier caso. —Ella murmura un poco antes de asentir, como si hubiera llegado a una conclusión. —Suponiendo que encontremos el cuerpo, tendremos que contarlo por la mitad.

— ¡Lydia! —Stiles dice en estado de shock.

—Esa es la única manera de asegurarse de que no regresarán —, explica Lydia con calma. —Engáñame una vez…

—Está bien, está bien, pero no tengo absolutamente ningún plan para participar en ninguna hermicorpectomía3, para tu información, —le dice Stiles. — Ya fue suficientemente malo cuando Derek quería que le cortara el brazo.

—No te lo pediría —, Lydia lo tranquiliza. —Es muy probable que vomites y dejes tu ADN en todas partes.

Stiles solo observa a Lydia por un momento, atrapado entre esa mezcla particular de terror y asombro que siempre ha inspirado. —Cierto. Continuemos.

Lydia pone los ojos en blanco. —Sí, continuemos —, dice ella. —De todos modos, cuando Peter se nos escapó, me tomo un tiempo para rastrearlo y descubrir qué estaba tramando, pero mi fuente se topó con unos mensajes de texto…

—Te refieres a Jackson —, dice Stiles amablemente.

—Mi fuente —, insiste Lydia, —dice que Peter ha estado llamando a todos los viejos contactos de la familia Hale para que intenten localizar a Gerard. Piensan que si esta ido, se ha ido a esconder bajo suelo.

—Si está vivo, esta con Chris. No hay manera de que no sepa exactamente donde está su querido padre —, dice Stiles con facilidad. — ¿Le has preguntado a Allison?

—Sí, nos estábamos pintando las uñas el otro día, y surgió el momento oportuno para preguntarle si, quizás, estaba manteniendo a su abuelo asesino encadenado en el sótano —, dice Lydia.

— ¿Se supone que eso es sarcasmo? Porque eso suena como algo que podría haber sucedido —, dice Stiles.

Lydia lo mira fijamente. —Ese hombre llevo a Allison al infierno también—, dice ella. —Si Gerard está vivo, ella no sabe nada al respecto.

—Si bien tu confianza en ella es admirables, no viste los resultados de su última crisis de primera mano —, dice Stiles. —No estoy seguro de que haya mucho de lo que Allison no sea capaz, si se lo propone.

—Creo que eso se podría decir de cualquiera de nosotros —, responde Lydia con frialdad. — ¿No lo crees?

Stiles se estremece, pero no puede discutir eso exactamente. —Sé que crees que estoy siendo duro con ella…

 

—No lo hago—, dice Lydia. —Tus problemas de confianza con respecto a Allison son totalmente comprensibles. La he perdonado por mis propias razones, pero no te pido que lo hagas. Te pido que me creas cuando te digo que no sabe nada de esto, porque yo sabría si ella lo hiciera.

—Está bien—, dice Stiles. —Pero eso todavía no descarta a Chris.

—Por supuesto que no—, concuerda Lydia. —Pero él es toda la familia que le queda, y no podemos pedirle que trabaje contra él. Tendremos que encontrar otra manera.

Stiles asiente. — ¿Qué tan cerca ha llegado Peter de encontrarlo?

—Por lo que sé, no ha encontrado mucho —, dice Lydia. —Pero en este momento solo se lo que le dijo a Derek, y estoy segura de que se lo está guardando para sí mismo. No hay mucho que podamos hacer en este momento, de todos modos, pero hay otros asuntos que debemos discutir.

—Por favor, no me digas que hay algo peor —, dice Stiles.

—No necesariamente —, dice ella. —Quiero saber qué pasa contigo y con Derek.

— ¿Ah, nada? —Stiles dice, y luego Lydia lo mira hacia abajo hasta que se derrumba. —Bueno, nada excepto que, de repente, todos parecen estar bajo la impresión de que estamos tienen una aventura secreta. Esa haciendo maravillas para mi crédito callejero, estoy seguro, pero en realidad no lo estamos. Así que eso es. E un poco incomodó. Quiero decir, pasamos de un estresante primer beso después del secuestro en el bosque a todos pensando que hemos estado junto por mucho tiempo y ¿qué hago con eso? Sigo tratando de explicarlo pero todo parece caer sobre la línea te la teoría que tienen sobre “no protestan tanto”

—Sí, me pregunto por qué alguien tendría esa impresión —, dice Lydia rotundamente. —Stiles, ¿te gusta Derek?

—¿Qué? —Stiles pregunta, mirándola confundida.

—Es una pregunta siempre —, dice Lydia. —¿Te gusta él?

—¿Si? —Stiles dice.

—¿Eso fue una pregunta? —Ella chasquea, moviéndose hacia él. Se inclina hacia adelante, sus ojos explorándolo cuidadosamente como si fuera algún tipo de androide, recopilando información. —No hay respuesta incorrecta. O lo haces o no lo haces.

—Sí, está bien —, responde Siles. —Por supuesto que me gusta. Es valiente y trágico y es brusco por fuera, a pesar de que es realmente blando por dentro y entiende mi sentido del humor, incluso cuando nunca se ríe y también parece un modelo de ropa interior, sin sonar superficial, pero en realidad, ¿quién no lo ha notado? Así que sí. Me gusta mucho. Me encanta observarlo cuando está entrenando porque a pesar de que lo hace todo mal, siempre está ahí, al cien por ciento, como…, quiero decir, él nunca hace las cosas a medias. Y me encanta discutir con él sobre todo, lo que es ridículo, pero lo hago. Es la mejor parte de mi día.

Stiles cae hacia adelante, poniendo su cabeza entre sus piernas. —Oh Dios, —gime. —Hay algo mal conmigo, ¿no es así?

— ¿Recuerdas todas las cosas que solías decir que mamabas de mí? —Lydia pregunta. — ¿Recuerdas que todas y cada una de ellas eran buenas?  ¿Idealizadas hasta el punto de que yo no podría estar a la altura?

Lydia se arrodilla frente a él, levantando cuidadosamente su cara hasta que encuentra sus ojos. —Es porque nunca fue real, Stiles. Si realmente amas a alguien, entonces también amas todas las cosas malas. ¿De qué otra manera crees que puedo quedarme con Jackson?

Stiles resopla, y Lydia lo deja ir, moviéndose para sentarse en la cama junto a él. —Es fácil decir que el amor es químico, que estamos siendo inundados con feniletilamina y norepinefrina y dopamina, pero la verdad es que no es racional. No es algo que se pueda explicar, ni siquiera por nosotros, ni siquiera cuando “sabes” que no es bueno. El amor no es cuantificable. Confía en mí, lo he intentado.  

—Simplemente no sé qué hacer —, dice Stiles. —Él quiere que me una a su manada. Tú crees que debería mantenerme neutral. Scott quiere que vuelva con él. Allison y Chris quieren que empiece a entrenar con ellos. Mi papá…él solo quiere que yo salga de esto.

— ¿Y tú que quieres? —Lydia pregunta, haciéndose eco de su pregunta de hace unos días, cuando había ido a recogerlo a Arnold y lo llevo a su casa, y lo único que quería era dormir.

—No lo sé. Nada. —dice Stiles. —Todo.

—Nadie te está diciendo que decidas en este momento —, dice Lydia. —Pero en cuanto a la neutralidad, creo que el tiempo para eso ha pasado.

Stiles la mira sorprendido. — ¿Qué…estas diciendo que has elegido un lado?

—Sí —,  dice Lydia, mirándolo. — El tuyo.

Notes:

1: Negarse a dar información auto incriminatoria. Se refiere a la quinta enmienda de la Constitución de los Estados Unidos, que establece que ningún ciudadano "será obligado en ningún caso penal a ser un testigo contra sí mismo...”

2: Frase de origen francés, conversación que mantienen dos personas frente a frente y en privado, sin que intervenga otra persona, generalmente para tratar un tema importante o confidencial.

3: En medicina, hemicorporectomía es una cirugía radical mediante la cual la mitad del cuerpo hasta la cintura es amputada, llegando hasta la vértebra lumbar. Se amputan las piernas, los genitales, el sistema urinario, los huesos pélvicos, el ano y el recto.

Nota personal: A veces, cuando no consigo decidirme en como traducir una frase recurro a google translate, y casi siempre las partes en cuando Lydia habla cambia todos los verbos a masculino y lo mismo pasa con Stiles, google los cambia a “estoy molesta, dice Stiles” o algo así, xD

Chapter 21: Capítulo 21

Notes:

He caído, tan fuerte y duro como nunca lo he hecho.
El aburrimiento ha sido la condena que me ha puesto la soga al cuello.
Y no puedo, sino estar agradecida por ello.
Las horas que pasaba repitiendo lo mismo una y otra vez ha sido repentinamente cambiada por otra cosa.

¿BTS, cómo has logrado eso?
Culpo a mi mejor amiga.
Gracias <3

(See the end of the chapter for more notes.)

Chapter Text

Stiles y su padre habían terminado de ver el partido de fútbol después de que Lydia se fue, comiendo pizza y pretendiendo comer la ensalada. Había sido agradable y relajante, y Stiles estaba empezando a sentir que se estaban conectando de nuevo. Por eso le golpeo tan fuerte cuando a la mañana siguiente bajó por las escaleras y encontró a su padre parado en la cocina en uniforme.

—Oh —, dice Stiles. No es como si hubiera olvidado que su padre es el Sheriff. No es como si se le escapó de la mente, o algo así. Es solo, que tal vez haya estado en una burbuja los últimos días, una burbuja curativa y extraña donde las cosas empezaron a mejorar de una forma que no lo habían sido desde antes de que los hombres lobo aparecieran.

Su padre hace una mueva y Stiles se arrepiente de haber mostrado su decepción tan obviamente. No es culpa de su padre que tenga que trabajar, y siempre ha hecho todo lo posible por no hacerle sentir culpable por eso. Lo acosara sin cesar por comer sano, pero nunca le pide que no vaya a la estación. Nunca le rogó que se quedara en casa, ni una sola ve, a pesar de que luchara contra un flujo constante de pánico en el fondo de su mente todo el tiempo que su padre este en turno.

—Tara llamó esta mañana —, dice su padre disculpándose. —Tengo que ir por un rato, pero solo por hoy. Voy a arreglar todo y luego tendré la próxima semana libre, ¿de acuerdo?

— ¿Una semana libre? —Pregunta Stiles, atrapado entre el alivio y el escepticismo. —No te has tomado una semana libre desde…—Traga saliva, cortando las palabras antes de que pueda terminar. —Desde siempre.

—Lo sé, y creo que ese ha sido uno de mis errores —, dice. —Quiero que nos volvamos a conectar, Stiles. Necesito… necesitamos ubicarnos, descifrar todo esto, ¿de acuerdo? Quiero que pasemos todo el tiempo que podamos juntos antes de que comience la escuela, para que podamos decidir qué queremos hacer al respecto.

¿Qué significa eso? —Stiles pregunta con suspicacia.

—Tal vez la Beacon Hills High no sea el mejor lugar para ti —, sugiere, deliberadamente casual. —Siempre esta Brentwood

Stiles lo mira con incredulidad. Brentwood había intentado reclutarlo cuando gano la feria de ciencias en séptimo grado, ofreciéndole una beca completa. Su padre había estado extasiado, pero Stiles lo había convencido de que era demasiada presión debido a su discapacidad de aprendizaje (la primera y última vez que se referiría a su TDAH como tal, porque en realidad no lo era, pero tiempos desesperados y cosas así, y había encontrado una sombría revista seudocientífica para respaldarse a sí mismo)

En realidad no había estado preocupado con poder seguir el curriculum de Brentwood. Le preocupaba la idea de enfrentarse a la escuela sin Scott.

—No puedes hablar en serio. ¡Eso fue hace años! Probablemente ya ni me quieres, no es como si hubiera hecho algo extraordinario en mi carrera escolar, —dice Stiles. —Además, sospecho que Brentwood está dirigida por vampiros.

Su padre parece desconfiado al instante. — ¿Los vampiros existen?

—No estoy seguro —, admite Stiles. —Pero sí lo son, definitivamente van a Brentwood.

Su papá suspiró. —Mira, no voy a obligarte a cambiar de escuela, pero aun así recibes una invitación cada año, así que es una opción. No te dije que aún los estaba recibiendo porque no quería que gastaras otras dos semanas creando una presentación sobre por qué tu TDAH te impedía mantenerte al día con la escuela. Lo cual, solo para el registro, nunca lo creí por un segundo.

— ¡Pero tenía gráficos de pastel!  —Stiles protesta al instante.

—Lo sé —, dice con ironía. — Y pensé que si estabas dispuesto a poner tanto esfuerzo para convencerme de que no querías ir, no iba a forzar el problema. Todavía no lo haré. Sólo quiero que me prometas que lo considerarás, ¿de acuerdo? Tal vez sería bueno para ti. Tal vez sea hora de un cambio.

Stiles frunce el ceño, y trata de considerarlo. Brentwood es una escuela privada que solo Gossip Girl ha visto, con una ropa extraña y que rara vez se apega a los códigos de vestimenta, y clones de Jackson por todos lados. Pero aparte de eso, su plan de estudios es bastante sorprendente y el formato es más universitario que el de Beacon Hills High. Podía elegir sus áreas de estudio con mucha más libertad, y casi se le garantizaría ingresar al menos en una Ivy League1.

Y no es como si Scott realmente lo necesitara. Incluso si vuelven a hablar, Scott ya no es todo su mundo. Un poco de distancia podría incluso hacerles bien.

—Lo pensaré —, dice Stiles en voz baja. — ¿De acuerdo?

—Eso es todo lo que pido —, dice su papá, aliviado. —Ahora, con preocupaciones más inmediatas. No estoy exactamente entusiasmado con la idea de dejarte aquí solo.

A Stiles no le gusto hacia donde se dirige esto. — ¡Pero prometí ser bueno, recuerda, durante otra semana y seis días! — él dice. — ¿Eso no significa nada?

—Creo que me sentiría mejor si vinieras conmigo a la oficina —, dice John.

— ¡No! No, estaré bien aquí —, dice Stiles rápidamente. Ser arrastrado a la oficina con su padre cuando estaba castigado era peor que la detención con Harris. No sería tan malo si se le permitiera involucrarse en los casos en curso, pero la última vez que se vio obligado a ir a la estación, fue desterrado a la esquina con nada más que una revista Highlights2 de 1999. Y eso solo había sido hace siete meses. —Dios. No. No me hagas eso.

Su papá lo señala. —Bien, pero llamare cada hora. Pero no exactamente a la hora, así que no hagas planes para escabullirte. Contestas al segundo tono o pasaras el resto de mi turno en la comisaria.

—Segundo tono, lo tengo, — Stiles dice. — ¿Puedo invitar a alguien?

—Solo a Scott, —su padre lo permite, porque, salvo esa vez que Melissa le había dicho despiadadamente a Scott ¡No Stiles!, Scott y Stiles siempre han estado exentos de los castigos del otro.

—Okay, pero ¿qué pasa con…?—Stiles comienza.

—No, Derek—, su padre dice rápidamente. —Y si descubro que el Camaro ha estado estacionado afuera de esta casa, Stiles…

—Ni si quiera pregunte si…—protesta Stiles. — ¡No iba a preguntar por Derek! Iba a preguntar por Lydia.

Su padre suspira. —Te das cuenta de que todavía estas siendo castigado, ¿verdad?

—Lo sé, pero, papá, ¿realmente quieres venir a cada esta noche si no he tendido a nadie con quien hablar todo el día? —Stiles pregunta. —Porque literalmente te seguiré por toda la casa hablando sin  parar sobre mi día. Recitaré, en detalle, todo lo que he hecho, lo haré…

—Sí, está bien, ella puede venir si quieres —, dice John. —Pero no…

—No Derek, lo tengo, —dice Stiles. —Nunca invite a Derek a venir, no sé de qué estás tan preocupado. ¿Cómo lo haría? Oye, Derek, ¿quieres venir a jugar Call of Duty? ¿No? ¿Un poco de Mario Kart? Papá. En serio. Me colgaría.

—Si pensara que lo invitarías a jugar videojuegos, no habría ningún problema —, dice su padre. — Así como están las cosas, no te quiero solo con él.

La boca de Stiles se abre ante lo que su padre esta insinuando, pero se guarda valientemente de protestar. Por mucho que quisiera luchar contra la injusticia de todo eso, la última vez que había estado solo con Derek había caído literalmente en sus brazos, por no hablar de otras ocasiones en que estaban solos, en los que había estado paralizado encima de él o atrapado con él en una piscina. Su historial de estar solo juntos no inspiraba exactamente confianza.

Su padre, ajeno a su sorpresa, solo tomo su termo de café y se dirigió hacia la puerta. — ¡Contesta el teléfono para el segundo timbre, Stiles!

[…]

Stiles está bien por un tiempo después de que su padre se vaya, pero no pasa mucho tiempo antes de que el silencio comience a molestarlo. Enciende el televisor de abajo y luego la radio en su habitación. Alfabetiza su estantería antes de volver a sacarlos y organizarla por género. Pero reorganizarlos de nuevo por el apellido del autor es probablemente un paso demasiado lejos, por lo que considera jugar videojuegos por un tiempo. Podía llamar a Scott para que pudieran jugar juntos.

Agarra su teléfono ante la idea, pero en realidad no puede marcar ninguno de los números. Su corazón comienza a acelerarse y su respiración es intermitente, por lo que vuelve a bajar el teléfono. Las cosas van muy bien entre él y Scott en este momento y no quiere arriesgarse. No cree que pueda tomar una llamada más que es ignorada, tal vez sea la salida de los cobardes, pero por el momento prefiere no intentarlo.

Se cae de espadas en su cama y luego vuelve a agarrar su teléfono. —Ven a rescatarme de la muerte por aburrimiento —, dice Stiles tan pronto como la llamada conecta. —Por favor. Estoy tan aburrido que te permitiré que me hagas el cambio de imagen por el que me has estado acosando durante meses. En serio. Te dejare que me arranques las cejas, así de desesperado estoy.

—Tentador —, dice Lydia, y da un poco de miedo que lo conozca lo suficientemente buen ahora que responde a esta pequeña perorata con la reacción que la mayoría de la gente tiene ante un simple “hola”. Entonces, una vez más, Lydia nunca ha mostrado ningún tipo de reacción a sus discursos, ni a ninguna de sus muchas declaraciones de amor, así que tal vez diga más sobre ella que sobre él. —Pero lo siento, Stiles, no puedo en este momento.

Oye lo que suena como una multitud en el fondo, y frunce el ceño. — ¿Qué estás haciendo? —dice. —Parece que estar con personas. Recuerdo persona. Al menos déjame vivir indirectamente.

—Estoy persiguiendo a Peter Hale —, responde Lydia simplemente.

— ¡Qué! —llora, enderezándose. —Lydia, ¿qué estás pensando? ¿Dónde estás?

—Relájate, Jackson está conmigo y estamos en el centro comercial —, Peter ya compró unos tres abrigos largos de invierno diferentes y ahora está comprando zapatos. Lo odio con toda mi alma, pero el hombre sabe de moda.

Stiles escucha que Jackson dice algo que suena adecuadamente sarcástico, pero en realidad no puede distinguir las palabras. Stiles cree que podría dirigirse hacia Peter o hacia él.

—No creo que sea una buena idea —, dice Stiles. —Tal vez debería…

—No vengas —, dice ella. —Tu padre tendría un APB contigo en unos cinco minutos, y estoy tratando de ser discreta.

—Probablemente tomaría más de cinco minutos —, dice Stiles sin convicción. —Solo ten  cuidado. Si él descubre que lo estas siguiendo…

—Oh, él sabe que lo estamos siguiendo —, dice Lydia fácilmente. —Quiero decir, estoy bien, pero es un hombre lobo. Nos vio antes de comprar el primer abrigo.

—¿Entonces por qué sigues siguiéndolo? —Stiles pregunta.

—Porque ahora está ocupado fingiendo que no está haciendo nada —, dice Lydia. —Lo que significa que en realidad no puede hacer nada. Me pregunto cuánto gastara antes de que se canse de esperarnos.

—Eres una especie de genio malvado —, dice Stiles con admiración.

—No hay “una especie de” al respecto —, le dice Lydia, y cuelga.

Agrega a Lydia junto con su padre a esa vaga preocupación en el fondo de su mente, aunque no se siente lo suficientemente generoso como para preocuparse por Jackson. Decide ser productivo para tratar de dejar de pensar en todo, así que lava todos los platos, aspira la sala de estar y luego hace algunas remodelaciones muy necesarias en el baño de abajo. En el medio, responde diligentemente al teléfono cada vez que suena, anunciando alegremente, “el Centro de Detentación Juvenil Beacon Hills, habla Stiles Stilinski”. Su padre no se ha reído.

Después de que la casa está casi impecable, se desploma en el sofá con un suspiro pesado, y mira el reloj. Dice las 10:00 AM y el piensa que debe estar mal, pero cuando saca su teléfono dice lo mismo. Solo han pasado tres horas desde que su papá se fue.

—Oh Dios. Me siento como Rapunzel —, gime. Se inclina hacia atrás contra los cojines antes de desplazarse apáticamente a través de los contactos en su teléfono. Piensa en llamar, luego decide no hacerlo, luego lo piensa otra vez, y finalmente golpea el nombre de Derek más rápido de lo que puede decirse.

— ¿Qué pasa? —Derek pregunta al instante.

— ¿Es ese tu saludo estándar cada vez que respondes el teléfono, o algo específico para mí? — Stiles pregunta. — ¿Algo tiene que estar mal? ¿No puedo llamar?

—Qué—, dice Derek, que no es realmente el cambio de ritmo que probablemente cree que es.

—Uh... entonces, me estaba preguntando... ¿quieres venir a jugar algo de Call of Duty? — pide.

— ¿Qué? —Derek pregunta, lo suficientemente confundido de que "qué" suena como una pregunta real de nuevo.

— ¿Mario Kart, tal vez? —Stiles intenta.

—Stiles, ¿dónde estás? — Derek pregunta.

—Estoy en casa—, dice Stiles.

— ¿Estás a salvo? — Derek exige.

— ¿Qué? Sí, estoy bien, ¿hola? ¿Derek? ¿Oye? — Stiles mira su teléfono con incredulidad. Derek acababa de colgarle.

Stiles lanza un suspiro. Supone que no es como si pudiera decir que no lo vio venir. Su teléfono comienza a sonar en su mano y él lo toma sin mirar.

—Sabía que volverías a llamar…— comienza.

— ¿Stiles? — La voz de Lydia aparece, sonando inestable, e inmediatamente se tensa.

 

— ¿Estás bien? — le pregunta rápidamente.

—Sí, pero lo perdimos—, dice ella, y aparentemente no está tan inquieta como furiosa. —Tengo que irme a casa, porque mi madre quiere que tengamos 'tiempo en familia', pero quería hacerte saber que Peter no intentó nada. Aparte de la desaparición misteriosa del vestidor de hombres, donde, por cierto, no hay ventanas.

Suena frustrada y enojada al perder la cola, pero Stiles se alegra de estar lejos de Peter. —Está bien, bien—, dice. — ¿Tal vez no hagas un hábito de esto? Peter es peligroso.

—Sí, lo sé—, dice Lydia bruscamente. —Si él fuera inofensivo, difícilmente estaría perdiendo el tiempo, ¿verdad?

—Lydia…— Stiles comienza.

—Lo siento—, dice ella, aunque no suena como si lo sintiera. —Me pone nerviosa, pero estoy bien. ¿Cómo estás aguantando? Parece que el aburrimiento todavía no te ha matado.

—Estoy bien—, dice Stiles. —Puedo llamar a Scott si me siento realmente desesperado. Incluso podría responder.

—Oh, Stiles—, Lydia suspira, porque ella probablemente entiende esto mejor que nadie. Es posible que ella y Allison no hayan sido mejores amigas desde la escuela primaria, pero se han acercado rápidamente, por lo que ha tenido que lidiar con el otro extremo del romance entre Scott y Allison.

—Estoy bien—, insiste de nuevo.

—Está bien, pero llámame si necesitas algo—, dice Lydia. —Mantendré mis pinzas3 a mano.

La forma en que lo dice suena como una amenaza. —En realidad, creo que he cambiado de opinión sobre eso…

—Adiós, Stiles—, dice Lydia con dulzura, colgando antes de que pueda optar por no recibir la solicitud de renovación. Él sabe que probablemente tendrá problemas en el futuro.

 

Todavía está allí, tumbado en el sofá, preguntándose si la muerte por aburrimiento es realmente una cosa, cuando se queda dormido. Se despierta sobresaltado unos diez minutos después, cuando suena el teléfono, y se lanza sin gracia para que lo conteste justo en el segundo timbre. — ¡Estoy aquí, estoy aquí! — el grita. — ¡Por favor, no me hagas hacer los rompecabezas en Destacados otra vez!

— ¿Stiles, exactamente cuánto Adderall has tenido? —su papa pregunta

—Tomé la dosis correcta—, dice Stiles, aunque en realidad lo había olvidado por completo. —Me quedé dormido.

—Oh—, dice su papá. —Mira, si necesitas dormir, solo, ¿qué tal si me llamas cuando despiertes, bien? Sé que no has dormido bien.

—Sí, está bien—, dice Stiles. —Probablemente podría dormir un poco más. No es como si hubiera algo más que hacer aquí. Lo que me recuerda, quite todo el papel tapiz en el baño de la planta baja porque era azul polvo con flores de color rosa intenso y ¿quién hace eso? Estoy bastante seguro que las personas que eran dueños de esta casa antes que nosotros eran asesinos en serie. Así que necesitas traer pintura a casa. Un color crema o algo así. Lo arreglaré mañana.

Hay una larga pausa de su padre. — ¿En serio? — él pide. —Nunca puedo decir por teléfono.

—Sí, por supuesto que lo digo en serio—, dice Stiles. —Ni siquiera podía ir a ese baño. Era como algo de la mente de Charlotte Perkins Gilman.4

—Solo descansa un poco, niño—, dice su padre con paciencia. —Llámame tan pronto como te levantes.

Stiles logra volver a dormir, y no se despierta hasta después de las tres. Mira aturdido el reloj, camina penosamente hacia la cocina para tomar su dosis tan necesaria de Adderall a pesar de que es casi demasiado tarde, y luego sube las escaleras para usar el baño. Se dirige hacia las escaleras para ir a llamar a su papá cuando ve algo sentado en su cama.

Se detiene en la puerta, frunciendo el ceño ante la tela doblada de terciopelo rojo que ha aparecido misteriosamente sobre su colcha. Se acerca con cautela, toma el borde de la tela y la voltea rápidamente para ver qué está envuelto.

Es un libro, que es algo anticlimático, pero Stiles no se va a quejar.

 

Solo puede pensar en un creeper que irrumpiría mientras dormía para dejarle regalos. Se pregunta si este es otro intento reprimido de una disculpa de Derek Hale. Un libro de disculpas.

Stiles pasa la mano por la tapa y nota que parece vieja. Auténtico viejo, no hecho para parecer viejo. Abre las páginas e instantáneamente selecciona una serie de palabras clave vinculadas a lo sobrenatural.

Decide si este es un libro de disculpas, Stiles perdonará a Derek para siempre.

Saca su teléfono y le envía a Derek un mensaje de texto rápido: Gracias por el libro.

Derek: ¿Qué libro?

Stiles: El que dejaste en mi habitación.

Su teléfono suena al instante. Stiles lo recoge distraídamente, todavía hojeando el libro. — ¿Hola?

— ¿Qué libro? — Derek gruñe.

—Algo relacionado con hombres lobo—, dice Stiles. —Parece que debería tener 'Propiedad de Hermione Granger' estampada en alguna parte. ¿Quieres decir que no es tuyo?

—Stiles, quiero que salgas de casa—, dice Derek. —Ahora mismo.

—Está bien, creo que deberías calmarte—, dice Stiles. —Es un libro. No es una bomba de tubería.5

—Sal ahora—, gruñe Derek, y Stiles suspira, porque obviamente Derek no se ha tomado muy en serio su consejo de "cómo comunicarse".

—No puedo ir a ninguna parte—, explica Stiles. —Estoy castigado. No es como si estuviera castigado, donde solo necesito estar aquí cuando mi padre esté aquí para mantener las apariencias. Pero como si estuviera castigado, hasta el punto que creo que mi padre pudo haber instalado micrófonos o cámaras de seguridad o ambos.

—No me importa, sal de la puta casa. No te dejé ningún libro, alguien ha estado allí—, dice Derek. —Llama a tu padre y dile que tenías que irte. Haz que venga a buscarte.

—Entonces déjame ver si entiendo tu lógica: ha habido un intruso, ¿entonces debería salir a la calle? ¿Salir al aire libre? Porque esa no es una idea terrible. ¿Nunca has visto Halloween? Eso nunca termina bueno para cualquiera. De todos modos, esto no es exactamente ominoso, así que no reaccionemos de manera exagerada—, dice Stiles. —Es solo un libro. Es un libro asombroso, en realidad. Dudo seriamente que mi misterioso benefactor signifique algún daño.

—Déjame verlo.

Stiles salta, dando vueltas cuando se da cuenta de que la voz de Derek lo está alcanzando en estéreo. — ¡Oh Dios mío! — el llora. — ¿Dónde estabas…? ¿Cómo?

—Corrí por el bosque—, dice Derek, aunque ni siquiera está sin aliento. Estúpidos hombres lobo y su estúpida resistencia sobrenatural.

—Corriste por el bosque: ¿qué es más rápido que una bala en exceso ahora? Dios mío. Espero que sepas que casi me dio un ataque al corazón. Hay casos registrados de ataques al corazón en adolescentes, no es como si estuviera fuera del reino de… —Stiles se interrumpe, cambiando rápidamente de tema. —Dijiste que corriste, ¿verdad? ¿Así que eso significa que el Camaro no está estacionado afuera?

—Sí, vine a pie—, dice Derek con impaciencia. — ¿Por qué?

—No hay razón—, dice Stiles rápidamente.

Derek extiende una mano. —El libro, Stiles, déjame verlo.

—Mantén tus manos para ti mismo, esto fue para mí—, dice Stiles, volviendo a la página de portada. —Creo que pertenecía a un cazador.

Derek se para detrás de él, inclinándose sobre su hombro para que pueda ver. —No cualquier cazador—, dice sombríamente, pasando los ojos por un escudo de armas. —Esa es la cresta Argent.

—Eh, — dice Stiles. — ¿Crees que Chris dejó esto por mí?

—No importa—, dice Derek bruscamente. —Obviamente no puedes quedártelo.

—Absolutamente puedo quedármelo—, dice Stiles, alejándose de Derek y sosteniendo el libro de forma protectora contra su pecho. —El que lo encuentra se lo queda.

—Stiles—, dice Derek, entrecerrando los ojos. Él se acerca para agarrar el libro de él, y en el momento en que sus dedos hacen contacto, está volando hacia atrás. Se estrella contra la pared detrás de él con la fuerza suficiente como para que una delgada grieta de telaraña se rompa hasta el techo.

Stiles deja caer el libro y se precipita hacia delante, cayendo de rodillas frente a la aturdida figura de Derek. — ¿Estás bien? ¿Qué demonios fue eso? ¿Hice eso? ¿Cuántos dedos? ¿Derek? — Stiles pregunta frenéticamente, levantando una mano. — ¡¿Cuantos dedos?!

—Cuatro, dice Derek.

— ¿Cuatro porque eres inteligente y no cuentas mi pulgar, o cuatro porque tienes daño cerebral? — Stiles pregunta.

—Los pulgares no son dedos. Son pulgares6, — dice Derek petulantemente. —Así que cuatro.

—Claro, obviamente estás bien—, dice Stiles.

— ¿Qué demonios me hiciste? — Derek exige.

— ¿No crees que fue a propósito, verdad? — él pide. —¡Ese fue el libro! ¡No fui yo! — Los ojos de Stiles se ensanchan y se pone de pie, cayendo nuevamente al suelo cuando alcanza el libro. —Creo que sé...

Pasa sus dedos por la cubierta interior. Tiene un forro impreso, con un pequeño patrón repetitivo de pequeños árboles de tinta negra. Árboles de fresno de montaña. —Creo que sus cubiertas están revestidas con ceniza de serbal—. Sus ojos se iluminan. —Y mezclado con mi Jedi…

—Deja de llamarte Jedi—, grita Derek.

—Acabo de enviarte volando por la habitación sin siquiera intentarlo—, dice Stiles. —Soy, obviamente, un Jedi. No me importa lo que digas—. Él vuelve a mirar a Derek con preocupación. — ¿Estás seguro de que estás bien? Realmente no quise ir momentáneamente al lado oscuro y tirarte así.

—Estoy bien—, dice Derek, volviendo a ponerse de pie. —Hombre lobo, ¿recuerdas? Pero creo que he expresado mi opinión sobre el libro. No puedes guardarlo.

—Todo lo que hemos aprendido es que es peligroso para los hombres lobo—, dice Stiles. —Esa es una razón más por la que debería guardarlo, para asegurarme de que no se use contra ninguno de ustedes.

 

—No me gusta esto", dice, frustrado. —Alguien obviamente está tratando de influir en ti.

—Yo digo que los dejemos—, dice Stiles, mirando de nuevo el libro. —Soy insensible a sus maneras de cortejar. Guardaré los regalos, pero nunca tendrán mi corazón.

—Esto no es un juego—, gruñe Derek. —Hay demasiadas cosas en este momento. No puedo preocuparme por esto también".

Stiles finalmente aleja sus ojos del libro. —Estás realmente preocupado por Gerard, ¿verdad?

— ¿Cómo supiste…?— Derek comienza.

—Tu manada está llena de adolescentes, ¿realmente esperabas tener secretos?—Stiles pregunta.

Derek intenta mirarlo mal, lo cual es mucho menos efectivo de lo que hubiera sido cuando se conocieron. Bueno, no es que Stiles le hubiera prestado demasiada atención incluso en ese momento. —Quiero que te mantengas fuera de esto.

— ¿Pensé que me querías en tu manada? — Stiles pregunta inocentemente.

—Sí, — dice Derek al instante. —Y si quieres unirte, te diré lo que sé. Ahora mismo. Si no lo haces, entonces no puedo protegerte completamente, y es mejor que no lo sepas.

—Al protegerme completamente, te refieres a un comando alfa para que me mantenga al margen, ¿no? — Stiles pregunta. —Ahora que incluso si estuviera en tu manada, no seguiría todos tus pedidos, ¿verdad?

—Sí, lo sé—, dice Derek con ironía. —Dejé de creer en los milagros cuando tenía unos cinco años.

— ¿Fue una broma? — Stiles pregunta. — ¡Realmente hiciste una broma! Incluso fue casi divertido. Wow. Mírate. Debo ser una buena influencia.

Derek lo ignora, merodea hacia la ventana y mira sus dedos desde el borde para probar la ceniza de la montaña. — ¿Cómo llegó alguien aquí? — él pide. — ¿No escuchaste nada?

—Me quedé dormido—, dice Stiles a la defensiva. —Por unas cinco horas. Bueno, con breves interrupciones en el control de la cama, pero aun así. ¡No me di cuenta de que tenía que estar en guardia en caso de que personas misteriosas irrumpieran para dejarme libros! O al menos, no lo haría si fuera no eras tú.     

—Así que alguien estuvo aquí mientras dormías—, dice Derek sombríamente, volviéndose para examinar el resto de la habitación.

— ¿No puedes olerlos? — Stiles pregunta. —Descubriste a Scott en muy poco tiempo.

—No... No, hay algo que interfiere. Creo que es ese maldito libro—. Derek mira el libro como si fuera responsable de toda la injusticia en el universo. —No me gusta.

Stiles lo sostiene contra su pecho a la defensiva, porque esto no es culpa del libro. —Los libros son neutrales, Derek—, dice. —No hay tal cosa como un libro moral o inmoral.

— ¿Me estás citando a Oscar Wilde? — Derek pregunta con incredulidad.

Stiles sonríe. —Sí—, dice. —No esperaba que atraparas eso—. Está a punto de decir algo más cuando escucha el sonido de abajo, y sus ojos se abren. —Oh, no. ¡Mi papá! Olvidé llamar.

Se levanta del piso y se apresura hacia las escaleras, arrojándose con tanta fuerza que tiene la suerte de llegar al fondo sin romperse el cuello. Se desploma sobre el sofá, extendiendo la mano y agarrando el teléfono justo cuando comienza su tercer timbre.

— ¡Todavía estoy aquí! ¡Estoy aquí! ¡No envíes S.W.A.T! — Stiles grita.

—No tenemos un equipo de S.W.A.T., Stiles. Pero estaba empezando a preocuparme—, dice su padre, su tono casi decepcionado. Stiles siente que su corazón se contrae. — ¿Y por qué estás sin aliento?

—Lo siento, me quedé dormido en mi habitación, dejé el teléfono abajo—, explica Stiles. —No quise dormir tanto.

—Es bueno que finalmente hayas descansado. ¿Te sientes mejor? — John pregunta, sonando más comprensivo.

—Sí, estoy bien, ¿cómo va el trabajo? — Stiles pregunta, poniendo un poco de alegría en su voz. Puede ver a Derek merodeando por el rabillo del ojo, y odia las promesas que ya le ha hecho a su padre. Se pregunta cuánto ha cambiado realmente.

 

—No pasa mucho, gracias a Dios—, dice John. —Puede que llegue a casa temprano. Aún no lo sé. Pero recogeré algo para nosotros.

— ¿Qué tal Chipotle? — Stiles pregunta. —Usan todos los ingredientes frescos, es comida de verdad, papá, y creo que...

—Está bien, me gusta Chipotle—, dice su papá.

Stiles sospecha de inmediato que su padre se ha rendido tan rápido. —No cueles nada en tu burrito que se supone que no debes comer—, advierte.

—No lo soñaría—, dice con ironía. —Nos vemos pronto, niño.

Stiles cuelga el teléfono y levanta la vista para ver a Derek observándolo seriamente. — ¿Qué? — pregunta incómodamente, empujándose de nuevo a una posición sentada.

Derek solo levanta una ceja. —Nada.

—Me estás mirando como si estuvieras intentando separarme con tus ojos—, dice Stiles. —Obviamente no es nada.

—Solo, tú y tu papá, no eres lo que esperaba—, dice Derek.

Stiles sabe que la mayoría de las personas no entienden la forma en que su padre y él interactúan, pero Derek no parece ser crítico. Se ve curioso. — ¿En qué sentido?

—Se cuidan el uno al otro—, dice Derek vacilante. —Eso es todo lo que quise decir.

Stiles tira de una de sus rodillas hasta su pecho, apoyando la barbilla sobre él para que no tenga que mirarlo a los ojos. —Mi terapeuta solía decirme que es un mecanismo de defensa—, explica. —Que lidié con la pérdida de mi madre al poner toda mi atención en mi padre. Tratando de 'controlar su salud'. Pero en realidad es mucho más simple que eso. Simplemente no quiero perderlo también.

—Stiles... — Derek dice, y su voz es suave, pero por alguna razón, hace más eco que cualquiera de sus comandos cuando está enojado.

—Nunca lo quise involucrado en esto—, dice, y cierra los ojos.

—Es demasiado tarde para eso—, le dice Derek.

—Lo sé—, dice Stiles.

—No quiero que te involucres en esto, tampoco, ya sabes—, dice Derek suavemente.

Stiles se ríe y mira hacia arriba. —Definitivamente es demasiado tarde para eso.

—Lo sé—, hace eco. —Tal vez es hora de que ambos aceptemos eso, ¿qué te parece?

Stiles se encuentra con los ojos de Derek constantemente. — ¿Eso significa que finalmente vas a ser honesto conmigo? — él pide.

Derek se sienta en la mesa de café, pareciendo resignado. — ¿Cuánto sabes ya?

—Solo que no has podido encontrar el cuerpo de Gerard—, dice Stiles.

—Peter y yo rastreamos a Gerard esa noche—, dice Derek. —El rastro simplemente siguió y no pudimos entender cómo seguía moviéndose. Luego encontramos huellas de llantas. Alguien lo había recogido.

—Chris—, dice Stiles al instante.

—Esa también sería mi suposición—, acuerda Derek.

—Y quizás no podrías haber dicho, 'oye, Stiles, ¿no te quedes con los Argents porque podrían estar albergando a su pariente loco y homicida?' En lugar de solo gruñir "mantente alejado de ellos” a cada rato—, pregunta, empujando su pierna hacia abajo para poder inclinarse hacia delante. —Respondo al razonamiento, ¿sabes? Los comandos no tanto.

—No gruñí—, dice Derek. —Estaba tratando de expresar…

—A través de gruñidos, — interrumpe Stiles.

—… La seriedad de la situación—, termina Derek con fuerza. —Si Gerard está vivo y descubre lo que puedes hacer, nunca estarás a salvo. Nunca te habría dejado ir cuando te llevó, si hubiera sabido lo que puedes hacer.

—Parece que tienes algo de experiencia con esto—, dice Stiles.

—Lo hago, — Derek está de acuerdo.

Stiles espera la explicación, pero como siempre, espera en vano. —Derek, necesito algo más que eso—, dice. —Sé que agrupar grandes cantidades de palabras es un concepto extraño para ti…

—Cállate—, dice Derek, pero no tiene el calor habitual, y Stiles cierra la boca al instante. —Bien, mira, sucedió cuando tenía unos catorce años. Mis padres y Peter fueron atacados por cazadores cuando estaban patrullando la Reserva, y estaban atrapados con ceniza de serbal. Nunca, nunca habíamos sabido que los cazadores podías usarlo, normalmente eran nuestros aleados los que tenían ese tipo de poder. Así que los tomo desprevenidos.

Derek cierra los ojos por un momento, y parece que le está causando dolor físico hablar sobre su familia, su pasado. Stiles desea poder decirle que no tiene que hacerlo, pero necesita saberlo, y siempre existe la posibilidad de que tal vez sea útil hablar de ello.

—Había dos hombres y una mujer. Los hombres eran los únicos armados, y le dispararon cinco veces a mi padre, pensando que él era la mayor amenaza—, explica. —Mi madre era en realidad el Alfa, así que ese fue su primer error. Luego, la barrera se disolvió y, en su ira, mi madre destrozó a los hombres. Luego fue a por la mujer—. Derek lo mira. —En realidad fue Peter quien la detuvo.

Derek esboza una sonrisa fantasma, antes de apartar la mirada de nuevo. —Tuve que escuchar esta historia tantas veces. La forma en que él simplemente se fue y se paró frente a esa mujer antes de que mi madre pudiera tocarla, a pesar de que era una Alfa enojada y podría haberlo lastimado seriamente. Pero él sabía lo que esa mujer era, de inmediato. Peter siempre ha podido captar ese tipo de cosas, aunque ninguno de nosotros supo nunca si fue su poder o su renuencia lo que vio. Simplemente sabía que ella no había estado allí por elección. Sabía que ella había sido la que había derribado la barrera de cenizas de serbal.

—Ella era como yo—, se da cuenta Stiles.

—Sí—, él está de acuerdo. —Los cazadores la obligaron a crear la barrera, pero en el momento en que se distrajeron, ella la bajó y los salvó. Básicamente había sido su esclava—. La ira en su voz comienza a aumentar a medida que continúa, profundizando su voz. —Nunca supe todos los detalles sobre lo que le hicieron a ella. Era demasiado joven, no hablarían de eso conmigo. Pero una vez la vi, salió en traje de baño cuando estábamos en una fiesta y... estaba cubierta de cicatrices. Nunca había visto algo así.

— ¿Quién era ella? —Pregunta Stiles.

—Se llamaba Emily. Se la llevaron cuando tenía solo quince años, camino a casa desde la escuela. Creo que había vivido en algún lugar de Georgia—, dice Derek. —Tenía casi veintitrés años cuando la conocí, así que estuvo con los cazadores durante al menos siete años. Eso es todo lo que me contaron sobre su pasado. Para ser honesto, nunca pedí saber más. Estoy seguro que ni siquiera ahora querría saberlo. Pensé que habría tiempo después, si...

 

Stiles golpea torpemente sus manos contra sus piernas mientras Derek se va, sin saber qué decir. La preocupación de Derek por él está empezando a tener mucho más sentido. — ¿Lo hacen mucho? ¿Con personas que pueden usar ceniza de serbal? — él pide.

—Siempre que pueden, que afortunadamente no es frecuente—, dice Derek. —Pocos pueden hacerlo, y menos aún tienen la oportunidad de intentar darse cuenta de que pueden hacerlo.

— ¿Qué le pasó a ella? ¿A Emily? — Stiles pregunta. — ¿Dijiste que estaba en una fiesta? ¿Se quedó con ustedes?

—Sí, se casó con Peter, solo unos meses antes de morir en el incendio con el resto de mi familia—, dice, y su tono sin emociones es discordante cuando se compara con la realidad de sus palabras.

Stiles ha estado en todas las páginas de los informes de incendios de Hale, varias veces, y él sabe que Peter nunca tuvo una esposa legal, y que no había una lista de Emily Hale en ese incendio. Pero él sabe que eso no significa nada, en realidad. El fuego había ardido tanto que casi no podían identificar ninguno de los cuerpos, y quedaba muy poco para enterrar. Tal vez Peter y Emily se casaron con hombres lobo en alguna ceremonia secreta en el bosque, o tal vez la mantuvieron oculta porque no querían que se la llevaran de nuevo.

No quiere lastimar más a Derek haciéndole todas estas preguntas simplemente para satisfacer su curiosidad, por lo que se las guarda para sí mismo, pero hay una cosa que aún necesita saber.

— ¿Quiénes eran los cazadores que tenían a Emily? — él pide.

—Los Argent—, dice Derek, mirándolo seriamente. —Se podría decir que probablemente fue lo que inició la disputa entre nosotros. Fueron solo un par de los primos lejanos de Gerard los que fueron asesinados, y dudo que se preocupara por ellos. Solo quería una razón para venir tras nosotros.

—Lo siento, Derek—, dice Stiles.

— ¿Entiendes ahora por qué tienes que tener cuidado? — Derek pregunta. —Los Argent podrían haber caído del poder, pero todavía hay muchas familias de cazadores por ahí, y si esto vuelve a cualquiera de ellos...

—Sí, no creo que sea un buen esclavo cazador—, dice Stiles, tratando de mantener su tono ligero, incluso cuando siente la ansiedad deslizándose sobre él. —Hablo demasiado y no tomo las órdenes muy bien. Probablemente no duraría una semana.

Derek se mueve de inmediato, agachándose frente a él con una expresión seria y enojada. Extiende la mano y agarra las muñecas de Stiles, tirando de él un poco para asegurarse de que tiene toda su atención. Uno de estos días Stiles realmente tendrá que sentarse con él y hablar mucho sobre todo el maltrato.

—No voy a dejar que eso te pase a ti—, promete Derek, su voz es un gruñido, y una parte tranquilizadora. —Es por eso que tenemos que encontrar a Gerard. No creo que Chris traicionará tu secreto a otra familia, pero podría decírselo a su padre.

—Cuando dices “tenemos”, no te refieres a ti y a mí, ¿verdad? Te refieres a ti y a Peter—, dice Stiles en tono acusador.

—Sí—, admite Derek. —Es un buen rastreador, y no solo como un lobo. Puede seguir rastros de papel, y tiene más contactos que yo. Es mucho mejor en esas cosas que yo. Lo necesito.

— ¿Pero puedes confiar en él? — Stiles exige.

—Puedo confiar en él para seguir buscando a Gerard hasta que estemos seguros de que está muerto, de una forma u otra—, dice Derek fácilmente.

—El problema es que no le importará lo que cueste ni a quién tiene que lastimar para que esto suceda—, le recuerda Stiles.

—No, no lo hará—, reconoce Derek, dejándolo ir. —Es por eso que te mantendrás fuera del camino.

— ¿Y qué hay de ti? — Stiles exige.

—Llámame si recibes más regalos sospechosos—, dice Derek en lugar de contestar, y luego se pone de pie y sale por la puerta de la cocina.

¡Una de estas veces, tal vez quieras probar un 'adiós' solo por la novedad! — Stiles lo llama enojado.

Su teléfono vibra y Stiles lo mira con irritación, que rápidamente se convierte en confusión cuando ve que el texto es de Derek.

Simplemente dice: Adiós, Stiles.

No es tan tranquilizador como Derek creé.

Notes:

1: La Ivy League es una alianza de las ocho universidades más prestigiosas de estados unidos. Son: Universidad Brown, Universidad de Columbia, Universidad Cornell, Dartmouth College, Universidad Harvard, Universidad de Pensilvania, Universidad Yale, Universidad de Princeton
2: Highlights for Children, a menudo referido simplemente como Highlights, es una revista infantil estadounidense. Comenzó su publicación en junio de 1946.
3: Se refiere a pinzas para la ceja.
4: Charlotte Anna Perkins, fue una intelectual norteamericana multidisciplinar, muy activa en defensa de los derechos civiles de las mujeres entre finales de 1890 y mediados de 1920.
5: Una bomba de tubería es un dispositivo explosivo improvisado, que utiliza una sección de tubería herméticamente sellada y llena de material explosivo.
6: En el habla inglés normalmente se agrega el término “dedo” (Finger) al final de nombrar los dedos. (Ex. Index finger, middle finger, ring finger, little finger and thumb) así que como una clase de broma al pulgar no se le considera dedo. (Ingles 101 con Liliath )

Chapter 22: Capítulo 22

Notes:

He estado viendo una drama chino llamado The Untamed, excelente elenco. Y la historia es triste y gay como las prefiero. :)

(See the end of the chapter for more notes.)

Chapter Text

Su padre no termina llegando a casa temprano, pero eso solo le da tiempo a Stiles para trabajar. No quiere forzar un interrogatorio sobre Derek, quien ya había hablado un 250% más de lo habitual, por lo que eso significa que necesita encontrar respuestas por su cuenta. Buscar en la base de datos de la Oficina del Sheriff no le haría mucho bien aquí, ya que Emily había desaparecido en Georgia. Afortunadamente, el padre de Scott está en el FBI.

Stiles tenía once años la última vez que recuerda haber visto al señor McCall. Había estado iniciando sesión en la base de datos desde su casa, y Stiles acababa de ver el registro: rmccall, pw: melissascott52.

Stiles no tenía uso para esa información en ese entonces, por supuesto. Las reglas todavía significaban algo en ese momento, pero se le había quedado grabado. No podía entender el '52', parecía tan arbitrario, excepto que conocía a muchas personas que se veían obligadas a actualizar su contraseña a menudo y tendían a aumentarla un número cada vez.

La policía generalmente requería una nueva contraseña cada tres meses, por lo que Stiles la había contado de forma incremental cuando tenía quince años, solo para ver qué pasaría. McCall nunca había sido particularmente creativo, pero Stiles todavía se sorprendió cuando funcionó: había abandonado a su familia, pero la mantuvo como su contraseña. Stiles casi se lo había contado a Scott, pero no estaba seguro de todo esto convirtiera al Sr. MacCall en un bastardo a un mas grande, por lo que nunca lo hizo.

Cinco años después, y todo lo que necesita es un poco de matemática básica para ingresar a la base de datos del FBI casi siempre que lo desee. Solo lo ha hecho tres veces (1: para ver si podía 2: hacer una verificación de antecedentes de la Sra. Hamilton que vivía al otro lado de la calle, cuando su padre pensó erróneamente que estaba listo para salir 3: para ver si los archivos x realmente existieron). Stiles sabe mejor que tentar a la suerte y acceder a la cuenta demasiado. Si alguna vez revisan los registros de acceso y ven a Rafael McCall conectado desde una dirección IP1 en Beacon Hills, bueno, es demasiado imbécil para que cualquiera pueda asumir que solo fue a visitar a su hijo.

Abre la base de datos, cubriendo sus huellas como lo hace con algunos consejos que había recogido de Danny, y comienza una búsqueda de niños desaparecidos entre los años de 1998 y 1999 en Georgia, reduciendo los parámetros cada vez más hasta que finalmente se encuentra con el archivo del caso de Emily Dewitt.

Ella es bonita, de una manera joven y femenina. Parece un poco como si hubiera podido ganarse a Ellen Page por el papel de Juno. Tiene problemas para imaginarla con Peter, pero sabe que ella probablemente tenía muy poco en común con la chica de la foto cuando los Hales la encontraron, siete años después.

Sigue leyendo y ve que el caso todavía está en la lista como abierto, porque ella nunca fue encontrada oficialmente.

Ahora, sabe, ella nunca será encontrada. Había estado en cuidado de crianza en el momento en que la llevaron, y no sabe si sentirse aliviada o no porque ella no parecía tener ninguna familia que la llorara. Nunca estuvo seguro de si eso mejora o empeora las cosas.

Hace copias de las páginas y las imprime, y está a punto de cerrar la sesión cuando se le ocurre hacer una referencia cruzada del caso con el nombre de Argent. El nombre de Gerard aparece un momento después, cuando uno de los testigos preguntó cuándo había desaparecido por primera vez.

Había estado enseñando en su escuela.

—Mierda—, respira Stiles, maldito bastardo. No hay nada en el código sobre arrebatar a chicas de quince años de la calle para obligarlas a trabajar para los cazadores. Entonces piensa en Chris, que se habría casado recientemente con un niña pequeña en ese momento, ¿habría sabido hasta qué punto se había hundido su padre incluso en ese momento?

Recibe un mensaje de texto de que su padre está en camino y considera esconder lo que ha encontrado, pero luego se da cuenta de la grieta a lo largo de la pared y obtiene otra idea. Se deshace de los sellos oficiales del FBI y simplemente imprime el texto, imprimiendo fotos en color de Emily y los Argent, antes de tomar una foto de Derek en el Facebook de Érica. Ella lo había sorprendido a medias, sus ojos se cerraron lo suficiente como para que el destello de luz producido por los ojos del alfa no se viera en la foto.

Se para en la silla de su escritorio y graba la imagen de Emily en la parte superior de la pared, justo sobre la grieta, y luego coloca todo lo demás a su alrededor. Conecta las imágenes con un carrete de hilo rojo.

Él retrocede y mira su obra. Parece caótico, pero lo tranquiliza, de alguna manera, y puede seguir las conexiones a lo largo de un borde de la pared al otro. Es un poco como un mosaico, y si lo mira lo suficiente, puede comenzar a ver la imagen completa tomando forma.

— ¡Stiles, estoy en casa! — su papá llama desde abajo. —Y también Lydia. Tienes veinte minutos.

Stiles frunce el ceño y se da vuelta cuando Lydia entra caminando a su habitación. Ella se detiene y mira su pared, aparentemente sin impresionarse. —Pensé que debería venir a comprobar que no te hubieras vuelto loco—, explica. —Creo que llego un poco tarde.

—Solo estaba…— comienza Stiles.

—Lo primero es lo primero—, interrumpe Lydia, levantando una mano para cortarlo. — ¿Qué es esto de que vas a ir a Brentwood?"

Los ojos de Stiles se abren. — ¿Qué? ¿Mi papá te dijo eso?

—No—, dice Lydia lentamente. —Me preguntó qué sabía sobre Brentwood, y descubrí el resto desde allí.

—No es... no voy a ir allí—, dice Stiles. —Simplemente no me di cuenta de que todavía estaban tratando de reclutarme.

—Buitres bien vestidos—, se burla Lydia con simpatía. —Me llaman al menos una vez a la semana durante los veranos.

—Sí, mira, eso no me sorprende, pero no puedo ver por qué todavía me ofrecen un lugar—, dice Stiles. —Quiero decir, tengo buenas calificaciones, pero también mucha gente, y se supone que Brentwood es bastante élite. Realmente no pensé que mi proyecto científico sobre las cualidades regenerativas de las lombrices de tierra fuera tan memorable.

Lydia pone los ojos en blanco. —Stiles, eres el segundo en nuestra clase.

— ¿Lo soy? — Stiles pregunta sorprendido. —Espera, ¿cómo sabes eso y yo no?

—No tengo idea de por qué no lo sabes—, dice ella. —Personalmente, me gusta vigilar a la competencia. Siempre existe la posibilidad de que puedas comenzar a aplicarte y convertirte en una amenaza real.

—No puedo creer que sea el segundo—, frunce el ceño.

—La mayoría de las personas entre los cinco primeros lugares de cualquier clase están muy apegados a sus libros de texto, y calculan sus calificaciones una vez por semana para ver si su promedio de calificaciones se ha movido—, dice ella. —Que hayas llegado en segundo lugar sin querer es exactamente por qué te vigilo. Siempre lo he hecho.

— ¿Qué quieres decir con que siempre lo has hecho? — Stiles exige. —Ni siquiera sabías quién era yo.

—Hemos estado en las mismas escuelas desde primer grado, y tú eres el único que superó mi puntaje en un examen. Por supuesto, sabía quién eras, dice ella.

—Entonces me estabas ignorando—, dice Stiles.

—Ciertamente parecía efectivo", dice Lydia. —Y, sinceramente, era la única forma de tratar con usted que no requería ser extremadamente cruel.

—Está bien, punto valido—, admite Stiles. Lydia habría tenido que aniquilarlo verbalmente, probablemente varias veces, antes de que él se hubiera rendido si hubiera sabido en ese entonces que ella tenía algún tipo de interés personal en él. —Entonces, ¿por qué no estás en Brentwood?

—Se suponía que Jackson y yo íbamos a ir juntos nuestro primer año—, dice Lydia.

—Entonces, ¿por qué no lo hiciste? — él pide.

Lydia mira hacia otro lado. —No entró.

—Gran cosa—, Stiles resopla. —Su papá podría haberle comprado esa escuela.

Lydia se vuelve hacia Stiles y lo mira a los ojos con seriedad. —Jackson no lo dejó—, dice ella. —Sé lo que piensas de él, Stiles, pero la mayoría de lo que odias de él solo está ahí de actuación.

—Entonces es su culpa por ser un actor tan estelar—, dice Stiles sin compasión. —Su compromiso con su papel obviamente está al borde de los niveles de dedicación de Christian Bale.

Lydia suspira, pero lo deja ir. —De todos modos, existe ese viejo dicho, mejor ser un pez grande en un pequeño estanque—, dice ella. —Me destaco en Beacon Hills High.

—Lydia, te destacarías en cualquier lugar—, le dice Stiles.

—Cierto—, dice Lydia, tarareando pensativamente. —Pero no conocería a nadie allí.

—Puede que me conozcas—, dice Stiles en voz baja.

Ella gira bruscamente. —Suenas como si realmente estuvieras considerando la transferencia—, dice sorprendida.

Stiles se encoge de hombros y se aleja de ella para mirar hacia la pared.

—No puedes decir algo así y luego simplemente dejarlo caer, Stiles Stilinski—, dice Lydia con seriedad. — ¿Que está pasando?

—Le prometí a mi papá que lo pensaría, eso es todo—, dice Stiles.

—Le prometes a muchas personas muchas cosas, pero solo haces lo que quieres—, dice Lydia. —Lo que significa que no solo lo estás pensando porque él te lo pidió.

—Está bien—, admite Stiles. —Entonces, tal vez lo estoy considerando. No es exactamente como si los habitantes de Beacon Hills High se alborotaran en los pasillos si decidiera irme. Creo que Harris podría organizar algún tipo de celebración. Quizás incluso aliviar las detenciones.

—Crees que no te extrañaremos—, dice Lydia, su voz extrañamente fría. — ¿Es eso lo que realmente piensas?

—Creo que todavía puedo ver a las únicas personas que me extrañarían—, corrige Stiles. —Y no podría importarme menos el resto.

—Está bien—, dice Lydia suavemente. —Está bien. Entiendo tu punto. Tal vez tengas razón.

—No digo que sea lo que voy a hacer—, le asegura Stiles. —Solo digo que lo estoy considerando, ¿de acuerdo?

—Entonces lo consideraré también—, dice Lydia.

—Gracias—, frunce el ceño Stiles, —pero realmente tengo que tomar esta decisión por mi cuenta.

—No, idiota—, dice Lydia. —Consideraré transferirme allí también. No puedo dejar que tengas una ventaja, ¿verdad? La próxima vez que llamen, supongo que puedo darles treinta segundos antes de colgar.

Stiles se vuelve hacia ella con incredulidad: no sabe qué hacer con el hecho de que la chica que había perseguido durante años en realidad podría estar considerando seguirlo a una nueva escuela. —No tienes que hacer esto.

—Lo sé—, dice ella. —Sabes lo que es para mí. Todos todavía me miran como si estuviera loca. Me dije a mí mismo que tenía que quedarme, para mostrarles que no dolía. Que no me importaba. Pero tal vez es hora de que realmente deje de preocuparme y hago lo que es mejor para mí—. Lydia se tira el pelo y se vuelve a poner la máscara perfecta. —Además, me veo increíble en uniforme.

— ¿Qué hay de Jackson? —él pide.

—Hace tres años ir a escuelas separadas nos hubiera destrozado—, dice Lydia. —Me gustaría pensar que somos más fuertes que eso ahora. Y si no lo somos, tal vez sea mejor que lo descubra ahora que cuando entre en M.I.T. y él no.

—Sí, realmente no puedo imaginar a Jackson en otro lugar que no sea Chico—, dice Stiles con una sonrisa.

Lydia solo le lanza una mirada fulminante y luego mira hacia la pared. —Entonces, ¿por qué investigas un caso de una niña desaparecida de hace más de una década?

Apenas ha mirado a la pared, y ya ha descubierto el caso principal. Puede que Stiles no esté enamorado de ella, pero él la amará para siempre. Se acerca a la pared, pasando los dedos por un trozo de cuerda.

—Porque ella era como yo—, explica. La imagen de Emily está en la parte superior, y unida por hilos rojos a varios Argent, así como a Peter (en caricatura, ya que Stiles y Peter no eran amigos en Facebook). Tenía fotocopias de los informes de incendios que se suponía que no debía tener, y el informe oficial del FBI sobre el secuestro de Emily que definitivamente no debía tener.

— ¿Cómo conseguiste esto? — Lydia pregunta, mientras pasa los dedos por uno de los informes de secuestro.

—Mejor si no preguntas—, dice Stiles. —Negabilidad plausible, y todo eso.

Lydia simplemente vuelve a las impresiones, aparentemente indiferente. —Podría considerar a Brentwood, pero no voy a pasar tiempo en prisión por ti—, dice ella.

—Es solo un delito menor de clase B, técnicamente—, Stiles se encoge de hombros. —Incluso Danny lo ha hecho. Y Danny es casi un ser humano perfecto.

—Por eso puede salirse con la suya—, dice ella con astucia.

—Me salgo con la mía—, protesta Stiles. —Es que, a diferencia de Danny, no me atrapan en primer lugar.

—Excepto cuando lo hacen—, le recuerda Lydia.

—Correcto, excepto por entonces—, acepta Stiles. — ¿Podemos mantenernos enfocados por favor?

—Hmm—, dice Lydia. — ¿Y por qué nos preocupamos por ella otra vez?

—Ella podría hacer lo mismo que yo, podría usar ceniza de serbal—, explica Stiles. —Fue secuestrada por los Argent y la obligaron a hacer cosas horribles. Derek cree que me va a pasar a mí.

—No va a pasar—, ella niega bruscamente, inquietantemente segura. —Tienes al Sheriff de la ciudad, dos manadas de hombres lobo, y lo más importante, yo a tu lado. ¿De eso se trata? ¿Es por eso que estás...?"

—No, solo estoy tratando de resolverlo—, dice Stiles, frunciendo el ceño mientras vuelve a mirar por la pared. —Pensé, quiero decir, sé cómo es Gerard, está bien, sabía que era un bastardo. Pero todavía pensaba que Kate era una especie de aberración de cazadora. Pensé que quemar viva a una familia entera era solo su ser un sociópata, pero he estado pensando en lo que dijiste: que Kate lo hizo con Gerard, y creo que tú y Peter tienen razón.

—Por mucho que me duele estar de acuerdo con él en algo—, dice Lydia.

—Sí, pero desafortunadamente Peter es bueno para descubrir las motivaciones para los locos, probablemente porque puede relacionarse con ellos en un nivel que simplemente no podemos—, dice Stiles, y le lanza una sonrisa. Lydia simplemente le devuelve la mirada, pero Stiles nota la forma sutil en que comienza a relajarse. Se vuelve hacia la pared. —Entonces, si Gerard pudiera hacer eso, él podría hacer cualquier cosa. Y ahora creo que acechó y secuestró a una niña de quince años y luego, no sé, ¡como regalarla a sus primos lejanos! Y en serio, ¿quién hace eso? ¿Qué es eso? Derek tenía razón, estos cazadores están locos, y yo ni siquiera…

—Respira, Stiles—, dice Lydia con calma.

—Correcto. Sí. Respirar. Está bien—, está de acuerdo, pero todavía no deja de hablar lo suficiente como para tomar mucho aire. Agarra el libro de su escritorio. —Pero mira, ¿de acuerdo? Este libro perteneció a la familia Argenta una vez. Es básicamente lo opuesto al Bestiario. Se trata de un Manual del Cazador, supuestamente, pero en realidad limita con ser un Grimorio.

Lydia se acerca con interés, tirando suavemente del libro de sus manos antes de dejarse caer sobre su cama para hojearlo. —Uno pensaría que Argent frunciría el ceño ante ese tipo de cosas".

—Sí, lo sé, ¿verdad? — Dice Stiles. —Excepto que históricamente nunca ha ido de esa manera. Quiero decir, mira a Hitler. Los tiranos siempre son “haz lo que yo digo y no lo que yo hago”, así que los Argent estaban usando todo tipo de magia oscura. O más bien, estaban obteniendo a otros para hacerlo por ellos. Y eso no es todo—. Se deja caer a su lado. —Hay un ritual allí, para ganar poder y control como hombre lobo

— ¿Por qué querrían ayudar a los hombres lobo a obtener más poder? La madre de Allison se suicidó en lugar de convertiste—, le recuerda Lydia. —Estoy bastante seguro de que los Argent toman sus códigos bastante en serio, porque eso es lo más dedicado posible.

—Sí, pero no Gerard... y hay algo extraño allí—, dice Stiles. —Son las mujeres las que lideran, ¿verdad? ¿Se supone que son matriarcales? Excepto que Chris clasificó más alto que Kate en todos los sentidos, y Gerard es el verdadero jefe de la familia. Creo que las mujeres eran solo figuras decorativas. Se les dijo que practicaran el código, para mantener las apariencias, mientras que detrás de escena Gerard hacía lo que quisiera. Quizás no siempre fue así, pero...

—Pero eso es lo que hizo Gerard—, termina Lydia.

—Exactamente. Quiero decir, tenía que saber que se estaba muriendo cuando la madre de Allison se suicidó—, dice Stiles. —Dejó que eso sucediera incluso cuando ya estaba planeando convertirse en un hombre lobo.

—Porque él no podía controlar a Victoria o Chris, pero una vez que ella estaba muerta, Allison era la siguiente en la fila—, termina Lydia. —Y Gerard planeaba mantenerla bien bajo su pulgar.

—Correcto—, acepta Stiles, mostrándole una sonrisa rápida. Fue agradable tener a alguien que lo entendiera por una vez, bueno, dice que lo entiende, pero a veces se pregunta si Lydia no está unos pasos por delante.

— ¿Qué es este ritual entonces? — ella pregunta.

—Ahí es donde entras tú—, dice Stiles. —Está escrito en latín arcaico. Mi latín arcaico está un poco oxidado, y actualmente no es una opción en Google Translate, así que...

—Sí, bien, lo haré—, dice Lydia, acercando el libro. —Probablemente me llevará unas horas.

— ¿Así de largo? — Stiles pregunta, con fingida incredulidad

Lydia solo resopla molesta, sacando su teléfono para fotografiar las páginas. —Puedo entregártelo por la mañana, ¿lo suficientemente bueno?

—Eres increíble—, dice Stiles. — ¿Lo sabes bien?

—Por supuesto—, acepta Lydia, mientras le devuelve el libro.

—Está bien, se acabó el tiempo—, dice su padre, mientras se acerca y se inclina en la puerta. Echa un vistazo a la pared, suspira y luego se vuelve para mirar a Stiles. — ¿En serio, Stiles?

—Me dejaste solo todo el día, ¿qué esperabas? — Stiles pregunta.

— ¿Debo preocuparme por esto? — pregunta, señalando hacia la pared.

—Todavía no—, dice Stiles con sinceridad.

—Bueno, me voy a ir ahora—, dice Lydia primariamente. —Sheriff, fue agradable volver a verlo. Por favor, trate de recordar que Stiles es más peligroso cuando está aburrido. Puede que nos esté haciendo un favor a todos si le da un poco de libertad.

—Me aseguraré de tomar eso en consideración—, dice John cortésmente.

Su padre se vuelve hacia él y levanta una ceja. —Hay un momento en que habrías sido un desastre por estar en la cama con Lydia Martin.

—Lo fui la primera vez—, dice Stiles. —Me tocó la pierna y casi me desmayo, pero estaba tomando medicamentos lo suficientemente potentes como para derribar un caballo en ese momento, así que mató un poco el romance. Lamento decir que la emoción se ha ido.

Su padre solo resopla y se vuelve hacia las escaleras. —Vamos, nos traje la cena.

— ¿Me trajiste un burrito de carne? — Stiles pregunta emocionado.

—Ahora, Stiles, sabes que eso no es bueno para ti—, dice, con una sonrisa maliciosa. —Te traje el tofu.

—Creo que me lo merezco—, suspira Stiles.

[...]

Su padre había intentado interrogarlo astutamente a lo largo de su cena sobre el muro del misterio de Stiles, pero Stiles había logrado esquivar lo suficiente como para que solo le entregara lo básico: está registrando a los Argent y otros usuarios de cenizas de serbal.

—Usuarios de ceniza de serbal—, había suspirado su padre. —Parece que estás enganchado a algún tipo de droga.

Es solo un comentario descartable, pero hace que Stiles piense. Él sabe que no es adicto a las cenizas de serbal, pero hay una oleada de poder que resulta un poco difícil de resistir. Había estado casi mareado la primera vez que lo había logrado con éxito, con toda esa energía atrapada en sus propias venas.

Se pregunta si tal vez así fue como consiguieron a Emily: promesas de poder para una chica que no tenía nada más. ¿Había estado probando a todos los estudiantes en su escuela? ¿De qué otra forma podría haber sabido de Emily, de entre todos?

Piensa en el breve tiempo de Gerard como su director, y se pregunta si también los había estado probando.

Las preguntas sin respuesta están tirando de su mente, pero no importa cuántas piezas nuevas del rompecabezas Stiles ponga en la pared, él sabe que nunca obtendrá la imagen completa. Emily está muerta, e incluso si Gerard no está, no se puede confiar en él. Ni siquiera sus canales habituales, foros ocultos en las profundidades de Internet donde se habla de lo sobrenatural en una abreviatura codificada, solo aquellos que saben pueden entender, tienen algo sobre ceniza de serbal, excepto alguna vaga alusión a los druidas o emisarios o algo así. .

Stiles imprime una foto de Deaton de su sitio web veterinario y la pega justo en el medio de la pared.

Deaton también puede usar ceniza de serbal. Puede usarlo tan bien que ni siquiera tiene que estar allí, solo puede construirlo en las paredes. Deaton es el que le mostró lo que podía hacer y sabía de antemano que sería capaz de hacerlo.

Pero Deaton también es tan útil como una esfinge.

Suena su teléfono y lo levanta distraídamente. — ¿Uh? — él gruñe, inclinando la cabeza mientras vuelve a leer el informe inicial del secuestro de Emily.

—Stiles.

Stiles se endereza ante la voz de Derek. Suena extraño, transpirable, profundo y más aliviado que enojado, lo que realmente está mal. — ¿Derek? — él pide. — ¿Qué pasa?

—Pensé que esa era mi línea—, dice Derek. — ¿Todavía estás en casa?

—Sí—, dice Stiles. — ¿Dónde estás?

—Quédate esta noche en casa—, dice Derek, con su forma habitual de dar órdenes en lugar de respuestas.

—Bueno, estaba planeando ir a un bar, pero esos planes tuvieron problemas cuando mi papá confiscó las llaves de mi auto y me puso bajo arresto domiciliario, así que... — dice Stiles secamente.

—Por favor—, dice Derek, su voz casi gentil. —Por favor, Stiles, solo necesito…

— ¿Por qué suenas raro? — Stiles exige, interrumpiéndolo cuando siente que sus latidos se aceleran. Puede sentir punzadas de inquietud sobre su piel y no sabe por qué. — ¿Estás herido?

—Estoy bien—, dice Derek. —Solo necesito que te quedes esta noche en tu casa. Si tienes más ceniza de serbal, ponla por toda la casa.

—Lo que necesitas es decirme qué pasa—, insiste Stiles bruscamente.

Hay una larga pausa, y Stiles piensa por un momento que eso es todo lo que tendrá. Que Derek ha vuelto a su nivel predeterminado de órdenes crípticas y gruñidos, pero luego habla. —Gerard está vivo y ha vuelto a la ciudad—, dice simplemente. —Así que quédate en la maldita casa.

La llamada finaliza y Stiles mira el teléfono con incredulidad, antes de volver a marcar. No está exactamente sorprendido de que lo envíen directamente al correo de voz, pero todavía duele. —No puedes hacer eso—, dice Stiles, una vez que el mensaje comienza a grabarse. —No puedes decir eso y luego colgar. Derek, llámame. Lo digo en serio. Ahora mismo. Llámame.

Derek no vuelve a llamar. Stiles pasa las siguientes dos horas paseando y dejando mensajes de voz cada vez más frenéticos antes de que finalmente se quede dormido por un momento, su teléfono fuertemente apretado en su mano. Todavía no hay noticias de Derek cuando se despierta a las cuatro de la mañana, así que intenta llamarlo nuevamente. Tiene que empujar una oleada de alivio cuando la llamada conecta.

 

—Finalmente—, espeta. —Derek, ¿Quién diablos crees que…? — Se detiene con una sensación de temor cada vez mayor cuando no hay interrupciones impacientes o gruñidos o respiraciones espeluznantes desde el otro extremo de la línea. — ¿Derek? — pregunta vacilante, su ira desapareciendo. Su corazón se hunde y aprieta el teléfono con más fuerza. — ¿Quién es?

La llamada se corta.

Las paredes se vuelven repentinamente fluidas, ondulando y cerrándose. Stiles cierra los ojos y apoya las manos contra la pared, tratando de tomar aire. Bloquea su pánico mientras trabaja para estabilizar su respiración, porque no tiene tiempo para desmoronarse. Necesita un plan, y ya está marcando el número de Lydia antes de saber completamente cuál será ese plan.

Sabe que podría arrepentirse de esto, pero siempre ha estado allí, en el fondo de su mente, como último recurso. Siempre hay un riesgo al hacer un trato con el diablo, pero casi siempre es efectivo desde el principio. Puede lidiar con las consecuencias más tarde.

—Lydia—, dice con urgencia, en el momento en que ella responde. —Necesito el número de Peter.

— ¿Por qué? — Lydia pregunta, y suena demasiado despierta para las cuatro de la mañana.

—Creo que Derek está en problemas—, dice Stiles. —Por favor, solo... sé que lo tienes, ¿de acuerdo? No tengo tiempo para explicarte.

—Te enviaré la información de contacto—, dice ella, y finaliza la llamada. Recibe la alerta un segundo después, y Lydia le envió la información de contacto de alguien que ella había enumerado como 'Sujeto Uno'.

Él marca el número, sin estar seguro de que está haciendo lo correcto, incluso cuando lo hace. Podría llamar a la manada de Derek, por supuesto, pero Erica y Jackson son inestables en el mejor de los casos, y Boyd podría estar más tranquilo pero seguirá su ejemplo. Él sabe que su mejor oportunidad para que alguien llegue a Derek lo suficientemente rápido es Peter.

—Stiles—, dice Peter cuando responde, su voz divertida y astuta. — ¿A qué le debo el placer?

Stiles no pierde el tiempo exigiendo saber cómo Peter sabe que es él. Está bastante seguro de que Peter fue quien clonó su teléfono, por lo que probablemente sepa más que solo el número.

—Derek dice que Gerard está vivo—, dice sin preámbulos.

—Por supuesto que lo está—, dice Peter. —Le he estado diciendo a Derek eso por semanas.

— ¿Sabes dónde está el? — Stiles exige.

— ¿Gerard? — Peter pregunta.

— ¡Derek! — Stiles llora impaciente. — ¿Sabes dónde está Derek?

—Supongo que está al acecho en algún rincón oscuro en algún lugar, luciendo conflictivo—, dice Peter.

—Creo que Gerard lo tiene—, dice Stiles.

—Totalmente posible—, dice Peter después de un momento. —Es el estilo de Gerard perseguir al jugador más grande de la ciudad, por lo que no me sorprendería si comenzara con el Alfa en lugar de avanzar como alguien cuerdo.

—Bueno, ¿no crees que deberías hacer algo al respecto? — Stiles pregunta.

— ¿Por qué, Stiles, qué me estás pidiendo que haga? — Peter pregunta.

—No te estoy pidiendo que hagas nada. Solo esperaba que lo mataras—, dice Stiles.

Peter se ríe alegremente, sonando genuinamente complacido. —Nunca dejas de sorprenderme.

—Si todos tenemos que soportar que seas un psicópata asesino, también podríamos apuntarte en la dirección correcta—, dice Stiles.

—No nos pongamos de pie en la ceremonia, ¿por qué no lo dices cómo es? — Peter dice. —Quieres que haga el trabajo sucio por ti.

—Lo siento. No quise ofender tu delicada sensibilidad—, dice Stiles. —Puedes darle a Gerard unas vacaciones con todos los gastos pagados a Hawaii por todo lo que me importa, solo encuentra a Derek.

—No te pongas a la defensiva, lo dije como un cumplido. No tienes absolutamente nada de qué avergonzarte. Es raro ser tan listo como nosotros y no ser un poco cruel—, explica Peter. —Entendemos el mundo demasiado bien como para querer salvarlo.

—Solo hay una cosa que me interesa ahorrar en este momento, y ese es Derek—, dice Stiles. — Él es tu familia, ¿ni siquiera te importa?

Hay una pausa momentánea. —Solo quieres... así que es por eso—, dice a sabiendas. —Te fuiste y te enamoraste de él, ¿no? No puedo decir que no estoy decepcionado de ti, Stiles. Quiero decir, ¿mi sobrino, en serio? Podrías tener algo mucho mejor.

— ¿Me darías una respuesta directa? — Stiles exige.

—Pero no estás haciendo ninguna de las preguntas correctas—, dice Peter.

—No tengo tiempo para juegos, Peter—, dice Stiles. —Si tienes algo que decirme, solo dilo.

—Muy bien. ¿Por qué no piensas en esto? Si Gerard está vivo, entonces está debilitado—, dice Peter. —Habría intentado algo mucho antes si no lo hubiera estado. ¿Estás de acuerdo?

—Sí—, dice Stiles con impaciencia. —Según todos los informes, estaba en muy mal estado, vomitando alquitrán2 negro. Así que supongo que se podría decir que estaba debilitado.

—Debilitado—, Peter repite sedosamente. — ¿Recuerdas lo que te dije en ese garaje? ¿Sobre la mordida?

—Sí—, dice Stiles. —O te conviertes o mueres. Luego mordiste a Lydia y  todo ese rollo se fue por la ventana.

—Especial de Lydia—, dice Peter. —No esperes que un rayo golpee el mismo lugar dos veces.

— ¿Qué estás diciendo? — él pide.

—Bueno, si no está muerto, es un hombre lobo—, explica Peter lentamente, como si fuera un niño pequeño. —Y si es un hombre lobo, ¿por qué es débil?

— ¿Qué, eres el Acertijo ahora? — Stiles pregunta bruscamente. —No me importa Gerard, ¿de acuerdo? ¡Solo quiero que encuentres a Derek!

—No tienes todo lo que quieres—, le recuerda Peter.

—Entonces no vas a ayudar—, dice Stiles.

—Estoy ayudando—, dice Peter. —Quizás no estás escuchando.

—Estoy tan harto de que todos en mi vida den medias respuestas o esta mierda críptica—, dice Stiles. — ¿Vas a asegurarte de que Derek esté bien o no?

—Estoy un poco... ocupado, por el momento—, dice Peter. —Entonces no. Pero no deberías preocuparte tanto por Derek, Stiles. Solo hay una cosa en la que él es bueno, de verdad. Y eso es mantenerse con vida.

Peter cuelga y la cabeza de Stiles comienza a nadar de nuevo. Revisa su teléfono en busca de alguna palabra de Derek, pero no hay nada allí. Realmente no había esperado que hubiera, porque sabe que Gerard lo tiene. Él lo sabe porque Derek puede ser un imbécil, pero nunca lo dejó preocuparse tanto. Hubiera llamado de nuevo si hubiera podido. Habría hablado cuando la llamada conecto.

Gerard tiene a Derek, y él no sabe qué hacer. No sabe a quién debería llamar: ¿todos ellos? ¿Ninguno de ellos?

Podía hacerlo solo, porque no es como no lo había hecho antes. Podía ir a tomar las flechas de ceniza de serbal que se encontraban junto a la caja de seguridad de la planta baja y dirigirse al vagón. Podía intentar encontrarlos y detener a Gerard de una vez por todas. De hecho, está un poco molesto por la facilidad con la que cree que podría hacerlo: solo arroja una de esas flechas hacia él, susurrando una pequeña orden: golpear el corazón.

Entonces lo piensa. Piensa en bajar las escaleras y salir por la parte de atrás. Poniendo el Jeep en neutral y deslizándolo lo suficiente por la calle, su padre no lo escuchará cuando comience.

Lo piensa, y luego cruza el pasillo hacia la habitación de su padre.

—Papá—, dice, y su voz suena temblorosa y demasiado joven. Su padre está luchando por encender la luz de su mesilla casi antes de que pueda terminar las palabras: —Papá, necesito tu ayuda.

Notes:

1: La dirección IP es un número que identifica, de manera lógica y jerárquica, a una Interfaz en red de un dispositivo que utilice el protocolo IP o, que corresponde al nivel de red del modelo TCP/IP.

2: El alquitrán es una sustancia líquida bituminosa, viscosa, oscura y de olor fuerte, que se obtiene de la destilación destructiva de ciertas materias

Si hay algo que no se haya entendido por favor dejen sus preguntas en los comentarios.

Chapter 23: Capítulo 23

Notes:

(See the end of the chapter for notes.)

Chapter Text

— ¡Aquí! ¡Gira aquí! — Stiles grita. Lleva puesto el cinturón de seguridad solo porque su padre se negó a arrancar el automóvil hasta que se abrochó el cinturón, pero se está inclinando hacia adelante lo más que puede, entrecerrando los ojos ante el amanecer mientras dirige a su padre a la guarida de Derek.

Su padre ni siquiera ha dudado, cuando Stiles le dijo que Derek estaba en problemas. En menos de cinco minutos estaban sentados en la patrulla. Su padre había cargado su arma de servicio con la munición de Chris y Stiles había arrojado sus flechas de cenizas de serbal a su mochila como un carcaj improvisado, el libro Argent enterrado en la parte inferior.

— ¿No va esto más rápido? — Stiles exige. — ¿No deberíamos encender las luces? ¿Activar la sirena? Papá…

—No podemos llamar la atención. El oficial Jones está de guardia esta noche y hará demasiadas preguntas—, dice su padre con calma, antes de mirarlo con preocupación. —Necesito que te calmes, ¿de acuerdo? O te llevaré de regreso a casa y buscaré a Derek yo mismo.

—Lo siento—, dice ansioso, y se alegra de que su padre no sea un hombre lobo, porque si tuviera alguna idea de lo asustado que esta en este momento, nunca habría sido capaz de convencerlo de que lo llevara en primer lugar. Probablemente no ayudará a su caso si intenta explicarle que esta es más o menos su reacción habitual a la crisis: enloquecer, agitarse, inventar un plan sobre la marcha y de alguna manera lograr salir ileso.

— ¿Estás seguro de que este es el lugar? — pregunta su padre, mientras se detiene frente a la estación abandonada. —Creo que toda esta área esta maldita.

—Sí, lo está—, acepta Stiles, mientras pelea con su cinturón de seguridad y casi se cae cuando sale del auto —A Derek le gusta de esa manera, evita visitantes no deseados.

Su padre lo sigue, prendiendo una linterna. Apunta con ella hacia el piso delante de ellos, y hay una larga línea viendo desde la puerta que se corta abruptamente.

— ¿Eso es sangre? — John pregunta.

Stiles mira hacia abajo, porque prácticamente está parado en ella, y definitivamente es sangre. —Oh, Dios—, susurra, antes de salir corriendo. Se estrella contra las puertas, notando cuando lo hace que el pestillo está roto, y baja corriendo los escalones.

— ¡Stiles! Stiles, espera—, le llama su padre. — ¡Maldita sea, Stiles!

Observa una corriente de luz que rebota en las paredes cuando su padre lo sigue y recibe 1instantáneas iluminadas de una escena que no está haciendo nada para tranquilizarlo. Pero Stiles nunca se ha escondido de nada, y no comenzara en este momento. Alarga la mano hacia la pared hasta que encuentra el interruptor de la luz y lo presiona.

Su padre está frente a él en un instante, su arma junto con la linterna, sostenida encima de ella mientras busca cualquier signo de amenaza.

Stiles no se molesta en verificar. Se da cuenta de que ya es demasiado tarde: Derek hace mucho tiempo que no está aquí, y también quien se lo llevó. Solo queda la sangre. Derramada a lo largo de la parte inferior de las escaleras y la pared a su izquierda, y hay tanta que Stiles se está mareando un poco con solo mirarla.

Su padre avanza para revisar el vagón del tren y mirar por el túnel abandonado, pero regresa en un momento, sacudiendo la cabeza. —Está despejado—, dice, antes de dirigir su atención a la pared.

Hay seis agujeros de bala en la pared, en el primer recuento. Stiles puede imaginar que Derek había estado de pie contra la pared cuando le dispararon, como si hubiera sido sometido a un pelotón de fusilamiento. Frunce el ceño cuando ve una huella de mano ensangrentada en el suelo a pocos metros de la pared, donde Derek probablemente había tratado de detenerse cuando cayó.

Stiles se arrodilla temblorosamente, obedeciendo un instinto que no puede entender, y presiona su propia mano sobre la sangrienta huella de la palma en el suelo.

El mundo cambia en el momento en que su mano hace contacto, y hay un estallido en el aire, como un estallido sónico que envía ondas a través de la estación y lo derriba contra el suelo. Cierra los ojos con fuerza y puede ver destellos de hombres entrando por la puerta, un ardor en el pecho y alguien tirando de él. Escucha a alguien que lo llama por su nombre.

Cuando abre los ojos, está tendido en el suelo frío como un águila extendida2, y su padre está arrodillado sobre él con expresión de pánico. — ¿Stiles? — llama su papá. —Hey, mírame. ¿Qué acaba de pasar?

—No tengo idea—, dice Stiles, su voz suena áspera, mientras trata de levantarse. Su padre no le suelta los brazos. — ¿Por qué me miras así?

—Stiles... estabas gritando—, le dice preocupado su padre. —Sentí... no sé lo que sentí, pero te voy a llevar a casa.

—Necesito estar aquí—, insiste Stiles. —Probablemente había cenizas de serbal en la sangre, por las balas. Probablemente solo... lo activé, o algo así.

Suena como una excusa patética incluso para él, y Stiles está bastante seguro de que estas balas tenían acónito y no cenizas de serbal, pero no puede pensar en que otra cosa podría ser.

—Esto no es normal, Stiles—, dice John. —No podemos ignorarlo.

—En realidad es un poco normal. Bienvenido a tu nueva normalidad—, le dice Stiles, mientras finalmente se desenreda del agarre de su padre y vuelve a ponerse de pie.

—No creo que esto caiga bajo ninguna definición de normal, Stiles—, dice John. —Ni siquiera el tuyo.

Stiles no lo mira mientras saca su teléfono celular.

— ¿Stiles? — dice, irritado por ser ignorado. — ¿A quién estas llamando?

—Lydia—, dice Stiles, y solo es un segundo hasta que ella contesta.

— ¿Qué está pasando? — Lydia pregunta, y sonando extrañamente frenética. —Stiles, yo, ¿estás bien?

—Estoy bien—, dice Stiles rápidamente. —Pero Derek no. Necesito saber todo lo que has podido traducir.

— ¿Dónde estás? — ella pregunta bruscamente.

—La estación de tren—, dice Stiles. —Lydia

—Jackson y yo estaremos allí—, dice, y cuelga.

—Por favor, dime que no invitaste a una adolescente a la escena del crimen—, dice.

—No puedes ser el Sheriff en este momento—, dice Stiles en voz baja, mirando a su padre, esperando que lo consiga. —Si lo intentas, esto no funcionará.

—No podemos ocultar esto—, insiste su padre, mientras camina hacia él.

Stiles tiene que contener una risa histérica, porque por supuesto que pueden. Stiles lo ha estado haciendo durante casi un año; encubrirlo es fácil, tratar de explicar la verdad es lo que no se puede hacer.

—Papá, mira a tu alrededor, llamas a alguien por esto y no solo verán la escena del crimen, ¡verán un sitio de asesinato! — El grita. —Con tanta sangre, ningún humano habría sobrevivido. Pero Derek no está muerto, papá, no lo está. Sé que no lo está. Gerard lo habría dejado aquí si solo hubiera planeado matarlo, y yo sabría si estaba muerto, lo haría, así que está vivo, y no podemos explicar esto, no podemos...

—Oye, vamos, Stiles3, todo estará bien—, dice preocupado su padre, y Stiles aprieta las manos mientras toma aire.

—Nadie puede ayudarnos con esto—, dice Stiles constantemente. —Estamos solos. ¿Entiendes?

Stiles observa que la comprensión llega a los ojos de su padre. —Esto es con lo que has estado lidiando todo este tiempo, ¿no?

—Sí—, dice Stiles en voz baja. —Es como... como vivir en otro mundo, uno que nadie más que tu puedes ver. Quiero decir, un minuto estás sentado al lado de hombres lobo en Química pasando notas sobre el destino de la ciudad y al siguiente estás en el vestuario y tienes a Greenberg hablando de un extraño cerumen naranja que encontró en su oído y que realmente quiere que eches un vistazo, y es como un choque cultural, papá, es como ...

—Oye, oye—, dice su padre suavemente, enmarcando su rostro y obligando a Stiles a mirarlo. —Entiendo. — Espera hasta que los ojos desenfocados de Stiles finalmente se queden quietos y se claven en los suyos. —Pero necesito que entiendas algo también. No estás solo en este mundo. Ya no. Lamento que alguna vez pensaste que lo estabas.

—Yo también.

Stiles se aleja de su padre sorprendido, sus ojos se agrandan cuando levanta la vista para ver a Scott bajando las escaleras hacia ellos, de dos en dos. —Scott, qué…

Scott lo alcanza y lo arrastra a sus brazos. Stiles se deja caer contra él, apretando las manos en la parte trasera de la chaqueta de Scott. Puede sentir los latidos de su corazón estabilizarse, y cierra los ojos. — ¿Cómo estás aquí? — él pide.

— ¿Estás bien? — Scott exige, retrocediendo lo suficiente como para mirarlo.

— ¿Qué? Sí, estoy bien. ¿Cómo llegaste hasta aquí? — él pide.

—Te escuché, Stiles—, dice Scott lentamente, su voz llena de preocupación. —Podía escucharte gritar.

—Justo cuando estábamos tratando de disfrutar de un maratón de películas durante toda la noche—, dice Isaac secamente, apareciendo detrás de Scott.

— ¿Que pasó aquí? — Scott pregunta, alejándose mientras mira por el suelo. Stiles puede ver sus ojos cambiar de color brevemente antes de volver a la normalidad. — ¿Stiles?

—Gerad se lo ha llevado, Scott—, dice. —Se ha llevado a Derek.

Scott frunce el ceño y gira mientras observa la escena. —No solo Gerard—, dice, después de un momento. —Había al menos otros dos. Estaban armados con acónito. Mucho acónito.

Isaac se acerca para pararse al lado de Scott. —Hay mucha sangre—, dice en voz baja.

—No está muerto—, dice Stiles.

—Stiles…— comienza Scott.

—Hasta que sepamos lo contrario, procedemos bajo la idea de que Derek está vivo y retenido en algún lugar—, interrumpe John con calma. —Esa es la única forma de manejar un caso como este. ¿Entendido?

—Tienes toda la razón, él está vivo—, dice Érica, mientras baja corriendo las escaleras con Boyd pisándole los talones. —Todavía puedo sentirlo.

— ¿Jackson te llamó? — Stiles pregunta, sin saber si es bueno tenerlos aquí o no. Scott e Isaac no han podido jugar bien con los otros lobos durante bastante tiempo, y no tiene tiempo para actuar como mediador.

—Nos llamaste, Stiles—, dice Érica sin complejos, mirándolo atentamente.

—Estábamos pasando el rato en la casa de Érica cuando escuchamos tu llamada—, explica Boyd.

Stiles tarda un minuto en darse cuenta de que deben significar que lo habían escuchado cuando aparentemente había estado gritando. —Érica vive en el otro lado de la ciudad—, dice vacilante. La casa de Scott es solo unas a cuadras de distancia, Scott e Isaac oyéndole podría ser explicado, pero...

—Sí, bueno, parecía que estabas justo detrás de mí—, dice Érica. —Y sabía que me llevabas aquí.

—Fue como cuando escuchamos a uno de nuestro grupo aullar—, explica Boyd. —No sabía que podías hacer eso.

— ¿Stiles? — su papá le pregunta.

— ¿Qué? — Stiles pregunta, mirando alrededor para ver a todos mirándolo. — ¡Yo tampoco sabía que podía hacerlo! ¡Ni siquiera sé lo que he hecho!

—Sí, yo tampoco, porque no sé si podrías llamar a eso un aullido—, dice Isaac con ironía. —Sonaba más como Caperucita Roja mutilada que el Lobo feroz.

—Tú—, dice Stiles, señalando a Isaac, —no te necesitamos. Puedes irte.

—Stiles—, reprende su padre.

—Bien. Quédate. O siéntate. No me importa—. Stiles entrecierra los ojos hacia Isaac, quien simplemente le devuelve la sonrisa.

Scott se acerca y pone una mano sobre el brazo de Stiles, y hace que esa extraña calma vuelva a apoderarse de él. Stiles traga saliva, sin saber qué le está pasando. Tiene la sospecha de que de alguna manera se hizo parte de la manada ya sea que quisiera o no, pero nunca pensó que funcionaría de esta manera para los humanos también. No debería poder sentirlos de esta manera.

—Lydia y Jackson están aquí—, anuncia Scott, y pronto ambos bajan las escaleras.

Lydia lleva un vestido amarillo y tacones de 5 centímetros, parece que está lista para salir a la ciudad y no como si la hubieran despertado a las cuatro de la mañana. Jackson también se ve molestamente bien armado. Stiles se da cuenta vagamente de que él es el único en su pantalón de chándal y camisa de dormir, aunque al menos se había puesto una sudadera con capucha, incluso su padre se había tomado el tiempo para ponerse el uniforme del Sheriff. Nunca pensó que se sentiría desnudo para una misión de rescate.

— ¿Qué demonios está pasando? — Jackson exige. —Mis oídos todavía están sonando.

— ¿También escuchaste a Stiles? — Scott pregunta sorprendido.

—Sí—, dice Jackson, aunque parece mucho más despreocupado que los demás. —Parecía que Stilinski estaba siendo asesinado.

Stiles recuerda la voz de Lydia cuando la llamó antes y frunce el ceño. —Lydia, ¿también me escuchaste?

—No—, dice Lydia, aunque se ve sacudida, y eso es lo suficientemente preocupante. Las cosas tienen que ser malas, para que ella deje ver incluso una fracción de eso. —Simplemente lo sabía. Sabía que algo andaba mal.

—Podemos preocuparnos por eso más tarde. ¿Qué vamos a hacer con Derek? — Érica exige de repente. — ¿Por qué Gerard lo querría? Peter mató a Kate.

—No creo que se trate de venganza por Gerard—, explica Stiles. —Peter me recordó que Gerard no se estaba curando del todo bien. Y Peter lo sabría, ¿verdad? Porque también le sucedió a él. Estuvo atrapado en un estado de coma durante años, incapaz de superar ese estancamiento de curación. No hasta que se convirtió Alfa.

— ¿Qué estás diciendo exactamente? — John pregunta.

—Derek mordió a Gerard, lo mordió, y no fue correcto, pero tampoco lo mató. Y esas son las únicas dos opciones, a menos que seas Lydia—, dice Stiles. —O te transformas o mueres. Así que se convirtió en hombre lobo, simplemente no se está curando. Todavía está enfermo y por eso necesita a Derek.

—Él mata al Alfa—, explica Lydia.

—…Se convierte en el Alfa—, termina Stiles. —Y sanará.

—Pero si él mata al Alfa que lo convirtió, ¿eso no lo hará humano nuevamente? — Scott pregunta confundido.

—Scott, no creo que sea así—, dice Stiles suavemente. —Derek solo... solo estaba usando eso para obtener tu ayuda. Creo que es solo un mito. Como balas de plata.

—Entonces, ¿por qué mantenerlo vivo? — Jackson exige. —Es bastante obvio que Derek no ganó en esta pelea. Gerard podría haberlo matado aquí.

—Tengo mis sospechas sobre eso—, dice Stiles, antes de recurrir a Lydia. — ¿Pudiste trabajar en la traducción?

—Lo suficiente para entender para qué sirve, pero no te va a gustar—, dice ella. —La mayor parte coincide con tu teoría. Es un ritual de sacrificio de un hombre lobo Alfa para aumentar el poder de un Beta. Excepto que hay una cosa que no mencionaste.

— ¿Es una buena sorpresa o una mala sorpresa?— Stiles pregunta con una mueca

—No existe una buena sorpresa—, dice Lydia. —El ritual está destinado a tomar más que solo el poder del Alfa, está destinado a tomar su manada.

—Eso es lo que pasa, ¿verdad? — Isaac pregunta. — ¿El nuevo Alpha hereda la manada?

—Peter intentó forzar a Scott a su manada, pero Scott pudo luchar contra él. Los hombres lobo todavía tienen algo de libre albedrío—, explica. —Esto es otra cosa: si funciona de la forma en que dice que lo haría, eliminaría ese libre albedrío.

— ¿Qué pasa si ya no somos parte de su manada? — Isaac pregunta.

—No estoy seguro de que eso importe—, dice Stiles. —Tal vez no te incluirá a ti y a Scott, pero podría, si es lo suficientemente poderoso.

—Y Peter—, dice Lydia. Su voz no titubea, pero Stiles puede decir por la forma en que su espalda se endereza que la idea la asusta. Peter es lo suficientemente peligroso por sí mismo: pensar en él como un arma, en manos de Gerard, es casi demasiado horrible para contemplarlo.

Entonces Stiles no menciona que la manada de Derek también podría incluirlo ahora. Todos tienen suficiente de qué preocuparse.

—La única buena noticia es que el ritual debe realizarse en luna llena—, dice Lydia. —Es por eso que no mató a Derek aquí.

— ¿Cuándo es la próxima luna llena? — pregunta su papá.

—Um—, comienza Stiles, antes de vacilar. — ¿Pronto, creo?

—Stiles, deberías saber esto—, dice Lydia con desaprobación.

—Sé que la próxima luna llena es el 2 de agosto—, dice a la defensiva. —Simplemente no sé qué día es hoy.

—Eso es lo que es hoy—, dice Lydia. —La luna llena es esta noche.

—Deberíamos llamar a Allison—, dice Scott rápidamente. —Si alguien supiera cómo encontrar a Gerard, es ella.

—Ese es el problema con preguntarle—, dice Stiles.

Scott parece confundido por un momento, antes de que su expresión se vuelva casi devastada. —Crees que ella ya lo sabe.

—Creo que si lo sabe no lo dirá, y si no lo sabe, Chris sí, pero no se lo dirá—, dice Stiles. —De cualquier manera, no vamos a obtener lo que necesitamos de ella. Deberíamos dejarlos a ambos fuera de esto, y tratar de rastrear a Derek. ¿Pueden ustedes seguir su olor? ¿Tratar de encontrarlo de esa manera?

Scott asiente, pareciendo resuelto. —Isaac y yo nos encargaremos de eso—, dice, mirando a Erica, Boyd y Jackson. — ¿Están dispuestos a trabajar con nosotros?

Erica y Boyd asienten, pero Jackson solo resopla. —Me quedo con Lydia—, dice.

Scott parece listo para pelear contra él, así que Stiles se interpone entre ellos. —Esa es una buena idea—, dice. —El teléfono de Derek todavía estaba encendido hace una hora. Probablemente sea una posibilidad remota, pero tal vez tú y Lydia puedan ir con Danny, ¿ver si hay alguna forma de que siga a Derek de esa manera?

Jackson asiente a regañadientes, y Stiles se vuelve hacia los demás. —Bien—, dice. —Así que vamos a encontrarlo.

Todos comienzan a dispersarse, y John deja escapar un silbido agudo. Los lobos se congelan y luego se vuelven hacia él sorprendidos.

— ¡Esperen, todos ustedes! — Grita John. Señala a los hombres lobo. —No me importa si son criaturas sobrenaturales de la noche con súper curación, todavía son niños. Si lo encuentran, no vayan solos, llámeme y elaboraremos un plan. ¿Lo entiendes?

—Sí, señor Stilinski—, dice Scott complacientemente.

—Lo tienes, Sheriff—, dice Érica con un guiño, antes de dar un pequeño saludo. —Te llamaría en cualquier momento.

Los hombres lobo, a excepción de Jackson, desaparecen por las escaleras, antes de que Stiles pueda enloquecer por las insinuaciones no tan sutiles de Erica sobre su padre. Su padre también parece un poco traumatizado, pero eso es bastante normal en lo que respecta al efecto Érica.

Lydia se le acerca y le entrega una hoja de papel doblada. —Los detalles que he podido reunir sobre el ritual—, explica. —Y no creas que no me di cuenta de que nunca dijiste lo que harías durante todo esto.

—Lydia…— comienza Stiles.

—Simplemente no hagas nada estúpido—, ordena, antes de agarrar la mano de Jackson y llevarlo de vuelta a las escaleras.

Su padre aparece detrás de él y también lo empuja suavemente hacia las escaleras. —Vamos—, dice. —Vamos a sacarte de aquí.

Vuelven a subir al crucero, pero su padre se queda quieto después de poner la llave en el encendido, con la mano flotando a su lado sin girar. — ¿Por qué tengo la sensación de que realmente no estamos dejando a los Argent fuera de esto? — pregunta su padre en voz baja, porque incluso después de todo, su padre todavía lo entiende mejor que nadie, excepto tal vez Lydia.

—Porque no hay forma de que Chris no sepa exactamente dónde está su padre—, dice Stiles.

Su papá asiente. —Hablaré con él.

—No podemos arriesgarnos—, dice Stiles, con voz firme. —No podemos obligarlo a hablar, y si no nos ayuda, habremos mostrado nuestras intenciones.

—Stiles, no puedo simplemente ignorar en esto—, dice su padre.

—Hará lo que pueda para proteger a su padre, pero no lo ayudaría con algo como esto—, dice Stiles. —Lo que significa que todavía no sabe nada de Derek. Sabemos más que él por una vez, pero si se trata de esto como si fuera un caso oficial, perderemos por completo nuestra ventaja.

— ¿Qué estas sugiriendo? — John pregunta cansado.

—Nos dijo que podríamos ir cuando quisiéramos…—Stiles comienza.

—Y le dijiste que preferirías tener un tratamiento de conducto4, sin la anestesia—, le recuerda su padre.

—Estoy de acuerdo con eso, por eso debes ser tú quien acepte la invitación y me arrastre—, explica Stiles. —Y si me pierdo en el camino al baño y término en la oficina de Chris, bueno, ese tipo de cosas suceden. Sabes que no tengo sentido de dirección.

—Apenas son las cinco de la mañana, no podremos organizar una reunión durante al menos unas horas si no vamos a hacer que sospeche. No tenemos ese tipo de tiempo, Stiles—, dice John suavemente. —Eso era mucha sangre.

—Derek sanará—, dice Stiles, y aunque trata de mantener su tono indiferente, no lo está logrando. —Gerard mantendrá vivo a Derek hasta la luna llena, así que tenemos hasta el atardecer para encontrarlos. Tenemos que jugar bien—. Toma un respiro tembloroso. —Quiero encontrarlo. No lo quiero con ese psicópata por un segundo más de lo que tiene que ser, pero si nos delatamos y Gerard sabe que vamos por él, entonces...

—Entonces podría reducir sus pérdidas y matar a Derek antes de lo previsto—, termina su padre.

—Exactamente—, dice Stiles. —No necesita el ritual para convertirse en Alfa, es solo una bonificación. Tenemos que dejarle pensar que está ganando, o de lo contrario perderemos.

—Haré los arreglos con Chris en un par de horas—, dice su padre. —Hasta entonces, puedo revisar los informes policiales recientes y buscar cualquier cosa sospechosa. Si tiene otros cazadores con él, podrían haber sido notados. Con un poco de suerte, podríamos rastrearlo a la antigua usanza.

—Eso sería genial, pero primero, creo que necesitamos ver a Deaton—, dice Stiles.

—¿Deaton? ¿Por qué? — pregunta su papá.

—Entonces puedo preguntarle qué me está pasando—, explica Stiles, y tira de la manga de su sudadera.

Las venas en su muñeca se han vuelto luminiscentes, brillando tenuemente doradas debajo de su piel.

Notes:

1: No es la mejor manera de describir la escena, pero imagínense como si fuera un cuarto oscuro en el que estas tomando fotos con el flash activado por lo que solo puedes ver una sección del cuarto. Las instantáneas se refieren a esas fotos.

2:Spread Eagle: es una posición en las que tus brazos y piernas están totalmente estirados.

3: En el original el Sheriff dice Kiddo, la traducción literal sería niño o niñito, lo cual es no se escucha muy bien, así que lo deje solo con el nombre de Stiles porque en el original pretendía ser un término de cariño.

4: Un tratamiento de conducto: Es un procedimiento dental en el cual el odontólogo remueve la parte superior del diente para exponer la pula infectada, la pulpa esta compuesta de nervios, vasos sanguíneos y tejido conectivo, y llega hasta el hueso de la mandíbula. En otras palabras AUCH!!

Chapter 24: Capítulo 24

Notes:

(See the end of the chapter for notes.)

Chapter Text

—Stiles—, dice su padre tembloroso, —estás brillando.

—Sí—, acepta Stiles.

— ¿Por qué estás brillando? — él exige.

— ¡No lo sé! No es como si ocurriera normalmente—, dice Stiles. —Ha estado sucediendo desde lo que paso en la estación de tren.

— ¿Y solo lo estás mencionando ahora? — Exclama.

— ¡Secuestraron a Derek! ¡Teníamos cosas más importantes que discutir! — Stiles dice, antes de encorvarse en su asiento y pasar bruscamente una mano sobre su cabello. —Pero creo que esto está relacionado, de alguna manera. Creo que tal vez... creo que vi cómo se llevaron a Derek.

—Viste…— su padre deja escapar un suspiro constante. — ¿Me estás diciendo que eres psíquico ahora?

Stiles resopla. —No, por supuesto que no—, dice, pero luego sus ojos se abren. —Oh, Dios. Espero que no. Eso nunca termina bien en la ficción. Quiero decir, es una gran historia, pero ¿quién realmente quiere caminar viendo cosas horribles suceder todo el tiempo? Tengo suficiente de eso justo en frente de mí, muchas gracias, no necesito la repetición instantánea en mi cabeza.

—Cristo, niño—, suspira John.

—Mira, eso no me va a pasar a mí—, decide Stiles. —Es otra cosa, y tengo la sensación de que Deaton sabrá qué. Me ha estado ocultando cosas durante bastante tiempo, y lo he estado dejando porque puede conseguirme libros que no puedes ver exactamente en la biblioteca local, y no quería molestarlo.

—Está bien—, dice su padre, enciende el auto y se dirige hacia el veterinario. —Pero espero que me estés contando todo, chico.

No dicen mucho más en el viaje a la veterinaria de Deaton. Stiles se rasca distraídamente las muñecas, siente un extraño calor hormigueante, extendiéndose cada vez más rápido por sus brazos. Sus manos también brillan ligeramente ahora, aunque es lo suficientemente débil como para pasar desapercibido a la luz.

 

Se le ocurre a Stiles después de que llegan que probablemente debería haber intentado llamar a Deaton primero, ya que son solo las cinco y media de la mañana, pero el auto del veterinario está allí, de todos modos. A veces, Stiles se pregunta si quizás Deaton no duerme.

Agarra su mochila y su papá lo lleva adentro. Deaton sale a su encuentro tan pronto como suena la campana de bienvenida. —Sheriff—, dice en saludo. —Stiles. ¿Derek está bien?

—No—, dice Stiles. —Y tampoco creo que yo lo esté—. Se levanta las mangas de su sudadera y extiende los brazos. —No sabrías nada sobre esto, ¿verdad?

Deaton parece sorprendido, por supuesto viniendo de Deaton, en realidad hay muy pocos cambios en su expresión, pero Stiles se está volviendo bueno leyendo a personas con caras de póker. —Vuelve—, dice, antes de girar rápidamente sobre sus talones. —Súbete a la mesa, Stiles.

Stiles solo duda por un momento. Deaton es un veterinario, por lo que Stiles todavía tiene dudas sobre si es el médico de la manada, pero al menos cuando son los hombres lobo, puede reírse. Traga saliva y se quita la mochila de los hombros, antes de saltar sobre la mesa. Su padre está ansioso detrás de él, pero lo que realmente molesta a Stiles es que Deaton parece preocupado.

—Oh dios—, dice. —Es malo, ¿no? ¿Voy a explotar? ¿Cómo un mito urbano de combustión espontánea? ¿Voy a ascender a un plano más alto? ¿Estoy…?

—Stiles, necesito que te calmes—, dice Deaton, agarrando sus muñecas y tirando hasta que Stiles levanta la vista para mirarlo a los ojos. —Cierra los ojos y respira hondo.

Stiles lo intenta, pero sus inhalaciones son inestables en el mejor de los casos. El agarre de Deaton se tensa en sus muñecas. — ¿Recuerdas que te dije sobre esa chispa? — Deaton pregunta. —Necesito que lo imagines ahora, y necesito que lo controles. Estás dejando que te abrume.

—Intenté tomar una clase de meditación una vez—, dice Stiles. —Me expulsaron en menos de cinco minutos. Me dijeron que era un récord. Así que creo que tendremos que encontrar algo más

De repente, el agarre de Deaton sobre él se desaloja, y Stiles abre los ojos para ver a su padre abriéndose paso en su lugar. Suavemente coloca sus manos sobre las muñecas de Stiles. —Está bien, Stiles—, dice. —Solo trata de hacer lo que él dice. No pienses en ello como meditación, piensa en eso como un ataque de pánico, ¿de acuerdo?

 

Stiles asiente con la cabeza, cerrando los ojos con fuerza y tratando de controlar toda su preocupación y miedo, tratando de respirar hasta que el pánico disminuya lentamente, hasta que lo único que importa es inhalar y exhalar.

—Puedes abrir los ojos—, dice su padre.

Stiles mira hacia abajo y ve que ha dejado de brillar. Flexiona las manos y mira a Deaton. —Si eso está relacionado con mi enfoque—, dice, —tendremos problemas. El enfoque no es mi punto fuerte, y si voy a iluminarme como un árbol de Navidad cada vez que tenga un examen de Química, podría llamar la atención.

—Este tipo de reacción en alguien como tú tiene una correlación muy directa, no va a suceder en un abrir y cerrar de ojos—, le asegura Deaton. — ¿Asumo que Derek está en problemas?

—Gerard se lo llevo—, acepta Stiles. —Quiere sacrificarlo en la luna llena. Aparentemente es aún más psicótico de lo que le estábamos dando crédito.

—Entonces es como sospechaba—, asiente Deaton. —Eres el emisario de Derek.

—El emisario de Derek, sí, por supuesto, — Stiles dice. — ¿Por qué nunca empiezas con una explicación que tenga sentido?

 

— ¿Por qué no me cuentas cómo empezó esto? — Deaton pregunta en su lugar.

 

—Fuimos a buscar a Derek. Él ya no estaba, pero había mucha sangre, y yo... ¿lo toqué de alguna manera? Lo cual, en retrospectiva, suena un poco espeluznante—, dice Stiles, frunciendo la nariz. —En realidad no tengo idea de por qué hice eso.

 

— ¿Y qué pasó cuando lo hiciste? — Deaton pregunta.

 

Stiles puede sentir a su padre tensarse a su lado, percibiendo lo mismo que él. Deaton está preguntando, pero es obvio que ya lo sabe.

 

—Creo que sentí lo que él sintió, vi destellos de cosas y no fue agradable, así que supongo que empecé a gritar—, explica Stiles. —No estaba realmente, ya sabes, del todo presente en ese momento. No recuerdo haberlo hecho.

 

—Definitivamente estabas gritando—, dice su padre en voz baja, las líneas alrededor de sus ojos apretados.

 

—Sí, ah, de todos modos, los lobos también lo escucharon, al otro lado de la ciudad—, explica Stiles. —Están tratando de rastrear a Derek ahora.

 

Deaton asiente recostándose contra el mostrador mientras observa a Stiles. —Sospeché que se estaba formando un vínculo entre tú y Derek por un tiempo ahora. Al igual que con la manada, los emisarios están unidos a sus alfas por la sangre. Al realizar ese tipo de rito de sangre, has consolidado el vínculo, y ahora tú poder se está expandiendo. Por lo general, el Alfa elegido estaría aquí para ayudarlo a controlarlo, pero si Derek falta, tendrá que aprender a manejarlo por su cuenta.

 

— ¿Scott no puede ayudarme hasta que recuperemos a Derek? — Stiles pregunta. —Lo ha hecho antes.

 

— ¿Scott? — Deaton dice sorprendido.

 

—Sí, él e Isaac también me escucharon gritar—, dice Stiles. —Vinieron a ayudar, y a veces Scott es capaz de hacer eso de Alfa, ¿dónde me hace calmarme?

 

— ¿Qué cosa Alfa que te hace calmarte? — Deaton pregunta atentamente, alejándose del mostrador para estudiarlo cuidadosamente.

 

Stiles frunce el ceño, encogiéndose de hombros un poco. —Realmente nunca pensé en eso, supongo. Es solo que, a veces, cuando me toca, me siento mejor. No lo sé. Se... detuvo por un tiempo o, quiero decir, supongo que Scott no ya no solía tocarme, y luego Derek... entonces fue como, Derek podría hacerme sentir mejor también. Detuvo un ataque de pánico una vez, solo tocando mis muñecas. Pero probablemente fue solo por sus extrañas habilidades para chupar dolor, ¿verdad? , eso tiene sentido, ¿no?

 

—Así no es como funciona—, dice Deaton, y se ve inquieto, lo cual nunca es una buena señal. —Creo que de alguna manera te uniste a ambos.

 

— ¿Unir? — Stiles pregunta. — ¿Es eso, eso es lo emisario? Leí un poco al respecto, pero no se sabe mucho, ni se ha escrito en ningún caso. Así que necesitaré la versión SparkNotes1. Porque de todo lo que pude encontrar, los emisarios solo pudieron ser emisarios de alfas reales.

 

—Scott siempre ha sido un caso especial—, explica Deaton. —Puede que todavía sea un Beta físicamente, pero tiene varias características Alfa. Siempre sospeché que podría convertirse en un Alfa Verdadero.

 

— ¿Un verdadero alfa? — Stiles pregunta. — ¿Qué, como un Highlander2, 'solo puede haber uno'?

 

—Como en, creo que podría convertirse en un Alfa, sin tener que tomar el poder matando a otro Alfa—, aclara Deaton.

 

—Oh, entonces lo opuesto a Highlander—, dice Stiles. —Eso está bien, interesante, y podría haber sido bueno saber que era incluso una posibilidad. Pero aún no sé qué es un emisario ni por qué empecé a brillar.

 

—Ya sabes lo que es un emisario, Stiles, porque eres uno—, dice Deaton. —Supongo que tienes sangre de druida. Probablemente, del lado de tu madre, ya que nunca he sentido nada del Sheriff—. Deaton mira a John, quien frunce el ceño preocupado.

 

—Sangre de druida—, hace eco Stiles. — ¿Estás diciendo que soy celta?

 

—Druidas, eso tiene algo que ver con los árboles, ¿verdad? — John pregunta. — ¿Qué tiene eso que ver con todo esto?

 

—Druida significa 'conocedor de robles'—, dice Stiles, antes de que Deaton pueda. —Estuvieron involucrados en muchos sacrificios humanos, en su mayoría.

 

—Wise-Oak3, en realidad, y fueron filósofos—, contradice Deaton a la ligera. —Los verdaderos druidas alguna vez cometieron sacrificios. Eran las personas encargadas de ayudar a los hombres lobo a controlar el cambio, y esa tradición se ha mantenido. La mayoría de las manadas bien establecidas tienen lo que llamamos un emisario, alguien de sangre de druida, que puede usar su magia y sabiduría para ayudar a proteger la manada. Este fue mi papel en la manada Hale, cuando Talia Hale era Alfa.

 

—Wow—, dice Stiles. —Respuestas reales, y no te mató. ¡Seguro que habría sido útil, no sé, hace un año!

 

—Stiles—, advierte su padre.

 

—No, tiene razón—, dice Deaton suavemente, antes de volverse hacia Stiles. —Me estaba protegiendo, y por eso, me disculpo. No me di cuenta de que tenías el potencial de convertirte en un emisario de pleno derecho al principio, o te lo habría dicho antes. Pensé que solo tenías una chispa, suficiente magia para trabajar ceniza de serbal.

 

—Eso es todo lo que puedo hacer—, acepta Stiles. —Bueno, eso, y aparentemente tengo la capacidad de convertirme en una luz nocturna humana.

 

Deaton niega con la cabeza. —Los lazos que estás creando entre las manadas son una magia que va mucho más profundo que cualquier cosa que hayas hecho con las cenizas de serbal—, dice. —Es un poder antiguo al que has recurrido, para hacer algo así. Por lo general, es algo que solo se puede hacer con años de entrenamiento, con druidas con sangre mucho más pura que la tuya.

 

—Los sangre pura no son tan especiales—, dice Stiles. —Nosotros los muggles somos más listos.

 

—Stiles—, suspira su padre.

 

—Lo sé, lo siento—, dice Stiles. —Pero él camino directa a esa.

 

Deaton solo lo mira por un momento, y luego continúa como si no hubiera hablado. —En cualquier caso, un emisario se une a un Alfa, y así es como crean una conexión con una manada—, explica Deaton. —A veces interactúan únicamente con el Alfa, o a veces toman un papel más activo en la manada, pero el vínculo es siempre el mismo. Se basa en el respeto mutuo del druida y el alfa, y solo se puede crear si ambos partidos están dispuestos. Pero nunca se puede deshacer, ninguno puede reemplazar al otro. Están atados a la muerte.

 

—Muy bien, espera por un minuto, porque realmente espero no entender la situación aquí—, dice John. —Pero para ser claros, mi hijo, mi hijo menor de edad, acaba de unirse a Derek Hale hasta la muerte, y esto era algo que no solo sabías que podía suceder, sino que lo alentabas activamente. ¿Y no sentiste, en ningún momento, que deberías de haberles advertido?

 

—No hay inconvenientes en tener un vínculo de este tipo. Puede ser todo lo que quieran—, explica Deaton. —No hay reglas de distancia o proximidad, aunque, por supuesto, se alienta el contacto y ayuda a aliviar los lazos de la manada, lo cual Stiles ya está descubriendo.

 

—Eso no respondió absolutamente ninguna de mis preguntas—, dice John.

 

—Bienvenido a mi vida—, le dice Stiles.

 

Deaton vuelve a mirar a Stiles con un suspiro. —El problema con que te dé respuestas aquí es que nunca supe que algo así sucedería. Obviamente te has convertido en el emisario de Derek—, dice. —Pero estoy empezando a sospechar que fuiste de Scott, primero. Eso no se supone que sea posible. Un emisario siempre tiene una sola manada, un Alfa.

 

—Así que soy un emisario de doble turno, es lo que estás diciendo—, dice Stiles con incredulidad.

 

Parece que Deaton va a protestar por un momento, y luego su expresión vuelve a su falta-expresión normal. —Esencialmente, sí—, él está de acuerdo.

 

—Y todas esas cosas que me contaste acerca de mis lealtades divididas, acerca de unir las manadas 'en uno', no podrías haber dicho simplemente, oye, mira, Stiles, eres básicamente Merlín.

 

—No eres como Merlín—, interrumpe Deaton con calma.

 

—Y tienes el poder de liderar…

 

—Para guiar—, corrige Deaton.

 

—…A todas las manadas de hombres lobo, aparentemente, en una gran familia feliz como su emisario…

 

—No me di cuenta de que habías comenzado un vínculo con ninguno de ellos en ese momento—, explica Deaton. —Ciertamente no pensé que pudieras unirte a los dos. Simplemente pensé que si finalmente pudieras elegir uno de ellos, el otro seguiría…

 

—Si sospechabas que estaba un poco inclinado hacia los emisarios, ¿cómo podrías no saber que era de Scott? ¡Solíamos dormir en el mismo saco de dormir! — Stiles llora. —Quiero decir, no era como si cada uno no tuviera el nuestro. Simplemente nos enfriamos fácilmente y realmente no nos gustó la oscuridad, así que, ya sabes... mi punto es que no teníamos límites. Si Soy un Merlín mágico...

 

—De nuevo, Stiles, no estás…

 

—…Y él es la versión hombre lobo del Rey Arturo, habrá un vínculo—, dice Stiles. —Prácticamente vinimos pre-unidos, ¿de acuerdo? ¡Estamos superpegados!

 

Deaton deja escapar un suspiro de hostigamiento, porque Stiles siempre ha sido el único en romper su expresión serena. — ¿Y Derek? — él pide.

 

—Derek solo... Derek— Stiles comienza con incertidumbre. —O, Morgana, supongo, si te refieres a quién es él en la metáfora. Me refiero, por supuesto, a la reciente adaptación de la BBC y no a la leyenda original, pero estoy bastante seguro de que Morgana también se vuelve malvada en eso, así que tal vez no se aplica. Para ser honesto, perdí un poco el interés después de la segunda temporada.

 

—Stiles, no estoy seguro…— comienza Deaton, luciendo abrumado.

 

—Solo... sigue adelante—, sugiere John cansado. —No trates de darle sentido.

 

Stiles se ofendería, pero esto probablemente les ahorrará tiempo. —Sí, probablemente no deberías—, él está de acuerdo. —Lo siento. Divago cuando estoy ansioso.

 

—No es solo cuando estás ansioso—, dice su padre.

 

— ¡Suficiente de la galería de maní!4 — Stiles lo señala. —Es por eso que nunca antes te han invitado a las reuniones sobrenaturales.

 

—Por lo general, los emisarios solo están atados por la sangre—, dice Deaton, aun eligiendo ignorar sus disputas. —Dijiste que entraste en contacto con la sangre de Derek justo antes de que se hiciera la conexión, y aunque no es así como suele hacerse, tiene sentido. Me imagino que la razón por la que fue algo... traumática se debe a las circunstancias actuales de Derek. La creación de un vínculo se supone que debe de ser placentero, un momento de pensamientos compartidos.

 

Stiles palidece al darse cuenta de lo que quiere decir Deaton. Derek siente dolor, y cuando la conexión se había establecido, Stiles había sentido ese dolor él mismo.

 

—Stiles—, dice su padre suavemente, colocando una mano sobre su hombro. Stiles lo mira sorprendido, solo para que su padre asienta. Él mira hacia abajo y su sangre comienza a brillar nuevamente alrededor de sus muñecas y débilmente a través de las palmas de sus manos. Cierra los ojos con fuerza e intenta calmarse hasta que se detiene.

 

Se las arregla bien, pero Deaton no le da mucho tiempo para recuperarse, antes de continuar. —En cualquier caso, eso solo explica cómo te uniste a Derek—, dice Deaton. —Esto nunca te ha pasado con Scott, ¿verdad?

 

—Nos cortamos las manos y nos convertimos en hermanos de sangre cuando teníamos como nueve años—, dice Stiles, después de un momento. —¿Crees que eso cuenta?

 

— ¿Hiciste qué? — John exige. —Stiles, te dije que no…

 

—Fue hace siete años, papá—, interrumpe Stiles. —Estoy bastante seguro de que el estatuto de limitaciones de la tontería ha seguido su curso.

 

Deaton mira entre ellos con algo así como diversión. —Nunca he oído que se haga de esa manera—, dice. —Pero si ya lo aceptaste como tu hermano de sangre, tu magia podría haberlo reconocido. Supongo que es posible, y realmente no es tan diferente de lo que generalmente se hace. Tradicionalmente, la conexión está formada por una mordida.

 

— ¿Una mordida? — Stiles pregunta sorprendido. — ¿Los emisarios son hombres lobo?

 

—Los emisarios no pueden convertirse en hombres lobo—, dice, sacudiendo la cabeza. —La mordedura tiene un efecto muy diferente en aquellos como nosotros—. Deaton se arremanga la manga para revelar una cicatriz en el borde de la muñeca. —Es un acto de confianza, para que un emisario se deje morder por un Alfa. Y debe darse voluntariamente, o no funcionará. Así es como se forma normalmente una conexión de sangre.

 

—¿Siempre está en la muñeca? — Stiles pregunta débilmente.

 

—Sí—, dice Deaton, mirándolo. — ¿Por qué?

 

—Oh, ese bastardo—, susurra Stiles, riendo incrédulo. Recuerda a Peter en ese garaje, con los dientes flotando sobre su muñeca, preguntando, no tomando. Debido a que debe darse voluntariamente, y Peter no había querido convertirlo en su Beta, había querido convertirlo en su emisario

 

Peter siempre ha sabido exactamente qué es Stiles.

 

— ¿Stiles? — pregunta su padre con preocupación.

 

—Nada, solo... mucho está empezando a tener sentido para mí ahora—, dice Stiles. —Apuesto a que ese tipo de mordisco tampoco mata, ¿verdad? Y no te convierte. ¿Cuántas excepciones a la regla del te conviertes o mueres hay? Tal vez Gerard ni siquiera es un hombre lobo. Por lo que sabemos, se convierte en campanita cada vez que alguien aplaude.

 

—Gerard no es como tú o Lydia, te lo puedo asegurar—, dice Deaton. —Se habrá convertido, si todavía está vivo.

 

—Sí, pero ¿estás seguro de que es un hombre lobo? — Stiles exige. —A veces refleja quién eres, eso es lo que dijiste cuando Jackson se convirtió en Kanima, ¿verdad? Jackson puede ser un extraordinario imbécil

 

— ¡Lenguaje! — su padre grita, porque sus prioridades aparentemente están rotas.

 

—…Pero ni siquiera es la mitad de terrible que Gerard—, termina Stiles.

 

Deaton lo mira pensativo. —Tienes un punto.

 

— ¡Oh, Dios mío! ¡No! ¡Se suponía que me tranquilizarías! ¡Qué demonios! — Stiles esconde su rostro con sus manos. —Por favor, dime que no se va a convertir en la cosa del dragón que Scott dijo que Jackson se estaba convirtiendo, porque no puedo manejar eso. Matar a un dragón no está en ninguna parte de mi Lista de Deseos; si fuera necesario, tendría que ser lo único que hubiera allí.

 

—No creo que ese tipo de cambio sea posible. Eso requiere un gran poder—, le asegura Deaton. —No puedo imaginar que Gerard esté lo suficientemente curado como para cambiar a su forma beta.

 

Stiles lo mira con los ojos entrecerrados. — ¿Qué le hicieron exactamente tus pequeñas píldoras milagrosas?

 

—Estaban destinados a matarlo—, dice Deaton simplemente.

 

John hace una mueca. —Sí, y no creas que no hablaremos de eso en algún momento también—, dice. —Pero creo que lo que quiso decir Stiles es, ¿qué hicieron realmente tus pequeñas píldoras?

 

—Sí, eso—, acepta Stiles, señalando a su padre. —Todos nos informaron sobre el plan, sino hasta mucho después de que se llevara a cabo. Lo cual, por cierto, podrías haber confiado en mí, ya sabes. Habría estado totalmente de acuerdo con...

 

—Stiles—, dice su padre con desaprobación.

 

—…Debilitarlo lo suficiente como para que pueda ser arrestado de manera segura—, termina Stiles con falsa alegría. —Excepto que se fue vagando por el desierto soltando mugre negra como si fuera aceite de motor y que nunca se lo volvería a ver. Así que fue un fracaso en todos los sentidos.

 

—Sí, eso fue... inesperado—, acepta Deaton.

 

— ¿Inesperado? Lo que significa que no tienes idea de lo que realmente sucedió, ¿verdad? —John suspira.

 

Deaton mira a John como si acabara de notar las similitudes entre padre e hijo. —Me imagino que la dosis no fue lo suficientemente alta como para ser fatal—, dice. —Pero sin más información, no puedo decir más que eso.

 

—Lo que significa que no tienes idea de lo que realmente sucedió—, repite John.

 

—Está bien—, suspira Stiles, saltando de la mesa para agarrar su mochila. Saca el libro Argent. —Si no sabemos lo que sucedió, tal vez al menos podamos entender qué va a pasar.

 

Deja caer el libro sobre la mesa del veterinario y los ojos de Deaton se iluminan. — ¿De dónde has sacado esto? — pregunta, sonando casi fascinado.

 

Stiles mira a su padre, antes de tocar nerviosamente su cuello. Su padre no necesitaba saber acerca de los libros que aparecían misteriosamente en su habitación, ya había recibido un sermón de Derek. —Lo encontré—, dice. —Uh, afuera de la casa Hale.

 

Deaton lo mira dubitativo, pero no lo llama mentira. Sorprendentemente, su padre no parece entenderlo. Stiles saca las notas de Lydia de su sudadera y las despliega, extendiéndolas sobre la mesa de metal al lado del libro. —Lydia ya tradujo principalmente el ritual que creemos que Gerard está representando—, dice. —Estamos bastante seguros de eso, ya que este es un libro Argent y tiene que mantener a Derek vivo por algo.

 

No menciona que este libro prácticamente cayendo en sus manos probablemente tampoco no sea una coincidencia. Sabe que quien lo dejó para él quería que encontrara ese ritual.

 

—Él quiere el poder Alfa de Derek—, dice Deaton, mientras escanea el ritual. —Esto requiere que se sacrifiquen dos vidas además del Alfa.

 

— ¿Qué? — Stiles dice, con los ojos muy abiertos mientras mira la letra perfecta de Lydia. —Crees que ella habría mencionado esa parte. No esperaba más sorpresas.

 

Se inclina para leer la descripción bastante separada de Lydia del ritual:

 

Se necesitarán dos sacrificios adicionales al comienzo, con la garganta cortada. Su sangre se usará para crear un círculo cerrado.

 

El Alfa debe ser envenenado con acónito y extendido en el círculo atado con una cuerda hilada de con acónito.  

 

Supuestamente, el círculo de sangre amortiguará temporalmente la conexión del Alfa con su manada, por lo que cuando lo maten y se complete la transferencia de poder, el nuevo Alfa puede tomar su lugar sin problemas sin que la conexión con la manada se corte y tenga que volverse a formar.

 

—Encantador—, dice Stiles con incredulidad. —¿Y se supone que estos son los buenos?

 

—Los libros como este no estaban destinados a ser manuales—, explica Deaton. —Estaba destinado a catalogar cosas que habían encontrado y formas de contrarrestarlo. Es extraño que tengan todo el ritual grabado de esta manera.

 

—Perteneció a los Argent, dicho lo suficiente—, le recuerda Stiles. — ¿No hay una parte en todo esto que nos diga como contra atacar?

 

—Sí. Detén el ritual antes de que maten al Alfa—, dice Deaton.

 

—Por supuesto—, dice Stiles. — ¿Por qué no pensé en eso?

 

Su papá aclara en voz alta su garganta. —Oye, voy a ir a la patrulla, pedir algunos favores, ver qué puedo encontrar—, dice John. —No voy a ser de mucha ayuda con todas estas cosas de rituales, pero tal vez pueda encontrar algo sobre dónde ha estado Gerard. ¿Stiles? Quiero que te quedes aquí.

 

— ¿Eh? — Stiles dice distraídamente. —Si seguro.

 

—Stiles—, su padre le llama la atención.

 

Stiles lo mira. —Papá, estaré aquí—, promete. —Estamos juntos en esto ahora, ¿verdad?

 

—Correcto—, dice John, relajándose un poco. Él asiente con la cabeza a Deaton y luego se dirige hacia las puertas.

 

—Parece estar manejando esto notablemente bien—, dice Deaton.

 

—Dile eso a mi ventana—, dice Stiles

 

Deaton levanta una ceja, pero no pregunta. — ¿Y cómo lo manejas, Stiles?

 

—Ni siquiera puedo pensar en nada de esto en este momento—, dice. —Tengo que salvar a Derek, entonces puedo enloquecer.

 

—Sabes lo cariñoso que soy con Scott—, comienza Deaton, y Stiles casi se ríe, porque ¿cómo se suponía que iba a entender eso cuando Deaton tenía menos expresiones que Derek? —Pero no puedo decir que no estoy contento de que te hayas unido a Derek.

 

—Derek me necesita más que Scott—, dice Stiles, y se da cuenta de que es cierto. Tampoco dice cuánto necesita a Derek, pero cree que Deaton probablemente ya lo sabe teniendo en cuenta el hecho de que Stiles ha comenzado a iluminarse literalmente cada vez que piensa en él.

 

—Sí, creo que sí—, acepta Deaton. —Le prometí a su madre hace mucho tiempo que lo cuidaría, pero nunca podría ser su emisario. No confía en mí.

 

— ¿Crees que él confía en mí? — Stiles pregunta incrédulo.

 

—Esto—, dice Deaton, tocando su muñeca, donde todavía parpadea un ligero resplandor, —no hubiera sido posible si no lo hubiera hecho.

 

— ¿Sabe él? — Stiles pregunta en voz baja. — ¿Sabe él lo que soy?

 

—Ni siquiera estoy convencido de que Derek sepa lo que realmente es un emisario—, dice Deaton suavemente. —La manada de Talia consistía completamente de familia, eso es inusual, en estos días. Confió en mí por completo, pero entendió que los demás nunca aceptarían a un extraño. Yo era su emisario, pero nunca realmente manada, y nunca conocí a ninguno de los otros Hales. Eso era la naturaleza de nuestro vínculo particular, por lo que Derek y yo nunca nos conocimos formalmente hasta que regresó aquí.

 

— ¿Y pensaste que continuarías dejándolo en la oscuridad? — Stiles pregunta.

 

—Necesitas entender algo, Stiles—, dice Deaton. —El arma más poderosa de un emisario son sus secretos: sin ellos, no somos nada. Es la única forma de mantenernos a salvo.

 

—Lo dijiste tú mismo, el vínculo puede ser tan grande o tan pequeño como quieras, ¿verdad? — Stiles pregunta. —Bueno, no solo me relacioné con Derek. Sentí que estaba abierto para todos ellos, incluidos Scott e incluso Isaac. No veo secretos que nos hagan bien a ninguno de nosotros, y no creo que pueda dejarlos fuera ahora si lo intentara.

 

—Eso te hará muy, muy fuerte—, dice Deaton, —o extremadamente vulnerable.

 

—Ya recibí la historia de advertencia sobre Emily de Derek—, suspira Stiles.

—Entiendo los riesgos.

 

Deaton lo mira sorprendido. —Emily—, repite. — ¿Emily DeWitt?

 

— ¿La conocías? — Stiles pregunta, a pesar de que tiene tanto sentido que no sabe por qué no lo descubrió él mismo. Emily era una Hale al final, por supuesto, Deaton habría sabido de ella.

 

—Sí, conocía a Emily—, dice Deaton. —Le aconsejé a Talia que no la acogiera.

 

Stiles mira hacia arriba con una mirada fulminante. Siempre pensó que Deaton era del tipo que se arriesgaría a ayudar a alguien, a pesar de su inclinación por guardar todos sus secretos. No puede verlo siendo tan cruel con alguien que había necesitado ayuda tan desesperadamente. — ¿Por qué harías eso?

 

— ¿Recuerdas que dije que el vínculo con un emisario debe ser con consentimiento? — Deaton pregunta. —Eso no era estrictamente cierto.

 

—Déjame adivinar, estabas siendo vago y engañoso—, dice Stiles. —Estoy sorprendido.

 

—No hay forma de que un hombre lobo inicie un vínculo involuntario, pero para un humano, hay una manera de atar a un druida, de ponernos bajo la esclavitud—, dice Deaton a regañadientes. —Pero rara vez se hace y pocos saben cómo.

 

—Gerard Argent sabe cómo—, dice Stiles con certeza

 

Deaton no lo niega. —Incluso si pudiera, ahora que eres oficialmente un emisario, no puede controlarte—, le asegura. —Y él no se atrevería a seguirme.

 

—Derek dijo que Emily era la esclava de los Argent, pero era más que eso, ¿no? — él pide. — ¿Estaba bajo su esclavitud?

 

—Sí—, dice Deaton. —Afirmó que el vínculo se rompió cuando los cazadores con ella fueron asesinados, pero siempre sospeché que ese no era el caso.

 

—Crees que estaba ligada a Gerard—, se da cuenta Stiles.

 

—Emily era inteligente y sabía cómo esconderse. La distancia le permitió luchar contra el vínculo—, dice Deaton. —Quería ayudarla a correr lo más lejos que pudiera, pero Gerard siempre la iba a encontrar. Es por eso que le aconsejé a Talia que no la acogiera. Era tan bueno como una declaración de guerra.

 

—En realidad le estás echando la culpa del incendio—, acusa Stiles.

 

—Creo que si no hubiera sido Emily, habría sido otra cosa, pero ella fue el punto de inflexión—, dice Deaton. —Gerard siempre ha querido deshacerse de los Hales. Eran todo lo que dijo que los hombres lobo no eran, y por eso eran una amenaza. Su hijo ya estaba empezando a simpatizar con su especie.

 

—Entonces, en lugar de perseguir a los hombres lobo que en realidad eran una amenaza para las personas inocentes, estaba persiguiendo a los que eran una amenaza para él—, se da cuenta Stiles enfermizo.

 

—Gerard nunca ha sido más que un soldado en una guerra—, dice Deaton. —No habría tenido ningún propósito si hubiera paz.

 

Stiles ya está decidido a salvar a Derek de Gerard, pero siente que su ansiedad aumenta y se da cuenta de que no solo está en juego la vida de Derek. Son todos ellos. Gerard con tanto poder los destruiría a todos.

 

El resplandor regresa a sus manos y él aprieta los puños, tratando de empujarlo hacia abajo.

 

—Dijiste que no podía controlarme, pero eso no es cierto, ¿verdad? No puede controlarme mientras Derek vive, pero este ritual transfiere a la manada—, dice Stiles. —Bueno, soy parte de la manada. Entonces, si esto realmente funciona, también me quedaré con él.

 

—Quizás no—, dice Deaton, con una leve sonrisa. —A diferencia del resto de la manada, no tienes un solo vínculo, tienes a Scott a quien recurrir. Es poco probable que Gerard pueda controlarte, al menos no completamente. Pero supongo que ya debería haber aprendido mejor, a decir algo de manera tan segura, y no sé cuánto tiempo pueden durar ustedes dos estando separados.

 

—De todos modos es discutible—, decide Stiles. —De ninguna manera voy a dejar morir a Derek.

 

—No, supongo que no lo harás—, dice Deaton, sonriendo débilmente. —Pero salvarlo es solo el comienzo.

 

—Crees que voy a tener que elegir entre ellos—, se da cuenta Stiles. —Voy a tener que elegir entre Derek y mi mejor amigo.

 

—Honestamente no lo sé—, dice Deaton. —Realmente creo que Scott está destinado a convertirse en un verdadero Alfa, y pensé, al principio, que algún día podrías convertirte en su emisario.

 

— ¿Pero? — Stiles dice, sintiendo que una verdad se acerca.

 

—Pero todo lo que hiciste fue entrar en contacto con la sangre de Derek, cuando él ni siquiera estaba allí, y pudiste forjar una de las conexiones más fuertes que he visto —, dice Deaton. — Así que es como dije, Stiles. —El veterinario se encuentra con sus ojos cuidadosamente. —He estado en esto demasiado tiempo para estar seguro de algo.

Notes:

1: SparkNotes, originalmente parte de un sitio web llamado The Spark, es una compañía iniciada por los estudiantes de Harvard Sam Yagan, Max Krohn, Chris Coyne y Eli Bolotin en 1999 que originalmente proporcionó guías de estudio para literatura, poesía, historia, cine y filosofía.

2: Highlander es una serie de TV. Duncan Mcleod es un descendiente del clan escocés de personajes inmortales de Connor McLeod, que en la actualidad regenta junto a su novia Tessa, una pequeña tienda de antigüedades, intentando pasar desapercibido y alejado de las luchas ancestrales que sostienen los inmortales entre ellos, conocidas como “El Juego” hasta que solo quede uno de ellos al final.

3: No pude pensar o encontrar, en las profundidades del internet, una buena traducción de Wise-Oak aparte de Sabio Roble.
El Wise-Oak ha sido un símbolo de sabiduría y conocimiento inherente a su fuerte e inquebrantable tronco. El poder de atraer los relámpagos ha hecho que se celebre como un signo de poder y fuerza. Los robles han tenido una gran importancia en muchas culturas y sociedades durante miles de años, y aún lo siguen haciendo.

4: Una galería de maní era un apodo para los asientos más baratos y ostensiblemente más ruidosos del teatro, cuyos ocupantes solían molestar a los artistas. La merienda menos costosa que se sirve en el teatro a menudo son los cacahuetes, que los clientes a veces arrojan a los artistas en el escenario para expresar su desaprobación. Frases como "sin comentarios de la galería de maní" o "tranquilo en la galería de maní" son extensiones del nombre

Chapter 25: Capituo 25

Chapter Text

Stiles regresa al área de recepción, bastante seguro de que no sacará nada más de Deaton, ya sea que Deaton sepa más o no. Su teléfono comienza a sonar antes de que llegue a la puerta, y lo saca para ver el nombre de Scott. Responde antes de salir de la veterinaria, conteniendo la respiración mientras lo hace, tratando de prepararse para lo peor.

—¿Lo has encontrado? — exige, en el momento en que acepta la llamada.

—Lo siento, Stiles—, dice Scott, sonando cansado. —Creemos que lo metieron en un automóvil justo afuera de la puerta. Realmente no hay rastro a seguir. Sin embargo, todavía estamos buscando, ¿de acuerdo? Hemos dividido el condado en cuadrantes. Lo vamos a encontrar.

Stiles asiente con la cabeza, antes de darse cuenta de que Scott no puede verlo. —Exacto, sí, lo haremos.

—¿Dónde estás ahora? — Scott pregunta.

—Necesitaba la ayuda de Deaton con algo—, dice. —Estaba teniendo algún tipo de reacción a todo esto. Tiene que ver con la forma en que soy capaz de manejar las cenizas de serbal.

—¿Que te dijo? — Scott pregunta con ansiedad. —Estás bien, ¿verdad?

Stiles considera decirle que podrían haberse unido de manera mística accidentalmente debido a su extraña amistad cercana en la infancia, y también podría haberse unido de manera mística accidental a cierto lobo amargado por razones desconocidas, pero no parece el tipo de conversación que uno debería tener por teléfono.

—Estoy bien—, dice Stiles, en cambio. —No era nada.

—Está bien—, dice Scott, de una manera que significa que no le cree ni por un segundo. —¿Qué vas a hacer ahora? No lo estás buscando solo, ¿verdad?

—Mi papá se niega a dejar que me aleje a más de seis metros—, dice Stiles con ironía. —Así que no creo que eso vaya a suceder.

—¿Bueno, entonces…? — Scott pregunta, comenzando a sonar frustrado. —Stiles, quiero ayudar.

—No puedes ayudar con esta parte—, le dice Stiles. —Voy a la casa de Allison.

—Pensé que tu no…, ¿pensé que no confiabas en ellos? — pregunta en voz baja.

—No lo hago, por eso no voy a pedir la información que quiero—, dice Stiles. —Voy a intentar encontrarla.

—¿Por qué no me dijiste que eso es lo que planeabas? — Scott pregunta después de un momento.

Stiles suspira. —Quería que tuvieras una negación plausible.

—Entonces, ¿por qué me estás diciendo ahora? — él pide.

—Porque no se siente bien, y apesta mentirte—, dice con una leve risa. —No se siente como un plan, si no estás en él. No sé cómo lograste hacerlo.

—Stiles—, dice Scott suavemente. —Estaba tratando de mantenerte a salvo. Así es como podría hacerlo. Tampoco se lo dije a Allison.

Scott no podía decirle a Allison porque había estado en medio de un ataque psicótico, y probablemente lo habría apuñalado en el pecho varias veces, por lo que Stiles cree que no es exactamente lo mismo.

Pero aún así, aprecia el pensamiento.

—Solo ... Allison no haría esto—, dice Scott. —Sé que no lo haría.

—¿Porque nunca antes ha tratado de matar a Derek? — Stiles pregunta. —¿Todavía piensa que él mordió a su madre sin una buena razón?

—Yo ... es su madre, Stiles. No necesita saber lo que hizo—, dice Scott.

—De alguna manera lo hace, si eso significa evitar un viaje sangriento de venganza—, dice Stiles. —Mira, no creo que ella esté trabajando con Gerard, ¿de acuerdo? Él también trató de matarla. Pero Chris sabe algo, seguro. Y no creo que vaya a entregarnos a su padre, incluso después de todo lo que ha hecho. Así que voy a omitir los trámites y no preguntar.

—¿Cómo vas a hacer eso? — él pide.

—Voy a encontrar evidencia, de alguna manera, no lo sé—, suspira Stiles. —Es un trabajo en progreso, ¿de acuerdo?

—Solo ten cuidado—, advierte Scott. —No creo que el Sr. Argent te haga daño, pero ...

—Mi papá estará conmigo, no puede tocarnos—, dice Stiles. —Solo ... sigue buscando, ¿de acuerdo?

—No me detendré—, le asegura Scott. —Lo encontraré.

—Sí, gracias, amigo—, dice Stiles, colgando la llamada mientras empuja las puertas. Se deja caer en el asiento del pasajero de la patrulla junto a su padre.

—Entendido, María—, dice John, terminando una llamada en su radio, antes de apagarlo y mirar a Stiles. —¿Todo bien?

—Scott llamó, no hay señales de Derek o Gerard todavía—, dice Stiles. —¿Y tú? ¿Encontraste algo?

—Había una cosa que me llamó la atención—, dice su padre. —Guy alquiló una habitación en Beacon Motel por una noche, nunca se fue. Se fueron a revisar la habitación y todas sus cosas estaban allí, pero no hay señales de él. Coincidentemente, las 'cosas' que quedaron fueron muchas armas y algunas balas personalizadas muy extrañas.

Stiles frunce el ceño. —¿Se registraron con su nombre real o un alias?

—El nombre de Guy es Andy Mason, parece comprobarlo. Y también esto, su último lugar de empleo conocido es Argent Arms.

—¿Llamaron a su compañía Argent Arms? — Stiles pregunta con incredulidad.

—En realidad, no es la parte más relevante de eso, Stiles—, dice su padre.

—Sí, no, lo sé, pero aun así—, dice Stiles. —Sin embargo, ¿dejar un rastro? Eso es descuidado para ellos. Los Argent solo contratan profesionales. ¿Estás pensando que es una trampa?

—Tú dímelo—, dice. —¿Tu pequeña pandilla sabe algo sobre un cazador desaparecido?

—No somos la mafia sobrenatural—, dice Stiles a la defensiva. —Solo peleamos en defensa propia. Principalmente, hay muchas huidas de cosas que nos quieren matar.

—Lo sé, lo siento—, dice. Se pasa una mano por el pelo y se da vuelta para mirar por la ventana. —Llamé a Chris. Le dije que ni siquiera podía dormir, estoy aterrorizado de dejarte fuera de mi vista. Me preguntaron si podía pasar y él podría darme un poco más de consejos sobre medidas de protección para la casa.

—Bien—, dice Stiles con aprecio. —Y te preguntas dónde aprendí a mentir.

—Nada de eso es exactamente una mentira, Stiles—, dice su padre.

Stiles hace una mueca, antes de morderse el labio. Esta es exactamente la razón por la que se lo había ocultado a su padre durante tanto tiempo: ya tenía mucho de qué preocuparse, había querido protegerlo de esto todo el tiempo que pudiera. —Lo siento— dice.

—No causaste nada de esto—, dice John con firmeza. —Espero que lo sepas.

—Sí, lo sé—, dice Stiles. Es sobre todo cierto, excepto que él ve tanta ciencia ficción y siempre ha encontrado fascinante la idea de universos paralelos, a veces no puede evitar pensar que esa noche en que arrastró a Scott al bosque fue el punto de inflexión. Se pregunta cuán diferentes podrían ser las cosas, si no lo hubiera hecho.

Excepto que él sabe que va mucho más allá que eso. Laura Hale aún estaría muerta en ese bosque, la buscaran o no.

—Sé que no lo he dicho, pero espero que lo sepas ... —Stiles comienza vacilante. —Quiero decir, gracias, por hacer esto. Sé que es mucho pedir, considerando que estás resolviendo todo esto, y sé que no conoces a Derek, y no tienes que escucharme…

—Siempre estaré allí cuando me necesites—, interrumpe John. —Pensé que lo sabías, o te lo habría dicho antes.

 —Lo sabía—, dice Stiles. —Papá, lo sabía, yo solo ... quería que estuvieras a salvo.

—Estoy a salvo cuando tú estás a salvo—, grita su padre. —¿Quieres protegerme, hijo? Protégete. Porque no sobreviviré perdiéndote, puedo prometerte eso.

Stiles permanece en silencio por el resto del viaje. Realmente no sabe qué decir a eso, porque sabe que no ayudará explicarle a su padre que siente lo mismo. Es extraño pensar cuán destructivo puede ser el amor. Había visto de primera mano lo que la pérdida de su madre le había hecho a su padre; a veces se pregunta si no es por eso que se obsesionó con Lydia y excluyó a todos los demás.

La había mantenido en un pedestal donde realmente no podía lastimarlo.

Sabe que Derek es mucho más peligroso para él que ella, y no solo porque sus garras eran un poco más literales que las de Lydia.

—Estamos aquí—, dice su padre, mientras se estaciona frente a los argentinos. —¿Tienes un plan?

—Solo mantén a Chris ocupado—, dice Stiles. —Solo necesito un vistazo rápido en su oficina.

—No apruebo esto—, suspira John.

—Está bien, esperemos la orden de cateo—, dice Stiles. —Cuando pregunten por una razón, diles 'sospecha de albergar a un hombre lobo'—.

—No necesito el recordatorio de que no hay mucho más que podamos hacer aquí—, dice John con firmeza, mirando a Stiles. —Pero podríamos intentar confiar en ellos.

—Excepto que no podemos confiar en ellos—, dice Stiles. —Ese es todo el problema.

—Todavía no me gusta—, suspira.

—Allison es mi amiga—, dice Stiles. —Bueno. Más o menos. De todos modos, ella es amiga de un amigo, así que no estoy disfrutando esto exactamente. Tampoco creo que tengamos otras opciones. Necesitamos saber si Chris está escondiendo a Gerard, y si eso es lo que está haciendo. Realmente no creo que nos lo diga, y si no y nos dice que no lo está escondiendo, probablemente no le creería, y de todos modos perdería el tiempo pensando que es culpable.

—¿Cuándo te volviste tan cínico? — pregunta su papá.

Hace ocho años, piensa Stiles, pero no puede decirlo en voz alta. Sale del auto sin contestar. De todos modos, está bastante seguro de que fue retórico.

Stiles llega primero a la puerta, pero espera a que su padre lo alcance para tocar el timbre. Chris abre la puerta un momento después. Parece sospechoso, porque Chris no es un idiota.

—Adelante—, dice. —Allison todavía está dormida.

—Como todos los adolescentes deberían de estar—, dice Stiles con ironía, haciendo de su parte como si hubiera sido arrastrado fuera de su casa.

Su papá levanta una ceja antes de volverse hacia Chris. —¿Crees que podríamos hablar solos? Necesito ... hay algo que quiero discutir contigo, pero no quería dejar a Stiles solo en la casa.

Chris asiente y les indica que se dirijan a la sala de estar. —Puede quedarse aquí—, dice, antes de tirar el control remoto de Stiles. —Eres bienvenido a ver la televisión.

Stiles se desploma en el sofá y enciende la TV para ver algunas caricaturas. Él finge no darse cuenta cuando Chris lleva a su padre fuera de la habitación. Espera que no se dirijan a la oficina de Chris, pero no cree que Chris lo lleve allí. Cuenta con el hecho de que Chris tiene demasiado que esconder para arriesgarse a que el Sheriff lo vea.

Enciende el televisor lo suficientemente alto como para disimular su ausencia, pero no lo suficientemente fuerte como para llamar la atención, y luego mira cuidadosamente hacia donde habían venido. Puede distinguir a su padre y Chris al otro lado del pasillo, hablando en la mesa de la cocina, y deja escapar un suspiro de alivio.

No sabe cuánto tiempo tiene, así que vuelve a la sala de estar y se dirige al otro pasillo. Planea ir directamente a la oficina de Chris, pero se detiene cuando ve que la puerta del sótano ha quedado entreabierta. Su corazón se acelera por un momento, destellos de ser arrastrado por este pasillo y empujado descuidadamente por esta puerta, bajando las escaleras ...

Bloquea los recuerdos de su mente y abre la puerta, cautelosamente bajando los escalones. Se le ocurre por primera vez que Gerard y Derek podrían incluso estar aquí, y pone una mano en la pared mientras baja los escalones con cuidado, tratando de ver con la luz que entra desde el pasillo.

Llega al fondo y pasa los ojos por donde Erica y Boyd habían estado colgando. No hay nadie aquí ahora, y él no sabe si sentirse decepcionado o aliviado. Tira de la cuerda de la bombilla que cuelga del techo y luego se adentra aún más, saltando casi un metro cuando su teléfono vibra violentamente en su bolsillo.

Respira hondo y responde rápidamente cuando ve el nombre de Lydia. —¿Qué pasa?

—Rastreamos el teléfono de Derek—, dice Lydia sin preámbulos. —Stiles, es... está en casa de Allison. No quería creer que estuvieran involucrados, pero Danny pudo lo encontró dentro de 50 metros de distancia, así que ahora hay muy pocas dudas.

—No estoy tan seguro de eso—, dice Stiles, mientras observa cuidadosamente el resto de la habitación.

—¿Stiles? — Lydia pregunta bruscamente.

—Estoy en su sótano ahora mismo—, le dice Stiles. —Y parece que les han robado.

Los pestillos están rotos en todos los gabinetes, y Stiles puede ver claramente dónde se llevaron más de la mitad de las municiones y armas que se habían almacenado aquí.

—Los han limpiado bastante bien y todas las cerraduras están rotas—, continúa Stiles. —Como apuesto a que Chris tiene la llave de los gabinetes, creo que Gerard o uno de sus lacayos se detuvieron para abastecerse y hacer de Chris nuestra cortina de humo al mismo tiempo. Gerard respondió la llamada antes cuando llamé a Derek, y creo que dejó el teléfono encendido por una razón. Quería que nos guiara hasta aquí.

—¿Qué vas a hacer? — Lydia pregunta.

—Todavía creo que Chris está involucrado, creo que está tratando de ocultar a Gerard, o al menos lo estaba—, dice Stiles. —Y voy a averiguar dónde.

—¿Y qué hay de Jackson y yo? — ella pregunta. —¿Qué hacemos?

—Solo quédense quietos por ahora—, dice Stiles. —O llama a Scott, si crees que Jackson puede manejar trabajar con él.

—Ten cuidado, Stiles—, dice Lydia. —Incluso si Gerard dejó el teléfono allí para echarnos, no significa que Chris no esté involucrado en esto.

—Con eso estoy contando—, dice Stiles. —Hazme un favor. Llama al número de Derek después de que colguemos. Deja que suene cinco veces y luego finaliza la llamada. No hables si alguien responde.

—Stiles…— Lydia se detiene, y Stiles puede imaginarla frunciendo los labios con frustración. —Bien, pero ten cuidado.

Ella cuelga y un momento después oye el zumbido distintivo de un teléfono que vibra. Da un paso adelante, siguiendo el sonido, y ve un teléfono negro sentado en una mesa apoyada contra la pared. Él sabría incluso sin la 'Lydia' parpadeando en la pantalla que es de Derek.

Todavía tiene el pequeño trozo de cinta adhesiva que cubre la lente de la cámara, desde que Stiles había estado leyendo artículos sobre centros comerciales que piratean las cámaras de cualquier persona en su red inalámbrica para supuestos fines de 'marketing'. Eso fue lo suficientemente invasivo y espeluznante sin tener que preocuparse por ser descubierto accidentalmente como un hombre lobo, por lo que había estado en una misión para hacer todos los teléfonos de los lobos aprueba de espionaje. Derek se había quejado todo el tiempo que Stiles había estado jugando con su teléfono, pero había dejado la cinta puesta.

Stiles traga saliva, estirando la mano para agarrarlo. Parte de él quiere ir directamente arriba y confrontar a Chris, pero sabe que el hombre nunca sería tan descuidado. Si Chris tuviera algo que ver con llevarse a Derek, nunca habría traído el teléfono aquí. Por lo menos, se habría asegurado de apagarlo.

En cualquier caso, todavía tiene una misión que completar. Se arrastra hacia el pasillo. Apenas puede escuchar a su padre pedirle a Chris consejos sobre cómo manejar la participación de Stiles en lo sobrenatural. Stiles tiene que contener un resoplido, porque el sigilo nunca ha sido algo natural para él. Sin embargo, aunque Chris es una gran fuente de armamento y consejos sobre cómo matar cosas, teniendo en cuenta el historial de Allison, no parece ser la primera persona a la que acudir en busca de consejos para padres.

Supone que su padre tiene que mantener a Chris ocupado de alguna manera, y Stiles no sabe cuánto tiempo más puede mantenerlo ocupado. Deja de detenerse y se dirige a la oficina de Chris. Dice una oración rápida a los dioses hombre lobo para que no esté cerrada.

Algo finalmente le va bien, porque la puerta se abre fácilmente. Stiles se desliza dentro y lo cierra suavemente detrás de él, antes de dirigirse directamente al escritorio. Se deja caer en la silla de cuero de Chris y abre la computadora portátil. Como era de esperar, hay un código de acceso.

Es una posibilidad remota, pero Stiles levanta el teclado externo y hay un post-it allí con una lista de inicios de sesión. Tiene todo, desde su cuenta de AT&T hasta su información bancaria, por lo que es prácticamente cualquier cosa que pueda necesitar. Es descuidado en una forma en que Chris generalmente no lo es, pero luego recuerda que Victoria Argent probablemente se había encargado de todo y Chris todavía estaba tratando de encontrar una manera de hacer esto sin ella, y Stiles se siente casi mal.

Luego recuerda a Victoria Argent y todo vuelve a estar bien.

Toma un post-it y un bolígrafo y copia todos los nombres de usuario y contraseñas de la lista, antes de devolver la copia de Chris a su lugar debajo del teclado. Cierra la computadora portátil nuevamente y está a punto de ponerse de pie cuando se abre la puerta.

Se prepara para ser expulsado brutalmente por Chris, y no sabe qué hacer cuando es Allison quien entra.

Ella se cruza de brazos mientras deja que la puerta se cierre detrás de ella, sus feroces ojos oscuros calculan mientras se cruzan con él. Lucha contra un escalofrío y se pregunta si en realidad preferiría haber sido atrapado por Chris.

—Hola, Allison—, dice, torpemente alargando el saludo.

—¿Qué crees que estás haciendo? — ella pregunta con frialdad.

Stiles se acerca y cubre el post-it, pero no lo suficientemente rápido. Allison da un paso adelante y se lo quita de las manos. Ella lo mira con incredulidad.

—Estas son las cuentas de mi padre—, dice rotundamente. Él puede verla corriendo a través de las posibilidades: los intentos de fraude con tarjetas de crédito bajo las narices de su padre Sheriff son tantos niveles de estupidez que inmediatamente lo descarta.

Por todas las maneras traviesas de Stiles, cualquiera que realmente lo conozca sabe que solo viola la ley por buenas razones de todos modos.

—Crees que mi padre está escondiendo a Gerard—, dice en voz baja. Ella lo mira, encontrando su mirada tan intensamente que Stiles tiene que luchar para no mirar hacia otro lado. —¿verdad?

—Sí—, dice Stiles. No hay razón para negarlo ahora. Él sabe que su única esperanza de salir de esto es tener a Allison de su lado. Parece que tendrá que confiar en ella después de todo.

—Gerard está muerto—, dice Allison.

—Y Derek está desaparecido—, le dice. —Alguien se lo llevó, y por lo que parece, alguien ha estado en tu casa. ¿Has estado en el sótano últimamente?

—Realmente ya no voy al sótano—, dice ella.

—Bueno, podría valer la pena el viaje—, dice. —Alguien ha robado la mayoría de tus balas, estoy seguro de que las usará con nuestros amigos. No puedo pensar en un mejor sospechoso para eso que Gerard, excepto tal vez tú, así que dime quién crees que es más probable que esté detrás de esto.

—No le he hecho nada a Derek—, dice Allison. —¡Incluso guardé tu secreto sobre lo que te hizo! ¿Y qué obtengo por eso? Nada. Todavía apenas puedes mirarme a los ojos. Stiles, ¿qué va a tomar?

—¿Qué se necesitará para perdonarte? — él interrumpe en voz baja. —Intentaste matar a nuestros amigos. Los trajiste aquí para ser torturados. Si no fuera por el hecho de que no podemos darnos el lujo de llamar la atención, probablemente estarías siendo juzgada como un adulto ahora mismo con tu mejor la posibilidad de ser una sentencia de prisión de diez años. Entonces, ya sabes, no tratar de matar a alguien esta vez en realidad no compensa eso.

Stiles se da cuenta de que en algún momento se ha puesto de pie, y está muy contento de que su sudadera con capucha sea lo suficientemente grande como para cubrir la mitad de sus manos, porque puede sentir el poder acumulándose en ellas incluso si no puede ver la luz a través del material pesado. Allison, por su parte, parece estar cerca de las lágrimas. Stiles odia que se sienta como un imbécil a pesar de que no ha dicho nada que no sea cierto, porque no cree que haya hecho llorar a una chica antes, al menos no a propósito.

—Está bien—, dice en voz baja. —Me lo merecía.

—¿Cómo pudiste hacerles eso? — Stiles pregunta entrecortadamente. —¡Confiamos en ti! ¡Confié en ti!

—Podría hacerlo porque pensé que había sido traicionada—, dice Allison. —Pensé que me había equivocado acerca de ellos, que eran peligrosos. Que todo lo que creía saber estaba mal, pensé que mataron a mi madre

—Tu madre se suicidó, y Gerard y Chris se cruzaron de brazos y la dejaron—, dice Stiles. —Eso no fue culpa de Derek, no tenía otra opción. ¿Crees qué, él quería que ella fuera manada? ¿Tiene sentido para ti? Solo la mordió porque estaba luchando por su vida, porque estaba intentando para salvar a Scott.

—¿De qué estás hablando? — ella demanda, acercándose mientras sus ojos se aclaran. —¿Qué quieres decir con salvar a Scott?

—Tu madre estaba tratando de matar a Scott—, dice Stiles. —Lo siento, Allison. Sé que quieres pensar lo mejor de ella, pero lo que sucedió no fue culpa de nadie más que de ella.

Scott probablemente lo matará por esto, piensa, pero Allison todavía está en la cerca. Todavía está atrapada entre su loca familia y los hombres lobo y necesita todos los hechos para finalmente tomar su decisión.

—Eso no es cierto—, ella niega. —Scott me lo habría dicho.

—Pensó que estaría mejor si no lo supieras—, dice Stiles. —Excepto que ese plan fracasó cuando trataste de matarnos a todos.

—Yo nunca… — comienza Allison. —Nadie iba a ser asesinado.

—No eres tan ingenua—, dice Stiles. —Gerard no me iba a matar, tal vez. Pero nunca planeó dejar que Erica o Boyd salieran vivos de tu sótano. Incluso si, incluso si Derek había atacado a tu madre sin provocación, ¿qué demonios tenía eso que ver con Erica? y Boyd?

—Iban a matar a Lydia, ¿o lo olvidaste? — Allison pregunta. —Nunca fueron realmente inocentes.

Stiles deja escapar una risa incrédula. —Mira, ahí mismo. ¿Quieres saber por qué realmente no puedo perdonarte? Porque todavía no admitirás que estabas equivocado. Todavía estás encontrando excusas para sentirte mejor. Culpas a Kate, o culpas Gerard. Nunca es tu culpa, ¿verdad?

—Sé que he cometido errores—, comienza Allison.

—Realmente no lo entiendes, ¿verdad? — Stiles exige enojado, y él sabe que debería estar tratando de convencerla para que cambie de lado. Él sabe que este es el peor momento posible para tratar de resolver esto, pero puede sentir semanas y semanas de justa indignación simplemente luchando para salir. —¡No fueron solo errores! No es como si hicieras trampa en una de nuestras pruebas de historia, ¡esto no solo va a desaparecer! No sé si incluso puedes compensar las cosas que has hecho, pero al menos deberías intentarlo. Deberías pasar el resto de tu vida intentándolo, si eso es lo que se necesita.

—¿Cómo se supone que lo invente si ninguno de ustedes me lo permite? — ella exige.

La puerta se abre de nuevo y Chris les frunce el ceño. —¿Chicos, están bien?

Stiles puede ver a su padre luciendo ansioso detrás del hombro de Chris. Stiles se está preparando para arriesgarse por esto, para fingir que ha estado actuando solo, cuando Allison se vuelve hacia su padre con una sonrisa.

Sus ojos son fríos y se evalúan incluso cuando abre su sonrisa, y todo rastro de sus lágrimas anteriores se ha ido.

—Estaba mostrándole a Stiles tu colección de libros—, dice suavemente, su mentira tan impecable que Stiles se pregunta si incluso un hombre lobo habría sido capaz de atraparla. —Espero que no te moleste.

—Por supuesto que no—, dice Chris con cautela, y si los hombres lobo hubieran captado la mentira o no, está bastante seguro de que Chris no se la perdería

—Creo que deberíamos irnos de todos modos—, dice John, señalando a Stiles. —Vamos, chico.

Stiles se mueve rápidamente para irse, pero Allison atrapa su mano antes de que pueda. Se vuelve hacia ella e intenta no mostrar ninguna reacción cuando ella presiona el post-it con las cuentas de Chris en la palma de su mano.

—Estoy intentando—, dice Allison suavemente, y luego lo deja ir.      

Chapter 26: Capitulo 26

Notes:

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Chapter Text

Su padre lo saca de la casa Argent y hacia el coche sin parar. Chris los deja ir, a pesar de que observa su salida apresurada con creciente sospecha. Stiles sabe que solo se saldrán con la suya porque Chris en realidad no quiere ponerse del lado malo del Sheriff, pero él había estado contando con eso.

—¿Que has descubierto? —pregunta su padre, mientras los saca rápidamente a la calle.

—Nada todavía—, dice Stiles, mostrando el post-it. —Necesitamos ir a la biblioteca.

—¿La biblioteca? — él pide. —¿Vas a revisar el Manual del Hombre Lobo, o qué?

—Ah, no. Pero oye, no tienen cámaras de seguridad, y es imposible rastrear quién estaba usando sus computadoras en el momento en que se accede a ciertos sitios—, explica Stiles. —Las bibliotecas públicas siguen siendo una institución invaluable, incluso en nuestra sociedad moderna de alta tecnología, papá. Estoy decepcionado por tu poca visión1.

Su padre solo suspira y se dirige a la biblioteca sin molestarse en discutir. Stiles intenta no inquietarse demasiado en el camino, pero hay un reloj en su mente. Ya ha perdido horas sin acercarse más a encontrar a Derek, y no sabe qué va a hacer si este movimiento no vale la pena.

Stiles sale del auto en el momento en que su padre se estaciona, y se apresura a la biblioteca. Acaban de abrir, así que no hay nadie allí, y él escucha vagamente a su padre haciendo una pequeña charla con la bibliotecaria detrás de él, contando una historia sobre cómo Stiles había dejado un trabajo de investigación hasta el último minuto, mientras se dirige hacia la parte posterior.

Se deja caer frente a una de las computadoras y pega el post-it en el escritorio, abriendo el sitio bancario de Chris es lo primero. Realmente no tiene tiempo para intentar revisar sus registros telefónicos, aunque lo hará si es necesario. Tiene la sensación de que encontrará todo lo que necesita en el extracto de pago de Chris.

Los cazadores realmente nunca tienen que preocuparse por cubrir un rastro de papel, porque los hombres lobo que persiguen suelen ser ciudadanos deshonestos o simplemente ciudadanos comunes, que no tienen acceso ni recursos para defenderse de esta manera. Tan cuidadoso como es Chris, para él mantenerse alejado del radar nunca ha tenido que incluir el uso de efectivo o tarjetas de crédito prepagas.

—¿Quiero saber cómo es puedes hacer todo esto? — pregunta su padre mientras se deja caer en la silla del escritorio a su lado, inclinándose sobre su hombro con el ceño fruncido.

—No—, dice Stiles. —¿Quiero saber con qué frecuencia cautivas a las bibliotecarias desprevenidas con historias de tu hijo imposible y cuánto extrañas poder comer algo con tocino?

—Escuchaste eso, ¿verdad? — pregunta con ironía. —Todavía no estoy mintiendo. Eso es todo cierto.

Stiles solo resopla y termina de ingresar la información de Chris para que aparezca su resumen de tarjeta de crédito electrónico.

—Esto es tan ilegal—, suspira John.

—Aparta tus ojos—, aconseja Stiles. —Nunca serán capaces de culparme esto.

—Quieres decir que yo no lo haré—, dice John rotundamente. —No podré acusarte de esto.

—Lo sé, te tengo como mi hombre interno en el departamento del Sheriff y todo eso—, dice Stiles. —Podría triunfar como un maestro criminal.

—Solo si quieres que te envíe a la cama sin cenar—, responde rotundamente.

—Nunca harías eso, cederías en unos minutos—, decide Stiles.

—Sí, probablemente—, dice John. —Pero no hay postre, seguro.

Stiles resopla. —Como si hubiera dejado que el postre entrara en la casa, de todos modos—, dice. —Lo que me recuerda que reemplacé todas sus galletas con dátiles medjool. Son nutritivas, pero aún están llenas de azúcar. De nada.

—Maldita sea, Stiles…— comienza su padre.

Stiles lo ignora, sonriendo mientras encuentra lo que necesita. —Puedes quejarte de eso más tarde, tengo algo—, dice. —Chris ha estado desembolsando pagos diarios al Motel Glen Capri en Fairvale. No es realmente el habitual lugar de reunión de Chris, le gusta fingir que es un padre de familia suburbano.

Su padre entrecierra los ojos ante los registros de pago. —Mierda.

—No pensaste que realmente lo estaba escondiendo—, se da cuenta Stiles.

—Esperaba que no lo hiciera—, dice John. —Aunque supongo que es mejor de esta manera. Al menos tenemos un lugar para comenzar ahora.

—No puedes culpar realmente a Chris—, dice Stiles, eliminando el historial y borrando las cookies. —Gerard es un loco, pero sigue siendo su padre.

—Todavía hay límites, Stiles. Espero que no me ayudes a esconderme si me convirtiera en un asesino psicótico—, dice.

—Lo haría—, admite Stiles encogiéndose de hombros. —Claro que sí.

Su papá se ríe, pero el sonido está un poco roto. Stiles se vuelve hacia él preocupado, preparándose para deshacer lo que dijo: puede mentir y pretender ser una mejor persona para su padre si es necesario, será una de las mejores2 mentiras que ha dicho. Excepto que su papá lo está mirando con cariño. —¿Qué? — Stiles exige.

—Nada—, dice John. —Es solo que a veces eres exactamente como ella.

Stiles mira hacia otro lado. —Estoy bastante seguro de que mamá nunca se ofreció a esconderte si te volvías loco y comenzabas a matar personas.

—Tal vez no, pero sé que lo habría hecho—, dice John. —Ella habría hecho cualquier cosa por nosotros.

La voz de su padre tiene la misma tristeza de siempre cuando habla de ella, pero por mucho que duela, Stiles está bastante seguro de que esto es algo que ambos necesitan. Él no quiere seguir fingiendo que ella ya no es parte de la familia solo porque duele.

—A veces me preocupa que la voy a olvidar—, admite Stiles en voz baja.

Su padre se pone pálido, se ve destrozado, y es por eso que nunca hablan de ella. —Stiles…

—Nunca solía suceder, pero ahora, a veces, lo hago—, dice Stiles. —A veces no puedo recordar el sonido de su voz. A veces tengo estos recuerdos de ella y no puedo recordar si son reales o si los inventé.

—No la has olvidado—, dice John suavemente. —No puedes, porque ella está en todo lo que haces. Siempre me han llamado valiente, ya sabes, viene con la descripción del trabajo. Pero no tienes miedo, Stiles. No te alejas de nada, simplemente vas corriendo. Y obtienes eso de ella.

Stiles intenta imaginar qué pensaría su madre de todo esto. Él recuerda todas las historias que solía leerle, la forma en que le había fascinado la idea de que hubiera más en este mundo de lo que parecía, y sabe que a ella le habría encantado. Ella lo tomaría todo como él lo había hecho, probablemente demasiado bien.

—Vamos, vámonos—, dice su padre, levantándolo suavemente de la silla. —Fairvale está a casi dos horas de distancia. Necesitamos ponernos en movimiento.

[…]

De alguna manera, Stiles se las arregla para dormir durante el viaje, pero no descansa exactamente. En el momento en que cierra los ojos, comienza a soñar con los colores rojo y dorado. Está en un viejo edificio abandonado, llamando a Derek. Sigue intentando encontrar una salida, pero cada puerta que sale solo lo lleva de regreso al interior.

Se despierta gritando el nombre de Derek a unos diez minutos de Fairvale.

—Cristo, Stiles—, maldice su padre, como si se estuviera preparando para detenerse. —¿Estás bien?

—Bien, estoy bien—, dice Stiles rápidamente, incluso antes de que esté realmente despierto. Respira hondo y aprieta los dedos en el borde del asiento. Quiere restarle importancia, pero apenas puede decirle a su padre que esta no es la primera vez que se despierta gritando, porque su padre solo se sentirá culpable de haber estado trabajando en turnos nocturnos y no ha estado en casa para escucharlo.

—¿Esto está ... relacionado con la unión? —John pregunta vacilante.

Stiles lo mira sorprendido. —¿Uh, no lo sé? — él dice. —No pensé en eso—.

Sin embargo, tiene sentido ahora que lo esté pensando, y fue similar a los flashes que había recibido de Derek en la estación de trenes. Cierra los ojos por un momento y trata de tener una mejor idea de dónde había estado en el sueño, pero no sirve de nada. Era solo un edificio antiguo, con paredes y pisos de concreto gris.

—Bueno, ya casi llegamos—, dice su padre para tranquilizarlo.

—¿Cómo sabes a dónde ir? — Stiles pregunta. —¿Has estado allí antes?

—Tengo GPS en mi teléfono, Stiles—, dice con ironía. —No soy un total dinosaurio.

Stiles sonríe levemente mientras se relaja en el asiento, mirando por la ventana. Nunca ha estado en Fairvale antes. Lo ha pasado varias veces, pero nadie se detuvo allí a menos que tuvieran que hacerlo. Era una ciudad transitoria, algo así como una parada de descanso de servicio completo.

—Deberíamos haber tomado mi jeep—, dice. —Esto es un poco conspicuo.

—También es una buena encubierta—, dice su padre. —Incluso si no estoy en mi jurisdicción, es probable que 9 de cada 10 personas ni siquiera noten el condado escrito en la puerta.

—No quiero que vuelvas a tener problemas por mi culpa—, dice Stiles. —Yo puedo…

—No estás haciendo esto sin mí—, dice John bruscamente. —Realmente nunca te culpé cuando perdí mi placa, me culpé a mí mismo por no ver lo que estaba pasando contigo. Ciertamente no te culpo ahora que sé que solo lo hiciste para tratar de proteger a las personas. Entonces, si pierdo mi trabajo, sucedió, y me ocupare de ello. Pero si dejo que alguien salga lastimado cuando hay algo que puedo hacer para detenerlo, entonces no merezco usar una placa de todos modos. Puede que esté haciendo esto por ti, pero lo haría de todos modos, ¿de acuerdo?

—Sí, está bien—, Stiles está de acuerdo, pero sabe que nada de eso va a hacer una diferencia si su padre se lastima por esto, de todos modos, se va a culpar a sí mismo.

La patrulla llega al estacionamiento del Motel Glen Capri y su padre suspira. —Muy bien, voy a entrar y averiguar el número de habitación de Gerard, con mi uniforme probablemente no debería ser difícil convencerlos de que me lo den—, dice. —Entonces voy a ir a verlo. Te vas a quedar aquí.

Stiles lo mira boquiabierto. —Uh, no, no me voy a quedar aquí—, dice. —Estamos juntos en esto, ¿recuerdas?

—No puedo usar la carta de “oficial trabajando” si traigo a mi hijo adolescente conmigo ¿cierto?, vendre por ti si la habitación esta vacia y es seguro, y la revisaremos juntos.

—¿Y qué pasa si la habitación no está vacía? ¿Qué pasa si no es segura? — Stiles exige.

—Entonces tengo balas de acónito en mi arma, y me encargare de ellos—, dice. —Stiles, esto no es una negociación. Ahora, ¿vas a quedarte en el auto o necesito ponerte atrás?

—¿Porque eso funcionó tan bien la última vez? — Stiles pregunta incrédulo.

—Cierto—, suspira John, mientras abre la puerta del conductor. —Por favor, quédate en el auto—.

Stiles mira con furia su forma retirándose, pero puede admitir que su padre tiene razón. Tendrá más suerte si habla con el personal del motel si está solo, pero eso no lo hace más fácil. Mira ansioso por la ventana del lado del pasajero, tratando de encontrar algún rastro de que su padre se dirija hacia una de las habitaciones.

Luego se abre la puerta del conductor y oye a su padre volver a caer junto a él.

—¿Qué hiciste, aahhh!? — Stiles llora. —Tú no eres mi papá—.

—Afortunadamente no—, dice Peter agradablemente. —Eso haría que algunas de mis acciones anteriores fueran extremadamente inapropiadas.

—Eran inapropiadas de todos modos. Extremadamente—, dice Stiles. —¿Qué demonios estás haciendo aquí?

—He venido a ayudar. De nada—, dice Peter. —Y Gerard no está adentro, si te lo estabas preguntando. Se fue hace mucho.

—¿Como puedes estar seguro? — Stiles exige.

—Su olor es débil, —Peter se encoge de hombros. — El hedor a decadencia y enfermedad que lo sigue apenas se nota, así que me imagino que no ha regresado aquí por lo menos en un día.

Stiles frunce el ceño, inclinándose hacia adelante para tratar de ver a través de Peter al otro lado del motel. —Mi papá…

—Tu padre está bien—, dice Peter. —Pero estamos perdiendo el tiempo.

—¿Nosotros? ¡No hay nosotros! — Stiles llora, señalando con empatía entre ellos. —Ese no es el pronombre que uso cuando me refiero a mí y a los muertos vivientes.

—¿Oh? — Peter pregunta.

—Uso yo y eso—, dice Stiles. —Ahora te sugiero que te vayas antes de que mi papá regrese y te dispare. Chris le dio balas con una cepa particularmente maligna de acónito, por recomendación mía. Estaba pensando en ti.

Peter le lanza una sonrisa. —Me gustas, Stiles.

—Y esa es una fuente constante de inquietud para mí—, dice Stiles, antes de notar una mancha sospechosa en el cuello del abrigo de Peter. —Oh dios. ¿Eso es sangre?

—Sí—, dice Peter, mirando hacia abajo con el ceño fruncido. —Afortunadamente, he comprado recientemente otras dos como esta, porque no creo que logre sacar esto.

—Si le has hecho algo a Derek— gruñe.

Peter sonríe, sus ojos parpadean en azul mientras se acerca. —Si fuera tras Derek, estaría muerto, sería Alpha, y no estaría perdiendo el tiempo tratando de razonar contigo—, dice, antes de inclinarse de nuevo con un encogimiento de hombros. —Puede que haya destripado un cazador un poco. No te preocupes por eso. Se merecía algo peor.

—Creo que me voy a enfermar—, dice Stiles.

—Realmente, Stiles, necesitas superar esta aversión al derramamiento de sangre—, dice Peter. —En resumen, eres tan deliciosamente malicioso que no debes dejar que una pequeña carnicería te detenga de todo tu potencial.

—Ahí es donde estabas, cuando llamé, ¿no? — Stiles exige. —Lo estabas torturando. ¿Por qué no me dijiste eso?

—Te hubieras sentido obligado a tratar de detenerme—, dice Peter. —Ninguno de nosotros quiere eso. No hay absolutamente ninguna razón para que estemos en lados opuestos.

Stiles aparta la vista de él. —¿Por qué lo hiciste?

—Estaba trabajando para Gerard—, dice Peter. —Le dije que me dijera dónde estaba Gerard, él declinó de manera descortés, y le informé que lo abriría si no lo reconsideraba. Por alguna razón parecía pensar que estaba faroleando.

—Era Mason, ¿verdad? — Stiles pregunta en voz baja. —Oh, Dios. Eres la mafia sobrenatural.

Peter se ve sorprendido. —Ahora, ¿cómo supiste eso? — él pide. —No dejé ninguna evidencia. Puedo prometer que no queda nada de él para encontrar.

—Deberías haber limpiado la habitación del motel—, dice Stiles. —Las armas de fuego y las balas de aconito siempre levantan una bandera roja, incluso para los no iniciados.

Peter frunce los labios. —Me deshice del auto—, dice. —¿Cómo se suponía que debía saber que él era lo suficientemente descuidado como para dejar las cosas en su habitación? No puedo estar limpiando detrás de él todo el día.

—¿Aprendiste algo? — Stiles pregunta. Nunca aprobará los métodos de Peter, pero Derek no tiene tiempo suficiente para rechazar la información, sin importar la fuente.

—No de él—, dice Peter. —Casi admiro su lealtad, pero estoy bastante seguro de que sufrió una conmoción tan violenta que no me pudo haber dicho nada coherente de todos modos. Sin embargo, encontré esto en su billetera.

Extiende un recibo entre dos dedos y Stiles se lo arrebata.

—Es un recibo de cadenas—, dice Stiles, palideciendo. —Una batería de automóvil. Cables de cobre. Oh, mierda. Mierda".

—Eso no es lo importante—, dice Peter.

—Con un demonio que no es importante—, gruñe Stiles. —Lo están torturando.

—Ya lo sabíamos—, dice Peter con calma. —Mira la ubicación.

—Suministro de ferretería de Luke, Fairvale—, dice Stiles.

—Gerard es un hombre lobo nuevo, y ha estado lamiendo sus heridas aquí—, explica. —No se habrá quedado en Beacon Hills más de lo que debía, lo que significa que tienes a la manada buscándolo en el lugar equivocado. Habría traído a Derek de vuelta a Fairvale. Reclamó este territorio como suyo.

Stiles está bastante seguro de que Peter tiene razón, pero eso no significa que pueda confiar en él. Él lo mira astutamente. —¿Por qué estás aquí? — él pide. —Obviamente quieres algo de mí. ¿Qué es?

—Quiero que me ayudes a encontrar a Gerard—, dice Peter. —Pensé que ya te habrías dado cuenta de eso.

—¿Qué estás…?— Stiles se apaga, con los ojos muy abiertos. —El libro era de tu parte. Dormí con ese libro. Me siento muy sucio.

—Por supuesto que yo te lo di—, dice Peter. —Derek ciertamente no iba a decirte nada. No quería que estuvieras involucrado. Un mal uso de sus recursos, si me preguntas. Te has acercado más a encontrar a Argent en horas de lo que hemos logrado en semanas.

—Estaba muy motivado. De todos modos, ya sabía que Derek estaba buscando a Gerard—, protesta Stiles a medias. Sin embargo, sabe que Derek había estado haciendo todo lo posible para mantenerlo al margen, sin importar que le costara que se abriera un poco y admitiera lo que estaba sucediendo.

—Hmm, tal vez—, dice Peter. —Pero Derek y yo lo hemos estado buscando desde la noche en que desapareció. ¿Creías que íbamos a creer de buena fe que encontró roca para esconderse y morir? Los Argent son sorprendentemente resistentes, y teníamos que estar seguro. Seguimos el rastro de su ... fluido, durante aproximadamente dos millas antes de que desapareciera y se levantara un rastro de neumáticos.

—Solo esperaba que estuviera muerto—, admite Stiles. —Luego tuvimos que ahuyentar a la manada de Alfas, y luego estaban los bunyips…

—¿Bunyips? — Peter pregunta confundido, antes de sacudirse. —No importa eso. Derek no tiene mucho tiempo, tenemos que detener a Gerard antes de que salga la luna.

—Antes del ritual—, dice Stiles. —Podrías haberme contado sobre eso, ya sabes.

—Puede que haya sabido sobre el ritual, pero no tengo los detalles, y no puedo abrir ese libro para llegar a ellos—, dice Peter. —Está llena de cenizas de serbal, así que tenía que ser tú. Sé honesto, si hubieras sabido que el libro era mío, ¿hubieras confiado en él?

Stiles lo fulmina con la mirada, pero él tiene razón. Si hubiera sabido que Peter le había dado el libro, habría estado dudando de cada palabra, es decir, si Derek no hubiera quemado la cosa en el momento en que sabía de dónde había salido. Tal como estaban las cosas, sospechaba que Deaton o Chris lo habían dejado para él, y nunca había dudado realmente de que estaba allí para ayudar.

—¿Confío en que obtuviste los detalles del libro? — Peter pregunta, deliberadamente casual. —¿Sabes lo que implica?

—Sé lo que planea Gerard—, dice Stiles. —No veo qué bien nos va a hacer si no podemos encontrarlo.

—El conocimiento siempre es útil—, le dice Peter. —Necesito que me guardes ese libro, Stiles. Pertenecía a alguien muy especial para mí. No confiaría en nadie más que en ti.

—Perteneció a tu esposa—, se da cuenta Stiles. Tiene mucho sentido en retrospectiva, ya que Emily era, para todos los efectos, la versión de los Argent de un emisario.

Él sabe que debería haber sospechado que el libro era de Peter desde el principio. Pero Peter es bueno para que la gente se olvide de él, es bueno en pararse justo a tu lado mientras sospechas de todos los demás en la sala.

—¿Como sabes eso? — Peter exige, pareciendo realmente sorprendido.

—Derek me habló de ella—, dice Stiles, tratando de no sentirse mal por Peter. Aun así, es difícil, cuando Peter tiene la misma mirada en sus ojos que su padre siempre tenía cuando miraba a su madre.

—Ella es la razón por la que fui el único sobreviviente—, le dice Peter, desviando la mirada. —Se estaba quemando viva, y me miró directamente, y lo siguiente que supe fue que me estaba despertando en el hospital. Nunca supe lo que hizo, pero sé que fue ella. Porque si me hubiera dejado, me habría dejado morir a su lado.

—Lo siento—, dice Stiles con sinceridad. —Desearía haberla conocido.

Peter apaga la tristeza como si nunca hubiera estado allí y se da vuelta para mirarlo con ojos oscuros. —Gerard estará esperando que la luna llena esté en su apogeo, pero puede ser visible tan pronto como a las 7:00, así que no te confíes de tu tiempo. Necesitamos encontrar a Derek lo antes posible. Si Gerard completa el ritual él tendrá un mayor control sobre la manada de Derek, y cree que podrá obligarlos a hacer su voluntad.

—La manada de Derek te incluye a ti—, señala Stiles.

—Gerard Argent es un tonto—, dice Peter. —Scott es un niño y pudo resistirme, y yo fui mucho más poderoso de lo que Gerard puede esperar ser. No tendrá control si espera la luna llena o no, pero no entiende a los hombres lobo, nunca lo ha hecho. Cree que puede leer algo en su pequeño libro de monstruos y recrearlo a voluntad.

—Entonces no funcionará—, dice Stiles.

—Por supuesto que no funcionará—, acepta Peter.

—Entonces, ¿por qué estás tan preocupado? — él pide.

Peter se da vuelta para mirarlo, obviamente irritado por la percepción de Stiles. —No estoy preocupado, pero no voy a permitir que intente hacerse cargo de la manada, lo que me incluye a mí, como lo has señalado tan amablemente, solo porque no funcionará.

—Entonces, estás haciendo esto por la bondad de tu corazón—, dice Stiles con escepticismo, alejándose, mirando hacia el motel. —¿Por qué encuentro eso…—

Peter extiende la mano repentinamente y agarra la muñeca de Stiles, empujando hacia atrás la manga y girándola hacia arriba, pasando sus manos sobre sus venas ligeramente brillantes. Los ojos de Peter parpadean en azul mientras aprieta su agarre.

—Eres un emisario—, gruñe.

Stiles intenta alejarse, pero Peter solo aprieta su agarre. —Sueltame

—Pequeño tonto—, Peter susurra, mirándolo con algo como traición en sus ojos. —¿Sabes lo que has hecho?

—¡Dije que me sueltes! —Stiles grita, y la luz debajo de su piel brilla intensamente. Peter lo suelta con un grito de dolor, y Stiles cae contra la puerta del pasajero cuando el olor a carne quemada llena el aire.

La mano de Peter está ennegrecida y sangrando, y mira a Stiles con una mirada irritada incluso cuando comienza a sanar. —¿Cuándo se unieron?

—Esta mañana, y no exactamente a propósito—, dice Stiles temblorosamente, observando a Peter con cautela en busca de cualquier signo de represalia. Pero Peter parece menos preocupado por su mano lesionada que Stiles.

—¿Mi sobrino, supongo? — pregunta, falsamente casual. —Te estás volviendo demasiado poderoso demasiado rápido y te estás metiendo en problemas, lo sabes, ¿no?

—Estoy bien—, dice Stiles. —Tenía toda la intención de quemarte justo ahora. Totalmente en control, ese soy yo. Entonces, ya sabes, tal vez no me agarres de nuevo.

—Mi sobrino es un desastre de alfa, y no te merece—, dice Peter, falsamente dulce, mientras se acerca con una sonrisa. —Él nunca podrá ayudarte a controlar esto. Deberías haberme dicho que sí, Stiles.

—Así que estabas tratando de obligarme a convertirme en tu emisario—, respira Stiles con inquietud

Peter levanta una ceja. —Si pudiera haberte forzado, lo estarías, pero no funciona de esa manera, que es el punto.

—¿Qué hubieras hecho si te hubiera dicho que sí? — Stiles pregunta con curiosidad.

—Te habría mordido, por supuesto—, dice Peter. —Eres útil como eres, pero no puedes ser controlado. Es como la diferencia entre un fuego artificial y un arma. Ambos pueden ser bastante destructivos en las manos correctas, pero solo el arma puede apuntar.

—Y es por eso que nunca hubiera dicho que sí—, dice Stiles, entrecerrando los ojos. —Un emisario no está destinado a ser un arma. Tal vez tú eres el que está perdiendo el punto. Di lo que quieras sobre Derek pero nunca me ha usado.

—Eres demasiado inteligente para creer eso—, dice Peter con sarcasmo.

—No oculta sus intenciones, cada vez que lo ayudo, sé exactamente dónde estoy parado. —Dice Stiles. —Yo confío en él.

—Sí, bueno, si alguna vez te arrepientes de esa decisión, solo di la palabra—, dice Peter.

—Deaton dice que no hay forma de romper el vínculo—, le dice Stiles, convenientemente dejando de lado la escapatoria 'hasta la muerte', ya que no quiere darle ninguna idea a Peter, incluso si probablemente ya lo sabe.

—Probablemente también te dirá que no puedes traer a alguien de la muerte—, dice Peter. —Nunca he tenido mucho uso para Deaton. Siempre hay una manera, Stiles. Quiero que recuerdes eso.

—Está bien. Gran charla, me aseguraré de recordar. Ahora debería llamar a la manada—, dice Stiles, tratando de mantener su voz firme. —Comenzaremos a buscar aquí. Puedes irte. Tal vez tener un día de spa, o algo así. No te necesitamos.

—Sí, sí—, dice Peter al instante. —Sabes muy bien que lo haces, no dejes que tu miedo te aleje de la mejor oportunidad que tienes para recuperar a Derek.

—¿Y eso es lo que quieres? — Stiles exige. —¿De verdad estás aquí para salvarlo?

—Ya no soy el hombre que conociste—, dice Peter. —No tienes que tenerme miedo.

—El hombre que mató a su sobrina, convirtió a mi mejor amigo en contra de su voluntad, casi mató a Lydia, y luego trató de atraparme en un vínculo de por vida, ¿ese hombre? — Stiles pregunta. —Porque tengo que decir que te pareces a él.

—En ese momento solo me importaba el poder—, dice Peter. —Hubiera hecho mucho más que simplemente engañarte para que lo obtengas, pero lo lamento ahora. Realmente lo hago.

—No te creo—, dice Stiles.

—Esta es la única vez que realmente deberías—, le asegura Peter. —Porque si hubiera tenido el tiempo, te habría explicado lo que eras, de lo que eras capaz, te habría preparado hasta que me rogaras que envolviera mis dientes alrededor de tu piel y mordiera hasta el hueso…—

—Peter—, interrumpe Stiles, mirando más allá de él con los ojos muy abiertos. —Sabes que mi papá está parado detrás de ti, ¿verdad?

—Sí, escuché los latidos de su corazón—, dice Peter, con los ojos entrecerrados por la irritación. —Pero estaba demasiado metido en mi discurso para parar, yo…

John abre la puerta y agarra a Peter por la parte de atrás de su abrigo, arrastrándolo sin ceremonias y golpeándolo contra el carro, antes de salir del alcance de Peter y apuntar el arma a su cabeza. —Dame una buena razón para no matarte—, dice.

—¡Papá! — Stiles protesta, saliendo del auto desde el otro lado. —¡Espera! Sé que es realmente difícil resistirse a matarlo. No pude hacerlo yo mismo. Pero creo que lo necesitamos. Sin Derek es el único hombre lobo que tenemos que no se transformó en este último año. No me gusta, pero estamos un poco atrapados con él.

—Gracias por esa brillante recomendación, Stiles—, dice Peter secamente.

—¿Te tocó? — John le pregunta a Stiles, aunque nunca quita los ojos de Peter.

—No me hizo daño—, dice Stiles rápidamente. Probablemente su padre se da cuenta de que no es exactamente una respuesta directa, pero parece que se relaja un poco.

Peter solo sonríe, como si el arma que le apuntasen no fuera una preocupación. —En serio, sheriff—, comienza amablemente. —Sólo estaba…

—No me importa—, gruñe John. —Haces un movimiento equivocado y te enterraré de vuelta en el mismo agujero por el que saliste.

—Estoy empezando a ver de dónde saca su encantador hijo su ingenio—, dice Peter secamente.

—¿Qué estás haciendo aquí? — Él exige.

—Lo mismo que tú—, dice Peter. —Buscando a Gerard Argent. Sin embargo, no lo vas a encontrar. Ya lo revisé.

—El hecho de que él no esté aquí no significa que no podamos encontrar algo que nos pueda llevar a él—, dice Stiles, mirando con ansiedad entre su padre y Peter. —¿Tal vez deberíamos llevar esto adentro? ¿Antes de que pase cualquier ciudadano desprevenido de Fairvale?

—¿Cómo se supone que debemos confiar en ti? — John le pregunta a Peter, ignorando el torpe intento de Stiles de hacer la paz.

—Tengo un instinto de supervivencia muy bien desarrollado—, dice Peter con voz sedosa. —No voy a dañar a la gente que intenta derribar a mi enemigo.

—Hemos trabajado con él antes, más o menos—, admite Stiles vacilante. —Ayudará siempre que lo ayude a él también. Y no nos hará daño, porque no lo dejaré.

Peter mira a Stiles divertido. —No te lastimaría de todos modos, Stiles—, promete, pero no es tan tranquilizador como probablemente piensa que es.

John a regañadientes enfunda su arma, aunque mantiene su mano sobre ella, lista para sacarla. Peter probablemente sea más rápido con sus garras, pero Stiles puede sentir el hormigueo en sus dedos, y está bastante seguro de que este nuevo poder es más rápido que ambos.

—¿Tregua entonces? — Stiles pregunta. —¿Solo por ahora?

—Bien—, su padre grita de mala gana.

Stiles se mueve a su lado, y su padre se relaja marginalmente ahora que está entre él y Peter. —¿Encontraste algo? — Stiles pregunta.

—Todavía no pude pasar por todo—, dice su padre con ironía. —Miré por la ventana y vi a un hombre adulto inclinado sobre ti en el auto, así que tuve que reorganizar mis prioridades.

John mira a Peter todo el tiempo que habla, pero él solo lo mira divertido, sin arrepentirse. —¿Vamos a ver qué dejó él entonces? —Peter pregunta.

John le indica que siga adelante. —Tú primero.

Peter camina delante de ellos, subiendo las escaleras hacia el segundo nivel de habitaciones sin que nadie le diga el número de habitaciones de Gerard. Stiles se mueve para seguirlo, pero su padre lo agarra por la parte de atrás de su sudadera y luego lo empuja.

—Se acerca tanto a ti otra vez, no seré responsable de mis acciones—, advierte John. —Mantente alejado de él.

—No es un problema—, dice Stiles rápidamente. —Mantenerse lo más lejos posible de Peter es prácticamente una forma de vida para mí.

—Puedo escucharte, ya sabes—, Peter les llama con irritación.

—¡Sí, lo sé! — Stiles vuelve a llamar.

—Todavía me estoy acostumbrando a eso—, murmura su padre con el ceño fruncido, porque conoce las habilidades especiales de los hombres lobo, pero todavía tiene problemas para aplicar ese conocimiento a la práctica. Sube rápidamente las escaleras y entra en la habitación del motel siguiendo los pasos de Peter, con Stiles justo detrás de él.

Peter ya está en el baño cuando Stiles entra, inclinándose sobre el lavabo, olisqueando como el pervertido que es. —No está mejorando—, dice Peter, antes de girarse para recostarse contra el lavabo y cruzar los brazos. —El olor de su vil vómito negro está por todas partes aquí.

—Encantador, gracias por esa evidencia innecesariamente descriptiva—, dice Stiles.

—Si está tan enfermo, ¿cómo se las arregla para hacer todo esto? — John pregunta.

—Tiene ayuda—, dice Stiles. —Contrató a algunos de sus cazadores, como Mason. Probablemente esté haciendo el papel del viejo enfermo, quedándose atrás, dejándoles hacer todo el trabajo sucio.

—Ese cazador que desapareció—, dice su padre. —¿Crees que se fue sin dejar rastro porque vino aquí para ayudar a Gerard?

—Uh ... — comienza Stiles.

—Está muerto—, dice Peter amablemente. —Pero hay otros. Al menos dos más, pero probablemente no más que eso. Gerard quemó muchos puentes incluso antes de engañar a Scott para que lo ayudara con la mordida, y es muy difícil encontrar una buena ayuda.

—Mataste al cazador—, dice John con fuerza, su mano apretando su arma de nuevo. —Dime que al menos fue en defensa propia.

—Estaba absolutamente defendiéndome—, Peter acepta con calma.

—¿Cómo encontraste este lugar? — John exige. —¿Lo torturaste por información? ¿Es eso lo que pasó?

Stiles puede ver el destello de admiración en los ojos de Peter, antes de que el hombre lobo pueda ocultarlo. Lo conoce bien, porque generalmente está dirigido a él. Peter les sonríe a los dos. —Estaba visitando la ferretería de la ciudad cuando percibí el aroma de Stiles—, dice. —Pensé que podrías necesitar mi ayuda, así que aquí estoy.

Stiles aparta la mirada de él y sus ojos se estrechan en la pared al lado de la cama. Hay cuatro agujeros que forman una pequeña forma rectangular, con una serie de otros pequeños agujeros esparcidos por su interior.

—¿Viste esto, papá? — Stiles pregunta. Pasa los dedos por la superficie, contando los numerosos pequeños agujeros en la pared. La forma en que la pintura apenas se desprende de los pequeños agujeros, se ven recién hechos.

Stiles no quiere tener nada en común con Gerard, pero puede imaginarlo aquí, con un mapa pegado a lo largo de la pared, tratando de encontrar el mejor lugar para sostener a Derek hasta la luna llena. Es la forma en que él también planea.

Pero Gerard es arrogante, y aunque tiene cuidado, no tiene cuidado con los pequeños detalles. Stiles puede decir por los extraños ángulos irregulares de los agujeros en la pared que Gerard había arrancado el mapa sin sacar los pasadores uno por uno. Hubiera sido demasiado impaciente por eso.

—Dejó los alfileres aquí—, dice su padre detrás de él.

Stiles se da vuelta y mira hacia abajo cuando ve a su padre apuntando al piso. Puede ver dónde algunos de los alfileres de plástico transparente han caído en la alfombra, en su mayoría oscurecidos, pero hay algunos pedazos de papel unidos a algunos de ellos. Luego ve uno rojo, a unos metros de distancia. Stiles se arrodilla y lo levanta, y todavía hay un trozo de mapa roto pegado al borde de la punta.

Solo quedan cinco letras a lo largo del borde lateral izquierdo:
ale
le

—Qué descuidado de su parte—, dice Peter, haciendo un sonido tsk tsk, aunque parece contento con dejar que Stiles haga el trabajo. No se ha movido de donde está apoyado casualmente contra el lavabo del baño, pero eso le aprece bien a Stiles.

—Simplemente no sabe con quién está tratando—, dice Stiles, mientras saca su celular y busca un mapa de Fairvale. Lo abre y recorre todos los nombres de calles, parques y negocios.

Luego lo ve, justo en el borde del mapa:
Fairvale
Muelle

—Es el muelle—, dice Stiles. —Tiene que estar reteniéndolo en el muelle. Tendrá la mejor vista de la luna en la ciudad, y casi nadie estará cerca por la noche.

—Eso no lo reduce mucho—, frunce el ceño John.

—En realidad, eso lo reduce más que suficiente—, sonríe Peter, enderezándose del fregadero. —Puedo tomarlo desde aquí.

—No lo creo—, dice Stiles, metiendo la mano en el bolsillo para sacar un puñado de cenizas de serbal, un regalo de despedida de Deaton. Lo arroja en dirección a Peter, y se rompe en una línea a través de la puerta.

Los ojos de Peter se estrechan mientras mira la línea que se encuentra al otro lado de la puerta, sus colmillos se extienden cuando sus ojos se vuelven de un azul violento y brillante. —¿Qué crees que estás haciendo, Stiles? — él gruñe.

Stiles da un paso adelante, y su padre hace un movimiento abortado para agarrarlo y tirarlo hacia atrás. Puede ver que su padre todavía está tratando de conciliar el hecho de que la delgada línea de cenizas retendrá algo como Peter.

—Te importa más matar a Gerard que salvar a Derek—, le dice Stiles simplemente.

—No tienen que ser mutuamente excluyentes—, dice Peter dulcemente. —Puedo hacer múltiples tareas.

—No importa si no puedo confiar en ti—, dice Stiles.

—Supongo que por eso eres el inteligente—, dice Peter, inclinándose lo más cerca que la barrera lo permita. —Esperemos que no termines siendo demasiado inteligente para tu propio bien.

—Vamos, Stiles—, dice su padre, agarrándolo del brazo para sacarlo de la habitación del motel. —Nos vamos. Ahora.

Stiles deja que su papá lo empuje por la puerta y ambos rápidamente regresan a la patrulla. —¿Eso realmente lo va a retener? — pregunta su papá.

—Cualquier otro hombre lobo y yo diría que sí, cien por ciento—, dice Stiles. —He encontrado que las garantías no son muy útiles en lo que respecta a Peter.

—Tenía miedo de que dijeras eso—, dice John mientras suben al auto. Respira profundamente, dudando por un momento antes de finalmente arrancar el auto. —¿Stiles?

—¿Sí? — Stiles pregunta, girándose para mirarlo.

John sale a la carretera. —Esa es la última vez que te quedas en el auto.

Notes:

1: Traducción literal: miopía. Stiles se refería a la poca visión para lugares en donde investigar.
2: Stiles se refiere a que será una de las mejores mentiras en el sentido emocional, siendo una mentira blanca.

Notes:

*ceniza de serbal, es más conocida como Montain Ash en este fandom XD