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Se despierta gritando.
Con la boca seca y la ropa pegándose a su piel. Ha soñado con él. Ha soñado con Finn.
Clarke ha tenido pesadillas durante semanas, desde la muerte de Finn. Desde que le dijo que lo quería. Desde que lo mató. Cuando cierra los ojos, ve sus ojos mirándola, llenos de miedo y cariño, justo antes de que ella lo apuñalara. A veces también puede escuchar a Raven gritándole mientras Bellamy la sujeta para que no haga daño a Clarke.
Su madre la había mirado como diciéndole que todo estaría bien, que matarlo era la mejor opción. Ella no pudo soportar mirar a nadie así que dejó caer el cuchillo y corrió a su tienda. Pero, cuando Bellamy fue a verla aquella noche y la abrazó, Clarke no pudo apartarlo. Lo dejó abrazarla hasta que se quedó dormida.
Así que cuando se despierta gritando, no se sorprende al encontrar a Bellamy cruzando la entrada de la tienda sólo un par de minutos más tarde, su pelo hecho un desastre y sus ojos cansados.
"¿Qué haces aquí?" preguntó ella, tratando de recobrar el aliento.
"¿Estás de coña? Dios, Clarke el campamento entero escuchó tus gritos. Tu madre estará de camino para comprobar si estás bien. ¿Por qué gritabas así?"
Ella se sonroja y aparta la mirada, avergonzada.
"Yo lo maté". Su voz es apenas un susurro, pero él se las arregla para escucharla. "Yo lo maté, Bellamy" no sabe qué decir, así que hace lo mismo que hizo la noche que todo sucedió: la abraza. Clarke llora sobre su pecho y cree que no debería sentirse tan bien cuando él la abraza.
"Le dije que le quería y después lo maté, ¿cómo voy a vivir con eso?"
Quiere decirle que todo va a estar bien, que lo superarán juntos. Pero no puede porque, aunque ella es su princesa, él no es un caballero de brillante armadura para hacer desaparecer todos sus problemas. Es sólo un conserje que vino a cuidar a su hermana. Se suponía que esto no debía ocurrir. Se suponía que no se preocuparía por el resto de los 100, que no se preocuparía por ella. Y ahora todo es un desastre. Sus amigos están atrapados, los adultos los tratan como si todavía fueran niños, Finn está muerto y Clarke está enloqueciendo por todo; pero todo lo que puede hacer es sostenerla y tratar de calmarla. Se sienta en la cama y la coloca en su regazo, sus brazos todavía alrededor de ella como si fuera sólo una niña y Clarke sigue llorando y susurrando "lo maté. Lo maté. Lo maté".
Están todavía en la misma posición cuando Abby aparece dentro de la tienda para ver a su hija, pero Bellamy la mira como suplicando que los deje solos, como pidiéndole que le dejase sostener a Clarke porque ella es importante para él y porque es su amiga y le necesita ahí con ella. Abby simplemente asiente con la cabeza y se vuelve a su tienda pensando en lo que vio, demasiado cansada para discutir con él.
La respiración de Clarke se vuelve más lenta y tranquila y Bellamy sabe que se ha quedado dormida y que debe regresar a su tienda porque, joder, ha estado cazando ese día y está agotado, pero no quiere dejar a Clarke así. Sabe que no duerme bien desde que todo sucedió. La tumba en la cama, la cubre con una manta y se da la vuelta para volver a su tienda.
"Quédate" y está casi seguro de que está alucinando porque Clarke no le pediría que se quedara a pasar la noche, ¿no? Se da la vuelta y la ve sentada en la cama, los ojos casi cerrados y su pelo hecho un desastre y realmente quiere colocarle detrás de la oreja un mechón que le cae sobre los ojos. "Bellamy, por favor quédate".
Y él se queda. Se tumba con ella en su cama, tratando de no tocarla, pero ella se sigue acercando así que simplemente pone su brazo alrededor de su cintura, sus piernas enredadas. Cuando se despierten por la mañana van a tener que explicar a una muy molesta Abby por qué Bellamy ha pasado la noche en la tienda de su hija, sujetándola como si fuera la persona que más le importaba en el universo, pero ahora está sosteniendo a Clarke y soñando de caballeros y princesas. Todo lo demás puede esperar.